Parafraseando a Luis Cardoza y Aragón hablaré de Julio Cortázar en el Centenario de su nacimiento, porque Julio Cortázar escribió “Divertimento” “Divertimento” es una novela que fue escrita en 1949 y publicada en 1986, dos años después de la muerte del escritor, quizá porque en ella están las raíces de “Rayuela”. En “Divertimento” Cortázar hace una exploración por el camino bohemio e intelectual de las calles de Buenos Aires, técnica que volvería a utilizar en “Rayuela” con las calles de París. 1 En “Divertimento” reúne Cortázar como en “Rayuela” distintos personajes en torno a la bohemia, la literatura y la música. La historia de “Divertimento” es narrada por Insecto, una suerte cronopio alter ego de Cortázar, que a su vez es amigo de un pintor Renato Lozano y de su hermana Susana, y al mismo tiempo también es amigo de Jorge y Marta Vigil, una extraña pareja de hermanos, tan extraños como las hermanas Dinar, Laura y Moña que enredadas como en un ovillo son las últimas en hacerse parte de esta “barra” porteña que se reúne en el “Vive como Puedas,” que no es otra cosa que el taller donde intenta pintar Renato que convive con su gato Thibaud-Piazzini. Tomando como eje la relación que se genera entre la construcción del espacio urbano y el espacio imaginario fantasmagórico (del espiritismo), mi comentario parte de mi interpretación textual, tomando como base en ocasiones, el concepto de evidencia, desarrollado por Douglas Hofstadter. Al igual que en “Rayuela” la construcción del espacio urbano en “Divertimento” se caracteriza por ser un espacio de búsqueda, conocimiento y divertimento. La intuición de Marta, como lo señala Anabella Milagros Strzelecki, “al pretender buscar la casa de dos ventanas en las afueras del cuadro de Renato deja ver un puente, donde la pintura se fuga de su manifestación para involucrarse en la esfera de lo real. Pero, a su vez, el cuadro en relación con la realidad se inscribe en un contexto de previsión fotográfica. La pesadilla de Renato en la pintura deja una brecha entre el presentimiento y el futuro. De esta manera, el cuadro se constituiría como un arte espiritista, una representación de lo verdadero en lo estético, un trampolín del que se salta con ideas vagas que adquirirán forma o postularán su evidencia en el espacio urbano.” 2 “Lo malo es que del trampolín no tengo sino una idea muy vaga, una mezcla de recuerdos, un despertar a medianoche con un miedo atroz, una especie de presentimiento del futuro” . Sin embargo, el cuadro que está pintando Renato en el “Vive como Puedas”, no es una posibilidad de ver en él a los personajes de la novela. Aún así, Insecto y Marta encuentran en un ir y venir por Buenos Aires, la casa (que tiene “algo” de la inolvidable Mansión Usher, de Edgar Allan Poe), que constituye una evidencia en este juego de pesadillas, presentimientos y previsiones. Así es como Insecto decide arrendar esa casa que constituye para este relator-mago-espiritista como un recurso de manipulación en las sesiones del “Vive como Puedas”, ya que se inscribe dentro del enigma que atraviesa la novela como un nudo más. Este enigma se va enredando en el transcurso de la trama agregando cada vez más nudos que sólo son desenredables en la medida que se elija un tipo de interpretación entre las muchas elecciones que la novela pone en juego. Continuando con esta idea: es posible deducir que todos los personajes involucrados están amenazados por una resistencia inestable que se escabulle hasta un punto insostenible e indefinible. Esta resistencia se encuentra sujeta a las revelaciones de las sesiones espiritistas que se presentan como un reflejo de verdades continuas y el respeto que los involucrados tienen para con los fantasmas de Facundo Quiroga (el caudillo argentino del siglo XIX, personaje de la inmortal ¿novela-ensayo? de 3 Domingo Faustino Sarmiento) y Eufemia que, por otro lado, dejan bien claro que sus interpretaciones se inscriben en un marco acaso científico. La función de Narciso como director de las sesiones espiritistas, presenta a su vez para los participantes amigos, una especie de terror paterno con un único lenguaje que tiene como portavoz a Eufemia. La cualidad del discurso se transfiere tomando a Marta como médium, lo que da lugar a pensar en otro tipo de evidencia latente y cuya visión puede ser pretendidamente cientificista. La pluralidad de significados tanto del cuadro de Renato y como los de la sesión espiritista que revela la participación de Marta en la historia-pesadilla, cierra las interpretaciones y empieza una búsqueda de una posibilidad que no está detallada ni mucho menos explicada en “Divertimento”, pero que remite a la culminación de la pintura de Renato, en la que los personajes se ven representados. Y a pesar que Narciso parece tener algún tipo de culpa o al menos es el que desata algunos de los cuestionamientos de Insecto, está sujeta a los nudos que Eufemia intenta desenredar y que Insecto ve como un hilo perfecto en un ovillo sin nudos, algo así como “fotografiar la realidad a través de un ojo de mosca” Esos nudos, que hasta Narciso ve, parecen conformar la narrativa de la novela a nivel del contenido como metáfora, ya que los personajes viven en un mundo con una impresionante riqueza de referencias culturales donde, y como podemos leer en la contraportada del libro, “afloran los temas más queridos” por Cortázar.. 4 El ovillo y el nudo en el nivel narrativo se constituyen en la forma de atestiguar los sucesos que presenta Insecto. Hilo que nunca es sólo hilo, es un ovillo apretado en el que va ocultando los nudos y aunque en su apariencia de hilo parece estar desenredado y allí es, donde sobran las palabras. La metáfora del ovillo y el nudo da pautas para configurar una idea general de la novela y del cuadro de Renato, con esta explicación de Eufemia: “… los ovillos (…) no son nada”, hay que, “meterle tijera y se acabó” Esto es quizás lo que hace Insecto, “meterle tijera”, dejando en claro que el hilo está lejos de tener nudos, que todo es falso o que al menos es farsa cualquier explicación de Eufemia. Las fragmentarias dudas de Insecto ofrecen una dudosa percepción entre el cuadro de Renato y los amigos del “Vive como Puedas”. Aún así -siguiendo a Hofstadter, según Strzelecki - , la verdad se presenta elusivamente como para que “cualquier tipo de seres la abarque en su plenitud”. De manera que desde la percepción de Insecto como testigo de la historia, la verdad se evita aún más, y sus dudas sólo alcanzan cierto grado de comprensión al volverse real la casa imaginada y al visualizar, posiblemente terminado, el cuadro de Renato. El enigma es el nudo que atraviesa el hilo narrativo como un divertimento, tanto en el devenir de los personajes que como en Insecto, resuelve sus pensamientos entre humor y arte poético. 5 Desde el punto de vista estructural, este nudo refleja una trama de conflictos paralelos que se dan en el cuadro de Renato y en los personajes que actúan literalmente entre sucesos que llegan a su plenitud (años más tarde) en “Rayuela”. De la misma manera, la idea o metáfora del nudo puede constituirse como una representación de los personajes, cuyos hilos de vida se conducen en un camino de lucha que los oprime y al mismo tiempo, da vida a la vida. Según Hofstadter, “perseguir el autoconocimiento es iniciar un viaje que no puede ser trazado en mapas ni mucho menos puede describirse en palabras o dibujos”, cosa que años más tarde Julio Cortázar vuelve a dibujar, reiteramos, al escribir “Rayuela”. Los personajes de “Divertimento” no se conocen a sí mismos ni saben con certeza cuál es su representación a través de la imagen del cuadro que pinta Renato y que, de alguna manera, nos recuerda por su trascendencia, al de “El túnel”, de Ernesto Sabato. Pero el cuadro, reitero, es un principio difuso, con rostros indefinidos que dejan por llenar, espacios en blanco. Renato Lozano conoce su pesadilla y hasta cierto punto se cree loco, por que no sabe cómo finalizar su cuadro; como loco se siente un escritor cuando no sabe como concluir su historia. Ese espacio en blanco de las caras no representadas hasta casi el final de “Divertimento”, constituye la representación del ser de los personajes. Cualquiera 6 puede ser el portador de la espada y cualquiera puede ser la víctima. De esta manera el cuadro es una gran imagen viviente que muere al ser pensado en el espacio de lo real. (Nos viene a la memoria el retrato de Dorian Grey, donde el tiempo deviene y se refleja en él) Así es que lo real de la pintura se constituye en realidad cuando Marta e Insecto encuentran y arriendan la casa de dos ventanas. Dejando estas divagaciones mías por un instante, deseo destacar ese imaginario fantasmagórico que se inscribe en el marco del espiritismo como protociencia. Que las sesiones espiritistas no sean una manifestación científica o estén lejos de constituirse metodológicamente como un saber certero, no parece ser motivo de importancia o duda para los personajes. De hecho, para los involucrados en el “Vive como Puedas”, el espiritismo está lejos de ser solo una diversión, parece ser un nudo que intenta ser desenredado de alguna manera. De todas maneras, no parece que Cortázar le otorgó algún tipo de importancia a las ciencias ocultas o al espiritismo. Lo trata con humor. Por otro lado, la versión científica del espiritismo parecería estar descartada por esa percepción extrasensorial de la que habla también Hofstadter y que constituye la “atmósfera” del “Vive como Puedas”. Aún así, la percepción que tienen de Eufemia y de Marta (elegida como médium), no parece ser una sorpresa para los personajes, que parecen determinar que esta manifestación espiritual es para nada imaginaria. Lo extraño 7 es que parece que en el “Vive como Puedas” nadie escapa a esta percepción del poder de la imaginación. Visto de esta manera, el espiritismo en “Divertimento”, constituye ese extraño bucle del que habla Hofstadter, por el cual el espiritismo va a cuestionar los procedimientos habituales de la ciencia y ofrece nuevas formas para interpretar la evidencia. Evidencia que está lejos de ser una sola; ya que de hecho no sabemos cuál es la que realmente importa a los efectos de la trama, pero que si es posible determinar en el cuadro de Renato con los personajes del “Vive como Puedas” y en el espacio (citadino) que parece ser la casa de dos ventanas. La brecha entre el arte y lo real puede llenarse con el imaginario del fantasma de Eufemia que, aún como fantasma, ofrece una forma más cercana a una interpretación de la evidencia. Que sea falsa o verdadera, es otra cosa y poco importa al lector. Que se vuelva en contra de Marta y le ponga la espada en la mano, brindan cuestionamientos que no se resuelven pero que dan lugar a las dudas de Insecto. (Bueno es recordar cierta fobia porteña contra las espadas, comenzando por la del General José de San Martín, que muchos nefastos historiadores pretenden darle el mismo simbolismo que la Excalibur, la legendaria espada del Rey Arturo.) Aún así, Insecto recién parece entenderlo cuando la espada ve difuminada en el cuadro finalmente terminado. . De ninguna manera el cuadro de Renato asegura una escena de la vida real que para nada hace dudar a los lectores. Como bien señala Hofstadter, en vez de cuestionarse, una serie de dudas encontradas en el relato de “Divertimento”, parecen pertenecer a teorías que responden a un nivel superior de credibilidad. Y ese nivel se enmarca en la 8 constitución de un cuadro como representación de un acontecimiento futuro, algo que encontramos más claramente en “El túnel” de Ernesto Sabato, con una pintura de Juan Pablo Castel, el pintor que mató a María Iribarne. . Que Jorge sea el portador de la espada y que la espada sea posiblemente Laura, podría interpretarse como la disolución de un nudo, pero a su vez constituye un nuevo enigma que no es planteado a nivel textual. Lo paradójico es que el gato Thibaud-Piazzini (otro no-personaje) muere en manos de Jorge, lo que funciona como un tipo de previsión de la imagen del cuadro y da lugar a una carnavalesca descripción, que en algún sentido presumiblemente diabólico, es la que enmarca Insecto al dejarle a Jorge, a Thibaud-Piazzini muerto sobre la mesa. Este toque, acaso de siniestro humor negro, está estrechamente relacionado con el carácter del carnaval, tiempo en el que Cortázar concluyó la escritura de “Divertimento”. Finalmente las máscaras del cuadro, ¿no serán las que se encontraban con Cortázar en el corso del porteño barrio en el que vivió entre 1934 y 1951, junto a su madre y a su hermana Memé en una apacible casa de la calle General Artigas 3246, ubicada en el triángulo delimitado por las calles Tinogasta, Zamudio y Avenida San Martín, más conocido como Barrio Rawson?. A modo de conclusión, creo entender que la relación que se construye entre el espacio urbano y el imaginario fantasmagórico de las sesiones espiritistas se da justamente porque este imaginario constituye, manipulado o no, una forma de interpretación del cuadro de Renato y la realidad que viven los personajes. 9 Lo urbano que tiene como protagonista a la casa de dos ventanas, es tanto para Marta como para Insecto, la culminación de un viaje hacia el autoconocimiento. El enigma como metáfora del nudo del enigma, es solamente un intento de humor que ofrece este “divertimento”, con todas las acepciones que puede darse al título de esta primera novela de Julio Cortázar. La brecha entre arte y realidad de los personajes sólo se une en las reuniones en el “Vive como Puedas”, ya que abre los interrogantes de las dudas del relator (Insecto). La evidencia es una sola y podría estar en el cuadro de Renato. Pero su destrucción hacia el final de la novela, termina por aceptar que el acontecimiento, sea real o no, constituye una evidencia de real. Sin duda, el lector de “Divertimento”, después de su lectura, puede asumir que la vida y quizá este haya sido el deseo de Cortázar, es un pasatiempo en ocasiones divertido y por eso a la vida nunca hay que tomarla demasiado en serio. Pasatiempo o divertimento que Julio Cortázar llevará exitosamente al extremo en su novela “Rayuela”. 10 (Texto leído el viernes 18 de julio, en FILGUA 2014 – Feria del Libro de Guatemala- en homenaje a Julio Cortázar con motivo del centenario de su nacimiento) -------------------------------------------------------------------------------------------------------------BIBLIOGRAFÍA Cardoza y Aragón, Luis: “Asturias: casi novela”. Ediciones Era, México, 1991 Cortázar, Julio: “Divertimento”. Alfaguara, Buenos Aires, 1996. Cortázar, Julio: “Rayuela”. ALLCA XX, Colección Archivos, Madrid, 1996. Hofstadter, D.: “Bucle extraños o jerarquías enredadas”, en Gödel, Escher, Bach: una eterna trenzada dorada, México, CNCT, 1982. Sabato, Ernesto: “El túnel”. Cátedra, Madrid,1984. Strzelecki, Anabella Milagros: https://www.academia.edu/5252669/Fantasmas_y_espacios_la_interpretacion_de _la_evidencia_en_Divertimento_de_Julio_Cortazar 11