Lo que el agricultor no debe ignorar al instalar un invernadero

XOBA Vol, 2 N ü m . 2
DEPRRTniVIENTO DE EXPLOTACIÓN
EXPERIMENTACIÓN I O S MORISCOS
»
SERVICIO AGRÍCOLA
CAJA INSUlAft
DE aHOMROS
Di BRAN U Ñ A R Í A
LO QUE EL AGRICULTOR NO DEBE IGNORAR
AL INSTALAR UN INVERNADERO
José Manriaue de Lara y Gil
(Continuación]
TIPOS DE ESTRUCTURAS
La tendencia existente desde hace varios
años en el campo de los cultivos hortícolas, hacia
la producción anticipada o tatálmente fuera de
estación (semlforzado de cultivos), ha llevado a fa
puesta a punto de diversos sistemas protectores
idóneos para los fines indicados. Estas instalaciones pueden ser muy diversas entre si; bien por las
características y complejidad de sus estructuras,
como por la mayor o menor capacidad de control
del ambiente. Una primera clasificación, a grandes trazos; de los diversos tipos de protecciones,
puede hacerse distinguiendo entre los túneles e
invernaderos, citando estos dos sistemas por su
mayor uso en las islas Canarias.
I,-TÚNELES.
Aunque los materiales usados para la construcción de los túneles son sustancialmente siempre los mismos: plástico para el revestimiento y
hierro o madera para los soportes, sin embargo
pueden realizarse de muy distintas maneras,
según los usos culturales a que se destinen. El
túnel más sencillo de realizar, como todos o
casi todos los agricultores ya conocen, es el^
tipo fijo, que separa por completo del ambiente
exterior la superficie del terreno y el volumen
de aire que queda encerrado en él; estando
desprovisto de todo ingenio para la aireación.
Para su construcción se extiende la lámina
de plástico sobre pequeños arcos de hierro que
han sido previamente hincados en el terreno y
luego se sujeta fuertemente en los lados y en los
extremos. Se comprende fácilmente que bajo este
tipo de túnel la temperatura llega a ser altísima y
las condesaciones de humedad son realmente
importantes, por lo tanto se podrá utilizar en
ocasiones muy determinadas.
Tratándose de cultivos que tienen que estar
bajo túnel mucho tiempo y sobre todo cuando
las plantas tienen que pasar allí la delicada fase
de la fecundación de la flor, es absolutamente
indispensable construir unos túneles que permitan realizar periódicas aireaciones del cultivo.
En este caso el sistema comunmente adoptado es
el hacer un túnel que conste de dos series de
pequeños arcos, unos debajo de la lámina de
plástico con función de sostenimiento y los
otros por encima de ella, que mantienen el
túnel en contacto con la superficie del terreno
de modo que, si se quiere, se pueda levantar
para dejar que el aire se renueve.
Un perfeccionamiento del túnel y que,
afecta a su estructura, es mediante armaduras de
unos cinco metros de largo sobre las que se
coloca la lámina de plástico, que luego se sujeta
en los extremos. Por medio de un sistema de
tirantes muy sencillo,se puede levantar y bajar de
un lado el túnel, apoyándolo en el lado que queda fijo al terreno y de ese modo puede hacerse el
cambio del aire. Claro esta que este tipo de
construcción es más complicada y, por lo tanto,
más cara.
II.-INVERNADEROS
En un artículo de la Revista de la Hortofloricultura Italiana de 1962, Gorini define así un
invernadero: "Una construcción de madera o
hierro u otro material, cuya cubierta o estructura está completada por cristales, provistas por lo
general de calefacción que, a veces está iluminada
artificialmente y en donde se puede cultivar hortalizas tempranas, flores y plantas verdes, .en
épocas en las que la temperatura y la luz del
lugar en donde se está cultivando serían insuficientes para su crecimiento y fructificación". A
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Manrique de Lara Instalación Invernadero
•pesar de que hoy habría que añadir algo a esta
definición, sobre en lo que a los materiales de
recubrimiento o a estructuras se refiere, vemos
claramente que la definición de cabida a una
variedad enorme de formas constructivas bajo las
que puede realizarse un invernadero, variedad
de materiales estructurales y a la presencia o
ausencia de diversos aparatos de climatización
como de todos es conocido.
Aún reconociendo que esta evolución puede
tomarse como Índice de la progresiva tendencia a
la construcción de invernaderos cada ves más
especializados y climatizados, esto no debe hacernos pensar que las forma menos "evolucionadas"
deben considerarse como superadas.
A su vez hay que distinguir entre los materiales estructurales y los materiales de revestimiento
o cubierta. Hoy en día se dispone de gran variedad de materiales para las estructuras; sin embargo, los más que se usan son: la madera el hierro
galvanizado y en algunos casos, para determinadas piezas, se usan también el duraluminio.
Si hasta ahora el duraluminio no ha alcanzado más largo uso, es debido, no ha factores técnicos, sino económicos. Los materiales de recubrimientos son esencialmente dos: cristal y materiales plásticos como se sabe.
Las diversas combinaciones entre tos materiales enunciados ha dado lugar al uso de una nomenclatura para indicar los distintos tipos de invernaderos:se habla así,por ejemplo,de invernaderos de
madera y cristal; de madera y plástico de hierros
y plástico, de hierro, plástico y madera; de hierro
y cristal. Como resumen podríamos decir, según
las normas dominantes en la construcción de
invernaderos en nuestras islas, las preferencias en
el uso de estas estructuras:
a) Invernaderos de cristal.
Normalmente la construcción ha quedado en
manos de casas especializadas, usando para soportar el peso del vidrio perfiles de hierro galvanizado.
b) Invernaderos de tipo "Canarias"
Estos a pesar que existe personal dedicado a
este tipo de industria igualmente son proyectados
por personal agricultor, usando como estructuras
tubería galvanizada, madera y cubiertas de diferentes tipos de material plástico.
c) Invernaderos de palos.
Este tipo de invernaderos, generalmente de
techo "plano", es diseñado y construido por los
mismos agricultores, poniendo algún tipo de
protección al pato, bien sean riostras etc., metálicas; y, para evitar que la medera se pudra suelen
tratarse éstos con elgún tipo de betún asfáltico.
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es cubierto con materiales plásticos y fijado mediante cintas de igual material, mediante grapas
metálicas.
I I I . - LA VENTILACIÓN
La ventilación como todos los que están
metidos en el mundo de los invernaderos, conocen; tiene tres posibilidades:
a ) . - Mermar la temperatura
b).— Reducir la humedad
c).— Reposición mediante cierto número
de aperturas y cierres de ventanas
del C02.
Desde luego para la reposición del C02
como es lógico necesita un número determinado
de cambios durante la hora, con diez aproximadamente se conseguirá un suministro del 15 al
20 % , suministro que se considera óptimo para el
caso que nos ocupa.
A medida que se realizan estos cambios o
dicho de otra forma, aperturas y cierres del
sistema de ventilación, va siendo al mismo
tiempo como es lógico menor la diferencia
entre la temperatura exterior e interior, desde luego todo está proporcionado al sistema de
construcción, altura de las naves^ anchura de
éstas etc, en todo caso ante tal pérdida de
rendimiento solo habría que modificar el
número de cambios / hora.
El sistema de ventilación habrá que considerarlo bajo dos espectos perfectamente diferenciados, uno en forma DINÁMICA y la otra en
forma ESTÁTICA.
La ventilación estática.
Esta ventilación se realiza abriendo y cerrando ventanas o lo que es igual a un número
determinado de cambios / hora, de esta forma se
realizan cietas corrientes de aire en una dirección
determinada, según situación de los ventanales.
La convección que constituye el tiro natural de
un invernadero que se ve potenciada por la
acción del viento. Para caracterizar un practicable
se utiliza ante todo el concepto de superficie de
aireación y /o de aireación.
En algunos estudios realizados por personas
muy competentes sobre el caso, se ha llegado a la
conclusión sobre la colocación de estas ventanas
en distintos lugares con preferencia en laterales
y cumbreras.
Según normas de ciertos paisajes la superficie mínima de aireación para un buen control de
la temperatura en zonas meridionales es del
14/¿ en cubierta y del 6 /¿ en los laterales, indicando con especificaciones, lo que ya nos indica
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que a pesar de su beneficiosa acción conjunta,
son las ventanas de cubiertas las que tienen
mayor importancia, comparadas con las laterales.
La eficacia de las ventanas para la ventilación no
solo reside en su valor relativo como tal superficie, sino en su forma y disposición. Al mismo
tiempo
igualmente está demostrado que son
más eficaces las ventanas continuas que las
discontinuas. Igualmente se ha demostrado
gracias a los estudios de Renard y Krantz, la
importancia del diseño en las ventanas para favorecer las presiones o succión que realiza el viento,
dependiendo en gran parte en la importancia
sobre el conocimiento de los vientos en cada una
de las partes de la cobertura de un invernadero,
así otro elemento muy digno de tener en cuenta
es su orientación.
La ventilación dinámica.
Es aquella que eliminando todo tipo de
ventanas, et movimiento del aire es a base de
extractores. Como es lógico, se trata de una
construcción más económica, más hermética,
mejora el intercambio de gases a nivel de las
hojas y, permite controlar mejor la humedad
en los límites que no sean perjudiciales para la
proliferación de la enfermedades de hongos, etc.
Se puede producir una ventilación en la que
el viento no cuenta para nada y sin duda una
mejor distribución de fa temperatura vertical,
sobre todo sí los ventiladores se colocan como es
norma en los laterales det invernadero.
La ventilación dinámica no reduce las temperaturas más allá de la del termómetro seco al
exterior, pero puede ser más eficaz que ta estática y permite aprovechar y potenciar la aplicación del sistema evaporativo.
Sin embargo, también es verdad que encierra
este sistema algunos inconveniestes a saber:
a) Mayor coste de funcionamiento.
b) Dependencia total de los invernaderos a
la enegía eléctrica lo que en ciertos casos
igualmente nos obligará a depender de un
grupo electrógeno adecuado.
Pero a pesar de estos inconvenientes en invernaderos de tipo pequeño, sigue siendo importante y suficiente la ventilación a base de ventanas perfectamente estudiadas que, habiéndose
cumplido las exigencias de una buena orientación
del invernadero, los resultados pueden ser EXCELENTES.
La ventilación dinámica hace necesario, para
que se obtenga el mayor rendimiento un nivel de
renovación de unos 40/60 cambios / horas.
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