Un vaso de agua El conocimiento es la fuente de toda la riqueza material y espiritual de la sociedad humana.Cuando conocemos a la naturaleza, podemos hacer cosas maravillosas, y cuando nos conocemos a nosotros mismos, en el sentido más profundo y preciso del concepto, estamos en mejor posición de usar ese conocimiento en forma creativa. D ecimos que conocemos algo cuando podemos describir su estructura y las causas de su funcionamiento. El arte y la ciencia son las dos herramientas que permiten explorar todos los aspectos del cosmos, desde las manifestaciones de la naturaleza hasta la forma en la que las interpretamos. Un vaso con agua puede ser muchas cosas. Para la mayoría de las personas es un objeto de la vida diaria que no merece mas atención de la necesaria para beber el líquido, y dejar el vaso en un lugar razonablemente seguro. 32 POR: ENRIQUE GÁNEM FOTÓGRAFO: ARMANDO HERRERA Para un artista, un vaso de agua es un universo entero. Mauritius Cornelius Escher, por ejemplo, se deleitaba presentado objetos comunes, como un vaso de agua, desde una perspectiva inquietante. City Life Septiembre Con frecuencia, sus grabados invitan al espectador a "ver" al mundo de Escher en varios niveles; en el vaso hay reflejos que revelan partes del estudio que no serían visibles para la perspectiva principal del artista. En el vaso, puede aparecer además la imagen de Escher, dibujando el cuadro que ahora miramos. Y si seguimos esta lógica visual, al poco comenzamos a sentirnos en el interior de otro cuadro, pintado por un artista inimaginable. Para el científico moderno, particularmente para algunos físicos de la Universidad de Purdue, un vaso de agua podría ser la herramienta para destronar para siempre al petróleo del centro del universo económico humano. Hace un par de años, estos investigadores publicaron un trabajo inquietante. El ultrasonido es una herramienta tecnológica vieja. Cuando Henri Curie descubrió que el cuarzo, y otros materiales, cambian de forma cuando experimentan el paso de una corriente eléctrica, creyó que este fenómeno no pasaría de ser una curiosidad de laboratorio. Pocas décadas después, el ASDIC (el primer sonar), ayudó a salvar a los aliados de los submarinos alemanes durante la Primera Guerra Mundial. El cuarzo, al ser sometido a una corriente intensa y que varía con rapidez, puede vibrar muy rápidamente. El corazón de los modernos relojes de baterías (los de manecillas y los que tienen una pantalla de cristal líquido, con números) tienen un diapasón de cuarzo cuya forma ha sido cuidadosamente calculada para vibrar no menos de 32 mil y fracción veces por segundo; un pequeño circuito cuenta cada oscilación, y a las 32 mil y fracción, avanza el contador de los segundos. Finalmente, el mismo tipo de sistema piezoeléctrico (así se llama a la propiedad del cuarzo) puede usarse para generar sonidos de una frecuencia mucho mayor a la que podemos escuchar. Estos sonidos pueden ser empleados para construir un sonar mucho más pequeño, de menor alcance, pero mucho más preciso que el empleado para explorar y hacer la guerra en el mundo subacuático; estos sonares son usados para realizar los "ultrasonidos" tan útiles para los médicos. Los ultrasonidos también pueden ser usados para limpiar y esterilizar algunos objetos; las ondas sonoras de ultra alta frecuencia pueden desprender depósitos de sales, y matar bacterias. >> ELEXPLICADOR>> Los investigadores de Purdue se encontraron con un fenómeno curioso. Cuando hace uno pasar ondas ultrasónicas por un vaso de agua, a veces aparecen pequeñísimos destellos de luz. Los investigadores bautizaron a este fenómeno "sonoluminiscencia", por motivos obvios. rica en hidrógeno —la acetona— pues tiene algunas propiedades que hacen más probable la reacción de fusión). Aparentemente, La luz es un fenómeno bien conocido. Sabemos qué se necesita para producir luz. Los pequeños destellos en las micro burbujas de vacío formadas por las ondas ultrasónicas, al parecer, alcanzaban unas temperaturas enormes, durante una minúscula fracción de un segundo. atómicos, y cuando están solos son muy inestables (en unos 15 minutos se descomponen en un protón —con carga eléctrica positiva— y Cuando las ondas ultrasónicas sacuden el agua, a veces hacen que las moléculas de la misma se desplacen tan rápido que otras moléculas no pueden ocupar su lugar. Se forma una burbuja de vacío en ese lugar. La burbuja rápidamente es destruida cuando las moléculas de agua circundantes caen hacia ella. Este proceso puede ser acelerado por el ultrasonido. Las ondas de sonido en el agua pueden hacer que el colapso de esas burbujas de vacío sea mucho más violento que lo que ocurre cuando Ud. mueve su mano rápidamente en el interior de una piscina (se forman unas burbujas de vacío cerca de su mano; estas burbujas nunca suben a la superficie porque son destruidas en menos de un segundo). Los investigadores estaban seguros que la fuerza del colapso de esas burbujas podría ser suficiente como para realizar, a muy pequeña escala, el mismo proceso que permite que el sol brille. En el corazón de nuestra estrella, la presión es tan espantosa, y la velocidad de los átomos de hidrógeno es tan grande (otra forma de decir esto es que la temperatura del hidrógeno es enorme), que al chocar, los átomos de hidrógeno se funden, y forman helio (el proceso es algo complicado, por cierto). Al hacerlo, los átomos liberan una cantidad fantástica de energía, suficiente para mantener funcionando el ecosistema terrestre, que solamente recibe una fracción de una millonésima de la energía que emite el sol. En nuestro planeta, la fusión nuclear solamente se ha logrado con el estallido de las bombas de hidrógeno (que usan a una bomba atómica similar a la que destruyó a Hiroshima como simple detonador), y durante una ridícula fracción de segundo en los costosísimos reactores de fusión experimentales. Los científicos de Purdue reportaron recientemente que han repetido el experimento en varias ocasiones (en las últimas han usado, en lugar de agua, otra sustancia han encontrado que de las pequeñas burbujitas de luz emanan neutrones. Los neutrones son componentes fundamentales de los núcleos un electrón —con carga negativa—). Por esta razón no es común encontrarlos volando por ahí. Los neutrones solamente se pueden observar en solitario cuando han sido recientemente liberados por alguna reacción que altere la composición de un núcleo atómico. Ninguna reacción química puede hacer esto (los alquimistas nunca pudieron producir oro porque sus experimentos solamente involucraban cambios químicos en las sustancias que manipulaban). Si el experimento de Purdue es verificado por otros grupos, entonces no quedará duda posible. Con un simple sistema de ultrasonido es posible producir una reacción de fusión de átomos de hidrógeno en átomos de helio en un simple vaso de agua. Las consecuencias serían maravillosas... y terribles. Si esta tecnología puede hacerse práctica, cualquier hogar u oficina podría producir su propia energía eléctrica con la ayuda de equipos muy baratos y confiables. En lugar de excavar pozos en lugares cada vez más remotos y peligrosos para extraer petróleo, la sociedad obtendría su energía de un simple vaso lleno de agua de lluvia. Sería la primera vez, desde que existe la civilización humana, en que una persona, o un pequeño grupo, podría ser fácilmente autosuficiente en materia de producción de energía. La energía, al igual que la información, es la materia prima del progreso. Con energía se puede hacer todo. La sociedad moderna ha sido esclava de los procesos de producción de energía desde hace siglos. La mayoría de las grandes guerras del pasado —y las del presente— son impulsadas por el deseo de controlar la fuente de energía que mueve al mundo moderno. Ahora imagine como cambiaría su vida, la de su ciudad, de su país y del planeta entero si se confirma el resultado de este trabajo, que es consecuencia de mirar, en forma creativa, a un simple vaso con agua. • Septiembre City Life 33