Los 10 peores errores en una entrevista de trabajo ¿Escuchó la historia sobre un aspirante a un puesto de trabajo que se peinó durante un entrevista o sobre el candidato que se olió las axilas en el camino hacia la sala de la prueba? Puede sonar como una broma, pero el portal de internet CareerBuilder.com recopiló en una lista los 10 errores más groseros en entrevistas de trabajo durante el último año. La lista se basa en una encuesta a 3.061 personas encargadas de contratar personal y a profesionales de recursos humanos de los Estados Unidos, elaborada por la compañía Harris Interactive, y determinó que los errores más vergonzosos fueron: - Un aspirante respondió una llamada a su celular y le pidió a quien lo entrevistaba que abandonará su propia oficina porque era una conversación "privada". - Un candidato que aseguró al entrevistador que no se quedaría mucho tiempo en el puesto de trabajo ya que esperaba recibir una herencia de su tío, quien "no tenía buena pinta". - Una persona que aprovechó la entrevista para pedirle al seleccionador que lo acercara a su casa. - Un postulante que olió sus axilas en el camino a la sala de reuniones. - Una persona que se negó a entregar una muestra de su caligrafía debido a que toda su escritura era para la CIA y estaba considerado como "información clasificada". - Un aspirante que dijo haber sido despedido de su último trabajo por haber golpeado a su último jefe. - Un candidato que rechazó la oferta de comida antes de la entrevista debido a que no quería llenar su estómago de grasa antes de salir a beber. - Una persona que se presentaba a un puesto de contable aseguró ser fuerte en "relaciones sociales" y no en "números". - Un aspirante a un puesto de trabajo que tiró de la cadena del inodoro durante una conversación telefónica con el entrevistador. - Una persona que sacó un cepillo y comenzó a peinarse el cabello durante la reunión. Los errores clásicos Los empleadores también respondieron a la pregunta de cuales eran los errores más comunes que cometen los entrevistados. Un 51% de los entrevistadores aseguró que vestir de una forma inadecuada era el error más grande que podía cometer un aspirante durante una prueba. Referirse en forma negativa a su empleador, actual o pasado, fue catalogado como el segundo peor error por un 49%, y en tercer lugar, con 48%, se situó el parecer desinteresado. Otros errores incluyeron parecer arrogante, no responder de forma directa, y no hacer buenas preguntas. "Si un candidato es demasiado negativo, se agota con facilidad o no viene preparado, las alarmas suenan para los empleadores", afirma la portavoz de CareerBuilder.com, Rosemary Haefner.