MODELOS DE ESCUELA: MODELO IDEALISTA D. O. R. J. S. M. MODELO IDEALISTA El idealismo es la posición filosófica que afirma que el mundo exterior es una idea procedente de la mente del hombre o de un ser sobrenatural. Es una posición filosófica antigua que se considera que se inició con Platón. Su enfoque es racionalista o sea que tiene la tendencia a considerar el razonamiento deductivo como único método de conocimiento. Este método parte de los enunciados universales para llegar luego a proposiciones particulares. La verdad, la cual tiene carácter absoluto existe independientemente del individuo o de la sociedad en que éste vive. Por su naturaleza misma, algunos idealistas asignan excesiva importancia a los aspectos intelectuales y se ocupan poco de los problemas físicos. El propósito de la educación es transmitir la herencia cultural que refleja la verdad que fue progresivamente develada en el curso de la historia. El alumno puede acercarse al ideal emulando a su maestro, que lo guía en el análisis de las ideas. Los elementos de la mente son primarios para la educación. La educación debe guiar al aprendiz a captar las cosas mentalmente y en el uso de las ideas y conceptos ya que en estos encontrarán la verdad. El aprendizaje debe permitirles a los individuos el logro de la realización de la bondad y la verdad. La filosofía idealista ha ejercido gran influencia en la teoría y práctica pedagógicas. Sin embargo, desde el siglo XIX, el idealismo ha ido declinando en influencia en educación. Los filósofos idealistas mostraron gran interés por la educación. Platón, por ejemplo, expresó sus ideas sobre los fines de la educación, el concepto curricular y la metodología a seguir en su libro La República. Los idealistas consideraban que el principal fin de la educación debe ser la búsqueda de las ideas verdaderas. También creen que otro fin importante debe ser el desarrollo del carácter ya que la búsqueda de la verdad requiere disciplina y fortaleza de carácter. Platón creía que la verdad no puede encontrarse en el mundo material porque este mundo es cambiable e imperfecto; la verdad se encuentra en el mundo de las ideas. La educación debe tener como propósito fundamental el llevar al estudiante a que alcance la sabiduría. San Agustín representa la máxima expresión de la filosofía educativa idealista cristiana. Existe un paralelismo entre sus ideas y las de Platón. Como parte del currículo, propulsa las siguientes disciplinas: la gramática, la dialéctica, la retórica, la música, la aritmética, la geometría, y la astronomía. En su opinión, el estudio de las artes liberales y el desarrollo máximo de la razón a través de las matemáticas ayudan al hombre a aprender la Verdad Eterna que es Dios. Sin embargo, la razón y la ciencia están subordinadas a la fe y a las verdades divinas expresadas en las Sagradas Escrituras. Por eso, el hombre deberá estudiar la Biblia. Kant, su filosofía educativa tiene un enfoque moral. Para él, el fin de la educación debe ser la formación del carácter moral del estudiante. Debe formar al niño para que actúe de acuerdo con lo que le dicta su conciencia racional. El fin último de la educación debe ser la búsqueda de la perfección moral tanto individual como socialmente.