Una unión bancaria más fuerte: Nuevas medidas para reforzar la

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Comisión Europea - Comunicado de prensa
Una unión bancaria más fuerte: Nuevas medidas para reforzar la protección
de los depósitos y reducir aún más los riesgos bancarios
Estrasburgo, 24 de noviembre de 2015
La Comisión ha propuesto hoy un sistema de seguro de los depósitos bancarios para toda la
zona del euro y ha establecido en paralelo medidas adicionales con el fin de reducir los
riesgos que persisten en el sector bancario.
Message by Jonathan Hill: A Stronger Banking Union
La reciente crisis ha mostrado que las grandes crisis económicas y financieras pueden debilitar la
confianza en el sistema bancario. La unión bancaria se creó para sostener la confianza en los bancos
participantes: un sistema europeo de garantía de depósitos fortalecerá la unión bancaria,
afianzará la protección de los depositantes bancarios, reforzará la estabilidad financiera y reducirá aún
más el vínculo entre los bancos y sus deudas soberanas.
Las medidas tomadas constituyen son una de las etapas contempladas en el Informe de los cinco
Presidentes para reforzar la unión económica y monetaria de la UE. La propuesta legislativa de la
Comisión garantizará los depósitos de los ciudadanos a nivel de la zona del euro. La propuesta va
acompañada de una comunicación en la que se establecen otras medidas para reducir aún más los
riesgos persistentes en el sector bancario en paralelo al trabajo sobre la propuesta de sistema europeo
de garantía de depósitos.
El vicepresidente Valdis Dombrovskis, responsable del Euro y el Diálogo Social, ha declarado:
«Completar la unión bancaria es esencial para una unión económica y monetaria resiliente y próspera.
La propuesta de la Comisión relativa a un sistema europeo de garantía de depósitos se basa en los
sistemas nacionales de garantía de depósitos y sería accesible solo a condición de que las normas
acordadas en común hubieran sido plenamente aplicadas. Al mismo tiempo, se impone la adopción de
nuevas medidas para reducir los riesgos del sistema bancario. Hemos de debilitar el vínculo entre
bancos y deudas soberanas y poner en práctica las normas acordadas por las cuales los contribuyentes
no deberán ser los primeros en pagar por los bancos en dificultades».
El comisario Lord Hill, responsable de Estabilidad Financiera, Servicios Financieros y Mercado de
Capitales de la Unión, ha manifestado: «La crisis reveló la debilidad de la arquitectura general de la
moneda única. Desde entonces, hemos establecido un supervisor único y una autoridad única de
resolución. Ahora tenemos que tomar medidas encaminadas a la adopción de un sistema único de
garantía de depósitos. Al hacerlo paso a paso, tenemos que garantizar que la reducción del riesgo va
ya de la mano de la distribución de riesgos. Esto es lo que estamos decididos a ofrecer».
El sistema se desarrollará a lo largo del tiempo y en tres fases. Consistirá en un reaseguro de los
sistemas nacionales de garantía de depósitos, con el objetivo de avanzar tres años después a un
régimen de coaseguro, en el que la contribución del sistema europeo de garantía de depósitos
aumentará progresivamente con el tiempo. Como fase final, se prevé un sistema europeo de garantía
de depósitos completo para 2024. El sistema incluye una serie de sólidas salvaguardias frente al
«riesgo moral» y el uso inadecuado, a fin de dar incentivos a los sistemas nacionales para que
gestionen sus riesgos potenciales de manera prudente. En particular, un sistema nacional solo podrá
acceder al sistema europeo de garantía de depósitos si cumple plenamente la legislación pertinente de
la Unión.
Aspectos principales
El sistema europeo de garantía de depósitos:
se construirá sobre el sistema actual, compuesto por los sistemas nacionales de garantía de
depósitos creados de acuerdo con las normas europeas; los depositantes particulares seguirán
disfrutando del mismo nivel de protección (100 000 euros);
-
se introducirá gradualmente, paso a paso;
globalmente no tendrá costes para el sector bancario: las contribuciones que los bancos
efectúen al sistema europeo de garantía de depósitos podrán deducirse de sus contribuciones
nacionales a los sistemas de garantía de depósitos;
se ponderará en función del riesgo; los bancos con más riesgo efectuarán aportaciones más
elevadas que los bancos más seguros, y esta situación se reforzará a medida que se introduzca
gradualmente el sistema europeo de garantía de depósitos; los ajustes de riesgo se aplicarán desde el
primer momento;
irá acompañado de garantías estrictas: por ejemplo, solo asegurará los sistemas nacionales de
garantía de depósitos que cumplan las normas de la UE y se construyan en consonancia con ellas;
irá acompañado de una comunicación en la que se recogerán medidas para reducir los riesgos,
como futuras propuestas destinadas a garantizar que las exposiciones de los bancos a riesgos
individuales de deuda soberana estén lo suficientemente diversificadas; y
será obligatorio para los Estados miembros de la zona del euro, cuyos bancos están cubiertos
actualmente por el Mecanismo Único de Supervisión; pero estará abierto a otros Estados miembros de
la UE que deseen adherirse a la unión bancaria.
Evolución en tres fases hacia el sistema europeo de garantía de depósitos
Fase 1: Reaseguro
La propuesta de la Comisión se inicia con un planteamiento de reaseguro que tendría una duración de
tres años, hasta 2020.
Cómo funcionaría:
- en la fase de reaseguro, los sistemas nacionales de garantía de depósitos solo podrán acceder a los
fondos del sistema europeo cuando hayan agotado sus recursos propios; y, como en las demás fases,
si se ajustan a la Directiva sobre el sistema de garantía de depósitos.
- los fondos del sistema europeo de garantía de depósitos proporcionarán fondos adicionales a los
sistemas nacionales, pero solo hasta un determinado nivel.
Habrá salvaguardias para garantizar que los sistemas nacionales puedan acceder al sistema europeo
de garantía de depósitos solo cuando esté justificado y hacer frente al posible riesgo moral. En
particular, los fondos del sistema europeo de garantía de depósitos solo estarían disponibles si los
Estados miembros han aplicado plenamente las disposiciones pertinentes de la Directiva sobre el
sistema de garantía de depósitos. Cualquier uso que se haga de los fondos del sistema de garantía de
depósitos será objeto de un estrecho seguimiento. Cuando se compruebe que un sistema nacional de
garantía de depósitos ha recibido inapropiadamente fondos del sistema europeo de garantía de
depósitos, estos tendrán que reembolsarse íntegramente.
Este primer paso de reaseguro debilitaría el vínculo entre los bancos y sus deudas soberanas. Pero se
necesita algo más para ofrecer una garantía plena de que los sistemas nacionales pueden recurrir y
garantizar que todos los depósitos minoristas de la Unión Bancaria gozan de un mismo nivel de
protección. Esta es la razón por la que es necesaria una segunda fase.
Fase 2: Coaseguro
Tras tres años como sistema de reaseguro, en 2020 el sistema europeo de garantía de depósitos se
convertirá en un sistema progresivamente mutualizado («coaseguro»), aunque sujeto a límites y
salvaguardias adecuados contra los abusos.
La diferencia fundamental en esta fase sería que los sistemas nacionales no estarán obligados a agotar
sus fondos propios antes de acceder a los fondos del sistema europeo de garantía de depósitos. El
sistema europeo de garantía de depósitos estará en disposición de contribuir a una parte de los costes
a partir del momento en que haya que reembolsar a los depositantes. Esto introduce un mayor grado
de distribución de riesgo entre los regímenes nacionales a través del sistema europeo de garantía de
depósitos. La cuota contributiva del sistema europeo de garantía de depósitos comenzará a un nivel
relativamente bajo (20 %), y se incrementará en un período de cuatro años.
Fase 3: Seguro pleno
Al incrementar gradualmente la cuota de riesgo que el sistema europeo de garantía de depósitos
asume al 100 %, dicho sistema aseguraría plenamente los sistemas nacionales de garantía de
depósitos a partir de 2024. Ese será el año en que se habrán introducido plenamente el Fondo Único de
Resolución y los requisitos de la actual Directiva sobre el sistema de garantía de depósitos.
El Fondo europeo de garantía de depósitos
Se creará desde el primer momento un fondo europeo de garantía de depósitos. Se financiará
directamente mediante las contribuciones de los bancos, ajustadas en función del riesgo. La gestión del
fondo europeo de garantía de depósitos se confiará a la actual Junta Única de Resolución.
Medidas de reducción de riesgos
Además de introducir el sistema europeo de garantía de depósitos, y en paralelo a los trabajos sobre la
propuesta legislativa, la Comisión seguirá aplicando un paquete completo de medidas para reducir los
riesgos y garantizar la igualdad de condiciones en la unión bancaria.
Se cuentan entre ellas:
reducción de las opciones y facultades discrecionales nacionales en la aplicación de las normas
prudenciales, con el fin de que el Mecanismo Único de Supervisión pueda funcionar lo más eficazmente
posible;
-
armonización de los sistemas nacionales de garantía de depósitos;
adopción de legislación para llevar a la práctica los restantes elementos del marco regulador
pertinente para los bancos acordado a nivel internacional, en particular para limitar el apalancamiento
de los bancos, garantizar la estabilidad de la financiación bancaria y mejorar la comparabilidad de los
activos ponderados en función del riesgo, y para permitir la puesta en práctica en 2019, a más tardar,
de las recomendaciones del Consejo de Estabilidad Financiera sobre la capacidad total de absorción de
pérdidas por los bancos, de modo que se disponga de recursos suficientes para los bancos en
dificultades sin tener que recurrir a los contribuyentes;
aplicación de las normas vigentes de manera que el uso de financiación pública para mantener
un sector bancario solvente y resiliente sea mínimo;
aumento de la convergencia del Derecho de insolvencia tal como figura en el plan de acción
para una unión de los mercados de capitales;
iniciativas en lo que se refiere al trato prudencial de la exposición de los bancos a riesgos de
deuda soberana, como limitar las exposiciones de los bancos al riesgo de deuda soberana para
garantizar que el riesgo está diversificado.
Además de estas acciones, la Comisión se asegurará de que los Estados miembros transpongan
plenamente la legislación existente en este ámbito, como las Directivas de 2014 sobre rescate y
resolución bancarios y sistemas de garantía de depósitos. En su caso, se han puesto ya en marcha
procedimientos de infracción a tal fin (véase IP/15/5827).
Antecedentes:
En 2012, en el marco de una visión a largo plazo de integración económica y fiscal[1], la Comisión hizo
un llamamiento en favor de una unión bancaria que situara al sector bancario sobre una base más
sólida y restableciera la confianza en el euro. La unión bancaria debía llevarse a cabo paso a paso,
trasladando la supervisión al nivel europeo, estableciendo un marco único para la gestión de las crisis
bancarias y un sistema común de protección de los depósitos. Mientras que las dos primeras fases se
han alcanzado con la creación del Mecanismo Único de Supervisión y el Mecanismo Único de
Resolución, todavía no se ha creado un sistema común de protección de los depósitos.
El Informe de los cinco Presidentes, de 22 de junio de 2015[2], y la Comunicación de seguimiento de la
Comisión, de 21 de octubre de 2015[3], establecen un plan claro para profundizar en la unión
económica y monetaria, incluidas medidas para limitar aún más los riesgos para la estabilidad
financiera. Completar la unión bancaria es un paso indispensable hacia una unión económica y
monetaria profunda y completa. Es importante para la moneda única disponer de un sistema financiero
unificado y completamente integrado a fin de permitir una trasmisión eficaz de la política monetaria,
una mejor absorción de las crisis económicas mediante una adecuada diversificación de riesgos entre
los Estados miembros y la confianza general en el sistema bancario de la zona del euro.
En particular, el Informe de los cinco Presidentes propone crear, a largo plazo, un sistema europeo de
garantía de depósitos como tercer pilar de la unión bancaria junto con la supervisión bancaria, aspecto
que se ha confiado al Mecanismo Único de Supervisión, y la resolución de crisis bancarias, que se ha
confiado al Mecanismo Único de Resolución.
Si bien los sistemas nacionales de garantía de depósitos ya existen y aseguran la protección de
100 000 euros por persona/por cuenta por banco, no están respaldados por un sistema europeo
común.
Para más información:
VéaseMEMO/15/6153
[1] Comunicación de la Comisión al Parlamento Europeo y al Consejo «Hoja de ruta hacia una unión
bancaria», COM(2012) 510 de 12.9.2012.
[2] Informe de los cinco Presidentes, de 22 de junio de 2015, «Completar la Unión Económica y
Monetaria» http://ec.europa.eu/priorities/economic-monetary-union/docs/5-presidents-report_en.pdf
[3] Comunicación de la Comisión al Parlamento Europeo, al Consejo y al Banco Central Europeo,
«Medidas destinadas a realizar la Unión Económica y Monetaria», COM(2015) 600 final de 21.10.2015.
IP/15/6152
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