76 Raúl Anguiano pobladas por peatones apresurados aparecen de pronto En mi caso, hice una vaca con el icono que aparece ante nuestros ojos lo mismo una vaca con indumentaria como una constante de mi obra: la manzana, provista de azteca que otra con una catedral en el lomo y una meta- alas, figura que simboliza el vuelo en pos de los más ele- morfoseada en pez. Más allá encontramos una vaca vados ideales. Diría que se trata de una feminista, a favor tasajeada y otra más remedando un tope vial. A unos de los derechos de género, y con muy buena presentación. pasos, más rumiantes se lucen enfundados en tela bor- Es un “desfile de vacas” nunca antes visto en la ciu- dada o con piel de pasto verde o asemejando un rompe- dad, que durará cuatro meses y cuyo único precedente cabezas. Y debo mencionar, por supuesto, a una vaca quizá sean las exposiciones de esculturas de nopales pri- dorada que me asombró: simula ni más ni menos que a mero y de campanas después, que se han instalado en la Columna de la Independencia, monumento caracterís- los últimos años a lo largo de Paseo de la Reforma. Todo tico del tradicional Paseo de la Reforma. Por cierto, esa un espectáculo de formativa recreación. vaca fue la elegida para ser develada simbólicamente en Por todo ello, aquí sí que el reino bien vale una vaca. el acto inaugural, presidido por el jefe de Gobierno de la ciudad, Alejandro Encinas. www.marthachapa.com.mx