MÁS ALLÁ DE 2050 Misión tripulada a Marte «El pesimismo nunca ha ganado una guerra» Dwight D. Eisenhower. José Luis Calvo Albero. Coronel. Infantería. DEM. José Manuel Fernández López. Teniente Coronel. Transmisiones. 92 5(9,67$(-e5&,7210$5=2 Ciencia y Tecnología Estamos ante un mundo cuya tecnología experimenta una constante aceleración. En los últimos años, se ha producido un incremento exponencial en la velocidad de adopción de las nuevas tecnologías. Así por ejemplo, el papel tardó siglos en convertirse en un objeto común, el automóvil llegó al 80% de la población en 110 años, el ordenador ha empleado apenas 25 años, el teléfono móvil unos 15, Internet solo 10. Las Fuerzas Armadas no son ajenas a este fenómeno. Al contrario, son a la vez motores del cambio tecnológico y destinatarios iniciales de muchas de las nuevas tecnologías. Conocer los cambios tecnológicos que se producirán en los próximos años significa conocer también, en gran medida, cómo serán los ejércitos del futuro. Decía Liddell Hart que solo pueden arriesgarse a realizar estudios prospectivos aquellos que no tienen un prestigio intelectual que perder. Libres los autores de este artículo de la precaución del británico, nos arriesgarnos a un ejercicio de prospectiva en aquellas áreas de interés para la seguridad y la defensa. Y para que el riesgo sea aun mayor no nos conformaremos con los plazos habituales de diez-quince años propios de estos estudios, sino que nos aventuraremos más allá, incluso sobrepasando el horizonte de 2050. Evidentemente, los resultados de todo ejercicio de prospectiva deben ser tomados con precaución, y cuando se mueven en horizontes superiores a los diez años su validez objetiva resulta comparable a la de una novela de ciencia-ficción bien documentada. Pero la prospectiva tiene utilidad para mostrar acontecimientos y caminos posibles, que en algunas ocasiones se confirmarán parcialmente, o contribuirán con algunos de sus elementos al desarrollo de nuevos acontecimientos. Este artículo no pretende ser un mero ejercicio de inventiva, sino mostrar algunos de los avances científicos y las tendencias geoestratégicas que actualmente ya se están desarrollando, y que quizás en un futuro influyan decisivamente sobre la organización y equipamiento de los ejércitos, y el desarrollo de sus operaciones. Hemos dividido el trabajo en una serie de «dominios» que quizás no se correspondan con los Gordon Moore habituales en los estudios de prospectiva, pero que estimamos como los más relevantes durante el siglo XXI. EL DOMINIO DE LA INFORMACIÓN La información se ha convertido ya en un dominio con una identidad plenamente definida. En el futuro sus avances se relacionarán con los que tengan lugar en informática, telecomunicaciones, biotecnología, inteligencia artificial y nanotecnología. La ley de Moore de 1953 indica que la potencia de los ordenadores se duplica cada dieciocho meses. Hasta ahora esta ley se ha cumplido debido no solo a la progresión en ese aumento de la potencia, sino también por las sucesivas innovaciones tecnológicas. La evolución que ha permitido esto comenzó con la sustitución de tubos de vacío por transistores, que posteriormente formaron circuitos integrados y después se miniaturizaron integrándose en chips. El aumento de prestaciones ha ido en paralelo a una reducción de costes, de manera que en el año 2020, se estima que el precio de un chip sea inferior a un céntimo de euro. Dos grandes revoluciones serán contempladas durante este siglo XXI: a conexión a Internet desde lentillas y el final de la ley de Moore. 5(9,67$(-e5&,7210$5=2 *UiÀFDGHOD/H\GH0RRUH GAFAS Y LENTES DE CONTACTO CONECTADAS A INTERNET El sistema norteamericano Land Warrior permite conectar un sistema informático con unas gafas-pantalla portadas por un combatiente. El usuario puede así ver el campo de batalla con unas marcas tipo x que señalan las tropas propias y enemigas. Sensores GPS localizan con exactitud las posiciones de tropas, vehículos y edificios. Pulsando un botón aparecen informaciones diversas como meteorología, fuerzas propias o enemigas. Actualmente el grupo de investigación de la Universidad de Washington, encabezado por el profesor Babak Amir Parviz, está trabajando en los fundamentos de un tipo de lentillas que cambiarán el modo de acceso a Internet. Para Parviz esto solo es el principio, pues estima que en pocos años seremos capaces de descargar cualquier película, canción, página web o información desde Internet a nuestras lentes de contacto. Y a nadie se le escapan las evidentes aplicaciones militares que supondrá esta innovación. posible esculpir transistores cada vez más diminutos en las obleas de silicio que son la materia prima del chip. Pero en algún momento será imposible utilizar transistores menores que un átomo, lo que ocurrirá aproximadamente en el año 2020, momento en el cual la ley de Moore dejara de ser válida gradualmente. Esto en principio es un problema reconocido por todos los científicos, pero todos coinciden en afirmar que, aunque supondrá el fin del silicio como elemento base para la fabricación, también obligará a desarrollar otros elementos y profundizar más en el campo de la nanotecnología. EL FINAL DE LA LEY DE MOORE El proceso de miniaturización de los chips informáticos no será indefinido. Hasta el momento el ajuste de luz ultravioleta (para que su longitud de onda sea cada vez menor) ha hecho 94 5(9,67$(-e5&,7210$5=2 Profesor Babak Amir Parviz Ciencia y Tecnología EL DOMINIO DE LA MENTE Los científicos coinciden en afirmar que a partir del año 2050 se conseguirá un apreciable dominio de la mente humana. Al final de este siglo se podrán emitir órdenes con la mente a un ordenador. La base científica de esta tecnología ya existe aunque su desarrollo e implantación llevará décadas. Será una autentica revolución que tendrá fases muy diferenciadas: En la primera fase la mente humana podrá controlar objetos cercanos. Hace quince años se produjo el primer experimento con éxito cuando un hombre paralizado por un ataque de apoplejía pudo mover el cursor de un ordenador utilizando la señal eléctrica emitida por su cerebro a través de un electrodo conectado a un ordenador. Los científicos coinciden en afirmar que a partir del año 2050 se conseguirá un apreciable dominio de la mente humana. Al final de este siglo se podrán emitir órdenes con la mente a un ordenador La segunda fase consistirá en descifrar las órdenes/deseos de las personas, es decir, convertir los impulsos eléctricos del cerebro en formatos digitales de unos y ceros. La gran incógnita consiste en determinar si un ordenador podrá leer los pensamientos de una persona sin necesidad de implantar electrodos en su cerebro. Es sabido que el funcionamiento del cerebro se produce mediante la circulación de electricidad entre sus neuronas. Hoy en día se trabaja en la localización y definición de estas señales hasta el nivel neurona. Pero falta el código, la clave o el conversor de estas débiles señales a un formato comprensible para nosotros, los usuarios. Un equipo de investigadores de la Universidad de California dirigidos por Kendrick Kay está buscando el código de traducción que asocie cada percepción del cerebro con un tipo de corriente neuronal. Para ello han creado un potente programa informático que asocia estas percepciones con las señales que se reciben de la exploración cerebral a través de la resonancia magnética. Es el primer paso de la construcción de un «Diccionario del pensamiento» de forma que cada objeto este en correspondencia exacta con una señal eléctrica. Descifrar los códigos del pensamiento abre la puerta a múltiples posibilidades. Pero hay una especialmente preocupante: la manipulación de la mente. En términos prácticos, esto puede significar que, a finales de este siglo, los ejércitos tendrán que «defender» las mentes de sus soldados de ataques exteriores. Durante las próximas décadas, probablemente, se hablará de la defensa ética y física de la mente humana. No serán de extrañar, quizás, a partir de 2050, la realización de implantes que impidan el acceso no autorizado a la mente. EL DOMINIO DE LA MÁQUINA Se habla mucho de la creciente presencia de robots en los campos de batalla, pero en la mayoría de los casos se trata en realidad de vehículos pilotados por control remoto (remotely piloted vehicles: RPV). Un robot implica autonomía en la toma de decisiones, y la inteligencia artificial es un campo en el que los avances no se han producido a la velocidad esperada. Pero incluso los RPV pueden provocar cambios dramáticos en las operaciones militares de las próximas décadas, asumiendo aquellas funciones más fatigosas, arriesgadas, o sencillamente imposibles para un ser humano. La desactivación de explosivos, el rescate en condiciones y entornos extremos, las actividades de vigilancia Talon Swords 5(9,67$(-e5&,7210$5=2 95 y ataque que requieran de largos periodos de Cuando la inteligencia artificial alcance un aproximación y observación, o la penetración en nivel de desarrollo que permita realizar acciones sistemas defensivos que causarían bajas humanas autónomas, aparecerán los auténticos robots de inaceptables. combate. Pero que nadie espere una violenta Los RPV ofrecen solución a uno de los pro- irrupción de máquinas humanoides. Probableblemas clave de la guerra moderna: la dificul- mente la mayoría no tendrá semejanza con un tad para encajar bajas humanas. De hecho, ser humano, y se centrará en la gestión de sislos sistemas son simplemente sacrificables. temas defensivos complejos, como la defensa No hay ningún probleaérea, contra misiles o ma ético o económico ciberdefensa. en utilizarlos en misioUna de las dudas soEl gran fracaso tecnológico de nes sin retorno. Y por bre el empleo de robots nuestro tiempo es la incapacidad añadidura, el operador en un campo de batalla para encontrar alternativas a las del sistema no sufrirá es si se violará la famosa fuentes de energía utilizadas desde el primera ley de la robóansiedad insuperable por esperar horas antes tica, y se permitirá a un siglo XIX de tener las condiciorobot herir o matar a un nes óptimas de ataque, ser humano. La expeno entrará en pánico bajo el fuego enemigo riencia histórica nos hace ser más bien pesimisy no dudará en reiterar su acción, aunque las tas. Pero esto no abre necesariamente la puerta a posibilidades de supervivencia del vehículo un escenario apocalíptico. En realidad, los robots sean mínimas. tienen pocas probabilidades de convertirse en seLos RPV tampoco están sujetos a las limitacio- res tan inestables y brutales como pueden llegar nes de la biología humana. Pueden ser grandes, a ser los humanos. extremadamente pequeños, con la forma mejor adaptada a su tarea y con la capacidad de pene- EL DOMINIO DE LA GENÉTICA trar en ambientes letales para la vida. La visión de La mortalidad relativa de los combatientes ha un campo de batalla repleto de ellos, controlados disminuido considerablemente en los últimos sia gran distancia, o desde unas pocas plataformas glos. En la actualidad la tasa de supervivencia de nodriza con tripulación humana, parece bastante los soldados ha aumentado exponencialmente, creíble. pero en los últimos conflictos se ha producido un El problema de los RPV es que deben ser considerable aumento de casos de amputación dirigidos a distancia y esto significa un canal de de miembros. Esto ha motivado el interés de comunicación segura que es susceptible de ser países como los Estados Unidos por avanzar en interceptado o suplantado. La guerra electrónica la llamada «ingeniería de tejidos».Actualmente el alrededor de los sistemas de guiado de los RPV Instituto de Medicina Regenerativa de las Fuerzas del futuro promete ser apasionante. Armadas de los Estados Unidos ha revolucionado la metodología para generar órganos basándose en la capacidad regenerativa de las salamandras, que pueden recuperar miembros amputados completos. De momento, se ha conseguido regenerar el tejido de la yema de los dedos y las uñas. Pero resulta muy probable que en un futuro no demasiado lejano sea posible la regeneración de partes sustanciales de un miembro.La medicina y la biología actuales han experimentado una transformación histórica que las ha hecho converger con la física molecular. Los estudios sobre replicación de ADN permitieron la primeGlobal Hawk ra clonación de un ser vivo complejo en 1997. 5(9,67$(-e5&,7210$5=2 Ciencia y Tecnología Pero el avance espectacular en este campo fue la culminación del proyecto Genoma Humano, que en el año 2003 consiguió completar el mapa genético de nuestro cuerpo.En poco más de diez años podremos grabar nuestro genoma individual en un medio digital por poco más de 100 euros. Y eso, combinado con la nanotecnología, abrirá la puerta a una medicina personalizada con prestaciones hoy inimaginables. La detección de los códigos de determinados tipos de enfermedades como el cáncer, será seguida por la inyección de nanopartículas, que actuarán como auténticas bombas inteligentes introduciendo con precisión molecular los compuestos químicos para combatir las células cancerosas. Además esta terapiagenética podrá aplicarse a un solo individuo, o bien aplicarse a las células sexuales lo que permitiría evitar que genes defectuosos se transmitan a las generaciones posteriores. Las últimas décadas del siglo XXI contemplarán el ataque a la «teoría unificada del envejecimiento», dado que científicamente el envejecimiento es una acumulación de errores de nivel genético y celular. Puede pensarse con cierto optimismo que a partir del año 2050 o 2060 será posible ralentizarlo mediante el empleo de diversas terapias como las células madre y la terapia genética. Esto es tan esperanzador como preocupante, pues no se conocen las consecuencias sociales y económicas de una población con un apreciable porcentaje de individuos que superen los 100 años. Un riesgo militar de este «dominio de la genética» será una reedición de la guerra biológica con unas características bastante inquietantes. La utilización de virus y bacterias manipulados genéticamente, o la creación de sustancias tóxicas que afecten solo a individuos con determinado código genético abren las puertas a escenarios muy peligrosos, sobre todos si estas armas biológicas caen en manos de grupos terroristas. Queda como consuelo la certeza de que la guerra biológica siempre se ha utilizado de manera muy limitada y nunca se ha demostrado decisiva dentro del contexto de un conflicto. vas a las fuentes de energía utilizadas desde el siglo XIX. Los combustibles fósiles, cada vez más escasos y caros, continúan siendo indispensables, y las inversiones realizadas en ellos han cortado el paso a fuentes más rentables a largo plazo. La energía de fisión nuclear pudo ser una alternativa, pero no se ha podido solucionar el tema de los residuos, ni la escasez de combustibles nucleares, ni la aprensión que provoca lo nuclear en la opinión pública. Las esperanzas están puestas en la energía de fusión nuclear. Pero tendremos que esperar varias décadas para que sea rentable. Se trata esencialmente de una cuestión de financiación. Pese a que los fundamentos teóricos de los reactores de fusión tokamak se definieron en la URSS hace más de cincuenta años, todavía no se han hecho las inversiones necesarias para su desarrollo. El reactor experimental europeo ITER acumula retrasos y costes adicionales desde hace una década. Probablemente, las enormes necesidades energéticas de China, unidas al progresivo encarecimiento del petróleo y el gas, llevarán a Beijing a realizar en un futuro la inversión necesaria para el salto tecnológico. La transición de una fuente de energía a otra no se realizará sin sobresaltos. La aparición de los primeros reactores de fusión no disminuirá de golpe la dependencia de los combustibles EL DOMINIO DE LA ENERGÍA El gran fracaso tecnológico de nuestro tiempo es la incapacidad para encontrar alternati- ,7(55HDFWRUHXURSHR 5(9,67$(-e5&,7210$5=2 97 fósiles. Se tardará tiempo en miniaturizarlos Sin embargo, la evidencia de que los rey utilizarlos en medios de transporte. Habrá cursos de la Tierra son limitados reactivaun periodo en el cual petróleo y el gas serán rá probablemente la carrera espacial en las todavía indispensables, pero nadie querrá in- próximas décadas. La primera condición para vertir en ellos. La consecuencia probable será participar en ella será disponer de una agenla degradación del suministro, que se enca- cia espacial y de un centro de investigación, recerá aún más, provocando una seria crisis adiestramiento y lanzamiento. Rusia, EEUU energética. Además, y China tienen varios. el equilibrio de poder La UE (con el permiso en el mundo, marcado francés) utiliza el puerto Cuando se consiga disponer de actualmente por la siespacial de Kourou en combustibles eficientes y de bases tuación de las reservas espaciales terrestres e intermedias, la Guyana. Y otros estados de combustibles fósicomo Brasil, Japón, Inconquista del sistesma solar será una dia, Australia o Corea les, sufrirá un profundo realidad que reproducirá la estrategia del Sur ya tienen o han cambio. Para las aplicaciones proyectado su propio naval y colonial de hace cinco siglos militares, está claro que complejo espacial. Las bases espaciales la sostenibilidad energética va a ser un requisito muy interesante son el equivalente de los antiguos astilleros en en las próximas décadas. En muchos sistemas la época de la navegación a vela. Y aplicando de combate el bajo consumo de combustible esa misma dinámica al dominio del espacio, será una ventaja más valorada que la potencia el siguiente paso consistirá en instalar bases de fuego o la movilidad. Y en nuestras bases intermedias. La gran apuesta para conseguiren zona de operaciones será cada vez más lo es situar instalaciones permanentes en los frecuente ver largas formaciones de placas denominados «puntos de Lagrange», aquellos fotovoltaicas, compartiendo espacio con di- lugares en los que la gravedad de la Tierra versos tipos de generadores eólicos. Las ener- y la Luna se compensan, y un objeto puede gías renovables son más caras y tienen menor permanecer estacionario respecto a ambas sin rendimiento que los combustibles fósiles, pero apenas consumo de combustible. Los puntos cuando se trata de helitransportar depósitos de de Lagrange son excelentes puertos espaciales, combustible a bases perdidas en algún remoto además de representar la opción más económilugar de Afganistán, la cuestión del coste se ca para saltar de un sistema planetario a otro. inclina decididamente hacia el sol y el viento. Para poder instalar bases intermedias, será necesario resolver el problema del combusEL DOMINIO DEL ESPACIO EXTERIOR tible. Lo más «resignado» es esperar al desaLa conquista del espacio se ha desarrollado rrollo de reactores de fusión. Estos serían muy a un ritmo más lento de lo que cabía esperar útiles en la navegación espacial y permitirían cuando las inversiones masivas de los años viajar con comodidad entre los planetas de sesenta permitieron a la NASA realizar viajes nuestro sistema solar. Pero no está tan claro tripulados a la Luna. El motivo de ese retraso es que puedan proporcionar la aceleración inicial que, con los combustibles actuales, los viajes necesaria para vencer la gravedad terrestre en espaciales son enormemente caros. Colocar un el despegue. Se piensa en múltiples soluciones, kilo de carga en el espacio exterior supone un desde torres de lanzamiento de kilómetros de coste de entre 10.000 y 25.000 dólares solo altura, que ahorren rozamiento con la parte en gastos de lanzamiento. Con ese precio solo más densa de la atmósfera, hasta ascensores resultan rentables los sistemas situados en la espaciales, que se moverían mediante energía órbita terrestre que cumplen las funciones de eléctrica por un cable de carbono anclado a un todos conocidas. Intentar ir más allá y explotar contrapeso situado en órbita geoestacionaria. los recursos económicos del espacio exterior Cuando se consiga disponer de combusresultaría hoy en día ruinoso. tibles eficientes y de bases espaciales terres 5(9,67$(-e5&,7210$5=2 Ciencia y Tecnología tres e intermedias, la conquista del sistema solar será una realidad que reproducirá la estrategia naval y colonial de hace cinco siglos: ansiosa búsqueda de materias preciosas (una tonelada de helio 3 lunar podría abastecer de energía a Nueva York durante un año), competición por establecer asentamientos en los yacimientos más prometedores, y pugna aun más enconada por el control de los puntos de paso obligado. Cuestión más peliaguda será abandonar el sistema solar. Incluso los reactores de fusión se quedan cortos para recorrer distancias de años luz, aunque ya se ha pensado en motores de antimateria. La cuestión está en poder crear la suficiente antimateria (actualmente apenas se pueden generar algunas partículas a un coste fabuloso) aparte de superar el problema del rozamiento producido a velocidades cercanas a la de la luz. Por eso tendrán que pasar probablemente siglos para que una tripulación humana pueda recorrer los cuatro años luz que nos separan de Alfa Centauri. EL DOMINIO DE LO DESCONOCIDO Cabe indicar una breve reseña a lo desconocido. A esos acontecimientos que algunos denominan «cisnes negros» que nadie prevé, y que cambian dramáticamente el curso de la Historia. Hace cincuenta años se daba por sentado que en 2012 nos moveríamos con soltura por el sistema solar, pero nadie fue capaz de anticipar el grado de interconexión global fruto de la era digital. Lo desconocido y lo inesperado marcan con frecuencia el signo de la evolución humana, más allá de cualquier intento de prospectiva. Lo desconocido y lo inesperado marcan con frecuencia el signo de la evolución humana, más allá de cualquier intento de prospectiva 3XHUWR(VSDFLDO(XURSHR.RXURX CONCLUSIONES La consecuencia más clara de lo expuesto es que en los próximos años, al igual que ha ocurrido anteriormente, el mundo se dividirá entre los que se mantienen en los vagones de cabeza del progreso, los que pugnan por mantenerse en el tren y los que cayeron a la vía. El secreto para no perder los puestos preferentes está en una apuesta por la innovación, la ciencia y la apertura mental a todos los niveles. Una de las rémoras tradicionales para la modernización en España, que se aplica también a sus Fuerzas Armadas, es la mezcla entre la despreocupación institucional por la Ciencia y la existencia de un cierto complejo de inferioridad, basado más en tópicos que en realidades. Hay investigadores españoles trabajando en todos y cada uno de los aspectos tecnológicos que hemos mencionado en este artículo. Desgraciadamente una gran mayoría trabaja en el extranjero, pues en la mayor parte de las universidades y empresas españolas no se dan las condiciones mínimas para una investigación científica de calidad. Va siendo hora ya de que olvidemos el famoso «¡Que inventen ellos!», una de las muy escasas frases desafortunadas que pronunció en su vida don Miguel de Unamuno. Solo el interés por la ciencia y la tecnología permitirá afrontar las tensiones propias de mundo superpoblado, desequilibrado y falto de recursos. Así pues, apostemos por la Ciencia como una de las herramientas principales de nuestra seguridad. 5(9,67$(-e5&,7210$5=2 99