DOÑA UREA Hola, soy doña Urea, ¿sabes lo que dicen las cotillas de mis vecinas de mi? Dicen que soy un deshecho de la sangre y que además puedo ser tóxica. Mi vida es muy corta pero mola un montón. ¿Quieres conocerla? Pues prepárate que te la voy a contar: En tu cuerpo hay dos órganos en forma de judía del tamaño de tu puño y de color rojo muy muy fuerte, colocados en la espalda más o menos por encima de la goma de la braga o calzoncillo, uno a cada lado de la columna vertebral. Se llaman RIÑONES y tienen dos trabajos: limpiar los deshechos tóxicos de la sangre, y también medir los líquidos que entran y salen. En los riñones hay muchas trabajadoras llamadas NEFRONAS que limpian la sangre y separan lo que necesitamos de lo que no necesitamos. A mí y a mis amigos, señorita Creatinina, Don Potasio y Don Fósforo nos necesitan poco. Todos nosotros nos mezclamos con el agua y nos llamamos ORINA, aunque seguramente tú nos llames pis. Desde los RIÑONES, todos mis amigos, la señorita Creatinina, Don Potasio y Don Fósforo, viajamos por dos tubos delgados llamados URÉTERES, las paredes de estos tubos se aprietan y relajan constantemente para que la orina caiga hacia abajo. Al final de este tubo caemos a un globo grande donde se almacena la orina y lo llamamos VEJIGA. La vejiga se hincha y se hace redonda según se va llenando de orina. A vosotros cuando os da ganas de hacer pis vais corriendo al WC y nos abrís la puerta llamada esfínter para que nosotras pasemos por la URETRA y salimos expulsadas por la orina y nuestra vejiga se hace otra vez un globo pequeño. ¡ Se acabó mi viaje!