Pág. 12 DE SALUD El uso continuado del portátil sobre las rodillas provoca el Síndrome De La Piel Tostada Por José Antonio Ledesma Rubio El uso de los portátiles obliga a forzar la postura. De tiempo atrás ya sabíamos que el uso prolongado de ordenadores portátiles provoca dolor de espalda y de cuello, jaquecas y hormigueo en los dedos. A este tipo de dolencias se las conocía como “El síndrome de las nuevas tecnologías”. En EE UU han bautizado al nuevo síndrome que están experimentando, sobre todo los estudiantes, como ‘laptop-itis’. Traducido, sería algo así como ‘portátil-itis’ y se refiere, como su propio nombre indica, a las molestias causadas por el uso y abuso de los ordenadores portátiles. Pues bien, por si lo anterior fuera poco, ahora nos sorprenden los investigadores con el anuncio de una nueva patología producida por el uso inadecuado de este tipo de ordenadores el Síndrome de Piel Tostada. ¿En qué consiste este síndrome? La exposición al calor que desprende un ordenador, durante largos periodos de tiempo, provoca la aparición de manchas en la piel. Es una enfermedad que antes atacaba sobre todo a las abuelitas que se quedaban dormidas con los pies cerca del brasero, o a los señores feudales que se adormecían siempre dando el mismo lado a la chimenea. Algunas veces se observa también en personas de edad avanzada que utilizan bolsas de agua para calentase. Su nombre completo es “AB igne ERITMA” y suele ser común en las personas expuestas al calor durante su trabajo, como los panaderos y los orfebres. Ahora, les ocurre a los trabajadores nómadas que pasan demasiadas horas con el ordenador encendido sobre las rodillas. Aunque este es el caso más típico, tampoco hay que olvidar a los estudiantes y a los jóvenes que utilizan el ordenador portátil, durante horas, como herramienta de juegos. ¿Con que sintomatología se manifiesta y qué consecuencias puede producir? El síndrome consiste en que la piel toma una apariencia inusual y moteada. Se trata de un enrojecimiento de la piel similar al que se produce al tomar el sol. El calor generado por la parte inferior de un portátil es suficiente para causar una erupción cutánea desagradable, especialmente si se utiliza en contacto directo con la piel durante varias horas. Y es que en este tipo de ordenadores hay piezas internas que pueden llegar a generar temperaturas superiores a los 50 grados centígrados, por lo que, si el portátil tiene contacto directo con la piel, puede dejar algunas manchas que no desaparecerán rápidamente. En los casos más graves de eritema, la piel puede quedar bastante oscura, aunque no suele ser permanente. El estudio, que fue realizado por investigadores del Hospital Universitario de Basilea no es el primero en detectar este problema. El doctor Bav Shergill, del hospital universitario de Brighton, en el Reino Unido, dijo a la BBC que las personas que desarrollen este tipo la erupción no se deberían preocupar demasiado. «Yo esperaría que esta condición cutánea se resuelva con bastante rapidez, sin consecuencias a largo plazo». Aunque según aclararon investigadores del Hospital Universitario de Basilea, esas lesiones desaparecen con el tiempo al dejarse de colocar el ordenador sobre la piel, los dermatólogos avisan que si esta costumbre se mantiene durante muchos años, podría acabar provocando cáncer de piel. PÁGINA WEB Pág. 13 En el caso de los usuarios varones, además, estudios anteriores habían alertado de posibles efectos en su fertilidad al tener los ordenadores en sus piernas, ya que la alta temperatura podía afectar al escroto y por ende la producción de espermatozoides, aspecto este último del que se ha hecho eco la pagina ‘debate.com.mx’ tras un estudio aparecido recientemente. Otro estudio, que ha sido realizado por un grupo de investigadores argentinos, asegura que dicha práctica dañaría el ADN de los espermatozoides, afectando la movilidad y fragmentación del ADN, causado por la cercanía de los dispositivos portátiles, los cuales son muy comunes en los jóvenes. Dicho estudio se realizó colocando semen de personas en dos habitaciones separadas con una temperatura normal, siendo una de estas muestras incubada bajo ordenador portátil conectado a internet. Entre los casos estudiados destaca el que presentó hace poco la revista Pediatrics (www.pediatrics.org) de un menor de 12 años en cuyo muslo izquierdo sufrió quemaduras similares a la textura de una esponja, la cual, quedo llena de una especie de manchas, que, según los especialistas, representan un grave riesgo de cáncer. Todo esto, como consecuencia de largas jornadas jugando con el ordenador sobre sus piernas, el cual no cambió de posición pese a sentir el calentamiento en una de ellas. Un caso similar fue el de un estudiante de leyes del estado de Virginia que sufrió lesiones del mismo tipo. La doctora Kimberley Salkey, quien atendió al joven, estaba perpleja con el caso hasta que se enteró que el estudiante pasaba cerca de seis horas diarias trabajando con su equipo apoyado sobre sus rodillas. Al menos diez casos similares de oscurecimiento de la piel por la exposición al calor de un ordenador portátil se han estudiado en los últimos tres años. Aunque el calor no sea suficiente como para provocar quemadura, si puede causar manchas en la piel. Para que se produzca este síndrome no basta una exposición ocasional. Se produce en personas que colocan el ordenador sobre las rodillas muchas horas al día durante meses e incluso años. Aunque no todos los ordenadores portátiles del mercado se calientan igual. Hay algunos fríos mientras que otros se calientan tanto que casi se podría freír un huevo encima de ellos. Desde Jubiceca os aconsejamos informarse bien sobre la temperatura que alcanza el ordenador en funcionamiento continuado, antes de adquirirlo ,y leer sus especificaciones técnicas. Es una pena que la mayoría de los usuarios no lea nunca el manual de sus ordenadores portátiles. Si lo hicieran, encontrarían que prácticamente todos los fabricantes, como Apple, Hewlett Packard y Dell, por consejo de sus abogados, recomiendan encarecidamente no utilizar el ordenador sobre las rodillas, porque se pueden calentar el exceso. Este tipo de fenómenos puede ser causado por cualquier otro tipo de aparato electrónico que alcance altas temperaturas, por lo que es recomendable utilizar algún tipo de aislamiento térmico, si se le quiere apoyar sobre el cuerpo.