4.- TRABAJO SOCIAL EN LA REFORMA AGRARIA r40ýs ANGELA GARLASCHI 2 En carta dirigida a la Revista en agosto pasado, Angela Garlaschi, lefa del Servicio de la Corporación de la Reforma Agraria (CORA) dice: "Tengo a bien hacer entrega de las respuestas al cuestionario enviado en relación con las experiencias de Trabajo Social en el medio agrario. Realmente el momento es dificilísimo, pero hemos tratado de exponer lo que hemos hecho desde 1965-1970 (mayo). Nuestros planteamientos responden a la experiencia recogida a través de tareas de supervisión técnica en terreno durante cuatro años, de la participación en la programación i, realización de programas de Capacitación en educación básica, organizacional e institucional a niveles nacional, zonal, área y asentamiento. Lo expuesto responde al trabajo realizado por 21 asistentes sociales y 145 universitarios de servicio social que han efectuado sus prácticas reglamentarias y tesis de memorias durante el lapso 1965-1969. A través del trabajo de terreno hemos redefinido el nuestro; hemos comprendido que nuestras metodologías y técnicas de trabajo deben responder a una realidad concreta que es la problemática económica-social, política y cultural de Chile il Latinoamérica". Las respuestas han sido incluidlas como un artículo-informe. -La actuación del trabajador social en el proceso de reforma agraria ha tenido dos etapas, dice Angela Garlaschi. Señala que la primera se sitúa desde 1963 a mayo de 1965, en labores relacionadas con la selección y organización de los asignatarios de tierras, en actividades específicas de bienestar social, pertenecientes a colonias agrícolas de las provincias de Santiago, O'Higgins, Cautín, Arauco y Osorno (ley N< 15.020). La segunda etapa, entre 1965 y 1970, está marcada por un intenso trabajo en los campos de la educación del campesino, de la organización y de la preparación para las diferentes etapas que va cumpliendo la Reforma Agraria. La labor se proyecta ampliamente a las escuelas de servicio social de casi todo el país. Señala, en seguida, los diferentes programas en los cuales el Servicio Social de la Corporación de la Reforma Agraria participó, tanto en su programación como realización: Educación básica, a nivel zonal, área y asentamiento. Capacitación organizacional, con los siguientes contenidos: planteamiento del proceso, ley 16.640, asentamiento, organización del asentamiento, asamblea, consejos de administración, comités ejecutivos, otras organizaciones de base. Asignación de tierras. En relación a aspectos ideológicos sobre el tipo de propiedad y aspectos técnicos (proyecto de asignación). Cooperativa. Se hizo el planteamiento ideológico con respecto a la organización cooperativa, de acuerdo a un esquema que abarcaba lo económico, lo político, lo social y lo cultural. Se estudió con los campesinos la estructura de la cooperativa y se hizo análisis de estatutos de la cooperativa de asignatarios, de la cooperativa mixta y de la cooperativa asignataria. Cursos de capacitación CORA-ICIRA para universitarios de Servicio Social, educación familiar y educadores de párvulos. Realizada la programación en conjunto con ICIRA, las asistentes sociales de CORA se hicieron cargo de la coordinación del curso en relación a profesores, trabajos en grupos de discusión y plenarios, y luego la evaluación. Convenios con Universidads. Con las siguientes escuelas de Servicio Social: Arica (U. del Norte); La Serena (U. de Ch.); Valparaíso (U. de Ch., U. C.); Santiago (U. de Ch., Dr. Alejandro del Río y U. Católica); Concepción. Los objetivos eran: incorporar al alumno de cuarto año y al egresado memorista a la realidad social agraria y lograr la creación y recreación de metodologías acordes con el planteamiento del proceso agrario. Coordinación y capacitacióninstitucional, a nivel funcionario y a nivel campesino. Para ello, el Servicio Social participó en la programación a nivel nacional y realización de cursos a nivel zonal, relacionados con seguridad social (aspectos previsionales de la ley 10.383); previsión del campesino asentado; previsión del campesino asignatario de tierras; capacitáción de dirigentes y miembros de asambleas. El objetivo era lograr que el campesino dirigente y miembro de asamblea actúe consciente y organizadamente frente a las instituciones del sector servicios (Servicio de Seguro Social, Servicio Nacional de Salud, Ministerio de Educación, Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas, etc.). Seminario de Evaluación y capacitación en coordinación con ICIRA y Escuela de Trabajo Social de la Universidadý Católica,para asistentes sociales titulares de CORA y para profesores de desarrollo de la comunixad y supervisores de terreno de las escuelas de Servicio Social que establecieron convenios con la Corporación de la Reforma Agraria. Cambios cualitativos En este aspecto las respuestas al cuestionario dicen que la influencia del trabajo social en el proceso de cambio en el campo es muy difícil medirla, por cuanto los programas de capacitación están condicionados por las líneas políticas de la institución. Podemos decir, agrega, que el aporte de los trabajadores sociales desde 1963, enfatizado extraordinariamente a partir de junio de 1965 por la presencia de 21 trabajadoras so- ciales titulares y 145 alumnas de las diversas universidades durante cinco años, significó u, aporte metodológico importante, si bien cues. tionado, por la rigidez de sus planteamientos teóricos y prácticos. En muchas ocasiones el juicio crítico emi. tido por estos profesionales ha significado una revisión del trabajo a nivel de infraestructura (zonas, áreas y asentamientos) y una modifi. cación substancial del sistema de trabajo, planteando constitución de equipos de terre. no, participación campesina en la programa. ción, contenidos de capacitación, etc. Dos tipos de obstáculos El Trabajo Social ha vivido dos tipos de obstáculos: los de tipo metodológico y los de tipo institucional y político. De tipo metodológico. Ello corresponde más bien a una primera etapa (1965-1968) en que el diálogo con las escuelas de Servicio Social, al considerar la incorporación de alumnos egresados memoristas, se vio dificultado por la rigidez de los llamados métodos, que en las escuelas, salvo excepciones, han transformado en programas, no comprendiendo entonces el porqué el alumno del 49 año debía incorporarse a un programa (Educación Básica, por ejemplo), y ahí aplicar las metodologías y no llegar a las comunidades en donde se destacaban a realizar sus programas, los exigidos por la escuela. Lamentablemente, las visitas esporádicas de las Supervisoras de terreno no daban suficiente fundamentación para que se produjera una rápida reacción de parte ae los docentes. Desde el punto de vista de los titulares no tenemos problemas, ya que el contacto directo con la realidad social ha permitido crear y recrear metodología adecuada. El techo institucional El problema institucional y político graviia profundamente en el Trabajador Socia, obligándolo en muchos~'casos a adherirse a planteamientos evidentemente equivocados y que van en contra de todos los principios de capacitación y participación del campesino en el ejercicio del poder. Se anula la capacidad crítica del funcionario y del campesino. Si determinado contenido de capacitación no conviene a la posición política partidista (porque puede desvirtuar la campaña),_.9 Trabajador Social debecallarlo. Si honesta- mente, y porque lo considera un deber el entregar elementos que abran el camino a la concientización y a la real participación, no acata las órdenes terminantes emanadas del ejecutivo, se le retira del terreno. El Trabajador Social se enfrenta a una problemática dura y difícil. Cualquiera que sea ¡u posición debe saber que no puede contribuir a esconder los vicios del sistema: al contrario, debe entregar toda su técnica, todos sus conocimientos al campesino, para que sabiéndolo todo, juzgándolo todo, pueda actuariotodo. No puedo responder el que ésta sea la posición de todos los Trabajadores Sociales de CORA. Las circunstancias especiales porque atravesamos nos han impedido reunimos en Seminarios y discutir sobre el particular. Despertar campesino El campesino ha tomado conciencia que ES PERSONA. Rota la estructura patrón-inquilino, el campesino se siente liberado, comprende que hay un mundo mucho más amplio, su vida ya no se reduce al fundo. La estructura Asentamiento le entrega nuevas responsabilidades, funciones, división del trabajo, etc. Mas, este cambio inicial y sectorial requiere de un cambio global. Ello no se ha producido, razón por la cual los nuevos valores que se pretende incorporar encuentran un terreno dffcil y el campesino si bien se siente solidario en su asentamiento, al salir a la ciudad en busca del crédito, de la comercialización, tropieza con los obstáculos del sistema bancario, de los canales de comercialización, todos enraízados en el mundo capitalista. En resumen, existe un cierto grado de concientización, pero que aún no ha constituido *un cambio cultural. Para ello se requiere un cambio profundo estructural que abarque todo el sistema: económico, político, social y un profundo cambio cultural. Sin ello la Reforma Agraria no pasa de ser un buen deseo. Tarea: traspasar poder a los trabajadores El movimiento campesino, nacido prácticamente con el problema de Ranquil en 1934, tuvo una vida muy débil hasta 1947 en que frente a una Ley de Sindicalización Campesina, modificada en 1964, fue tomando cuerpo y organizándose a través de sindicatos comunales, en federaciones, confederaciones. Ello permitió en cierta medida organizar a los campesinos de todos los predios, cualquiera fuera el número de obligados, afuerinos, voluntarios, etc. El movimiento campesino hasta el momento es solamente reivindicativo. No participó en la gestación de la Ley de Reforma Agraria, no participó en las modificaciones a la ley (XI-1969). El poder que tiene es muy limitado, porque la Ley de Sindicalización si bien abrió un camino, este camino es muy angosto, dificultado por trabas legales, que en última instancia siempre favorecen al patrón. El movimiento campesino como el de los trabajadores urbanos, tiene un papel preponderante en la construcción del nuevo estado, el que sólo será ejecutado en la medida que tenga poder y sea gobierno. El rol del Trabajador Social es de vital importancia, a mi juicio, pues debe entregarle todos los elementos de capacitación, y digo todos, para que juegue el papel que le corresponde: se trata de traspasar poder a los trabajadores, a los campesinos; si ellos no lo saben todo, no lo juzgan todo, ni lo actúan todo, surgirán estructuras de poder que los prostituirán, dándole una imagen distorsionada de lo que es la participación. El aporte ideológico y técnico, a mi juicio, es vital en este rol del Trabajador Social que yo llamo de CAPACITADOR. Es el Trabajador Social el que debe capacitar para que el campesino participe a nivel de la planificación, de la programación, entregándole las técnicas necesarias para desenvolverse en un medio nuevo, con conciencia de clase, integrado totalmente a la base. Creo que el Trabajador Social deberá luchar en cualquier sistema político para que la clase explotada participe realmente del poder; su responsabilidad es investigar, crear y recrear nretodologías de capacitación para hacer posible la construcció de una sociedad más justa y más humana.