entrevista DRA. MERCÈ GUARRO MIRALLES, directora del Servicio de Oftalmología - Servicio Integrado de Oftalmología del Vallès Oriental “SI LOS OJOS LLORAN DEMASIADO O NO HAY LÁGRIMA, PUEDE HABER UN TRASTORNO QUE AFECTE LA VISIÓN” La sequedad ocular es un trastorno causado por cambios en la cantidad y la calidad de las lágrimas que produce el síndrome del ojo seco. La película lacrimal no sólo es agua, sino que está formada por varios componentes que se organizan en capas para cumplir bien con su función antiinfecciosa, de lubrificación, de limpieza, defensa y nutrición de la superficie ocular. La capa en contacto con el ojo se denomina mucosa y se encarga de la lubrificación componentes de la película lacrimal. Ésta es la razón por la que el síndrome del ojo seco es mucho más frecuente en las mujeres una vez han entrado en la menopausia. ¿Cuál es el tratamiento? Este efecto aparece o empeora con la edad y un 75% de las personas mayores de 65 años tienen síntomas. En Las lágrimas artificiales pueden actuar como un buen sustituto. Existen diferentes tipos para cada problema y humidificación de los tejidos de la superficie ocular. La intermedia o acuosa es la encargada de la nutrición, limpieza y protección con componentes con función antibacteriana. La más externa o lipídica tiene como misión principal evitar la evaporación de la lágrima. ¿Por qué se produce el ojo seco? La disfunción de la película lacrimal se debe a varios motivos: déficits vitamínicos, el envejecimiento, la pérdida de las células que secretan los componentes que forman parte de la lágrima, toxicidad por uso crónico de fármacos... ¿Cómo se implican las hormonas en la disminución de la lágrima? Están implicadas en la regulación de la secreción de sus componentes. Los andrógenos (hormonas masculinas) regulan la producción de lípidos y los estrógenos y la progesterona (femeninas) son importantes para el buen funcionamiento de los tejidos que fabrican los 6 NeoxFarma estos casos, el uso de lágrimas artificiales incrementa la disponibilidad de estos componentes en los tejidos de la superficie ocular y ayuda a combatir el sufrimiento celular. Por ello, se recomiendan colirios que permiten una gelificación progresiva y más retención de la lágrima sobre la superficie ocular. ¿Y para la lágrima de poca calidad? Cuando existe una alteración tanto en la composición como en la proporción de los componentes de la lágrima y se asocia a una alteración del funcionamiento de las glándulas de Meibom, encargadas de la producción de los lípidos o grasas que forman parte de la lágrima, aparece como consecuencia una disminución de la producción del componente lipídico y, por lo tanto, la existencia de más evaporación e inestabilidad de la película. En estos casos, las lágrimas tradicionales pueden no ser suficientes y hay que es- coger otras más específicas que ayuden a restablecer el equilibrio de la capa lipídica. Estos productos añaden fosfolípidos aniónicos con aceite mineral a su composición, que recubren la capa lipídica deficitaria y así incrementan la retención de la lágrima y disminuye la evaporación. Las personas que llevan lentes, ¿necesitan lágrima artificial? Sí, es recomendable, puesto que llevar lentes de contacto durante mucho tiempo puede hacer aumentar la evaporación de la película lacrimal, reducir el flujo de lágrimas y aumentar el riesgo de infección. De hecho, se ha visto que el síndrome del ojo seco y la queratoconjuntivitis superficial son la causa más frecuente de intolerancia.