Enseñanzas bíblicas para Discípulos en Crecimiento. Lección 6.

Enseñanzas bíblicas para Discípulos en Crecimiento.
Lección 6.
TEMA: EL CARÁCTER DE LOS CREYENTES COMPROMETIDOS CON LA VISION
– PARTE 6.
TITULO: AMANTES DE LA UNIDAD
TEXTO BASE: SALMOS 133
INTRODUCCION: Una de las más importantes y dicientes cualidades de la iglesia de
Jesucristo es la unidad de sus miembros. En ella el mundo conoce que Cristo está con nosotros,
en ella esta la aplicación de aquello que dijo Jesús, “Sean uno; así como el Padre y yo somos
uno”. Amados, permanecer en unidad no solo es un mandato de Dios, sino que es la evidencia
espontánea (no elaborada) de unos creyentes que se aman fraternalmente, se apoyan, se extrañan
y permanecen en sus objetivos comunes como una iglesia saludable.
Desafortunadamente; así como en su gran mayoría los creyentes les gusta permanecer unidos,
como las ovejas de un rebaño, hay una minoría que es enemiga de la unidad; pero tienen la
posibilidad de contaminar al resto, tal y como Jesús dijo: “Un poco de levadura, leuda toda la
masa”.
Estudiemos esto a la luz de las escrituras. El salmista hace mención de dos cosas acerca del estar
en unidad:
Es bueno: Que es útil y que es a propósito para alguna cosa. También significa que es gustoso
(produce gusto), apetecible, agradable y divertido.
Es delicioso: Muy agradable o ameno. Que causa un placer intenso en el ánimo.
Pero, establece un contraste de condiciones en que será bueno y delicioso habitar en unidad:

Juntos: que tiene más que ver con el término de unanimidad; es decir no solo agrupados;
sino que convienen en un mismo parecer, dictamen, voluntad o sentimiento.
 En armonía: En Amistad y buena correspondencia.
Musicalmente hablando, este termino se refiere a un conjunto de sonidos simultáneos (que
suenan al mismo tiempo) diferentes; pero, acordes.
En esto, el término es aplicable a la iglesia; porque aunque tenemos diferentes dones,
diferentes maneras de ser, diferentes maneras de expresarnos, al final somos un solo cuerpo y
debemos trabajar unidos por una sola causa; la causa del Señor.
 Es como el buen aceite: Aquí hace referencia al aceite de la unción que era puesto sobre la
cabeza y descendía por la barba del sumo sacerdote Aaron. Luego caía al pectoral donde
estaban las 12 piedras que representaban a las 12 tribus de Israel y finalmente llegaba hasta el
borde inferior de su túnica.
El sumo sacerdote era el representante del pueblo ante Dios y esta comparación nos quiere
mostrar a la unidad de los hermanos en Cristo (que somos todos sacerdotes), como un solo
cuerpo bañado por el aceite de la unción que es símbolo del Espíritu Santo. Que preciosa
bendición!!!

Es como el rocío de Hermón. Hace referencia al rocío (sereno) que en las madrugadas cae
silenciosamente desde el cielo, sobre este monte y que es símbolo de bendición divina; pero,
su aplicación a nuestras vidas es que aunque todos los congregados venimos de un lugar
diferente, de familias diferentes, de costumbres diferentes, somos como gotas de rocío que
llegan al lugar de congregación, atrayendo en la unidad, ricas bendiciones materiales desde el
cielo para nuestras familias, nuestra ciudad y nuestra nación.
 Porque allí concede el Señor, bendición y vida eterna. Quiere decirnos que cuando se da
esta unidad y esta armonía, no es que envía; sino que concede (en acto de autonomía y
gobierno) que fluyan las bendiciones sobre su pueblo y a través de su pueblo, bendice a la
ciudad y la nación.
La expresión “vida eterna”, en este contexto hace referencia a la condición de restauración
permanente de todas las áreas de la vida de Israel como nación, para que permanezca. Para
nosotros aplica como la supervivencia y permanencia del pueblo de Dios (la iglesia local, la
iglesia de la ciudad, de la nación, del planeta), como valuarte de una nación bendecida, como
la presencia permanente de un pueblo que prospera en medio del mundo dando testimonio
del poder de Dios.
Hermanos, nos es necesario permanecer unidos y unánimes. Acompañémonos los unos a los
otros y tomados de la mano caminemos la ruta que debemos cumplir según el plan y el designio
de Dios. Manantial de Amor, no es una iglesia local, es un proyecto de Dios a las naciones, y de
los que hemos nacido primero, saldrán los que conquistarán otras ciudades, naciones y lenguas.
Para que esto se cumpla; la unidad es la condición ineludible.
Dice la Biblia en Amós 3:3 “¿Andarán dos juntos si no están de acuerdo?” La NVI dice:
“¿Pueden dos caminar juntos sin antes ponerse de acuerdo?”
No debemos tener dudas de que toda persona que Dios ha traído a nuestra congregación, era para
que caminara juntamente y de acuerdo con nosotros. Dios es el que prometió para cada uno de
nosotros: Pastos delicados y Aguas de reposo. Dios nos ha dado esos pastos y esas aguas en este
lugar para provecho de todos.
Si no tenemos dudas en cuanto a que Dios es el autor de este pacto de marchar juntos; entonces,
debemos buscar estar de acuerdo en la unidad del Espíritu Santo. Los pastores (como autoridades
puestas por Dios sobre la iglesia), los líderes y la comunidad en general.
Tristemente no faltan las expresiones desafinadas de los que; sin saber porqué, tienen rebeldías
en su corazón, que desentonan con toda la armonía que los demás quieren tener (los que han
madurado son muchos más). Este tipo de actitudes son divisionistas, son enemigas de la unidad.
Siendo la unidad el mandamiento del Señor, la iglesia no puede tolerar comportamientos
contrarios. Tenemos que ser Bíblicos en esto.
Que dice TITO 3:10-11? “Al que cause divisiones, amonéstalo dos veces, y después evítalo
(deséchalo)”.
La versión de lenguaje actual dice: “A los que siempre están peleando en la iglesia, llámales
la atención una o dos veces. Si no te hacen caso, apártate de ellos. Puedes estar seguro que
esa gente ha dejado de creer en la verdadera enseñanza, y sus propios pecados demuestran
que son culpables”.
Amado hermano, tal vez te parece fuerte esta palabra, pero es la instrucción de Dios para la
iglesia y como buenos hijos, debemos obedecerla.
Antes que sentirte golpeado por ella, déjala entrar a escudriñar tu corazón. No te opongas tú;
antes, toma la bienaventuranza de los MANSOS (Humildes) y los PACIFICADORES en
MATEO 5:5 y 5:9, que heredarán la tierra y serán llamados hijos de Dios.
Oración Sugerida: Oremos pidiendo perdón por levantarnos contra lo que no comprendemos y
pidiendo a Dios sometimiento a las autoridades de la iglesia y a la hermandad, para permanecer
en unidad. Amén!!