(65) VOLCANES DE GERONA.—PARTE 223 GENERAL la plataforma en que descansa el volcán. Tal sucede, entre otros, en Olot, en el Montsacopa y en la. Garrinada, donde un dique basáltico atraviesa todo el volcán de E . á W., lo cual explica la confusión en que han caído ciertos observadores, creyendo que estos cráteres habían vomitado basaltos perfectamente c o m p a c ­ tos, homogéneos y desprovistos de vacuolas, así como supuestas corrientes del mismo material desde la cima del monte hasta el valle, que no son sino crestones, quizá diques de basalto que estaba y a consolidado antes de la elevación del circo crateriano de que forman parte. E s una cosa enteramente análoga á la que acontece al Puy Chopine, de Auvernia, cuyo basalto está adosa­ do al flanco S . de un gran dique de domita. Desde luego se comprende que si cada volcán estratificado no es, en último término, más que un montón de piedras, arenas y escorias precipitado en torno del orificio ú orificios de proyec­ ción, los relieves del suelo quedarían tapados por dichos mate­ riales, y sólo permanecerían las partes más eminentes por enci­ ma de éstos. L a diseminación de las materias fragmentarias durante las erupciones ha podido verificarse de un modo regular ó irregular, según la dirección y la fuerza impulsiva del viento reinante á la sazón. S a p p e r se ha ocupado de este asunto, aunque brevemen­ te, tratando de algunos de los volcanes de Olot, entre ellos el Montolivet, en cuya construcción se reconoce que mientras pre­ dominó una fuerte corriente del W., los materiales fueron arro­ jados sobre la cadena terciaria que se alza al lado opuesto; cuando, por el contrario, imperó el viento del E . , los detritus cayeron en mucha mayor cantidad, cerrando el circo y constru­ yendo un segundo cráter, aunque no de un modo completamente regular. L a s corrientes de aire moderadas produjeron conos ter­ minales aproximadamente circulares y con cráter único (Mont­ sacopa). Mas si el punto de proyección cambió, las corrientes aéreas enérgicas ó débiles tuvieron que depositar los materiales en forma elíptica, dando lugar á varios cráteres consecutivos (Ga­ rrinada). A un fuerte viento S W . , dominando durante parte del tiempo en que se verificaba la erupción, debe al cráter de Santa Margarita su configuración elíptica dirigida al N E . , quedando un Mem. B,. Soc. esp.Hist. nat., iv, 1906. 16