CONSAGRACION de la R∴ ∴L∴ ∴ ALEPH en el ORIENTE DE TOLEDO. Madrid, 11 de Febrero 2006 Muy Venerable Maestro, Muy Respetable Gran Maestro, Respetable Gran Maestro Provincial, Respetables Hermanos, muy Venerables Hermanos, Venerables Hermanos, Queridos Hermanos Todos, Esta logia que ha nacido hoy es la primera logia de España que se rige por un rito muy antiguo, dicho rito Moderno o Francés, y que tiene por nombre la palabra más antigua del mundo, “Aleph”. ¡Qué su futuro sea tan rico como su pasado! La letra Aleph se escribía en su forma hebrea mucho antes de escribirse como Alpha griega, o como nuestra letra “A” romana. Es una letra muy antigua. Después de la aparición de los jeroglíficos egipcios en los cuales se ve una cabeza de toro, precursor de las letras aleph y alpha, hacia el año 3300 antes de nuestra era, y más de mil años antes de la aparición de la escritura cuneiforme y al menos 500 años más antes del protosinaítico, vuelve este toro cornudo con los cuernos a la derecha como nuestra alpha y letra “a” minúsculas de hoy. Cuando el patriarca Abraham, (sea Brama, quien se fue del Oriente indio para ir al oeste con sus compatriotas), y quien se fue también más tarde de Caldea a Canaán hacia el año 1900 antes de nuestra era, hubiera podido conocer la escritura en un alfabeto proto-hebraico del aleph con sus cuernos hacia arriba. Era también el fin de la época de la Constelación del Toro y el inicio de la de Aries. Unos 500 años más tarde Moisés iba a destruir y prohibir el culto del Becerro de Oro, y comenzaron el sacrificio del Cordero. Pero, si este acontecimiento trastornó al toro, en ambos sentidos de la palabra, guardaron los fenicios en su alfabeto una aleph con los cuernos hacia arriba. Y es esta letra cuadrada la que se utiliza hoy como en la Torá, para designar Aleph. Es importante decirlo, porque los cuernos del toro, de Aleph, no tienen ningún significado irrisorio. Al revés, ya que los cuernos son simbólicamente una corona, palabra de la misma etimología que cuerno; son una antena de transmisión entre esta fuerza animal y fecundadora terrestre y su creador celeste. Y así es que Aleph, letra fecundadora de todas las demás, cuyo número es el uno, no tiene padres sino el Inefable, desconocido de lo que es anterior al uno. Representa este desconocido. El mundo de la creación y de lo Divino Revelado empieza con la Beith, primera letra de la primera palabra del Génesis: “Bereschit”: Al Inicio….” Es la letra B que nos da la base de este mundo creado. 1 Entonces, ¿qué es Aleph? Un misterio. Una voz silenciosa. Suena como el tañido de un triángulo en el fondo de una estruendosa sinfonía de Mahler. No se pronuncia como vocal sino como consonante, casi muda. Lingüísticamente, es un estrechamiento de la glotis sin sonido. Es la primera letra, muda, del Divino, que se representa bajo formas como Al, El, El Al, Allah, pero que son representaciones humanas de lo indecible. La baraja del Tarot utiliza Aleph para designar la primera carta que representa la iniciación, el futuro que incluye el pasado, el pasado que incluye el futuro, el presente esencial y generador del futuro. ¿Qué significa el llamar a una Logia Aleph? Se hubiera podido llamar Alpha, los cuernos del toro en el plano horizontal, con una descendencia cultural griega……….., y una ascendencia hacia Aleph. Alpha, con su forma de pez, tiende a Omega, inicio y fin de la tradición cristiana. Pero Aleph es anterior a esta tradición. Es anterior a la letra Beith del Bereschit, “Al Inicio…”, primera palabra del Génesis. Si queremos sacar una lección de ella sólo hay que mirarla. Tiene cuatro ramas que van en cuatro direcciones. Claro, cabe en un círculo. ¿Tiene un centro? Miremos esta letra, formada por dos Yod y una diagonal que los separa. ¿Tiene un centro? Claro que si, pero este centro no es un hiato entre el pasado y el futuro, es un enlace. Tiene cuatro extremos que indican el universo. Invita a explorar ese Universo externo, y tiene un centro que invita a volver a Él. Es un símbolo perfecto de la masonería que invita a sus adeptos a ir a visitar el exterior como les invita con cada viaje concluido a volver al centro. Cosa curiosa: Esta Logia es la 147. Ahora bien 1+4+7=12. 12, 1+2=3. Así el valor intrínseco de 147 es 3. El nombre Aleph se escribe con las letras Aleph, Lamb y Phe cuyos valores son 651. 651, es decir, 6+5+1=12; exactamente como el número de esta Logia, 147. El número y el apellido dan 3, número sagrado de la F.M. Excelente augurio Hermanos míos. Una Logia que se llama Aleph… es un programa universal, eterno, ¡que nos sea dado poder asumirlo! He dicho. Stephen Burrough 2