. 8 revista DOMINGO, 20 AGOSTO 2006 L A VA N G U A R D I A Quince años tecleando www La World Wide Web que ideó Tim Berners-Lee ha hecho de internet un espacio abierto a todo el mundo Lina María Aguirre principios de la década de los 70, cuando estudiaba Física en la Universidad de Oxford, Tim Berners-Lee construyó su primer ordenador con poco más que hierro de soldadura, un procesador M6800 y un televisor viejo. Hoy es uno de los más reputados científicos del mundo, investigador y catedrático en Estados Unidos y Reino Unido, director del Consorcio W3C, receptor de una larga lista de distinciones y premios, además de blogger, entre otras actividades. Mientras continúa trabajando frenéticamente, este londinense hijo de matemáticos y nombrado sir ya tiene un título para la historia: inventor de la World Wide Web (www). En una de las escasas entrevistas concedidas –a Kris Herbst en junio de 2004 a través de internet–, TBL (como suele encontrarse su firma) mencionaba algunos elementos de su carácter que habían influido en su invención: “Cualquiera que haya perdido la noción del tiempo cuando usa un ordenador conoce la propensión a soñar, la urgencia por convertir esos sueños en realidad y la tendencia a que se le pase la hora de la comida. Las dos últimas condiciones probablemente hayan ayudado. Creo que ahora lo llaman trastorno de déficit de atención”. Antes de la www, internet era básicamente una red física de redes; máquinas y cables interconectados que forman un sistema que permite enviar paquetes de información entre ordenadores, usualmente en fracciones de segundos. Muchos programas, como el correo electrónico, funcionan usando internet, cuyo diseño nació en 1973 y se empezó a divulgar en 1974 por Vint Cert y Bob Kahan, quienes definieron el llamado IP (protocolo de internet), que se hizo masivo en 1983. La www es un espacio imaginario –virtual– en el cual uno encuentra documentos, sonidos, vídeos y todo tipo de información. A diferencia de internet, que se conecta con cables y ordenadores, la web utiliza los hypertext links: vínculos de hipertexto que, cuando uno hace clic sobre ellos, conducen a su vez a enlaces relacionados. Después de Oxford, Berners-Lee A Dos jóvenes navegan por internet y consultan su correo electrónico con sus ordenadores portátiles en una cafetería con conexión sin cables a la red KEN CEDENO / CORBIS trabajó en varias compañías de telecomunicaciones, y como consultor independiente para el CERN (Centro Europeo para la Investigación Nuclear) en Ginebra. Allí regresó en 1984 al obtener una beca. Uno de sus proyectos científicos fue el de recuperar un programa que había diseñado algunos años atrás para uso personal, llamado Enquire. Usado para almacenamiento de información, Enquire prevé asociaciones aleatorias y su conceptualización sirvió de base para el desarrollo de un futuro invento. En 1989, Ber- Entre 1991 y 1993, Berners-Lee avanzó en el diseño y especificaciones de su creación, intercambiando y discutiendo información con los nuevos usuarios internacionales. En este proceso refinó conceptos como el del html, el lenguaje de marcación de hipertextos que se generalizó como herramienta de escritura de webs. Los orígenes del hipertexto Los orígenes del concepto de hipertexto se remontan cinco décadas atrás, con la publicación en 1945 en la revis- Antes de la www, internet era una red física, no un gran espacio virtual ners-Lee propuso el proyecto del hipertexto global, escribiendo el primer servidor: httpd, que usaba un navegador y editor llamado World Wide Web. En octubre de 1990 ese nuevo programa, ya conocido como www, se puso a disposición del CERN, y en agosto de 1991 se extendió a todo el mundo a través de internet, expuesto en un navegador básico visible en cualquier plataforma, creado por la entonces estudiante Nicola Pellow. ta Atlantic Monthly del histórico artículo en el que el científico Vanevar Bush proponía una máquina llamada Memex, que podría permitir hacer y seguir automáticamente referencias cruzadas de información mediante un proceso de código binario y fotografía instantánea. Posteriormente aparecieron investigaciones fundamentales como la de Doug Englebart (el sistema NLS para el uso de ordenadores digitales para intercambio de archivos) o la de Ted Nelson, quien acuñó el término hipertexto. El panorama con el que BernersLee se encontró en los 80 fue el de un campo científico que se venía expandiendo notablemente, cada vez más información estaba siendo copiada magnéticamente y almacenada en ordenadores, pero justamente esa riqueza y diversificación estaba creando cada vez sistemas más dispares, redes, formatos, soportes y códigos incompatibles entre sí. “Eso hacía que cualquier intento de transferir datos era una tarea generalmente impracticable”, escribía en un documento de agosto de 1996 sobre el pasado, presente y futuro de la web, en el cual también explicaba el principio básico bajo el cual diseñó la red mundial: “Como un mundo interactivo de información compartida a través de la cual la gente se pudiera comunicar entre sí misma y con máquinas”. Si en su primera fase la www contenía predominantemente material de sólo lectura (no editable en línea) alojado en servidores de grandes empresas, organismos públicos y universidades, hoy delata una constante expansión gracias al creciente número de personas conectadas a través de sus ordenadores u otros dispositivos en todo el planeta. Esto se debe, en gran parte, a los criterios que Ber- . L A VA N G U A R D I A ners-Lee estableció en el diseño original de la web: flexibilidad –mínimas especificaciones para minimizar restricciones de funcionamiento– y la capacidad de que pudiera usarse en cualquier plataforma física o informática, en previsión de su evolución. También una de las metas trazadas por TBL fue que “la interacción entre la persona y el hipertexto pudiera ser tan intuitiva que el espacio con información legible en el ordenador diera una idea precisa del estado de los pensamientos y patrones de trabajo de los usuarios”. La red ha tenido tan sensacional éxito gracias a que muchos individuos, sin ser físicos ni expertos, han decidido explorar, muchas veces a tientas, las posibilidades ocultas detrás de cada línea cliqueable en una pantalla. Otra razón del éxito fue el hecho de que Berners-Lee ofreció su invento a la humanidad renunciando a las regalías y el prospecto de fortuna que le hubiese esperado allí. Al trabajar con códigos abiertos, permitió que rápidamente colegas y curiosos de la informática se volcaran en un proyecto común de alcance global. “La intención era que ese espacio pudiera transformarse de un sistema privado de información en uno público abierto tanto para material cuidadosamente organizado y revisado como para ideas sin- gulares que tal vez sólo tuvieran sentido para un pequeño grupo de personas y tal vez nunca releídas”, recapitulaba el creador de la www en el documento ya mencionado. Una tecnología libre Al hacer de la web un invento de dominio público aseguró esta transformación, en la que contribuyó igualmente la decisión de las directivas del CERN en su documento histórico del 30 de abril de 1993, en el que anunciaron que la tecnología www podría ser utili- novedad del momento: navegar virtualmente por la nueva www. La trayectoria de la red también está marcada por la creación en 1994 del World Wide Web Consortium W3C, una organización sin ánimo de lucro con más de 150 miembros, entre ellos los desarrolladores líderes de tecnología en línea y muchas otras personas cuyo trabajo está asociado con la versatilidad, ubicuidad y funcionalidad de la web. Su objetivo general es de promover “todo el potencial de la web”, proveyendo un “foro neutral en En los 80 se digitalizó mucho, pero en soportes y códigos incompatibles zada libremente por cualquier persona o institución de cualquier país, sin que tuviese que pagar ningún tipo de derechos al laboratorio. En febrero de 1995, el tema principal en la agenda de reunión del G7, auspiciado por la Unión Europea en Bruselas, fue la web, y al siguiente mes, el CERN convocó un seminario con 250 periodistas europeos para enseñarles, con la ayuda de estudiantes de la Escuela Internacional local, la el que compañías competidoras puedan encontrarse y ponerse de acuerdo sobre especificaciones comunes para el bien común”. Desde que la www se hizo pública ha existido la preocupación por su fragmentación: que se creen múltiples estándares de operación, torpedeando el universo compartido de información sobre el cual se han construido tantos proyectos comerciales, educativos, técnicos y científicos. La Una corta pero intensa historia 1995 Netscape revolucionó el mundo con su nuevo navegador para la web, mientras Pierre Omidyar creó eBay, que hoy es el mayor sitio de compraventa en línea del mundo. La muerte de Jerry García es la primera noticia ‘colgada’ en el recién inaugurado portal de Yahoo, que pronto se convirtió en uno de los sitios más visitados de la web 1996 Los estudiantes Larry Page y Sergey Brin crean en su habitación de la residencia de la Universidad Stanford el buscador BackRub, que hoy es el popular Google 1998 La aparición de Verisign y el cifrado de mensajes dio un empuje fundamental al comercio electrónico 1997 Se baten en línea Garry Kasparov y el ordenador Deep Blue de IBM. Perdió el ajedrecista. 2000 Empieza la cobertura on line de las elecciones presidenciales en Estados Unidos. Cuatro años más tarde, la web se convierte en medio esencial de una de las campañas más aguerridas y seguidas en el país y el resto del mundo 2002 La mayor librería on line del mundo consigue sus primeras ganancias. Hoy vende además música y una amplia gama de bienes nuevos o usados Marzo del 2003 Empieza la guerra de Iraq y un misterioso blogger que firma Salam Pax se convierte en el diarista más leído de la web, motivando además a muchas más personas en el mundo a crear sus propios blogs. También ese año el peligroso gusano Slammer casi hace ‘caer’ la red mundial Diciembre de 2004 La web se convierte en el medio más efectivo de comunicación y acopio de ayudas para las víctimas del tsunami en Asia. 2005 Google, convertida en una compañía pública (inscrita en la bolsa de los Estados Unidos), amplía su abanico de servicios de búsquedas e información consolidándose como uno de los negocios más exitosos de la web y, por el momento, todavía gratuito. Enlaces de interés www.w3c.org Sitio oficial del Consorcio W3C www.w3.org/People/BernersLee Información sobre Tim Berners-Lee con enlaces a varios textos de su autoría, incluyendo el documento ‘The World Wide Web: Present, Past and Future’, mencionado en este artículo: www.w3.org/People/BernersLee/1996/ppf.html TBL es autor del libro ‘Weaving the Web’, sobre la trayectoria de la web. Edición en castellano: ‘Tejiendo la Red’ (Siglo XXI España, 2000) misión del W3C, visualizada por Berners-Lee (uno de sus fundadores y actual director) es la de diseñar criterios que aseguren al crecimiento de la web a largo plazo. El W3C se ha consolidado como organismo independiente, y en este sentido no sólo ofrece un amplio temario de ayuda técnica, sino que también ha abierto debates sobre temas éticos o de interferencias gubernamentales que vulneren el carácter libre y democrático de la red. Se sostiene económicamente con aportaciones de sus miembros, fondos de investigación, becas y otras fuentes públicas y privadas. El trabajo es administrado por el Laboratorio de Ciencia e Inteligencia Artificial del MIT en Estados Unidos, el Consorcio Europeo para Informática y Matemáticas en Francia y la Universidad Keio en Japón. Tiene además oficinas en 15 regiones del mundo, con el fin de extender el espectro de actividades y promover la creación de tecnología en más idiomas. No todo es alentador con la expansión actual y prevista de la red. Los anuncios perniciosos; los sitios virtuales que conducen a abusos de menores, ilegalidad, estafas; las avalachas de correo basura; los virus... Por otro lado, hay inquietud sobre si la web es una herramienta de desarrollo e integración o, por el contrario, acrecentará la brecha entre sociedades ricas y pobres o se convertirá en arma destructiva de grupos extremistas. Un recorrido por las noticias actuales puede llevar a la conclusión de que el mundo está hecho un desastre de violencia, abandono de la razón, a la par de una alarmante dependencia informática en ciertas esferas. En estos momentos, merece la pena recordar que hay gente como Tim Berners-Lee trabajando por expandir un gran espacio en el que, respetando la individualidad y la diversidad, haya un entendimiento universal. Un espacio integrador, al alcance de más seres humanos que no se supeditan a las máquinas, sino que las saben usar más y mejor. Un amplio escenario lleno de testimonios, imágenes, sonidos y documentación relevante bien para una persona o para millones; y desde el cual se pueda comprar a cualquier hora un nuevo plato de comida a domicilio para quienes convierten el déficit de atención en genialidad.c DOMINGO, 20 AGOSTO 2006 Tim Berners-Lee, durante se intervención en la conferencia internacional sobre la World revista Wide Web celebrada en la ciudad australiana de Brisbane en el 2003 E. POHLNER / REUTERS Desafíos de futuro para el W3C iConseguir que más personas puedan usar fácilmente el hipertexto y crear sus propias páginas, así como poder filtrar la información disponible en la red iPara el W3C es fundamental evitar la fragmentación de la web en múltiples estándares de funcionamiento sin afectar la libre experimentación y competencia propia de un programa en código abierto. También es crucial trabajar en lo que ellos llaman la ‘interoperatibilidad’: que la web funcione bien en cualquier ordenador, con cualquier navegador y sobre cualquier plataforma iAmpliar los usos de la web como herramienta participativa de educación (de nada sirven sitios bonitos, pero no actualizados ni usados activamente por profesores y alumnado) iMejorar los controles de privacidad y de seguridad en las operaciones como compras y banca on line 9