DIETA DE TRIATLETAS EN PERIODO PRETEMPORADA Y PRECOMPETITIVO Antonio Torres García, Beatriz Sanz Álvaro, Amaia García Aparicio, Guadalupe Garrido Pastor Departamento de Rendimiento Humano del I.N.E.F. de Madrid. Resumen Se ha estimado el balance energético de un grupo de triatletas de alto nivel, para lo cual se ha valorado la ingesta nutricional y se ha estimado el gasto energético en un grupo de 10 en dos periodos distintos de la temporada del año 2003: pretemporada (febrero) y precompetitivo (mayo). El aporte de nutrientes se ha calculado pesando todos los alimentos consumidos en las tres comidas principales durante cinco días. Se presentan los porcentajes de contribución a las ingestas diarias recomendadas de macro y micronutrientes (RDA) en ambos periodos. Se observa que el aporte energético se reduce en el periodo competitivo. En contra de lo esperado, en el periodo precompetitivo se observa una disminución en el aporte de hidratos de carbono relativos al peso y de algunos micronutrientes, que se sitúan por debajo de las ingestas diarias recomendadas (RDA). Palabras clave: Triatlón. Nutrición deportiva. Ingesta alimentaria. INTRODUCCIÓN El triatlón es un deporte combinado de resistencia que incluye: natación, bicicleta y carrera. La temporada de triatlón se divide básicamente en tres periodos: periodo de pretemporada, precompetitivo y competitivo. El periodo precompetitivo, elegido para la segunda toma de datos, se situó en torno a dos semanas antes de las primeras competiciones de triatlón ya que las pruebas que se celebran en invierno son de la disciplina de duatlón (sin natación). La alimentación es un factor fundamental a la hora de optimizar los efectos del entrenamiento, especialmente en periodos competitivos y de entrenamiento intenso. Las ingestas energéticas bajas y/o insuficientes en los nutrientes necesarios se asocian con la pérdida de peso, disminución del rendimiento y alteraciones de diversos aspectos relacionados con la salud. Por tanto, el mantenimiento del balance energético y del aporte adecuado de micronutrientes no energéticos es fundamental para asegurar un óptimo rendimiento deportivo y una adecuada salud. La distribución energética (hidratos de carbono, proteínas y lípidos) recomendada en la dieta del triatleta dependerá del tiempo y de la intensidad del entrenamiento de resistencia desarrollado. En general, para esfuerzos de larga duración se recomienda una alta ingesta de hidratos de carbono (HC) que conduce en el periodo de recuperación a una máxima reposición de glucógeno. En relación con las proteínas, un triatleta requiere mayor aporte que un homólogo sedentario debido a que es necesario reparar el daño muscular tras el esfuerzo prolongado. Se ha realizado un estudio pormenorizado de la dieta mediante la pesada de todos los alimentos ingeridos. La ventaja de esta técnica frente a los estudios realizados mediante encuesta es la posibilidad de calcular con mayor precisión lo ingerido. MÉTODOS El grupo estudiado estaba integrado por 10 triatletas, 5 chicas y 5 chicos, pertenecientes a la Selección Española de Triatlón, becados por el C.S.D y algunos de ellos internos en la Residencia Joaquín Blume de Madrid. Durante el periodo del estudio todos ellos realizaban tres comidas diarias (desayuno, comida y cena) en la citada residencia, que presenta un comedor a modo de bufet. Los tentempiés de media mañana (almuerzo) y media tarde (merienda), así como la ingesta de líquidos, fueron también registrados. Sin embargo, los líquidos ingeridos fuera del comedor, debido a la falta de exactitud en su medición sobre todo durante el entrenamiento, se consideran subvalorados. Todos los alimentos fueron pesados en una báscula digital (modelo Viper S26 Mettler-Toledo, precisión ± 0,5 g). La determinación de la ingesta fue realizada mediante la técnica de doble pesada por dos observadores entrenados: uno pesaba y otro registraba los datos en una encuesta. Cada alimento fue pesado antes de ser comido así como las sobras de la comida. Se consultaba diariamente a los triatletas, para dejarlo también registrado, el consumo de cualquier alimento ingerido fuera del comedor de la residencia. El análisis de la ingesta se ha llevado a cabo a través de la corrección de las encuestas rellenadas con los alimentos consumidos durante cinco días (un festivo) con el software Nutritionist IV (First Data Bank. San Bruno) previa incorporación a la base de datos de las recetas del menú consumido tras la petición pormenorizada de los ingredientes en la cocina de la Residencia J. Blume. El gasto energético se ha estimado mediante el cálculo del factor de actividad a través del registro de la actividad física y del entrenamiento desarrollado en los dos periodos de estudio (pretemporada y precompetitivo). RESULTADOS El aporte energético se redujo en periodo precompetitivo, especialmente en los chicos. La estimación del gasto energético fue similar en los dos periodos. En el segundo periodo estudiado se ha observado un balance negativo de energía (Tabla1). CHICAS CHICOS Pretemporada Precompetición Pretemporada Precompetición 2238 ± 263 2140 ± 631 3701 ± 252 2609,4 ± 324 Aporte energético (Kcal) 2163 ± 253 2183 ± 192 2914 ± 266 3038,7 ± 66 Gasto energético (Kcal) 75 ± 292 -43 ± 698 786 ± 14 -429,3 ±263 Balance energético (Kcal) Tabla 1.- Aporte y gasto de energía en los dos periodos y en los dos grupos estudiados (Media ± DE) A continuación se muestra la ingesta energética media del grupo estudiado en los dos periodos estudiados, así como su distribución en porcentaje de macronutrientes (Gráfico 1). El perfil de distribución de la energía fue muy similar en los dos periodos. PRETEMPORADA PRECOMPETICIÓN 2969 ± 257 2375 ± 477 26% 24% LÍPIDOS PROTEÍNAS HC 58% 58% 16% 18% Gráfico1.- Aporte energético medio ± DE del grupo (N = 10) en Kcal y distribución energética de la dieta en los dos periodos. Se observó una tendencia general (entre 0.8–1 kg) a perder peso durante la temporada. En la Tabla 2 se presentan los valores relativos al peso para la ingesta de HC y de proteínas. A pesar de tener un alto porcentaje de HC en la dieta, al expresarlo en forma relativa al peso se observó que los valores eran inferiores a lo recomendado en ambos periodos para las chicas y en el periodo precompetitivo para los chicos. La ingesta de proteínas relativa al peso se considera adecuada en ambos grupos y en ambos periodos con respecto a los requerimientos de los deportes de resistencia. HC (g/kg peso) PROTEÍNAS (g/kg peso) ♀ ♂ ♀ ♂ PRETEMPORADA 6,2 8,3 1,7 2,2 PRECOMPETICIÓN 5,9 5,4 1,9 1,7 Tabla 2.- Ingesta relativa al peso (kg) de HC y de proteínas. Se observa una reducción en el periodo precompetitivo en el consumo de grasas totales, especialmente en los chicos, disminuyendo paralelamente la ingesta de grasas saturadas. La ingesta de colesterol en el grupo de los chicos fue superior a los 300 mg (cifra de ingesta máxima recomendada) en los dos periodos (Tabla 3). CHICAS CHICOS Pretemporada Precompetición Pretemporada Precompetición 67,3 ±9,8 59,4 ±22,1 29,3 ±14,4 18,1 ±12,2 Grasas (g) 19,4 ±4,5 15,4 ±5,6 120,2 ±3,4 74,4 ±3,1 Grasas saturadas (g) 222,3 ±69.3 275,8 ±67,9 385,7 ±150,3 327,0 ±79,2 Colesterol (mg) Tabla 3.- Ingesta media ± DE diaria de grasa total, saturada y de colesterol. En el grupo de chicas triatletas se observa un mayor número de dietas deficientes en micronutrientes. En periodo de pretemporada la media del grupo presenta deficiencia en el aporte de vitamina E por la dieta (Gráfico 2), sin embargo la casi totalidad del grupo la consume en forma de suplemento. En el periodo precompetitivo se observa una ingesta deficitaria en ácido fólico, vitamina D y hierro (Gráfico 2). En los chicos triatletas el aporte de micronutrientes fue correcto excepto para la vitamina D, que no podemos tener en cuenta ya que esta vitamina se sintetiza en la piel expuesta a la luz solar a partir de su precursor (7dehidrocolesterol o previtamina D3) y en el triatlón se entrena largos tiempos al aire libre. 200 PRETEMPORADA % RDA PRECOMPETICIÓN 100 0 Vitamina E Ac. Fólico Ác. Pantot. Vitamina D Hierro mg Gráfico 3.- Micronutrientes deficitarios en la dieta en el grupo de chicas. CONCLUSIONES La ingesta energética fue inadecuada especialmente en los chicos en el periodo precompetitivo, por lo que se observa un balance energético negativo. Se ha citado en otros estudios que el estado de fatiga crónica conduce a una pérdida de apetito. El balance energético positivo del grupo de los chicos triatletas en el periodo de pretemporada puede asociarse con un aumento de la demanda de energía requerida para el incremento de la masa muscular. La distribución de la energía de la dieta fue adecuada, pero al expresar los valores de los macronutrientes (HC y proteínas) de forma relativa al peso se observa que la ingesta de HC se encuentra por debajo de lo recomendado (8 g de HC/kg de peso) en ambos grupos. Este hecho es bastante frecuente y ha sido referido en otros estudios. Sería recomendable aumentar el consumo de HC en forma de suplementos sólidos o líquidos antes, durante o después del entrenamiento, especialmente en periodo precompetitivo para mejorar el rendimiento. Son necesarios más estudios de manipulación de la dieta para ajustar la ingesta a las necesidades reales de energía, macronutrientes y micronutrientes en las dietas de los triatletas de élite. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS American College of Sports Medicine, American Dietetic Association, Dieticians of Canada (2000). Nutrition and Athletic Performance. 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