HISTORIA DE ESPAÑA LA SOCIEDAD ANDALUSÍ En la sociedad de Al-Andalus podemos distinguir diversos grupos de población definidos por motivos religiosos, jurídicos y étnicos. 1. Por razón religiosa. La plenitud de los derechos la ostentan únicamente los musulmanes, únicos miembros de la comunidad (umma). La conversión teóricamente daba al converso la plenitud de derechos de los que disponía cualquier otro musulmán, pero en realidad se convertía en una especie de cliente de la comunidad. Los conversos eran conocidos a partir de la segunda generación como muwallad, de donde proviene muladíes. En cuanto a los no musulmanes, podían vivir bajo las autoridades musulmanas acogiéndose a su protección mediante un acuerdo que se formaliza en el momento de su rendición. Esta es una posibilidad que se ofrece únicamente a cristianos y judíos (dimníes). Los dimníes gozan de la protección de las autoridades islámicas; sus propiedades, costumbres, leyes y religión son respetadas a cambio del pago de la yizya y el jarach. La población numéricamente más importante sometida a las autoridades islámicas fueron los cristianos, designados con el término mozárabes, que no fue utilizado en Al-Andalus pero que era habitual en los territorios cristianos para referirse a los cristianos en territorio musulmán, que acababan adoptando muchos de sus usos y costumbres. La comunidad mozárabe conserva sus propias autoridades y la estructura religiosa. La reacción más extrema sería la protagonizada por el martirio voluntario. Con la llegada de los almorávides, que supuso una mayor radicalidad islámica, la comunidad mozárabe acabó casi por desaparecer. Otro grupo de población no musulmana son los judíos. Forman comunidades independientes, de cierta importancia en algunas ciudades, con sus propias autoridades, de modo similar a lo que ocurre con la población cristiana. 2. Desde el punto de vista jurídico, se diferencian dos sectores: libres y esclavos. Libres son todos los que, independientemente de su situación socioeconómica, su religión o su procedencia étnica, tienen plena personalidad jurídica. Los esclavos lo son por nacimiento o por cautividad. Los varones son empleados en funciones domésticas, como soldados y como administradores de las propiedades de sus dueños y, en ciertos casos, alcanzan incluso puestos de relevancia en la administración. Las mujeres se ocupan esencialmente de tareas domésticas y, en muchas ocasiones, se convierten en concubinas de sus dueños. 3. La distinción étnica causó muchos enfrentamientos y fue factor que dificultó la consolidación de un Estado andalusí. El grupo étnico de más elevada condición social es el constituido por los árabes. Ocuparon una posición dominante en la vida social, económica y política. Los beréberes llegaron con Tarik y en numerosas oleadas sucesivas, procedentes del norte de África (Magreb). La población beréber mantuvo de manera continuada una actitud de descontento que se manifestó ya en los primeros tiempos de la conquista, insatisfechos con el reparto del botín y de los territorios. El grupo étnico mayoritario estaba constituido por los hispanorromano-visigodos. Sin embargo, no se impuso culturalmente a los musulmanes, sino que en líneas generales adoptó su modo de vida. Los conversos constituyen, con el tiempo, la absoluta mayoría de la población de Al-Andalus.