40 LATERCERA Martes 16 de febrero de 2016 Sociedad Cultura [ANIVERSARIO] En febrero de 1916, Hugo Ball, Tristan Tzara y Hans Arp crearon el movimiento que se enfrentó al arte burgués y a las convenciones literarias. Surgió en torno a un café en Zúrich, ciudad que hoy concentra las celebraciones. Por Denisse Espinoza A. FOTO: KUNSTHAUS ZÜRICH, © 2015 PROLITTERIS, ZÜRICH Contra la razón: un siglo de dadaísmo 1 N O hay mal que por bien no venga, dice el refrán. Sucedió a comienzos del siglo XX, al mismo tiempo que estallaba el horror, la muerte y la pobreza con el inicio de la Primera Guerra Mundial, en un café en Zúrich, Suiza, nacía uno de los principales movimientos creativos que dejaría sus secuelas hasta hoy. El 5 de febrero de 1916, se reunieron por primera vez en el café Cabaret Voltaire, tres poetas refugiados de la guerra: los alemanes Hugo Ball y Hans Arp y el rumano Tristan Tzara, quienes estaban dispuestos a revolucionar la dormida y temerosa escena europea, con un arte que rayaba en el absurdo, que iba en contra de las convenciones literarias y que repudiaba toda clase de control de la monarquía o burguesía. En sus espectáculos mezclaban la música, el teatro y la declamación de poemas creados a partir de frases recortadas de los periódicos y mezcladas al azar. Lo mismo sucedía en el formato visual, con sugerentes y atrevidos collages llenos de humor y juegos de palabras. Pocos meses después, el grupo ya había publicado su primer manifiesto; ampliado sus miembros a varios artistas, entre filósofos y pintores, como Guillaume Apollinaire, Filippo Marinetti, Pablo Pi- casso, Amedeo Modigliani y Vasili Kandinsky; y bautizado el movimiento como dadá. Una nota del diario de Hugo Ball, fechada en abril de 1916, da cuenta del momento y de su idea de crear una publicación: “Tzara está preocupado por la revista, mi sugerencia de que se le ponga ‘dadá’ es aceptada. ‘Dadá’ quiere decir en rumano Sí, sí; en francés, es la forma infantil de decir caballo; y en alemán es una señal de ingenuidad relacionada con el coche de un bebé”, dice el poeta, según los documentos archivados del grupo. A 100 años del inicio del dadaísmo, la memoria se reactiva en Zúrich, la ciudad donde comenzó todo y donde un extenso programa acaba de partir: el programa completo en www.dada100zuerich2016.ch . En el Museo de Arte de la capital se inauguró la semana pasada Dadaglobe, reconstructed, muestra que reúne 200 obras de arte, entre dibujos, collages y grabados, además de textos enviados a Tristan Tzara en 1921, por 160 artistas de toda Europa para la elaboración de un gran libro sobre el movimiento , que nunca fue publicado. Ahora el proyecto se recupera luego de que una investigación logró reunir varias de las piezas: en 2005, el curador Adrian Sudhalter observó que muchas obras dadás expuestas en una retrospectiva en el Centro Pompidour de París tenían similares números inscritos en el reverso. La curiosidad lo llevó a investigar diferentes colecciones de Suiza, Francia y EEUU, hasta hallar todo el grupo codificado por el propio Tzara. La exposición estará hasta mayo en Zúrich y en junio viajará al MoMa de Nueva York. Larga estela La idea de que todo arte puede ser cuestionado para dar paso a una constante reinvención, es la base del Dadaísmo , que allanó el camino para otros movimientos radicales como el surrealismo de André Bretón en Francia. Los europeos autoexiliados a Nueva York, como Marcel Duchamp, Francis Picabia y Man Ray, se encargaron de activar la movida. Duchamp fue el más radical con sus ready-mades, objetos que descontextualizados adquirían un nuevo significado, mientras que en Alemania, el dadá se politizó como arma de propaganda contra la República de Weimar, en manos de artistas como Richard Hülsenbeck y Hannah Höch. Este legado que alcanzó varios continentes se exhibe en Dadá Universal, la exposición del Museo Nacional de Zúrich que tiene como pieza estrella La Fuente de Duchamp, el emblemático urinario puesto al revés y convertido en obra de arte, prestado por la colección del Museo de Israel; y que recoge además obras del grupo Fluxus y del Pop Art, corrientes de alguna 1 Max Ernst Le rossignol chinois 1920, inspirada en el cuento de Hans Christian Andersen. 2 Duchamp / Man Ray Monte Carlo Bond, 1924. 3 Tristan Tzara retrato de 1920, del escritor rumano, fundador del dadá. 4 Francis Picabia Tableau Rastadada, 1920. 2 5Marcel Duchamp La fuente (1917), réplica de 1964. Museo de Israel, Jerusalén. 3 FOTO: BIBLIOTHÈQUE LITTÉRAIRE JACQUES DOUCET, PARIS FOTO: KUNSTHAUS ZÜRICH, © 2015 PROLITTERIS, ZÜRICH OBRAS ICONICAS