VALORES DE LOS PRONOMBRES ÁTONOS (me, te, se, nos, os) 1. Valor pronominal. Los pronombres átonos pueden aparecer en las oraciones como pronombres propiamente dichos, es decir, actuando con valor pronominal. En este caso pueden desempeñar alguna de las siguientes funciones: 1a. Variante de “le”. Decimos que el pronombre átono “se” es variante de “le” cuando aparece en lugar de éste en secuencias sintácticas en las que la presencia de “le” es agramatical. Esta función sólo puede ser desempeñada por “se”, que será CI. ̴ Ejemplos: Juan regaló un libro a María > Juan se lo regaló (en vez de: Juan *le lo regaló, que es incorrecto). CI 1b. Pronombre reflexivo. Decimos que un pronombre átono es reflexivo cuando aparece en una oración reflexiva, es decir, aquella cuyo sujeto realiza y recibe la acción del verbo al mismo tiempo. Esta función puede ser desempeñada por los siguientes pronombres átonos: me, te, se, nos, os. Si en la oración reflexiva aparece una palabra o sintagma que funcione como CD, el pronombre átono reflexivo actúa como CI; si en la oración reflexiva no aparece ningún elemento que actúe como CD, esa función la asume el pronombre átono. ̴ Ejemplos: Juan se ducha todas las mañanas / Ayer me bebí una copa de vino. CD CI 1c. Pronombre recíproco. Decimos que un pronombre átono es recíproco cuando aparece en una oración recíproca, es decir, aquella cuyo sujeto es múltiple y los individuos de dicho sujeto realizan y reciben la acción del verbo mutuamente. Esta función puede ser desempeñada por los siguientes pronombre átonos: nos, os, se. Si en la oración recíproca aparece una palabra o sintagma que funcione como CD, el pronombre átono recíproco actúa como CI; si en la oración recíproca no aparece ningún elemento que actúe como CD, esa función la asume el pronombre átono. ̴ Ejemplos: Juan y María se abrazan / Vosotros os mandáis cartas de felicitación en Navidad. CD CI 2. Valor de morfema verbal. Los pronombres átonos pueden aparecer en las oraciones como morfemas verbales, es decir, formando parte del núcleo del sintagma verbal predicado. En este caso pueden desempeñar alguna de las siguientes funciones: 2a. Morfema verbal de pasiva refleja. Actúa como tal el pronombre átono que aparece en una oración pasiva, es decir, cuyo sujeto es paciente (recibe la acción) y que no está construida mediante la perífrasis verbal de pasiva simple (verbo ser+participio), sino con la fórmula “se”+verbo. Sólo puede desempeñar esta función el pronombre “se”. ̴ Ejemplos: Se venden coches usados. Verbo Sujeto 2b. Morfema verbal de pronominalidad. Actúa como tal el pronombre átono que va acompañando a verbos pronominales, es decir, aquellos que exigen la aparición del pronombre para ser usados correctamente. Pueden desempeñar esta función los sigueintes pronombres: me, te, se, nos, os. ̴ Ejemplos: Nos arrepentimos de haber discutido con Juan / Se atrevió a cruzar el río a nado. Verbo Verbo 2c. Morfema verbal de impersonalidad. Actúa como tal el pronombre átono que aparece en oraciones impersonales, es decir, aquellas que no tienen sujeto. Sólo puede desempeñar esta función el pronombre “se”. ̴ Ejemplos: Se indemnizó a los afectados por las inundaciones / Se informó del incendio a las autoridades. Verbo Verbo