RVOS Cuando el patriarca de una prominente familia muere inesperadamente, sus hijos, Chava e Isabel Iglesias, luchan por asumir el control de su amado equipo de futbol: Los Cuervos de Nuevo Toledo. POR: Eduardo Anaya Camargo NETFLIX EN ESPAÑOL E strenada el 7 de agosto de 2015 a nivel mundial, Club de Cuervos llegó por la puerta grande. No solo marca la segunda colaboración del director Gary Alazraki con Luis Gerardo Méndez, después de Nosotros los Nobles (2013) sino que es la primera serie hablada en español producida por Netflix. ¿Cuáles son algunos de sus ingredientes? Una historia sólida y lineal, personajes tridimensionales, buena comedia, ¡y mucho futbol! CHAVA IGLESIAS, ¿TONTO O VISIONARIO? Resulta divertido describir a este personaje. Hay un aire familiar entre su idiosincrasia y la de Javi Noble en Nosotros los Nobles, especialmente porque ambos son emprendedores. Pero si Javi Noble era ingenuo, impráctico y a todas luces un junior, “hijo de papi”, Chava Iglesias (Luis Gerardo Méndez) va más allá, mucho más allá. ¿Por qué? Porque lo único más peligroso que un tonto con poder para una organización es un tonto que se cree visionario. Y esto empeora cuando dicho tonto está dispuesto a llegar a las últimas consecuencias para hacer realidad sus ideas. El conflicto en Club de Cuervos nace cuando Chava Iglesias es nombrado presidente del equipo de Los Cuervos de Toledo. Su visión para el equipo es muy clara: “Mi visión es que seamos el Real Madrid de América Latina”. Para hacerle justicia, vale la pena mencionar algunas de las cualidades de este personaje: entusiasta, oportunista, buen vendedor y muy perseverante. ISABEL IGLESIAS: VÍCTIMA DISCRIMINADA En contraparte, resulta conmovedor describir a Isabel Iglesias (Mariana Treviño). Líder, trabajadora, comprometida, planeadora y noble. El momento que muestra con más contundencia las cualidades de esta mujer sucede en el episodio Afortunado en jugar, en donde Isabel da un sucinto pero poderoso discurso sobre el compañerismo, el profesionalismo y el significado de ser futbolista. Este momento recalca la diferencia principal entre Isabel y su hermano: mientras Chava ve al club como una catapulta para su imagen, Isabel ve al club como una oportunidad para que perdure el legado de su padre. Dicha ‘inocencia’ en el personaje es a su vez defecto y cualidad, pues a pesar de que Isabel quiere hacer lo correcto a largo plazo para el club, su astucia y artimañas no son nada en comparación con las de su hermano. Isabel es la hija de la que cualquier padre se sentiría orgulloso; Chava, el hijo con el que cualquier padre sentiría que falló en algo. Es esta diferencia en el carácter de los hermanos la que le da tanta fuerza al conflicto, pero son sus similitudes las que le dan un toque SIGLO NUE V O • 71