Microfinanzas en el Perú Erika Cecilia Pinedo Ramírez Se considera al crédito como una herramienta para combatir la pobreza, disminuir las brechas de la desigualdad y tener mejores condiciones para la igualdad de oportunidades, es decir, mejorar el bienestar de las personas; sin embargo, según Conger, Inga y Webb (2009) el crédito bancario en el Perú nunca había existido para los pobres, hace solo 25 años que el panorama se presenta radicalmente diferente debido a la gran cantidad y variedad de instituciones que ofrecen servicios financieros a millones de familias pobres, situación que le permite al Perú constituirse como uno de los casos más significativos del desarrollo de las microfinanzas ya que ha funcionado como un laboratorio para una gran diversidad de modelos institucionales y revelado el margen existente para la adaptación y la credibilidad. La incursión de las instituciones microfinancieras y sus tecnologías de créditos se dieron durante los años 80 e inicios de los años 90 dentro de un contexto poco auspicioso para el tipo de negocio debido a la alta inflación, excesiva intervención del Estado, terrorismo virulento, colapso económico y un desastre natural extraordinario. A partir de la década del 90 las microfinanzas en el Perú empezaron a desarrollarse en un contexto más favorable debido a la implementación de un nuevo modelo económico para el país, a partir de ello el sector de la microempresa incrementó su participación en la estructura económica, que según Portocarrero (2003) llegó a brindar ocupación al 74% de la PEA, mientras que su demanda de financiamiento se incrementó por la expansión del aparato productivo. A partir de esa década, se ha registrado una importante ampliación de la oferta de microcrédito en el Perú, además se han ensayado diferentes estrategias para el desarrollo de las instituciones de microfinanciamiento, atendiendo en la actualidad a cerca del 8% de la población total. Ríos-Henckell y Martínez (2014) señalaron que al año 2013 el Perú ocupaba el primer lugar - por sexto año consecutivo – del ranking del Microscopio Global elaborado 2 por The Economist Intelligence Unit (EIU), posición que le permite al país ser el líder de las microfinanzas en América Latina y el Caribe por tener el mejor entorno para los negocios de microfinanzas a nivel global. Actualmente el mercado peruano del sector se encuentra en un proceso de transformación con fusiones y adquisiciones que enfrenta al liderazgo alcanzado hasta hoy a grandes retos para este año y los que vienen. La oferta de financiamiento para el microcrédito está dada por entidades reguladas y no reguladas, entre ellas, una veintena de ONGs especializadas, 10 Edpymes, 10 Cajas Rurales de Ahorro y Crédito, 13 Cajas Municipales de Ahorro y Crédito, 15 Cooperativas de Ahorro y Crédito, ocho financieras y un Banco especializado, todos ellos con un alcance de 4,1 millones de clientes. En tal sentido, la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (2009) manifestó que el marco regulatorio de supervisión se ha ido perfilando progresivamente para favorecer el fortalecimiento de las instituciones microfinancieras, el acceso de la microempresa al crédito y la competencia en el mercado financiero, indicó además que la competencia seguirá favoreciendo a los clientes para acceder al crédito en mejores condiciones, tanto en costos, como en variedad de productos y servicios. Según Copeme Microfinanzas (2014), a pesar de los logros y del liderazgo en la región, en el año 2013 las entidades microfinancieras experimentaron menores utilidades (16% menos) frente al año 2012, teniendo un contexto donde: (a) las colocaciones se desaceleraron, casi 6% menos frente al 2012, (b) el riesgo crediticio se incrementó, deteriorando aún más la calidad de la cartera, (c) los riesgos financieros se redujeron, junto con la baja de las tasas de interés, producto de la creciente competencia, (d) los gastos financieros y operativos se incrementaron frente a los ingresos financieros. El escenario en el 2014, no ha cambiado conllevando a que las utilidades declinen. Meza (2014) coincidió afirmando que el entorno económico del país no viene siendo muy favorable para las microfinanzas y todo indica que esa tendencia se mantendrá en el resto del año. El 3 incremento de la competencia y la aparente saturación de algunos mercados también juegan en contra, por lo tanto, el reto ya no se encuentra en la fuerza de ventas, sino más bien en la eficiencia y en la acertada toma de decisiones de los directivos. La reducción relativa de los ingresos parece irreversible, el incremento de las tasas de interés, a pesar del riesgo crediticio, ya no es tan viable debido a que los clientes no estarían dispuestos a pagarla. En el análisis realizado por Regis y Krmelj (2014) indicaron que las instituciones microfinancieras continuarían retirándose de las plazas poco rentables para ingresar en otras donde no exista fuerte competencia y se tenga espacio para bancarizar, pero esta expansión hacia mercados menos competitivos significa mayores costos operativos lo cual impacta directamente en los indicadores de rentabilidad. El deterioro de la cartera debido al incumplimiento de las obligaciones de pago por parte de los clientes, se dio como consecuencia del sobreendeudamiento por la sobreoferta y la competencia, situación que exigió mayores provisiones impactando nuevamente sobre la rentabilidad. Por tal motivo, Meza (2014) recomendó que las instituciones microfinancieras que quieran asegurar su sostenibilidad y mantener sus márgenes de utilidad en cifras razonables, deberán apostar por una mayor escala recurriendo a las fusiones y adquisiciones e ingresar al mercado de capitales por ser recursos financieros de menor costo. Siguiendo la línea comentada por Meza (2014), el Diario Gestión (2014) informó en el mes de febrero, sobre la adquisición de Mibanco por parte de Edyficar que es una empresa del holding Credicorp, con dicha operación el Grupo se posiciona como líder del mercado de la Mype acercándose al 26% de participación del mercado, que ha opinión de Fernando Valencia-Dongo presidente de la Asociación de Instituciones de Microfinanzas del Perú – citado en el mismo diario – la unión de ambas empresas es algo positivo ya que generaría la consolidación del sistema microfinanciero que siempre requiere de instituciones sólidas que puedan afrontar situaciones difíciles que presenta el mercado. 4 Portocarrero (2003) sostuvo que a pesar del rápido desarrollo del microcrédito en los últimos años, aún existe una amplia demanda insatisfecha y los costos del financiamiento ofertado todavía son altos, por lo que sugirió la intervención del sector público para incentivar la ampliación de la oferta a mayor velocidad y mejores condiciones, ello se lograría propiciando la reforma institucional y la posibilidad de diversificar las fuentes de capital y recursos. De igual opinión fueron León y Jopen (2011) al proponer que el Estado debe propiciar políticas que ayuden a las microfinancieras a superar problemas de economías de escalas para así poder llegar a regiones más remotas, por lo tanto, el marco normativo debería proveer instrumentos que amplíen la competencia y disminuyan la heterogeneidad del crédito entre instituciones pero sin descuidar la regulación que garantice el sano desarrollo del sector. Siendo entonces las microfinanzas una importante herramienta para la superación de la pobreza ya que permite el acceso al crédito de las personas con menores recursos, será necesario tomar medidas acertadas en un entorno, que si bien es cierto no es negativo, pero no crece en las proporciones esperadas. La regulación para evitar el sobreendeudamiento de los clientes debe ser una medida urgente, ya que genera el incumplimiento de los compromisos pactados lo que conlleva al deterioro de la cartera y reduce la demanda en un mercado donde existe sobreoferta. En condiciones de sobreoferta, el consumidor debería verse beneficiado ya que el costo del crédito podría ser menor lo que llevaría a un mayor volumen de transacciones teniendo como resultado la ampliación del uso del crédito. Las fusiones y adquisiciones podrán dar solidez al mercado, pero sin llegar al monopolio que sí perjudicaría al consumidor al no tener mayores opciones. Es un buen ensayo, señala varios hechos importantes ocurridos en el sector y plantea adecuadamente (de forma ordenada y sustentada en la literatura) los escenarios futuros de actuación y el papel de los diferentes agentes. 5 Como todo buen ensayo es capaz de generar nuevas dudas y preguntas, como por ejemplo ¿Qué pasará con las cajas municipales en este nuevo escenario donde las empresas más grandes del sector financiero empiezan a tener una participación importante del mercado? ¿Debe el Estado intervenir y favorecer economías de escala en el sector? ¿Es este realmente el problema? ¿Por qué se están enfrentando las entidades financieras orientadas a las microfinanzas a una reducción de utilidades? Una posible respuesta es que han estado captando depósitos a tasas pasivas muy por encima a las de la banca tradicional, quizás debería cambiar ese modelo. En cualquier caso la respuesta a estas interrogantes darían pie a un nuevo ensayo, únicamente las indico por compartir las impresiones generadas. Como observaciones puntuales, creo que sería bueno incluir alguna tabla o gráfico sobre la evolución de las tasas de morosidad y las utilidades en el sector o sobre la participación de mercado de las entidades más importantes. Referencias Compra de Mibanco: ¿Cómo queda el mercado financiero? (2014, 10 de febrero). Diario Gestión. Recuperado de http://gestion.pe/empresas/mibanco-como-queda-mercadomicrofinanciero-su-compra-2088671 Conger, L., Inga, P. & Webb, R. (2009). El árbol de la mostaza: Historia de las microfinanzas en el Perú. Lima, Perú: Universidad San Martín de Porres. León, J. & Jopen, G. (2011). La heterogeneidad del microcrédito en el sector financiero. En León, J. & Iguíñez, J. (Eds.), Desigualdad distributiva en el Perú: Dimensiones. Lima, Perú: Fondo Editorial PUCP. 6 Meza, J. (2014). Microfinanzas en el Perú, contexto 3D (Desfavorable de Desaceleración y Deterioro). Lima, Perú: COPEME Recuperado de http://www.microfinancegateway.org/es/library/microfinanzas-en-el-per%C3%BAcontexto-3d-desfavorable-de-desaceleraci%C3%B3n-y-deterioro Copeme Microfinanzas (2014). Microfinanzas en el Perú. Publicación Reporte Marzo 2014 N° 16. Portocarrero, F. (2003). Microfinanzas en el Perú: Retos y perspectivas. Lima, Perú: Universidad del Pacífico. Regis, H. & Krmelj, L. (2014). Análisis del sistema microfinanciero peruano. Lima, Perú: Equilibrium Calificadora de Riesgo. Ríos-Henckell, C. & Martínez, M. (2014). Perú: ¿Por qué es el campeón de las microfinanzas? Lima, Perú: Portal Microfinanzas. Recuperado de http://www.microfinancegateway.org/es/library/per%C3%BA-%C2%BFporqu%C3%A9-es-el-campe%C3%B3n-de-las-microfinanzas Superintendencia de Banca, Seguros y AFP. (2009, 30 de setiembre). El Futuro de las Microfinanzas en el Perú. Feria de Servicios Microfinancieros para la Pequeña y Mediana Empresa desarrollado en la Cámara de Comercio de Lima, Perú.