Arginusas 1 Teramenes permaneció como general en 407 adC, pero, en ese año, cuando la derrota ateniense en Notio dirigió la caida de Alcibíades y sus aliados políticos, Teramenes no fue reelegido. El año siguiente, sin embargo, navegó como trierarca en la improvisada flota de ayuda ateniense enviada para ayudar a Conón, quien había sido bloqueado con 40 triremes en Mitilene por Calicrátidas. Esa fuerza de liberación obtuvo una victoria sorprendente en la batalla de Arginusas, pero como consecuencia de esa batalla Teramenes se encontró en medio de una controversia enorme. Tuvieron que ser enviados barcos para recuperar a los marineros de veinticinco trirremes atenienses hundidos o dejados incapacitados en la batalla. En este punto, sin embargo, una grave tormenta estalló, y ambos ejércitos fueron empujados a tierra. Un gran número de marineros atenienses - los cálculos aproximados respecto a la cifra precisa alcanzan a cerca de 5.000 fueron ahogados. Poco después de que las noticias de esta tragedia pública llegaran a Atenas, una controversia enorme estalló sobre la atribución de la culpa por la chapuza de rescate. La gente estaba furiosa por la pérdida de tantos marineros, y por el fracaso de recuperar los cuerpos de los muertos para su entierro, y los generales sospechaban que Trasíbulo y Teramenes, que ya habían regresado a Atenas, podrían haber sido responsables de azuzar a la asamblea contra ellos, y escribieron cartas a la gente que denunciaban a los dos trierarcas como responsables del rescate fallido. Trasíbulo y Teramenes fueron llamados ante la asamblea para defender su comportamiento; en su defensa, Teramenes presentó una carta de los generales en la cual culpaban sólo a la tormenta del percance. Los trierarcas fueron exonerados, y la cólera pública ahora se volvió contra los generales. Los ocho fueron depuestos de su cargo, y llamados a Atenas para someterse a juicio. Dos huyeron, pero seis regresaron para afrontar los cargos contra ellos. Una serie amarga de debates y procedimientos judiciales se sucedieron cuando la asamblea discutió sobre qué hacía con los generales. Al principio, parecía que podrían ser tratados con clemencia, pero al final demostraciones públicas de duelo de las familias de los difuntos y la agresiva acusación de un político llamado Calixeno decantó la opinión de la asamblea; los seis generales fueron juzgados como grupo y ejecutados. El público ateniense, cuando el pesar y la cólera provocada por el desastre se enfriaron, llegaron a lamentar su acción, y durante miles de años los historiadores y comentaristas han destacado el incidente como quizás el más grande error judicial que el gobierno de la ciudad alguna vez perpetró. 1 Adaptation d'aprés http://es.wikipedia.org/wiki/Teramenes Texte proposé par Luc Paul ROCHE Lycée de Cosne 58200 Cosne 1/2 Octobre 2007 Para reflexionar: - Juzgando a los generales como grupo, los jueces atenienses violaron así una ley de Atenas que prohibía los procesos colectivos; debemos apuntar que un proceso colectivo compromete la precisión y claridad de los debates judiciales - Culpaban a personas quienes no tenían ninguna parte de responsabilidad, ya que la tormenta sólo había impedido el rescate de los marineros ahogados y heridos: ¡ el colmo ¡ - Condenando a generales victoriosos, se privaron además de las personas más competentes y más capaces para el desarrollo futuro de la Guerra del Peloponesio [se escribe también “Peloponeso”] poniendo en peligro su nación; por ello la batalla de Arginusas fue la última victoria de los atenienses contra los espartanos; la Guerra del Peloponesio acababa unos años más tarde por la derrota del ejército ateniense y la supremacía espartana. - Tal acontecimiento demuestra la grandeza y al mismo tiempo la endeblez de la democracia. Los jueces escuchaban la “voz del pueblo” conformándose a la práctica democrática – voz del pueblo qui pedía la condena de los generales. Sin embargo la opinión pública aun en caso de duelo no sugiere siempre decisiones muy sensatas. - Hay que apuntar por lo demás que la condena a los generales fue facilitada por rivalidades políticas: ciertos generales pertenecían a facciones enemigas de las de los jueces. Los jueces se aprovecharon así del duelo de las familias de víctimas para eliminar a rivales políticos quienes podían por ejemplo ganar en vez de ellos varias elecciones. Detrás del juicio se escondía una especie de “chanchullo” político. Commentaires de Luc Paul Roche Texte proposé par Luc Paul ROCHE Lycée de Cosne 58200 Cosne 2/2 Octobre 2007