ABUSO EN LA UTILIZACIÓN DE ZOPICLONA (DATOLAN®, LIMOVAN®, SIATEN®) En Francia, recientemente se han publicado datos sobre pacientes que utilizaban frecuentemente dosis de zopiclona (Datolan®, Limovan®, Siaten®) más elevadas de las recomendadas. Todo apunta a una semejanza con zolpidem, otro hipnótico similar a benzodiazepinas. Se recomienda vigilar su utilización en pacientes ambulatorios. Entre los diferentes hipnóticos, las benzodiazepinas son ampliamente utilizadas. Actualmente existe un grupo de fármacos de efectos similares a las benzodiazepinas, pero de estructura diferentes. Son el zolpidem (Cedrol®, Dalparan®, Stilnox®) y zopiclona (Datolan®, Limovan®, Siaten®). Recientemente se han publicado los resultados de un estudio de las prescripciones de una mutua de seguro social francesa [Revue Medicale de l’ Assurance Maladie 2001; 32 (1): 11-17]. Se analizaron todas las prescripciones de zopiclona que se financiaron por la citada mutua durante el segundo semestre de 1999, en total 6.189 pacientes. Los datos demográficos indicaban que el 61% eran mujeres, el 54% tenían más de 60 años. El 6% de los pacientes sobrepasaban la dosis máxima según la recomendada en la ficha técnica autorizada: un comprimido de 7,5 mg diarios. El 43% de los pacientes de más de 65 años utilizaban dosis superior a la recomendada para su grupo de edad de más de 65 años, que es medio comprimido al día. Un paciente mantenía este tratamiento después de más de 3 meses. En 24 pacientes se llevó a cabo una entrevista por un médico, dado que consumían cantidades altas. Como promedio, estos pacientes utilizaban zopiclona desde 6 años antes, a razón de 1,8 comprimidos al día. En 23 de los 24 pacientes se presentaba una alteración psiquiátrica. En 14 de ellos se había intentado una retirada de zopiclona, y en otros 9 pacientes se presentaron cuadros de insomnio de rebote. En 2 pacientes había antecedentes de intentos de suicidio con zopiclona. Otros 2 pacientes, habían recorrido diferentes consultas médicas para obtener cantidades extras de zopiclona, hasta 400 comprimidos a lo largo de 2 meses. Se debe recordar que las benzodiazepinas y estos fármacos similares, zolpidem y zopiclona, presentan una relación beneficio-riesgo superior a la de otros medicamentos utilizados en el insomnio, tales como los barbitúricos, ya en desuso, y los carbamatos como el meprobamato. Sin embargo, las benzodiazepinas y estos fármacos similares también presentan riesgo de dependencia y de provocar síndrome de retirada, cuando se interrumpe su administración. Por último, se debe recordar que zolpidem se ha incluido en la Lista IV del Anexo 1 de la relación de Sustancias Psicotrópicas, por lo que sus especialidades farmacéuticas como Cedrol®, Dalparan® y Stilnox® tienen la misma categoría legal en el ámbito de la dispensación que las que contienen benzodiazepina, tal como se informaba en estas páginas (ver Panorama Actual Medicamento nº 244). Suponemos que con el tiempo suceda lo mismo con zopiclona, ya que los datos farmacológicos son equivalentes entre todos ellos. Recomendación Las alteraciones del sueño no deben siempre provocar la toma de un medicamento. Existen medidas higiénicas para conseguir cambios de conducta, que faciliten el sueño, como evitar bebidas estimulantes, realizar ejercicio suficiente, no alterar horarios, etc. Temporalmente pueden utilizarse remedios farmacológicos que induzcan el sueño. Si se requiere la consulta médica y se recibe una prescripción médica de uno de estos fármacos, como las benzodiazepinas o uno de estos similares, zolpidem (Cedrol®, Dalparan®, Stilnox®) o zopiclona (Datolan®, Limovan®, Siaten®), se debe seguir la posología prescrita. En el caso de notar la aparición de una pérdida de eficacia nunca debe recomendarse aumentar la dosis, sin control médico. En el momento de decidir la suspensión del tratamiento, debe procurarse hacerlo de forma paulatina para evitar las recaídas.