1.- Cristo ayer y Cristo hoy /: Cristo siempre será el Señor, Tú eres Dios y eres amor, me has llamado: aquí estoy:/ 1.- Gloria al Señor, resucitó, y de la muerte nos libró, desde el sepulcro resurgió, sin medida, su amor, nos da: ¡Amén, Aleluya! 2 - ¡Gloria al Señor! vamos a Él, a sus promesas siempre fiel, siempre dispuesto a perdonar: sin medida su amor nos da... ¡Amén! ¡Aleluya! 3 ¡Gloria al Señor! el Buen Pastor que en el redil su grey dejó y a su ovejuela fue a buscar: sin medida su amor nos da... ¡Amén! ¡Aleluya! 4 ¡Gloria a la Santa Trinidad, y gloria a Dios en la unidad, de nuestra fe la luz vital!: sin medida su amor nos da... ¡Amén! ¡Aleluya! 3.- Himno: Gloria (Nebreda) Gloria a Dios en el cielo y en la tierra paz a los hombres que ama el Señor. Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos te damos gracias. Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre, Todopoderoso. Señor, Hijo único Jesucristo. Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre. Tú, que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros; tú, que quitas el pecado del mundo atiende nuestras súplicas; tú, que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de nosotros. Porque sólo tú eres Santo, sólo tú, Señor, sólo tú, Altísimo Jesucristo. Con el Espíritu Santo, en la Gloria de Dios Padre. Amén, amén. 4.- Salmo 66 Oh Señor que te alaben los pueblos, que te alaben los pueblos Seór, Oh Señor que te alaben los pueblos. 5.- Gloria al Señor, Maestro y Dios, es el Camino, el Salvador, Él, nuestros pasos guiará. Sin medida, su amor, nos da: ¡Amén, Aleluya! 2.- Acto penitencial: kirie Frisina /:Señor, Señor, Señor, ten piedad:/ Señor Jesucristo, tú eres Camino que va hacia el Padre, Ten piedad de nosotros, ten piedad de nosotros. /:Señor, Señor, Señor, ten piedad:/ Cristo eres Verdad que ilumina a los pueblos para nuestra salvación, ten piedad de nosotros. /:Cristo, Cristo, Cristo, ten piedad:/ Señor, tu eres la Vida que renueva al mundo con tu resurrección, ten piedad de nosotros, ten piedad de nosotros. /:Señor, Señor, Señor, ten piedad:/ 5.- Alleluia gregoriano 6.- Nadie tiene mayor amor. /:Nadie tiene mayor amor, que quien, por sus amigos, da la vida:/ Si, como los he amado yo, ustedes, también deberán amarse. En verdad, los reconocerán que son mis discípulos, en este amor que se tendrán, los unos por los otros. 7.- Ofertorio junto nos acercamos Juntos nos acercamos a esta mesa para ofrecer, todo lo que tenemos que es para ti. Es nuestra vida, nuestra esperanza, nuestro dolor y amor, deja que nuestras manos lleguen a ti. El pan que es tierra, fruto y trabajo, tu cuerpo ya será; dánoslo hoy y nuestra vida renacerá. El vino convertido en tu sangre, dánoslo a beber y se hará fecundo nuestro dolor. Como el pan y el vino que se transforman en este altar, transforma nuestras vidas en nuestro hogar. 8.- Santo Gen Rosso 9.- Cordero Gen Rosso 10.- Cantos de comunión. Himno Apóstol Santiago /:Pues que siempre tan amado fuiste de nuestro Señor, Santiago Apóstol sagrado: Sé, hoy, nuestro protector:/ Si, como tu Padre, y Juan de oficio eres pescador; Cristo cambió tu labor por el misionero afán. Ya todo eso lo puedo comprender, pero la duda y la debilidad, buscan herir mi anhelo noble y santo: ¡amigo bueno, ayúdame a vender! La santidad es un don que se haya en todos, brota y florece, creyendo de verdad, Quisiera fuerzas para poder vivirla: ¡maestro bueno, yo la quiero alcanzar! 13.- “Remar mar adentro” “La cosecha es abundante”, nos confía el Señor Jesús. Hay semillas de fe y frutos sin obtener, pero hay pocos obreros de la mies. Por el honor de tu gran celo que tu corazón quemaba, hijo del trueno, llamado, fuiste por el Salvador. No podemos ocultar la luz que se enciende en el bautismo, y los dones de fuego, del Santo Espíritu, nos confirma en discípulos de paz. Al ser por Cristo elegido, por Él, fuiste consolado; viéndole trasfigurado en la cumbre del Tabor. Con el testimonio personal, una conversión de corazón; y un servicio culminado en la cruz: el Señor, su obra, hará. Cuando el primero a su lado, en el Reino quiere ser, Cristo te invita a beber su cáliz de salvación. De nuestra ciudad, Santiago, eres tú, su protector, has que fieles y pastores vivan siempre en el amor. 11.- Nunca nada Nunca nada podrá privarnos del amor de Dios, amor de Dios que se revela en Cristo. 12.- Maestro Bueno Maestro Bueno, yo quiero alcanzar, la vida eterna y la felicidad. Ya he cumplido todo cuanto pediste, pero mi alma se inquieta mucho más. Remar mar adentro, iremos, Señor, remar mar adentro, en tu nombre Remar mar adentro, iremos, Señor, remar mar adentro, en tu nombre Hoy es tiempo de salir, es tiempo de anunciar y remar mar adentro. Como iglesia reflejar el rostro de Jesús, con los gestos de su humildad. En la parte más honda y en las periferias debemos entrar: con ternura y caridad. Mi vida entera no deja de entender que yo he nacido para la eternidad, en Dios descansa mi débil corazón: maestro bueno, dime: ¿qué puedo hacer? Ha entrado en nuestro tiempo una fuerte desconfianza que destruye y separa lazos de hermandad y nos llena de miedos y dolor. Ven y sígueme, ven yo soy el Camino, yo soy la verdad, yo soy la Vida, he vencido a la muerte ya no puedes temer. Ven, levántate; ven, a ti te lo digo: busca en tu interior una gracia infinita, un tesoro divino que podrás repartir. Pero no dejaremos de actuar, a pesar de la fragilidad, con un gesto de ternura con todo aquel que está, en el barrio, el trabajo y el hogar. Vamos a encontrarnos con aquel que se ha ido y siente decepción; con el pobre y quien sufre en soledad: a todos, quiere el Señor. Somos un pueblo discípulo que, a la voz de su Señor, está escuchando atentamente, hoy, su Palabra para echar las redes en el mar. Ven, Señor y envía otra vez a tu iglesia que quiere salir, renovada en tu Palabra y en la Fracción del Pan, fuente y culmen de su peregrinar. Con María, nuestra Madre fiel y el Espíritu, Señor de Amor, vamos a hacer que todos los pueblos sean discípulos del Señor. 14.- canto de envio /:Contigo, Virgen del Carmen, juntos en el camino, tendemos la mano para servir a Chile:/ Yo soy el Camino, dice el Señor, yo soy la Verdad y la Vida, ya no tienen que temer: ¡he vencido a la muerte y el dolor! en su casa de alegre paz, mi Padre nos espera. Contigo Virgen del Carmen…. La Virgen Maria nos trae el sol Viene iluminando el camino Por el norte y por el sur La palabra nos lleva hacia Jesùs Nos invita a partir el pan como un pueblo de hermanos. Contigo Virgen del Carmen… Vamos encendiendo fuegos de amor Vamos encendiendo la llama Que nos quema el corazón Con Maria no hay noche ni temor Todo un pueblo se une al cantar, la patria esta despierta.