VAMOS A CAMBIAR LAS COSAS El 1 de Mayo es la fiesta de trabajadoras y trabajadores, de quienes con nuestro trabajo, nuestra solidaridad y nuestros impuestos hacemos que esta sociedad funcione. En esta fecha de forma especial reivindicamos nuestro papel y nuestro protagonismo, al tiempo que hacemos patente nuestra radical disconformidad con la forma en que las élites del dinero organizan todo el tinglado. Lo decimos en nuestro cartel de este 1 de Mayo: “esto puede cambiar”. ‘Esto’ es el injusto reparto de la riqueza, del poder y de las cargas entre clases sociales y entre pueblos. Un reparto cuya injusticia se acentúa como resultado de la globalización neoliberal. La globalización neoliberal se manifiesta con fuerza también entre nosotros. Aquí y ahora la globalización neoliberal se llama precarización de los contratos, bajos salarios, deterioro de las condiciones de trabajo, discriminación, sobre todo de mujeres y nuevas contrataciones, los despidos, deslocalización de empresas, desmantelamiento de la protección social, recorte del seguro de desempleo... En Bruselas, en Porto Alegre, en Barcelona, hemos dicho que otro mundo es posible, que las cosas se pueden organizar de forma muy distinta a como las organizan los mandamases del dinero. El 1 de Mayo, en la gran manifestación de Bilbao, vamos a seguir proclamando que esto puede cambiar, y vamos a afirmar y comprometer el papel del sindicato como instrumento y motor de ese cambio. Para quienes estamos en ELA el sindicato tiene un papel muy claro que jugar: defender a las trabajadoras y trabajadores, y organizar la resistencia y su lucha de contra quienes se empeñan en concentrar la riqueza y el poder. Y esto lo hacemos partiendo de cada empresa, cada centro de trabajo, cada sector, cada localidad. Al fatalismo y al pensamiento económico y social único oponemos la confianza en la clase trabajadora; al poder del dinero, oponemos la solidaridad organizada; a los abusos de los patronos, oponemos la respuesta colectiva. Por eso, en este 1 de Mayo subrayamos estas dos ideas: Por un lado, que esto puede cambiar, y por otro, que el sindicato es el principal instrumento que tenemos los trabajadores y trabajadoras para hacer que esto cambie. ¡Viva el 1º de Mayo! ¡Viva la solidaridad de la clase trabajadora!