Associació Cultural Granollers Divendres 20 de febrer / 19 i 22 hores Diumenge 22 de febrer / 19 hores Centre Cultural de Granollers 2015 Sessió en col·laboració amb Deux jours, une nuit (Dos días, una noche) de Jean-Pierre i Luc Dardenne Versió original en francès subtitulada Fitxa tècnica Guió i direcció: Jean-Pierre Dardenne, Luc Dardenne Fotografia: Alain Marcoen / País: Bèlgica / Any: 2014 Durada: 96 minuts Millor Actriu (Marion Cotillard) en els Premis del Cinema Europeu i del Cercle de Crítics de New York; nominada a Millor Actriu al propers Oscar. Fitxa artística Marion Cotillard, Fabrizio Rongione, Pili Groyne, Simon Caudry, Catherine Salée, Batiste Sornin, Alain Eloy, Myriem Akeddiou, Fabienne Sciascia, Olivier Gourmet Sinopsi. La Sandra, amb l’ajuda del seu marit, només disposa d’un cap de setmana per veure els seus companys de treball i convèncer-los que renunciïn a les seves primes perquè ella pugui mantenir el seu treball. ELS DIRECTORS. Jean-Pierre Dardenne va néixer a Engis (Bèlgica) l’abril de 1951. Luc Dardenne va néixer a Awirs (Bèlgica) el març de 1954. Han realitzat un gran nombre de documentals. L’any 1975, Jean-Pierre i Luc Dardenne van fundar la productora Dérives que ha produit més de 80 documentals, entre els que en destaquen els seus. El 1994, van crear la productora Les Films du Fleuve. Alguns títols de la seva carrera són La promesa, Rosetta, El hijo, El niño, El silencio de Lorna, El niño de la bicicleta… ENTREVISTA AMB ELS DIRECTORS ¿En qué circunstancias nació Dos días, una noche? Luc Dardenne: En el marco de la crisis económica y social que atraviesa Europa en este momento. Llevábamos unos años dándole vueltas a una película sobre una persona que estaba a punto de ser despedida con el acuerdo de la mayoría de sus compañeros de trabajo. Dos días, una noche nació por fin cuando creamos la pareja que forman Sandra y Manu, unidos en la adversidad. Jean-Pierre Dardenne: Lo que nos interesaba era mostrar a alguien excluido porque se le considera débil, poco productivo. La película es un homenaje a esta ‘trabajadora poco productiva’ que recupera la autoestima y el valor gracias a la lucha que emprende con su marido. Los compañeros de Sandra han votado una reducción de personal y el despido de ésta última a cambio de una prima. ¿Les habían llegado noticias sobre este tipo de circunstancias en el mundo del trabajo? Jean-Pierre: Sí, la verdad es que sí aunque no eran exactamente igual. En el mundo del trabajo, tanto en Bélgica como en otros sitios, existe una obsesión por la productividad que obliga a los trabajadores a competir entre ellos, a veces de forma violenta. Manu le insiste a Sandra para que contacte con sus compañeros durante un fin de semana. Quiere que se replanteen su voto y que Sandra sea readmitida. Su papel es fundamental. Manu es el sindicalista, el ‘coach’ de Sandra. Consigue convencerla de que existe una posibilidad y que sus compañeros pueden cambiar de opinión. Luc: Sandra no debía parecer una víctima que estigmatiza y denuncia a sus compañeros de trabajo que han votado en su contra. ¡No es la lucha de una pobre chica contra unos cerdos! No juzgan a ninguno de sus personajes. Luc: Los trabajadores de Dos días, una noche están obligados a competir todo el tiempo entre ellos. No se trata de distinguir entre buenos y malos, de ponerse de un lado o de otro. No nos interesa analizar el mundo de esa forma. Jean-Pierre: Una película no es un tribunal. Todos los compañeros de Sandra tienen sus razones para decirle sí o no. Pero una cosa está clara: la prima no es un lujo para ninguno de ellos. Les hace falta ese dinero para pagar el alquiler, las facturas... Sandra lo comprende porque ella también atraviesa las mismas dificultades financieras. Sandra tiene una familia unida formada por su marido y sus hijos. Es una circunstancia poco habitual en sus películas. Luc: Sandra saca fuerzas de su matrimonio. Manu ama profundamente a su mujer, lucha contra la depresión que sufre Sandra y le ayuda a no tener miedo. Al principio de la película, Manu está convencido que Sandra ha dejado de creer en ella misma. Jean-Pierre: De hecho, los hijos de Sandra y Manu también se implican y participan en lo que está ocurriendo. Ayudan a sus padres a buscar dónde viven sus compañeros de trabajo... Estos últimos no tienen la mejor intención de ponerse en huelga ni rechazar el acuerdo que les ha propuesto el jefe. Jean-Pierre: Elegimos deliberadamente una pequeña empresa en la que el número de empleados no es suficiente para tener representación sindical. Si la película hubiera contado la lucha contra un enemigo reconocible, hubiera sido totalmente diferente... Pero la falta de reacción colectiva, el hecho de estar en contra de ese voto por principio denota la falta de solidaridad que vivimos hoy en día. ¿Durante cuánto tiempo trabajaron en el guion para llegar a este resultado? Jean-Pierre: Llevábamos diez años dándole vueltas a este tema, así que hemos tenido tiempo para prepararnos. Luc: Lo escribimos bastante rápido. Empezamos a dar forma al guion en octubre de 2012 y lo terminamos en marzo de 2013. Queríamos que la acción se desarrollara en un espacio de tiempo muy corto, como indica el título de la película. Jean-Pierre: La urgencia que entraña ese lapsus de tiempo tenía que marcar el ritmo de la película. Crítica La protagonista de Dos días, una noche padece una depresión y no nos van a explicar las razones. Tiene un marido comprensivo, cariñoso, paciente y bueno, dos hijos; si ella se quedara sin trabajo, la supervivencia de esta familia estaría muy cruda. A la empastillada y sufriente víctima le comunican que la empresa ha montado una votación entre sus trabajadores para decidir si esa mujer debe recuperar su curro cuando mejore. Si sale perdedora, sus colegas recibirán una prima. El jefe sabe que el trabajo saldrá adelante sin ella, que lo hará el resto, que no es necesaria, que hay serias dudas de que alguien que ha atravesado el infierno recupere su antigua efectividad. A lo largo de un fin de semana esa persona aterrada e impotente se impone salir a la calle para hablar con los colegas que han firmado su destierro, tratar de convencerles para que cambien su negativa en una nueva votación y reconsideren lo de dejar en la puta calle a la que ha sido su compañera durante tiempo. Este es el arranque de una película que reproduce tenebrosamente el aquí y ahora en una Europa masacrada por la crisis que propiciaron los grandes e impunes villanos. Habla de algo fundamental en medio de la desdicha personal llamado puesto de trabajo, de la tragedia que supone en un mercado sin salida que te despojen injustamente de él, de la solidaridad y de su ausencia entre trabajadores, de las sucias salvaciones cotidianas, de la asfixia económica que puede hacer aflorar la mezquindad, del sálvese quien pueda, del mantenimiento de la dignidad en circunstancias duras que exigen un precio alto. Los hermanos Dardenne cuentan esta historia con su reconocible y austero estilo (no soy incondicional de él, pero saben lo que quieren narrar y cómo hacerlo), con realismo creíble, retratando la vida con tono y vocación documental, sin enfatizar diálogos ni situaciones, negándose a subrayar o a potenciar los sentimientos con la música, huyendo de las descripciones maniqueas, sabiendo que todos poseen sus razones ante un dilema demasiado cruel. Y, por supuesto, lo que describe puede ocurrir en cualquier parte. Y nadie es inocente al pactar, resignarse o sacar partido de los abusos y la violencia moral que perpetra el poder. El País / Carlos Boyero / 24.10.2014 PROPERES SESSIONS Dimarts Singulars. Dimarts 24 de febrer / 20 hores: La voz del viento (2013), de Carlos Pons 27 de febrer i 1 de març: Boyhood (2014), de Richard Linklater 6 i 8 de març: The Salt of the Earth (La sal de la tierra, 2014), de Wim Wenders i Juliano Ribeiro Salgado Associació Cultural Granollers Almogàvers, 5 08401 Granollers T93 861 55 98 F93 844 30 28 secretaria@acgranollers.cat www.acgranollers.cat @ACGranollers AC Granollers En conveni amb: