Sentencias ¿Puede requerirse información durante la suspensión del plazo para concluir una visita domiciliaria o revisión de gabinete? C.P.C. Héctor Manuel Miramontes Soto, Socio Socio fundador y director de la firma Actividades: Experiencia en asuntos tributarios, medios de defensa fiscal y consultoría corporativa Tiene 26 años en la firma INTRODUCCIÓN R ecientemente, la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) resolvió la contradicción de tesis 336/2011, entre las sustentadas por el Primer y el Segundo Tribunales Colegiados, ambos en Materia Administrativa del Cuarto Circuito, en la cual fija un criterio jurisprudencial confirmando que la suspensión del plazo para concluir una visita domiciliaria o revisión de gabinete contenido en el artículo 46-A, segundo párrafo, fracción IV del Código Fiscal de la Federación (CFF), no constituye un impedimento legal para que la autoridad fiscal continúe requiriendo información al contribuyente. El dispositivo en cita, en su parte medular, es del tenor siguiente: 46-A. Las autoridades fiscales deberán concluir la visita que se desarrolle en el domicilio fiscal de los contri- 38 buyentes o la revisión de la contabilidad de los mismos que se efectúe en las oficinas de las propias autoridades, dentro de un plazo máximo de doce meses contado a partir de que se notifique a los contribuyentes el inicio de las facultades de comprobación, salvo tratándose de: … Los plazos para concluir las visitas domiciliarias o las revisiones de gabinete a que se refiere el primer párrafo de este artículo, se suspenderán en los casos de: … IV. Cuando el contribuyente no atienda el requerimiento de datos, informes o documentos solicitados por las autoridades fiscales para verificar el cumplimiento de sus obligaciones fiscales, durante el periodo que transcurra entre el día del vencimiento del plazo otorgado en el requerimiento y hasta el día en que conteste o atienda el marzo 2012 Sentencias requerimiento, sin que la suspensión pueda exceder de seis meses. En el caso de dos o más solicitudes de información, se sumarán los distintos periodos de suspensión y en ningún caso el periodo de suspensión podrá exceder de un año. … En relación con tal dispositivo, el punto divergente denunciado en la contradicción de tesis referida, se hizo consistir, conforme a la ejecutoria respectiva: …en determinar si una vez suspendido el plazo para concluir la visita domiciliaria a que se refiere el artículo 46-A, segundo párrafo, fracción IV, del Código Fiscal de la Federación, la autoridad fiscal puede realizar requerimientos de datos, informes o documentos al contribuyente visitado, o si debe esperar a que fenezca el plazo legal de la suspensión decretada, para poder reanudar el procedimiento de fiscalización, esto es, si la suspensión mencionada constituye un impedimento legal para que la autoridad pueda continuar realizando requerimientos. Las consideraciones formuladas por los Tribunales Colegiados en los criterios en oposición, fueron, de manera resumida, las siguientes: 1. El Primer Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Cuarto Circuito, con residencia en Monterrey, Nuevo León, al resolver el recurso de revisión fiscal 41/2010, declaró infundado el agravio hecho valer por la recurrente, al considerar que la autoridad fiscal debió esperar a que el contribuyente contestara o atendiera el requerimiento de información y documentación o bien, que transcurriera el plazo de seis meses de suspensión del plazo para concluir la visita domiciliaria, y así poder reanudar el procedimiento de fiscalización. 2. El Segundo Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del mismo Circuito en cita, en un caso similar, al resolver el recurso de revisión fiscal 150/2010-II, declaró fundado el único agravio hecho valer, en el cual, la autoridad recurrente sostuvo que sí puede requerir al contribuyente información cuando el plazo para concluir la visita domiciliaria se encuentre suspendido, pues el plazo de 12 meses para que concluya la visita domiciliaria fue establecido con el propósito de agilizar el procedimiento de fiscalización e imponer una consecuencia legal al no ejercicio de la facultad de determinación de las autoridades fiscales, y no como una limitación al ejercicio de sus facultades de comprobación. Al resolver la contradicción que se analiza, el razonamiento de la SCJN consistió esencialmente en que: …el citado artículo 46-A, segundo párrafo, fracción IV del Código Fiscal de la Federación, no se refiere a la “sus- marzo 2012 pensión de las facultades de comprobación”, sino a la suspensión del plazo para concluir la visita domiciliaria cuando el contribuyente no atienda el requerimiento de datos, informes o documentos solicitados por las autoridades fiscales, es decir, la suspensión aludida se genera por una situación no imputable a la autoridad; de ahí que el citado precepto no prohíbe a la autoridad fiscalizadora a efectuar un nuevo requerimiento por el hecho de estar suspendido el plazo para la conclusión de la visita domiciliaria, ya que faculta a la autoridad para realizar dos o más solicitudes de información, en cuyo caso la suspensión del plazo para concluir la visita domiciliaria no podrá exceder de un año. En mérito a lo anterior, ese criterio tendrá el carácter de jurisprudencia conforme a lo previsto por el último párrafo del artículo 192 de la Ley de Amparo y, por ende, será obligatorio para los Tribunales Colegiados de Circuito, los Juzgados de Distrito y Tribunales administrativos. La tesis de referencia es del tenor siguiente: VISITA DOMICILIARIA O REVISIÓN DE GABINETE. LA SUSPENSIÓN DEL PLAZO PARA CONCLUIRLA A QUE SE REFIERE EL ARTÍCULO 46-A, SEGUNDO PÁRRAFO, FRACCIÓN IV, DEL CÓDIGO FISCAL DE LA FEDERACIÓN, NO CONSTITUYE UN IMPEDIMENTO LEGAL PARA QUE LA AUTORIDAD FISCAL CONTINÚE REQUIRIENDO INFORMACIÓN AL CONTRIBUYENTE. Del precepto citado se colige que las autoridades fiscales pueden continuar requiriendo datos, informes o documentos al contribuyente durante el desarrollo de una visita domiciliaria o revisión de gabinete para verificar el cumplimiento de sus obligaciones fiscales, aun cuando el plazo para concluirla se encuentre suspendido por no haberse atendido el requerimiento formulado, ya que dicho precepto no se refiere a la suspensión de las facultades de comprobación, sino a la del plazo para concluir la visita o revisión cuando el contribuyente no atienda el requerimiento referido, es decir, se genera por una situación no imputable a la autoridad, de ahí que el numeral indicado no le prohíbe efectuar un diverso requerimiento por el hecho de estar suspendido el plazo para la conclusión de la visita o revisión, pues la faculta para realizar dos o más solicitudes de información, en cuyo caso la suspensión del plazo para concluirla no podrá exceder de un año. Por tanto, para realizar un nuevo requerimiento al contribuyente, la autoridad no está obligada a esperar a que transcurran los 6 meses de suspensión decretada con motivo del incumplimiento al primer requerimiento, o bien, a que fenezca el plazo de un año en el caso de dos o más solicitudes de información, ya que la autoridad puede seguir realizando requerimientos, a fin de impulsar la continuación de la visita o revisión. 39 Sentencias Contradicción de tesis 336/2011. Entre las sustentadas por el Primer y el Segundo Tribunales Colegiados, ambos en Materia Administrativa del Cuarto Circuito. 5 de octubre de 2011. Mayoría de cuatro votos. Disidente: Margarita Beatriz Luna Ramos. Ponente: Luis María Aguilar Morales. Secretario: Aurelio Damián Magaña. Tesis de jurisprudencia 10/2011 (10a.). Aprobada por la Segunda Sala de este Alto Tribunal, en sesión privada del diecinueve de octubre de dos mil once. No. de Registro 2000037. Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Libro III. Décima Época. Segunda Sala. Materia administrativa. Jurisprudencia. Tesis 2a./J. 10/2011 (10a.). Diciembre, 2011. Pág. 3264. FACULTADES DE FISCALIZACIÓN DE LAS AUTORIDADES en la materia Efectivamente, conforme a lo dispuesto por el artículo 42 del CFF, las autoridades, a fin de comprobar que los contribuyentes, los responsables solidarios o los terceros con ellos relacionados, han cumplido con las disposiciones fiscales y, en su caso, para determinar las contribuciones omitidas o los créditos relacionados, así como para comprobar la comisión de delitos y para proporcionar información a otras autoridades fiscales, tienen, entre otras, las siguientes facultades: II. Requerir a los contribuyentes, responsables solidarios o terceros con ellos relacionados, para que exhiban en su domicilio, establecimientos o en las oficinas de las propias autoridades, a efecto de llevar a cabo su revisión, la contabilidad, así como que proporcionen los datos, otros documentos o informes que se les requieran. III. Practicar visitas a los contribuyentes, los responsables solidarios o terceros relacionados con ellos y revisar su contabilidad, bienes y mercancías. Es decir, para los fines que se indican, las autoridades fiscales podrán requerir a los contribuyentes y revisar tanto la contabilidad como otros documentos o informes que se les requieran, ya sea en una revisión de gabinete o durante la práctica de una visita domiciliaria. En ese sentido, es fácil advertir que las facultades de comprobación de las autoridades fiscales son atribuciones propias derivadas de sus funciones de autoridad encargada de vigilar el debido cumplimiento de las normas tributarias a cargo de los contribuyentes, las cuales sólo se encuentran limitadas o restringidas en los casos en que la ley prevé su extinción por caducidad, conforme a lo dispuesto en el artículo 67 del CFF, el cual dispone, inclusive, que el plazo para la extinción de las facultades fiscales se suspende cuando se ejerzan las facultades de comprobación a que se refieren las fracciones II, III y IV 40 del artículo 42 del Código citado, es decir, cuando se realice una revisión de gabinete, una visita domiciliaria o la revisión de los dictámenes que formulen los contadores públicos registrados. El contenido del artículo 67 invocado, en la parte que interesa, es del tenor siguiente: 67. Las facultades de las autoridades fiscales para determinar las contribuciones o aprovechamientos omitidos y sus accesorios, así como para imponer sanciones por infracciones a las disposiciones fiscales, se extinguen en el plazo de cinco años contados a partir del día siguiente a aquél en que: I. Se presentó la declaración del ejercicio, cuando se tenga obligación de hacerlo… … El plazo señalado en este artículo no está sujeto a interrupción y sólo se suspenderá cuando se ejerzan las facultades de comprobación de las autoridades fiscales a que se refieren las fracciones II, III y IV del artículo 42 de este Código; cuando se interponga algún recurso administrativo o juicio; o cuando las autoridades fiscales no puedan iniciar el ejercicio de sus facultades de comprobación en virtud de que el contribuyente hubiera desocupado su domicilio fiscal sin haber presentado el aviso de cambio correspondiente o cuando hubiere señalado de manera incorrecta su domicilio fiscal. En estos dos últimos casos, se reiniciará el cómputo del plazo de caducidad a partir de la fecha en la que se localice al contribuyente. … Al mismo tiempo se tiene que, derivado del propio proceso legislativo referido a la creación y a las reformas del artículo 46-A en comento, el establecimiento de un plazo máximo para que las autoridades concluyan las visitas domiciliarias o la revisión de gabinete –12 meses–, tiene como finalidad salvaguardar el principio de seguridad jurídica en favor de los contribuyentes, con la consecuencia de que, de no concluirse en el plazo referido, quedará sin efectos la orden de revisión y todas las actuaciones que de ella se derivaron. No obstante, el legislador también estableció, bajo un principio de equidad y de congruencia, que la referida consecuencia legal no surgirá a la vida jurídica cuando la autoridad se encuentre imposibilitada para verificar el cumplimiento de las obligaciones fiscales del contribuyente por causas imputables a éste y ajenas a ella, determinando que, en esa hipótesis, el plazo para concluir la visita domiciliaria o la revisión de gabinete debe ser suspendido, entre otros casos, cuando el contribuyente no atienda un requerimiento de datos, por el periodo que transcurra entre el día del vencimiento del plazo otorgado marzo 2012 Sentencias en el requerimiento y hasta el día en que se atienda, sin que la suspensión pueda exceder de seis meses. Se dispone en el mismo dispositivo, la posibilidad jurídica de que la autoridad revisora formule dos o más requerimientos de información durante el ejercicio de tales facultades de comprobación, lo cual hace más evidente que la suspensión mencionada opera sobre el plazo para la conclusión del acto de fiscalización de que se trate, y no de las facultades de comprobación. Más aún, bajo una interpretación armónica de los dispositivos invocados, se infiere que si el plazo para la extinción de las facultades de revisión de las autoridades fiscales se suspende precisamente durante el tiempo en el cual realizan los actos de fiscalización atinentes a una revisión de gabinete o a una visita domiciliaria –es decir, si no opera la caducidad de facultades durante dicho tiempo–, no sería lógico admitir que durante la suspensión del plazo para la conclusión de esos actos de autoridad, dentro del procedimiento fiscalizador, las facultades de comprobación también se suspendan, limiten o extingan en modo alguno. marzo 2012 CONCLUSIONES Con apoyo en las reflexiones anteriores, es claro que las autoridades fiscales sí están facultadas para formular los requerimientos de información que estimen necesarios dadas las circunstancias, para impulsar una revisión de gabinete o visita domiciliaria, durante el tiempo en que –conforme al dispositivo legal en estudio– el plazo para la conclusión de la revisión de que se trate se encuentre suspendido, ante la falta de atención de un requerimiento de autoridad por parte del contribuyente revisado. Se llega a esa conclusión, no sólo bajo una interpretación armónica de las normas sujetas a estudio, sino también bajo un estricto criterio de congruencia y equidad pues, si el establecimiento del plazo máximo que tiene la autoridad para concluir ese tipo de actos de fiscalización opera en beneficio del contribuyente y –al mismo tiempo– como una limitación a las facultades de aquélla, la suspensión del mismo, por cuestiones imputables al contribuyente y no a la autoridad fiscal revisora, debe operar en perjuicio de aquél y no de ésta. De ahí lo acertado de la tesis jurisprudencial comentada. 41