LA REPRESENTACIÓN SITUACIONISTA EN LA PERCEPCIÓN DE LO URBANO Manuel Bello Resumen La ciudad, monstruo incomprensible para muchos, y fascinante para otros, es un organismo vivo en constate cambio. Los intelectuales de la internacional situacionista trataron de entenderla por esta vía, ignorada por muchos pensadores de su tiempo. La ciudad ya no es la misma, si es que acaso alguna vez lo fue. O por lo menos ya no la miramos como lo solíamos hacer. La escritura multimedia junto a la caída, una y otra vez, de paradigmas que encasillan al desarrollo urbano y al pensar la ciudad en un catalogo de formas y soluciones, han redefinido un urbanismo humano y fustigador, realizado a partir de los recorridos en la ciudad, de su aceptación como un laberinto, como una esfera infinita cuyo centro esta en todas partes y la circunferencia en ninguna, como definiría Pascal una vez a la naturaleza (el espacio). Entre la construcción de situaciones y la vivencia sin prejuicios hacia ellas -y entre ellas mismas -, podemos armar una ciudad que respete al individuo, o que por lo menos le de las herramientas para lograr la libertad aceptándose de una vez y por todas como prisionero voluntario de las metrópolis. Palabras claves: laberinto dinámico, derivas, recorridos, mapas. THE REPRESENTACION SITUACIONISTA IN THE PERCEPCIÓN OF THE URBAN THING Summary To many people the city is an incomprehensible monster, and for other persons is a fascinating one: the city is a living organism in a constant change. The intellectuals of the International Situationist in the middle of the 2011 century, tried to understand the city tacking it as a continuous drafting, a path frequently ignored by must of the contemporary thinkers. The city is not the same anymore, if it really was at once. Or at least, we don't look at her in the same way. Once and again, the fall of the prototypes that classified the urban development and the urban thought into a catalogue of forms and solutions, merged with the multimedia writing, redefined the urbanism as a human and a criticizing discipline, build through city travels and from an acceptance of the urban body as a labyrinth, or like Pascal's definition of nature: as an endless sphere which center is everywhere and with a circumference in nowhere. With the recognition of the situationist construction as a way of life, without any prejudice, we will be able to build a city that respect the citizen individuality, giving to the inhabitant a path to a freedom in a collective ambience or, at least, the implementa to accepts itself as a voluntary prisoner of the metropolis. Key words: Dynamic Labyrinth, Derives, Journeys, Map. Introducción Desde Odiseo hasta las aventuras trasatlánticas de la fibra óptica, viajar, más que una inevitable naturaleza humana se ha convertido, con el pasar de los siglos, en la racional obligatoriedad de un pacto constante con nuestros instintos salvajes, sedientos de saciedades; un compromiso con la recuperación de nuestra individualidad, con la redención a todas nuestras rutinas. El apasionante y necesario conocimiento de exóticos parajes, ha hecho del turismo una potencia que se impone en la actualidad, valiéndose de nuestros ya globalizados comportamientos nomádicos. Ciudades enteras han encontrado la necesidad de definirse a si mismas como organismos vivos, fabricados por redes que, desde sus entrañas, pretenden construir nuevas cartografías alejadas de todo sistema cartesiano. Ciudades armadas no solo de recorridos y de movimientos, sino de relaciones que se memorizan y se detallan en unas especies de "archivos temporales" geográficos: mapas en constante vibración a los que apelan los habitantes a la hora de recorrer estas grandes urbes. Mapas mentales algunos, virtuales otros, inexactos todos, dando como resultado la redefinición de la ciudad como un ente que se ha ido alimentando vorazmente de estos deslices cartográficos. Esta lectura y, por inmediata consecuencia, construcción de la ciudad como una lúdica sucesión de eventos, ha generado entre ciertos ámbitos del pensar urbano contemporáneo la retoma, entre otras cosas, de la importante ideología de un grupo de artistas, principalmente, que formaron a mediados del siglo 20 lo que se conoció como la INTERNATIONAL SITUASIONIST (IT), un movimiento artístico-político-urbano que sembró frutos en donde, hoy por hoy, disciplinas como la arquitectura han visto grandes posibilidades, debido en parte a adelantos tecnológicos que han permitido llevar a cabo proyectos que se creían un poco utópicos para aquel momento. Es ahora, más que nunca, en donde nuestro Global Position System (GPS) exige nuevas voluntades arquitectónicas y urbanísticas, ahora cuando las intenciones parecieran ser tan susceptibles a deformaciones y distracciones. La pertinencia de los fundamentos de la internacional situacionistas en el urbanismo contemporáneo. En los años 50, París figuraba mundialmente como espacio para la discusión sobre el nuevo siglo. La revolución surgía como el paradigma moderno: El progreso, el nuevo hombre luego de la guerra. Y en medio de este contexto, se germinó todo el movimiento de la Internacional Situacionista (IS), proveniente por un lado (Parisino) del Grupo Letrista (1946) y de La Internacional Letrista (1952-1957), y por otro lado (resto de Europa) del polémico y,violento grupo COBRA (siglas para Copenhague, Bruselas y Amsterdam) los cuales eran los editores de la revista del mismo nombre que subsistió entre1948 y 1951, y por otra parte de el Movimiento Internacional por una Bauhaus Imaginista, (el IMIB en sus siglas inglesas), los cuales publicaron sus pensamientos en la revista Erística entre 1954 y 1957. Estos dos polos del árbol genealógico de los Situacionistas, tanto el francés como el del resto de Europa, encontraron en el Primer Congreso de Artistas Libres celebrado en Alba, Italia, en Septiembre de 1956, el punto de partida para esta "revolución" que de alguna forma duraría 15 años, de 1957 a 1972. Liderizada por una parte por el artista y pensador francés Guy Debord y por otra por el artista Holandés Constant Nieuwenhuis, la Internacional Situacionista basó su violenta revuelta intelectual en conceptos axiomáticos que a su vez redefinirían el urbanismo. Con ellos aparecieron nociones como deriva, psicogeografia, detournement (vagabundeo), Situación Construida y Urbanismo Unitario' entre otras categorías, acercándonos a la comprensión y disfrute de lo que significa la libertad en un contexto urbano y el establecimiento de una nueva individualidad dentro de la ciudad. Dichas ideas, cargadas de espacialidades, que recuerdan hasta cierto punto la concepción de espacios medievales, hacen que, y con la llegada de lo que Marshall Maculan llamó "La aldea global", nos hagan repensar tanto el espacio arquitectónico-urbano como la labor del que a ello toma como objeto de estudio. Poco a poco, y gracias a la difusión de los pensamientos sobre la revista del mismo nombre, La internacional Situacionista comenzó a ganar adeptos a lo largo y ancho de toda Europa, llevando como bandera la experimentación de recorridos en varias ciudades del continente. Fueron famosos sus recorridos basados en el Discours sur le passion de 1'amour y The Naked City (Ilustración Fig. 1), planos de París realizados por Debord, los cuales más que dispositivos encargados de mostrar la ciudad en su totalidad, nos revelaban islas, fragmentos recortados de mapas co erciales, unidos con grandes flechas rojas sobre un fondo blanco. El plano ya no era el de una ciudad siempre visualmente presente, sino que se comportaba más como una guía psicoge'Oofica de un conjunto de zonas de la ciudad. Debord, en sus largas derivas por París, llegó a creer que "las ciudades presentan un relieve psicogeográfico, con corrientes constantes, puntos fijos y vértices que nos disuaden de entrar o salir de según que zonas" 2. Igualmente, la Internacional Situacionista tocó otros temas interesantes que aportaron mucho al pensamiento de lo que es actualmente la arquitectura y la ciudad. "El juego como actividad" pensado por Johan Huizinga en su Homo Ludens: A Study of the play Element in Cultur, fue relacionado directamente con la idea de desorientación y libre tránsito presente en la paradigmática obra de Constant: Nueva Babilonia, Una ciudad nómada, propuesta artística en la que se plantea una ciudad definida básicamente por el pensamiento Situacionista, en donde el jugador que se pierde en su juego (o a quien pierde su juego) tiene un equivalente topológico en quien se desorienta en un espacio laberíntico. La ciudad nómada, la Nueva Babilonia, es representada como un campo fértil y uniforme para la confusión y construcción de situaciones, sin el protagonismo de ninguno de sus elementos. Para George Bataille, la estructura espacial del laberinto es la de un cuerpo sin jerarquía ni proporción, sin cabeza: un cuerpo acéfalo y monstruoso, todo él instinto, un serpenteo sin fin, sin razón. Pero esta propuesta urbana necesitaba no solo la redefinición de sus estructuras y de su representación, sino también la reforma de sus habitantes. Para los situacionistas, el ciudadano tenía que renunciar a muchas cosas. La Nueva Babilonia necesitaba, prácticamente, de un nuevo hombre, de un nómada que experimentara con la sensación de la actividad productivo-consumista, lo que le permitiría entrar en el terreno de lo lúdico, de lo meramente recreativo, pasando así a un espacio-deriva dominado por el trayecto indeterminado y por el azar, o por el juego ciego entre itinerarios dispares; un espacio determinado única y exclusivamente por la lógica de la movilidad: difuso, constantemente modificable. Un espacio de contradicciones productivas. En la deriva Situacionista se celebra una condición urbana en la que los espacios públicos dejan de ser ágoras -escenarios privilegiados del poder- para convertirse en una fluctuación aleatoria no-sedentaria, absolutamente nómada; contraponer esa antigua idea del laberinto cuyo centro era accesible a través de una única vía, y darle paso a una nueva concepción del laberinto, uno con multiplicidades de centros en constante movimiento, con innumerables salidas, un laberinto dinámico como lo llamaría Constant, un proceso ininterrumpido de reacción y destrucción. 'La creación y recreación continua de los' modos de comportamiento requieren de la construcción la reconstrucción infinita de sus decorados' dice Constant. Pero ahora bien, me pregunto si ¿no se requerirá acaso de la destrucción o más bien de la deconstrucción de dichos espacios para una mayor aprehensión de ellos?). El laberinto dinámico definiría entonces, la multiplicidad de focos o, mejor aún, un catálogo de focos, de metas inmediatas a alcanzar, de salidas (o de inicios), sin límites o barreras claras. Cada cual alcanzaría, según sus gustos y necesidades, los objetivos que quisieran. La absoluta libertad de ir y venir, ya sea en soledad o en comunión. De las nuevas cartografías y los mapas de situaciones. Es así como la ciudad Situacionista, cobra una vigencia tal que ha obligado al habitante, junto a los adelantos cibernéticos y comunicativos, a repensar los parámetros bajo los cuales es orientado (o desorientado) dentro de la ciudad en una paradójica visión que se debate entre intimidades y cortesías, entre lo que miramos y los que nos mira, como diría Didi-Hauberman. El mantenerse en un estado absolutamente consciente sobre lo vivido se convierte entonces en una labor titánica, esquizoide y, en muchos casos, inconveniente para el disfrute de algo que se nutre día a día de equivocaciones, de lo inevitable. Se hace insoportable pensar la ciudad en función de plantas y alzados, mecanismos que, lejos de ofrecer nuevas soluciones, se han hundido en cuestionables coherencias y en fenómenos dispersos que, en muchos casos, nublan y disfrazan el pensar sobre la problemática urbana. Los nuevos mapas efímeros, dinámicos e interactivos, bajo el inmenso manto de una Internet que ha sustituido al acostumbrado ¿Quien es? por el vertiginoso ¿donde estas?, no han dejado de ser, ni por un solo instante, los agentes reactivos encargados de regular las necesidades y el libre tránsito de los ciudadanos. Para los situacionistas el mapa no reproduce la inconsciencia, sino que la construye. Y por esto el sinnúmero de ejercicios y experimentos realizados por la IS en el París de medio siglo atrás, reflejan una ciudad no solo fragmentada, sino construida sobre las bases que dejan las relaciones entre estos fragmentos. Un laberinto de infinitas posibilidades y combinaciones, un lugar complejo que por definición se resiste a ser dibujado, a ser definido en la geometría de un plano topográfico, ya que solo existe como trayecto, como travesía. En este sentido, tentativas un poco más recientes como las del arquitecto francés Bernard Tschumi y sus Manhattan Transcripts (terminados en 1981), evidencian la evolución del pensamiento Situacionista, cuando la representación del mapa trasciende las coordenadas cartesianas y busca la reconstrucción de la ciudad a partir de la narrativa, de la definición tripartita evento-espacio-movimiento3. Esto guarda estrecha relación, claro está, con la lectura de fotogramas, es decir, la temporalidad de una secuencia de eventos y cuadros sugiere, en esta ocasión, una analogía directa con el cine. En ambos procedimientos, tanto el cine como la secuencia de eventos urbanos (la ciudad), poseen una técnica cuadro a cuadro (frame by frame) aislando trozos congelados de acción. En este sentido, en uno y otro el espacio no esta sólo compuesto, sino que es desarrollado toma a toma, lo que hace que el final de cada fotograma tenga una dependencia vital de su contexto. Es así como, en estos Transcripts, Tschumi arma un Manhattan (o varios Manhattan) a partir de un simple pretexto: la historia de una persona que persigue a un delincuente por toda la ciudad. Tschumi hábilmente asocia directamente cada parte de la historia con una secuencia de dibujos, planos y fotografías que enriquecen la narrativa y que al mismo tiempo van edificando los espacios de la ciudad sin ninguna jerarquía aparente. Confronta así al ciudadano con el objeto, logrando que cada espacio sea entendido en su carácter propio y en su relación con su contexto, tanto narrativo como urbano. La ciudad termina siendo el verdadero protagonista de la historia. Entonces el derivar, la pérdida voluntaria en las ciudades, construye una urbe de relaciones potenciada por el extrañamiento y la ausencia, mecanismos que desarrollan constantemente una dialéctica de la desorientación en nuestra relación con el entorno. Estas ciudades que armamos día tras día nos invitan, como en un rompecabezas, a completarlas, a descifrarlas, a leerlas. Pero esta lectura pareciera ser tan transitoria que cuando apenas logramos realizarla se desvanece o cambia a otra totalmente diferente. El incrementar acciones que sirvan de testigos para este dinámico y continuo diálogo espacio-temporal que se establece en la ciudad, resultaría en una operación de estrategia Situacionista: los espacios urbanos son modificados desde la dinámica del habitante y no sólo, como en muchos casos el urbanismo moderno plantea, desde la dinámica de lo edificado. La ciudad posee en si misma dispositivos (¿auto-defensivos?) que nos hacen desconocerla y, como consecuencia, el diseñar y entender la ciudad desde su olvido o, mejor dicho, desde lo que de ella recordamos, es sentirnos ajenos y, paradójicamente, cercanos a ella misma. En la actualidad, una relectura sobre el pensamiento de los situacionista, cobra severa pertinencia en la elaboración de mapas mentales de ciudades y , más aún, en una disciplina tan aparentemente lejana como lo es el diseño de paginas Web debido, claro está, a las específicas demandas de derivas que el navegar por La Internet exige. Los mapas diagramáticos de interrelaciones entre espacios de una misma Webpage semejan enormemente a esos fragmentos del mapa comercial parisino recortados por Debord. En este sentido, los inmensos adelantos tecnológicos en la comunicación, apoyados en experimentos como el de las Metaciudades del grupo Holandes MVRDV, tienen una curiosa e interesante referencia análoga casi obligada en los mapas Situacionistas. Es decir, existe en ellos operaciones y sistemas de relaciones que exigen una reflexión en las cartografías, no solo de nuestras complejas ciudades, sino de fenómenos como el Cyber Espacio y su directa relación con lo urbano. Mapas análogos para ciudades digitales, Mapas digitales para ciudades análogas. De la deriva y su potencial en el diálogo con lo urbano. El caso de Caracas. Con la IS, surgió la propuesta de un urbanismo que podríamos catalogar de urbanismo crítico, para aquel momento en notable contraposición del planteado por el sistema capitalista: ciudades, según ellos, plagadas de urbanizaciones sin envidia alguna a zona de refugios antiaéreos. " La humanización de los proyectos de viviendas es una mistificación tan ridícula como la humanización de la guerra nuclear, y lo es por las mismas razones. Los refugios dan a la amenaza de guerra (y no a la guerra en si) una dimensión humanan en el sentido en el cual es definido el hombre en el capitalismo moderno: su deber como consumidor.4 Desde su fundación, Caracas ha cambiado a una velocidad que ha superado toda reflexión sobre lo que es la ciudad, incluyendo frustraciones y desvaríos de modelos urbanos importados. Nuestra capital se ha ido construyendo sobre ansias de progresos teñidas con incomprensiones por abundancias desmedidas. Al parecer, los organismos encargados de la gerencia urbana no han tenido la necesidad, ni el tiempo, ni la determinación para tratar de descubrir, incentivar y potenciar la vocación de nuestra ciudad. Pensar Caracas ha quedado como un acto de intelligentsia vacío y sin ninguna aparente finalidad más que la masturbación por parte de megalómanos aislados, arquitectos del desastre y políticos esnobistas. Construir Caracas debe partir primero de su entendimiento, es decir, es necesaria la construcción de un entendimiento de Caracas. A pesar de todo esto, Caracas coexiste casi completamente con su incomprensión, pareciera funcionar de manera autónoma como un cuerpo hecho de pedazos quirúrgicamente mal ensamblados, pero, y contra toda lógica posible, guarda el sabor de un plato gustosamente condimentado. Quizá la imposibilidad que tenemos, al salir de nuestras casas, de conocer Caracas por completo sea fuente de su belleza como ciudad. Lo cierto es que esta ciudad nos obliga a leerla en un idioma mezclado, sazonado, complejo, único. Un idioma enraizado en tramas y redes que exigen una ardua traducción simultánea. Una sincronía perfectamente articulada. Así pareciera que, desde entonces, nuestra megalópolis se ha venido defendiendo contra sus creadores. Ella misma se ha construido en el tiempo como laberinto dinámico, lúdico, en donde pareciera que estuviese comenzando eternamente, del punto A al punto B, una y otra vez y a la misma vez. La creación se rebela contra sus habitantes y, en medio de la confusión, transforma a la frenética y habitual sensación de desorientación: esta ya no le pertenece al vagabundo urbano común, sino que permea en cada habitante, arrastrando consigo patologías ajenas y propias. Querer luchar contra esta lectura que la ciudad nos ofrece pareciera ser absurdo, estéril y poco pertinente. Ir a la deriva es convertirnos en navegantes cuyo fin es recorrer la ciudad, cualquiera que esta sea, teniendo que reparar nuestros propios navíos en plena mar, sin jamás poder deshacerlos, desmontarlos en un molde que les ajuste, ni poder reconstruirlos guardando las mejores partes. Nos vemos, entonces, en la necesidad de desarrollar lo que los griegos llamaban "metis ", o habilidad de ser inventivos como la circunstancia lo pida, desenvolviéndonos como seres capaces de tomar ventaja de lo inesperado. Igualmente, los buenos navegantes, poseedores de una metis, adecua su inteligencia para abrirse caminos y crear un pasaje o lo que para los griegos sería unos "poros", un medio para negociar con la otredad, para reconocerla y asimilarla. Así, es fácil encontrar en el navegante una imagen arquetipal de una política de interacción social del día a día en la ciudad. El navegar sin meta aparente tiene entonces una finalidad terapéutica irreversible: el conocimiento profundo de nuestra ciudad, el ser partícipe del cambio de cada una de sus situaciones (contexto) y de sus eventos (tiempo). Es aquí en donde nos encontramos siendo turistas en nuestras propias casas, disfrutando del anonimato que nos brinda el descubrimiento de redes que solo existen cuando por ellas recorremos. Mas aún, y en pleno ejercicio Situacionista, podríamos caminar el centro histórico caraqueño guiándonos por un mapa de Manhattan, Paris o Londres En este sentido, Caracas puede ser leída como un inusual campo de derivas, en donde la desorientación (efímera e informal) fuerza un estado ambiguo de extrañamiento hacia nuestra urbe y, por ende, de nuestro comportamiento como ciudadanos. Cada día una nueva ciudad, cada habitante una Caracas única, diferente. Y así, como frente a un espejo, seremos capaces de construir situaciones que describan metódicamente elementos inestables, conectores en constante reproducción de recorridos, de potenciales estructuras sobre las cuales edificar otra Caracas en la misma Caracas. Veremos entonces la urbe que tenemos, una ciudad narrada a través de sus callejones sin salida, de sus monumentos ahuecados por donde nos colamos sin pudor alguno, permitiéndonos la evasión furtiva en un juego anatómico por la aprehensión de sus órganos. Notas 1. Deriva (Derive): Modo de comportamiento experimental ligado a las condiciones de la sociedad urbana: Técnica de paso fugaz a través de ambientes diversos. Se utiliza también, más particularmente, para designar la duración de un ejercicio continuo de esta experiencia. Psicogeografía: Estudio de los efectos precisos del medio geográfico, acondicionado o no conscientemente, sobre el comportamiento afectivo de los individuos. Urbanismo Unitario Teoría del uso conjunto de las artes y técnicas que participan en la construcción integral de un medio, en relación dinámica con determinadas experiencias de comportamiento. Situación Construida: momento de la vida concreta y deliberadamente construido por medio de la organización colectiva de un ambiente unitario y de un juego de acontecimientos. Détournement (desviación) Se utiliza como abreviación de la fórmula: desviación de elementos estéticos prefabricados. Integración de producciones artísticas actuales o del pasado en una construcción superior del medio. En este sentido, no puede haber pintura o música situacionista, sino un uso situacionista de estas medios. En un sentido más primitivo, la desviación en el seno de esferas culturales antiguas es un método de propaganda que pone de manifiesto el desgaste y la pérdida de importancia de dichas esferas. (Definiciones propuesta por la International Situacionist. 1954) 2. Guy Ernest Debord: "Theorie de la derive" Les Levre nues num. 9 noviembre de 1956), p.6-13; una versión ligeramente distinta está traducida al ingles en "Theory of the derive" Situacionist International Anthology, p.50-54 3. EVENTO: Un incidente, una ocurrencia, un ítem particular en un programa. Los eventos pueden abarcar usos particulares, funciones singulares o actividades aisladas. Ellos incluyen momentos de pasión, actos de amor y el instante de la muerte. Los eventos tienen una existencia propia e independiente. Raramente son puramente consecuencia de su entorno. Los eventos tienen su propia lógica, su propio momento. En la literatura, pertenecen a la categoría de narrativa. (como opuesto a la descriptiva). Cabe destacar que en este sentido, podríamos diferenciar evento de situación única y exclusivamente por lo que cada término refiere: evento y situación son términos absolutamente equivalentes, salvo que evento refiere el acontecimiento y situación refiere al contexto. ESPACIO: ¿cosa mentale?, ¿acaso la categoría apriorística de conciencia, como lo expresaría Kant?, ¿pura forma?, y, en este sentido, (citando a Borges), ¿Música? (...) Generalizando el caso anterior, podríamos inferir que todas las formas tienen su virtud en sí mismas y no en un "contenido" conjetural. Eso concordaría con la tesis de Benedetto Croce, ya páter, en 1877, afirmó que todas las artes aspiran a la condición de la música, que no es otra cosa que forma. La música, los estados de felicidad, la mitología, las caras trabajadas por el tiempo, ciertos crepúsculos y ciertos lugares, quieren decirnos algo, o algo dijeron que no hubiéramos debido perder, o están por decir algo; esta inminencia de una revelación, que no se produce es, quizás, el hecho estético. (...) ¿O acaso es el espacio un producto social, la proyección en el piso de una estructura socio-política? La edad moderna: el espacio arquitectónico puede tener una autonomía y una lógica propia. La distorsión, rupturas, comprensión, fragmentaciones y yuxtaposiciones son inherentes a la manipulación de la forma, desde Piranesi hasta Schwitters, desde Dr. Caligari hasta Rietveld. MOVIMIENTO: Acción o proceso de moverse. También acto particular o manera de moverse (en un poema o narrativa: progreso o incidentes). También la inevitable intrusión de cuerpos en un orden controlado de arquitectura. Penetrando en un edificio: un acto que viola el balance precisamente ordenado geométricamente (extraña situación cuando fotografiamos edificios y tratamos de no incluir personas), cuerpos que talla espacios inesperadamente, a través de un errático fluido de movimiento. La arquitectura, entonces, es sólo un organismo pasivamente ocupado, en constante relación con el usuario, cuyo cuerpo agraden las reglas cuidadosamente establecidas por el pensamiento arquitectónico. 4. ( sin firma) "Géopolitique de 1'hibernation" Interntional Situacionista No 8 (abril 1962).En una gran mayoría de casos, la autoría de los artículos publicados en la revista Internacional Situacionist eran asumidos por el movimiento en si. CAMPS, Victoria. Paradojas del individualismo. Drakontos. Barcelona. 1993. Referencias Bibliográficas "THE CITY IN PLAY, Constant's serious fun with urban landscapes". METRÓPOLIS. Diciembre de 1999, Pags. 98 a 104. E.U.A. Bellerophon publications. SADLER, Simon. (2001). The Situacionist City. The MIT Press. Cambridge, Massachusetts. Tercera Edición. Situazionismo/ Situationism. Intercambi / Interchanges. "Lotus108" Revista Trimestrale di Architettura. Electa. Milano. TSCHUMI, Bernard. (2001). The Manhattan Transcripts. En "Perfects Acts Of Architecture". Recopilado por Jeffrey Kipnis. The Museum of Modern Art. New York. Abril. VARIOS. (1996). Catálogo de la exposición: Situacionistas. Arte, Política y Urbanismo. Actar. Museo D'Art Contemporani de Barcelona. VARIOS. (1996). Teoría de la deriva y otros textos situacionistas sobre ciudad. Actar. Museo D'Art Contemporani de Barcelona.