93 LATERCERA Sábado 24 de septiembre de 2016 The complete BBC sessions Sociedad Espectáculos Led Zeppelin CRITICA DE DISCOS Led Zeppelin: material explosivo L os fanáticos de los bootlegs tienen en Led Zeppelin lo que parece ser un pozo sin fondo. Una sesión en YouTube rastreando actuaciones en vivo, demos y ensayos de las más diversas fuentes y calidades puede durar días, como hasta 1999 se estableció que del conjunto circulaban casi 400 grabaciones fuera de norma. Hace años se rumoreó que el propio Jimmy Page ponía en circulación esa clase de archivos. Y aunque el catálogo oficial ha sido relanzado varias veces -la última revisión exhaustiva concluyó el año pasado con el guitarrista declarando que ahora sí no quedan más novedades-, resulta imposible descartar noticias a futuro. Sobre aquello este relanzamiento representa una prueba. BBC sessions fueron publicadas originalmente en 1997 siguiendo la estela inaugurada por The Beatles tres años antes, casilla que habitan Marcelo Contreras Crítico de música otros totems británicos como The Who y David Bowie. En su momento tuvieron un valor extraordinario, porque curiosamente de Led Zeppelin no había mayores registros oficiales en directo, más allá del legendario álbum doble The songs remains the same (1976), un clásico entre seguidores que los miembros de la banda nunca valoraron mucho. Tenían razón. En 2003 el formidable disco triple How the west was won recogía actuaciones extraordina- rias captadas a mediados de 1972, cuando todo el grupo estaba al tope de sus capacidades, con Robert Plant en el peak de su vozarrón y sin que los estragos del alcohol y las drogas mermaran el desempeño en escena de John Bonham y Jimmy Page. En estricto rigor, la novedad entre comillas de este caso radica en el tercer disco. Contiene nueve temas incluyendo la canción inédita Sunshine woman, grabada el 14 de abril de 1969, cuatro meses después del disco debut. La calidad del registro recuerda la textura de las viejas estaciones AM, y es un blues acelerado perfectamente representativo de la tensión musical de ese periodo entre los cuatro músicos, cuando asentaban su reinado estirando su musculatura musical al calor de próceres del sur profundo estadounidense como Willie Dixon. A su vez, tal como ocurre con varias otras canciones de esa fase embrionaria, el corte es prácticamente idéntico a The girl I love she got long black wavy hair, que RRLed Zeppelin en 1972. FOTO: LATINSTOCK fue uno de los enganches de la edición original de 1997. El resto ya es hilar fino: elegir entre las versiones de 1969 o 1971 de What is and what should never be y Communication breakdown -en ambos casos la segunda está mucho mejor grabada-, una tercera alternativa de You shook me, o atesorar la pieza instrumental White summer. Los dos primeros discos contienen exactamente lo mismo de 1997, con el detalle de la remaste- rización, que en este caso no hace gran diferencia. Nada de eso quita el valor supremo de estas cintas. Led Zeppelin demuestra una confianza abrumadora, una fe absoluta en sus gustos originales anclados en el blues y el rock primitivo, incluyendo un encendido tributo al pionero Eddie Cochran (Somethin’ else). Para quienes hicieron el gasto aquella vez y aún conserven ese álbum doble, aquí no hay nada que valga mayormente la pena.