DÍA TRISTE EN LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD Ese día fue el 1 de septiembre de 1939, ya que en su madrugada fuerzas del ejército alemán penetraron en territorio polaco a través de la frontera oriental, dando así inicio a la II Guerra Mundial (1939-1945), cumpliéndose en este año 2010 justamente 71 años de aquel trascendental hecho bélico, ocasión propicia para recodar algunos aspectos de su desarrollo. El 22 de agosto de 1939, unos días antes de que los alemanes atacaran Polonia, el Führer (Hitler) se dirigió a sus comandantes en jefes en estos términos: “Proporcionaré motivos de propaganda para el estallido de la guerra. Me es indiferente que los crean o no. Nadie pregunta al vencedor si dijo la verdad. Al llevar adelante una guerra no es el derecho lo que importa, sino la victoria. Hay que cerrar el corazón a todo sentimiento y actuar brutalmente”. A principios de los años 30 del siglo XX, la población mundial judía ascendía a unos 15 millones de personas y más del 60% vivían en Europa. En 1939 la población judía estaba extendida por todo el continente europeo (sur, norte y oeste, central y este), sumando 9, 5 millones en total, solo en Polonia y la Unión Soviética habían 3 y 2,5 millones, respectivamente, siendo los habitantes de esos país los que más sufrieron los mayores embates de los efectos de la guerra, baste decir que en los campos de concentración polacos los nazis acabaron con la vida de 3 millones y en total de 6 millones, y en la guerra los rusos perdieron 20 millones de habitantes. Adolfo Hitler y el ejército alemán al lanzarse a esta gran aventura de la guerra, tenían como propósitos apoderarse de toda Europa y posteriormente del mundo y exterminar a los judíos, contando para ello como aliados a la Italia de Mussolini, la España de Franco y el Japón de Hirohito. El 7 de diciembre de 1940, más de 300 bombarderos alemanes escoltados por 648 cazas cubrieron el cielo de Londres. La capital inglesa fue bombardeada durante 57 noches consecutivas, murieron 3 000 civiles y 1 300 quedaron heridos. Los londinenses se vieron en la necesidad de utilizar como refugios los túneles del metro o del ferrocarril suburbano, habilitando 79 estaciones y varios tramos que se encontraban fuera de servicio. La campaña alemana contra Rusia se llevó a cabo entre 1941-1943 a través de la “Operación Barba Roja”, para controlar los centros básicos del inmenso país, fundamentalmente petróleo, invadiéndola por tres frentes: Leningrado por norte, y Moscú y Kiev por el este, pensando que sería una labor sencilla, sin embargo, se encontraron con una durísima resistencia, que hizo posible la victoria de los rusos. Con el propósito de consolidar su hegemonía e influencia en el Pacífico, Japón decidió atacar por sorpresa la base de la flota norteamericana en Pearl Harbor (Hawai) y acabar con el poderío militar de Estados Unidos en la zona, efectuando un bombardeo el 8 de diciembre de 1941, hecho que fue bautizado por el presidente Rooservelt como “el día de la infamia”, declarándole así la guerra a Japón, Alemania e Italia. Los norteamericanos, británicos y canadienses formaron el grueso del ejercito de 150,000 soldados que arribaron a la costa francesa el 6 de junio de 1944, 1 desembarcando en Normandía, lo cual fue una acción que favoreció el fortalecimiento del desarrollo de la guerra contra Alemania. El lanzamiento de dos bombas atómicas por Estados Unidos sobre Hiroshima (6 de agosto) y Nagasaki (9 de agosto), produjeron 240 000 muertos y obligaron a Japón a capitular el 14 de agosto. En este contienda bélica varios líderes jugaron un papel determinante en su desarrollo: Adolfo Hitler (1889-1945), Alemania; Winston Churchill (1874-1965), Inglaterra; Benito Mussolini (1883-1945), Italia; Franklin Delano Roosevelt (1882-1945), Estados Unidos; Joseph Stalin (1879-1953), Unión Soviética; Hirohito (1901-1989) y Tojo Hideki (1884-1948), Japón; Charles De Gaulle (1900-1970), Francia y Harry S. Truman (1884-1972), Estados Unidos. El 30 de abril de 1945, Hitler se quitó la vida junto a su mujer Eva Braun en su bunker de Berlín, sus cuerpos fueron quemados y los integrantes de su séquito huyeron o se suicidaron, no encontrándose ningún resto del dictador nazi. El 8 de mayo de 1945, se produjo la rendición incondicional de Alemania que ponía fin al III Reich. Se establecieron cuatro zonas de ocupación y el 22 dirigentes nazis fueron juzgados en Nüremberg como criminales de guerra. Doce recibieron una condena a muerte, tres a cadena perpetua, cuatro a distintas penas de prisión y otros tres fueron absueltos. A modo de resumen puede afirmarse, la guerra que comenzó como conflicto armado entre naciones europeas, acabó extendiéndose por los cinco continentes y tuvo múltiples y muy duraderas consecuencias: la muerte de más de 60 millones de personas y el hecho de que por primera vez en la historia, una guerra provocara más muertes civiles que militares; el desarrollo y uso del arma más mortífera inventada por el ser humano (la bomba atómica); movimientos de la población masiva durante y después de la contienda; y el acceso de la mujer a las fábricas para suplir la ausencia de los hombres movilizados, lo que marcó un hito en el proceso de liberación de la mujer. Los hombres de buena voluntad, deben luchar sin cansancio y evitar que no surja jamás un nuevo día triste como el del 1 de septiembre de 1939. Trabajo confeccionado por: Lic. Ramón Carreño de Celis. Bibliografía: La segunda guerra mundial 60 años después. Revista Muy Especial, No. 68, 2005, España. Recibido: 30 de agosto de 2010. 2