'El Cebollero' pagará sólo 4 años por sus múltiples crímenes Por: REDACCIÓN JUSTICIA | 9:25 p.m. | 10 de Septiembre del 2011 El jefe de una poderosa banda de Medellín, sólo tiene una condena de 4 años. El 22 de abril de 1997, el cuerpo de un comerciante apareció baleado a pocas cuadras de la Central Mayorista de Itagüí (Antioquia). Días antes, en medio de tragos, le había gritado a Alirio de Jesús Rendón, el 'Cebollero', que no dejaría de comercializar sus cultivos y que mucho menos le iba a pagar 'impuestos'. Esa es una de las primeras muertes que aparecen relacionadas en los expedientes de inteligencia sobre Rendón Hurtado. El caso nunca fue resuelto y en este momento poco parece preocupar al 'Cebollero', señalado capo de la mafia de Medellín que desde hace una semana duerme en su lujoso apartamento de El Poblado, porque un juez decidió que su salud le impide seguir en una celda de máxima seguridad. Aunque Alirio de Jesús Rendón es considerado como el jefe de la banda 'La Unión', a la que le atribuyen centenares de asesinatos en Medellín y otros municipios del Valle de Aburrá, solo tiene en su contra una modesta condena de cuatro años, por concierto para delinquir. También le adelantan un proceso por lavado de activos que todavía no ha llegado a juicio. Para 1995, seis años después de que uno de sus hermanos muriera al lado del capo Gonzalo Rodríguez Gacha, Rendón dejó la venta de las verduras en la Plaza de Itagüí y empezó a carnetizar y organizó en cooperativas a los vendedores. Testigos le han dicho a la justicia que desde entonces quedó claro que quien quisiera ingresar productos a la central mayorista tenía que pagar, y que no hacerlo era jugar con la vida. 'El Cebollero' montó un miniejército de seguridad que en su momento tuvo el aval de las autoridades. La plaza pasó de ser, dicen los expedientes judiciales, un territorio en disputa entre guerrilleros, paramilitares y delincuencia común al monopolio de Rendón. Investigadores de la Policía que por un año se infiltraron en la central, haciéndose pasar como vendedores o indigentes, documentaron casos de extorsiones, torturas y asesinatos en las bodegas del sitio de comercio. Doce ex empleados de Rendón están siendo juzgados por esos crímenes. Algunos se exponen a penas de hasta 20 años, mientras su jefe nunca ha sido vinculado a esas investigaciones. En esa época nadie vio al 'Cebollero' con las supuestas dolencias que por segunda vez lo tienen por fuera de prisión. El hombre que en el 2009 se entregó a las autoridades con un dudoso cuello ortopédico para nada se parecía al que llegaba a la central a pedir cuentas, con cinco escoltas armados hasta los dientes. Los crímenes de 'la Unión' Por más de una década, Rendón prácticamente no existió en expedientes judiciales y se investiga hasta dónde su plata -le han rastreado bienes por 10 mil millones de pesos- y su poder intimidatorio jugaron en esa situación. En el 2008, con varios capos de segundo nivel peleando por ganarse el espacio que se abrió por la extradición de 'don Berna', 'el Cebollero' empezó a ganar importancia. Las denuncias del alcalde de Medellín, Alonso Salazar, terminaron en su primera captura ese año. Pero incluso en la cárcel seguía mandando, según varios reportes de inteligencia. Los investigadores analizan los mensajes hallados en las seis BlackBerry que le encontraron este año en su celda y que determinaron su traslado a la cárcel de máxima seguridad de Palmira. De allá lo devolvieron polémicas órdenes judiciales. Y mientras Rendón sigue jugándose cartas jurídicas para intentar romper la vigilancia estricta que le montaron el Inpec y la Policía mientras se define si regresa a la cárcel, su banda aún siembra el terror en el Área Metropolitana. La semana pasada, entre Medellín e Itagüí, la Policía halló un hombre en un costal. Lo ahorcaron con una soga después de torturarlo, un modus operandi que se vio en varias víctimas que tuvieron negocios en la central mayorista. Días atrás fue rescatado un joven de 16 años. Tenía decenas de cortaduras en las piernas, la represalia de 'la Unión' porque su familia intentaba recuperar la casa que la banda 'expropió' para usarla como 'olla' del narcotráfico. Renuncia de juez no vale El juez especializado de Medellín Gabriel Roldán Restrepo tendrá que resolver si Alirio de Jesús Rendón Hurtado vuelve a prisión, como lo han pedido las autoridades, o si sigue en su apartamento. El Tribunal Superior de Medellín no aceptó la renuncia que presentó Roldán esta semana y le ordenó continuar con la revisión del caso. Roldán reemplazó en el cargo al suspendido Juez Humberto Navales Durango, que le concedió al 'Cebollero' el polémico permiso basado en conceptos médicos que ya fueron corregidos por Medicina Legal. En el fallo, el juez Navales aceptó la opinión de dos médicos que aseguraron que la vida de Rendón Hurtado corría peligro por una afección cardiaca. Sin embargo, no ordenó trasladarlo a un hospital.