ENTREVISTA José María Cano “Más que una segunda Edad de Oro lo que el toreo está viviendo es su mayoría de edad” 12 Es de los de todo o nada. O se entusiasma o se aburre, no tiene punto intermedio. Normal, es artista: músico –ex componente de Mecano– y pintor. Suyos son los carteles del ciclo de San Isidro y del Aniversario, también el bello apunte que ilustra las entradas. Al hablar, ajusta sus palabras, pero lo hace sin concesiones y voz baja. “Ningún espectáculo se ha desarrollado tanto como los toros, en el sentido de tradición y arte a la vez. Hay hechos culturales que han evolucionado, pero algo que esté tan intrínsecamente ligado a su tradición, y que sin embargo haya evolucionado tanto en lo artístico, no lo conozco”, dice en su primera afirmación. Texto: Laura Tenorio Fotos: Juan Pelegrín Pregunta | Ver una corrida de toros tiene mucho de estampa anacrónica, es como si viajáramos a otro siglo. Respuesta | Sí. Pero no tiene por qué ser del pasado. Tenemos un entendimiento material que lo liga todo al espacio y al tiempo. En el hecho artístico del toreo, su manera de presentarse, tiene un elemento de atemporalidad que hace que viajemos en el tiempo, pero no necesariamente hacia atrás. Dígame, ¿cuándo aterriza en el planeta de los toros? Empecé a pintar toros por un encargo de una galería en Nueva York, Nyehaus, para una exposición que nunca hice, porque surgieron cosas más interesantes. Los primeros bocetos no eran muy buenos, pero me inquietó este mundo. Eso fue hace unos años y desde entonces no dejé de pintar toros, aunque haya pintado otras series. Ahora estoy trabajando en unos grabados, a modo de Tauromaquia. ¿Y cómo fue su acercamiento a este mundo? Progresivo. El mundo del toro es divertido, hay todo tipo de gente, pero es un mundo bastante extremo, lo cual se agradece, porque hace que no te aburras. También está el hecho taurino muy interesante, de gran belleza y de gran pureza. arrinconando al ser humano y si éste no lo evita, terminará de ese modo, arrinconado. El mundo es cíclico, los fascismos se caracterizan por el afán de prohibir. Los nuevos fascismos son los de la corrección política. Sabe que distintas Comunidades han reaccionado a la ILP. Sí, y me parece mal. Estoy de acuerdo que se apoye a la Fiesta al máximo, pero no como reacción. La Fiesta está bien sufriendo los ataques de los taurófobos. No tiene ningún problema, lleva toda la razón. Además, el toro bravo es el primer defensor de la tauromaquia. Es difícil encontrar algo que apasione tanto desde el punto de vista político que no tenga nada de malo, como es el caso de los toros. La Fiesta es buena para la eco- ”N ¿A qué llama hecho taurino? Me refiero al hecho metafísico de que dos fuerzas opuestas converjan en un punto sin llegar a chocar. Es lo que ocurre en un ruedo. ingún espectáculo se ha desarrollado tanto como los toros” Vayamos a la actualidad. ¿Qué opinión le merece la ILP que está nublando el panorama taurino en Cataluña? Sería bueno que prosperase. logía y sobre todo para la especie del toro bravo, ahí están las dehesas extremeñas, por ejemplo. ¿Cómo? Creo que estas cosas tienen auténtica entidad. Todo lo que tiene mucha pureza, mucha honestidad, termina estando medio prohibido. ¿Lo ve en positivo? Entiendo que la corrección política termina En España tenemos cerca de 540.000 hectáreas de dehesas. Creo que salen a dos hectáreas por toro. Además, hay mucha gente, como son los ganaderos, que por tradición familiar o simplemente por vocación están dispuestos a poner dinero por mantenerlas. Entonces sí ve feo el actual ataque a la Fiesta. El ataque a la Fiesta por los españoles es una de las mayores aberraciones de la Historia de la Cultura. Pero es muy interesante porque en todas estas cosas que ataca la corrección política, siempre hay considerandos; pero en este caso no hay consideración que valga. Creo que es fantástico que se ataque a la Fiesta porque de alguna manera significa que tiene valor, mucho valor… Lo que no vale para nada, no le molesta a nadie. ¿Piensa que los toros tienen una…? Además, perdona, si no hay toros en Cataluña, pues no pasa nada, los catalanes a los que les gusten los toros ya se irán a ver toros a Francia, o a Madrid, o a Bilbao… Lo que no es normal que como me sucedió el año pasado en Mallorca que quise ir con mi hijo a los toros y no le dejaron entrar. Lo vi casi como un atentando a los derechos humanos. Y a mí me parece importante que mi hijo, que tiene 14 años, entienda los valores éticos del toreo. ¿Qué no le gusta de los toros? El público. Para un artista, el silencio dice mucho, y eso, un público silente, dignificaría más al marco, al lugar donde se celebra la corrida, y en Madrid eso no ocurre. En Francia la gen- te está callada, en actitud respetuosa; si les gusta lo que ocurre en el ruedo, aplauden; si no, se callan. Y si protestan lo hacen con respeto. ¿Cómo ve la cosa en estos albores del siglo XXI? Creo que, como dice Serrat, nunca es triste la verdad, lo que no tiene es remedio… El ser humano tiene que despabilarse. Muchas veces es la adversidad lo que engrandece las cosas. Cuando tú realmente crees que puedes perder algo, entonces lo consideras. Es la vida misma. Cuando das por hecho algo, te despreocupas. Me parece que en un análisis superficial puede haber personas que digan que no les gusta cuando matan al toro en la plaza, tampoco a mí si el diestro se demora. Pero casi todo en la vida requiere una consideración más profunda, también los toros. Que haya gente en contra de ellos me parece bien, lo que no me parece bien es que esto se haya 13 ENTREVISTA convertido en una fórmula de pensamiento y se haya manejado políticamente. Y como vivimos en un país que le encanta dividirse en dos, pues ahora toca dividir al mundo taurino y ponerlo en un pack que no le corresponde. En la Guerra Civil había toros y toreros en los dos bandos; hay una foto bien famosa de Domingo Ortega a hombros de los milicianos. Los toros no eran ni de izquierda ni de derechas, ni de ricos ni de pobres, eran de todos, y lo siguen siendo. Es una pena que vayamos envileciendo todo con una lectura política. ¿Qué beneficio se saca de ello? El mundo político, en general, se fortalece con ello. Y lo digo sin ningún ánimo. Así la política toma mayor importancia y la dependencia de todos respecto a ella también es mayor. Es humano, pero tiene consecuencias negativas en la sociedad. Para las poquísimas personas que consiguen mantener libertad de pensamiento resulta muy incómodo. Hablemos de los toreros que le gustan… Me está empezando a costar responder a esa pregunta. Me siento demasiado cerca y como soy una persona que me muevo mucho por afectos, seguro que termino dando los nombres de los que mejor me caen, en vez de los que mejor me parecen. Pero alguna preferencia tendrá. Lógicamente me gustan los toreros artistas. Pero entiendo que hay que ver a todos, a los artistas y a los más currantes. Lo bonito de este universo es que hay de todo: toreros currantes, toreros estetas, toreros magos… y también toros muy distintos, de hecho hay toros que son buenos por unas cosas y otros que lo son por lo contrario. Qué me dice de Morante. … Pues que es un torero fantástico Y Enrique Ponce. Fantástico torero. Y El Juli. Fantástico también. Y Perera. Fantástico también. Manzanares. Fantástico torero. Cayetano. …Camino de fantástico torero, digamos. El Cid. … El Cid es un hombre luchando contra su destino. Algo muy enriquecedor para el universo del toro. 14 ”L a Fiesta está bien sufriendo los ataques de los taurófobos; no tiene ningún problema, lleva toda la razón” Otro nombre: Daniel Luque. Sería un poco lo contrario. Un chico al que le estaba saliendo todo bien y al que ahora hay que ver si sabe digerir lo vivido. Resulta que todos los toreros son fantásticos. Va a ser verdad que estamos viviendo una segunda Edad de Oro del Toreo. Más que en una segunda Edad de Oro lo que el toreo está viviendo es su mayoría de edad. Buen matiz el suyo, explíquelo. Primero, por los avances en la medicina que han sido, nunca mejor dicho, vitales. La televisión es otro factor decisivo. En las retransmisiones que hoy se hacen ves la hierba crecer. Te muestran toda la verdad y toda la mentira. Siempre ha habido quien vendía bien las cosas, pero hoy, con Youtube, todo el mundo puede ver casi en tiempo real cómo ha estado un torero. De modo que es muy difícil que te cuenten lo que no es. Además, los propios toreros utilizan ese medio para verse y analizar sus actuaciones. ¿Qué le gusta de una faena? Lo que más me gusta es la composición, considerándola en función del toro. ¿Quién sería entonces el mejor compositor? Hay muy buenos compositores, los hemos citado antes. Es ahí donde se nota esa mayoría de edad del toreo. Entiendo la importancia de Joselito y Belmonte, porque es cuando el toreo cambia por completo. A partir de ahí, ya con el toreo en redondo como norma y el temple como estilo, una vez que ha ocurrido esa revolución con Belmonte, pienso que jamás se ha toreado mejor que ahora. Probablemente en un futuro el toreo empiece su declive. Pasa en todas las artes: la ópera tuvo su mayoría de edad en los años 30 y 40; el pop la vivió en los 70 y los 80 y el toreo entiendo que ahora. Póngase nota como cartelista taurino. No me gusta hablar sobre mi trabajo y menos calificarlo. Lo que he intentado es reflejar el universo taurino, darle un tono de atemporal, por eso he dibujado con tinta, e igualmente he buscado que los carteles sean de verdad taurinos. Se le puede preguntar de cuál de los dos carteles –San Isidro y Aniversario– está más satisfecho. Me cuesta decidirme, la verdad. ¿Ha estudiado a cartelistas como Ruano Llopis, el pintor que definió las características del “cartel”? Antes de pintar los dos carteles de esta feria, no. Lo he hecho después, porque no quería dejarme influir. He preferido definir mi estilo sin la influencia de otros. Ahora sí que ojeo cosas y lo que más me gusta es la época de los años 30, el momento en el que la cartelería fue Arte. Actualmente es un arte menor.