INSTITUTO MEXICANO DEL ARBITRAJE POSTURA con respecto al Caso DC131/1007 Procedimientos Arbitrales y Judiciales Vinculados I. INTRODUCCIÓN La sentencia DC131/1007 toca un tema espinoso: los procedimientos judiciales y arbitrales vinculados. A continuación el Instituto Mexicano del Arbitraje (IMA) da una opinión sobre el mismo, la tesis que generó y su razonamiento. II. ANTECEDENTES A. DEMANDA 1. Actor A interpone una demanda en la vía ordinaria mercantil en contra de 4 codemandados, sociedades B, C, D y E, respecto del incumplimiento de un contrato de Joint Venture, demandando prestaciones relacionadas con el contrato de origen (daños y perjuicios por incumplimiento a obligaciones derivadas de derechos de propiedad industrial).1 2. Mientras que B y C estaban vinculadas por un acuerdo arbitral contenido en el joint venture con A, la relación entre A—D y E no contenía acuerdo arbitral alguno. B. EXCEPCIÓN DE INCOMPETENCIA 3. B interpuso una excepción de incompetencia (por declinatoria) del Juez dada la existencia de un acuerdo arbitral. A alegó la nulidad de la cláusula arbitral. 4. La Sala que conoció de la excepción2 declaró nulo todo lo actuado fundando su decisión en que, pese a que se demandó a diversas personas que no eran parte del joint venture (que contiene el acuerdo arbitral), el principio de indivisibilidad y continencia de la causa exige que la demanda se trate como una sola unidad, por lo que todas las 1 Conoció el Juez Sexagésimo Tercero de lo Civil del Distrito Federal (el “Juez”). 2 Décima Sala Civil del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal. 2 codemandadas (siendo o no parte del joint venture y acuerdo arbitral) debían someterse al procedimiento arbitral. C. EL AMPARO 5. D promovió amparo directo en contra de la resolución de la Sala3 argumentando que la resolución violatoria de sus garantía individuales, toda vez que resultaba violaba las garantías de legalidad y audiencia consagradas en los artículos 14 y 16 constitucionales. Por ende, no debía ser remitida al arbitraje puesto que no son parte del acuerdo arbitral. 6. El Colegiado amparó razonando que la Resolución de la Sala violaba las garantías de legalidad y audiencia al no ser los quejosos parte del acuerdo arbitral, pues el arbitraje exige consentimiento. En relación con la división de la causa y principio de indivisibilidad, sostuvo que sí eran divisibles las reclamaciones. En sus palabras: … las pretensiones de la actora no se encuentran inescindiblemente vinculadas … pueden dividirse sin la posibilidad de que se dicten sentencias contradictorias, pues no derivan de un acto ilícito común cometido por las demandadas . III. RAZONAMIENTO 7. Del razonamiento del Colegiado resalta: a) Las prestaciones pueden separarse sin riesgos de dictar sentencias contradictorias, pues la causa de pedir es distinta. b) El arbitraje es una norma de excepción al derecho a obtener justicia bajo el artículo 17 de la Constitución Federal. En sus palabras: … los árbitros conocerán en los casos autorizados por la ley, de los asuntos sometidos a su resolución. Fuera de estos casos, no pueden extenderse esas facultades por ningún otro mecanismo, ya sea de interpretación analógica o por mayoría de razón y cualquier otra, al tratarse de una norma de excepción. De manera que, si una demanda se presenta ante un juez y unas pretensiones corresponden a su jurisdicción y otras no, si no hay disposiciones legales que permitan la separación de las demandas con sendos juicios, el 3 Conoció el Cuarto Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito (el “Colegiado”) (toca DC 131/2007). 3 órgano jurisdiccional ante quien se presenta debe dar curso a la demanda y seguir la instrucción y ya en estado de sentencia o al resolver, absuelva de la instancia respectiva que no es de su jurisdicción dejando a salvo los derechos de las partes para hacerlos valer conforme a derecho proceda, y decida lo que es de su jurisdicción como corresponda a sus atribuciones y a los elementos existentes. … 8. La ejecutoria que recayó dice: JUICIO ARBITRAL. NO PUEDE ABSORBER LITIGIOS CORRESPONDIENTES A LOS TRIBUNALES JUDICIALES. Si en la demanda presentada ante un Juez existen pretensiones que corresponden a su jurisdicción y otras que deben ser objeto de juicio arbitral, el juzgador debe dar curso a la demanda, seguir la instrucción y dictar la sentencia, en la cual decidirá lo atinente a su jurisdicción y dejará a salvo los derechos de las partes respecto de las otras pretensiones, para que se hagan valer en la vía arbitral. En el artículo 17 constitucional, se prevé el derecho de los gobernados a la jurisdicción, y conforme a los artículos 49, 94, 116 fracción III, y 122 de la propia Ley Suprema, como regla general, la función jurisdiccional se reserva a los tribunales judiciales. En los artículos 1o., 2o. y 3o. de la Ley Orgánica del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, se admite una excepción a esa regla general, pues permite que los litigios se resuelvan por árbitros, pero con ciertas limitantes, y por tratarse de una norma de excepción, la función arbitral no puede extenderse más allá, mediante interpretación analógica o por mayoría de razón. Por tanto, si para la solución del conflicto, se inclinara hacia el conocimiento de todas las pretensiones por un árbitro, se le estarían ampliando las facultades más allá de las previstas para esta función. En cambio, es más natural, lógico y razonable que si es imposible dividir la demanda, el que conozca sea quien tiene más facultades y no el que las tiene limitadas.4 IV. POSTURA DEL IMA El IMA aplaude el sentido y razonamiento de la sentencia comentada. Con la única finalidad de enriquecer la materia, hace las siguientes observaciones: 4 Tesis: I.4o.C.153 C, amparo directo 131/2007, Registro No. 168888, Novena Época, Cuarto Tribunal Colegiado en Materia Civil del Primer Circuito, Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta XXVIII, Septiembre de 2008, pg. 1305. 4 1. El razonamiento seguido parece exigir concluir a contrario que si los procedimientos no fueran divisibles, prevalecería la competencia del juez nacional. Aunque ab initio ello parece correcto, la variedad de circunstancias a las que puede aplicar hace peligrosa una generalización. Podría suceder que existan procedimientos paralelos vinculados en donde no deba ‘absorberse’ (utilizando la terminología de la tesis) la competencia del árbitro por la del juez nacional. Mas que continencia de la causa, el criterio para remitir o no al arbitraje debe ser si existe un acuerdo arbitral. 2. Conforme al artículo 1424 del Código de Comercio, se debió ordenar la remisión al arbitraje de inmediato, no hasta la sentencia definitiva.