LA LIQUIDACIÓN DE CONDENAS I. CONCEPTO Se entiende por liquidación de condena los cálculos necesarios para hallar la fecha en que se extinguen las penas privativas de libertad por su cumplimiento. No estamos ante una institución meramente matemática, muy por el contrario se trata de un instrumento del derecho penal y penitenciario en el que intervienen conceptos sustantivos de la ejecución penal. Además, el procedimiento para liquidar condenas es, también útil cuando queremos informar a nuestro cliente del momento en el que puede comenzar a disfrutar de permisos o, incluso, cuando se cumple el requisito temporal exigido para acceder al cuarto grado de tratamiento o también llamado libertad condicional. El cumplimiento de las condenas en cuanto a su categoría temporal no debiera ser, como hasta ahora lo es, un espacio sustraído de la práctica de los letrados, que aceptan, sin comprobación alguna, las fechas propuestas por la Administración penitenciaria. En idéntico sentido, las autoridades judiciales competentes para aprobar las liquidaciones de condena, Juzgados y Tribunales sentenciadores, pueden hacer uso de este sencillo y práctico instrumento para comprobar la exactitud de los periodos propuestos por la Administración, haciendo ejecutar lo juzgado con sus propios parámetros. La desaparición de la redención de penas por el trabajo, simplifica enormemente los cálculos liquidadores. Sin embargo durante, todavía, muchos años será necesario aplicar la vetusta institución, pues en términos generales beneficia más que el nuevo Código penal. Para ello, expondremos separadamente la forma de liquidar una condena impuesta bajo la Ley Orgánica 13 JOSÉ M.ª BUENO CASTELLOTE 10/95, de aquellas otras regidas por el Texto refundido de 1973, publicado por el Decreto 3096 de 14 de septiembre con sus modificaciones posteriores. II. CÓDIGO PENAL VIGENTE El fundamento de la liquidación es idéntico que el del viejo Código, sin embargo la ausencia de minoraciones en el cumplimiento de la condena debidas a la redención de penas por el trabajo, simplifica sustancialmente los tramites calculadores. Mención especial merecen las normas transitorias del Texto penal vigente, en particular la aplicación de la norma más favorable para el justiciable, con una línea jurisprudencial perfectamente definida (1). Ahora, tan sólo nos ocuparemos de aquellas condenas recaídas bajo la ley vigente, en las que no fuera de aplicación el beneficio de la redención de penas por haber cometido los hechos punibles con posterioridad al 24 de mayo de 1996. Resulta fundamental valorar en todas las liquidaciones que los años de condena se cuentan por 365 días y los meses por 30 días. El primer paso consiste en transformar la condena en días. ejemplo: Una condena por homicidio consumado, determinada en diez años y ocho meses. 10X365= 3.650 días 8X30= 240 días Total condena = 3.890 días (1) Valga como ejemplo la Sentencia del T.S. n.° 557/1996, de 18 de julio, de la Sala Segunda, sobre refundición de condenas y consolidación de los beneficios de redención de penas adquiridos conforme al Código penal antiguo ante la aplicación retroactiva del nuevo Código penal más favorable para el reo. En dicha resolución, en su cuarto motivo, se dice que «el criterio del cómputo produce, en la persona del reo así favorecido, una situación penitenciaria plenamente consolidada que consideramos compatible con la aplicación del nuevo C.P., cuya prohibición relativa a la no aplicación de las disposiciones sobre redención de penas (D.T. 2.a) ha de entenderse únicamente referida a aquella que pudiera producirse después de la entrada en vigor de la nueva norma penal, lo que ocurrió el 25 de mayo de 1996». 14