PREGÓN DE D. MANUEL VENTURA RIVERO

Santa Brígida: entre fiesta y fiesta celebramos la vida cultural
PREGÓN DE D. MANUEL VENTURA RIVERO
domingo, 27 de julio de 2014
De las Fiestas Patronales de Santa Brígida 26 de julio de 2014
Buenas noches a todos, autoridades, vecinos,
familia y amigos que hoy han querido acompañarme en este acto, sean todos bienvenidos : Ante todo, agradecer que
este año la Comisión me haya elegido como pregonero de las Fiestas Patronales en Honor a Santa Brígida 2014. Les
debo de confesar que cuando me lo propusieron pensé ¿Y porqué yo? y ellos me lo explicaron así : " Manolín es que
ud. siempre ha estado ahí ", a veces para ser parte de estas fiestas no hace falta vestirse de romero o participar en todos
los actos, es estar cuando es necesario. Yo he intentado siempre ser amable y colaborar en todo lo que he podido, era
mi responsabilidad laboral, pero también era mi responsabilidad como vecino y con mis fiestas. He conocido muchas
comisiones y siempre he intentado ayudarles. Antiguamente las fiestas las organizaba el cura y algunos parroquianos
como los hermanos José , Manolo y Pilarito Navarro y luego con el tiempo fue pasando a los vecinos y a los más
jóvenes . Con todos ellos y en la medida que he podido, he intentado estar siempre . A la hora que me llamaran yo
siempre he procuarado estar, si había que recoger, les "echaba una mano" y cuando necesitaban alguna cosa, con mis
compañeros, recopilaba el material para que todo estuviera dispuesto. Cuando venían las fiestas era un trasteo, yo no
descansaba pensando siempre en lo que había que hacer mañana, siempre intentaba que todo estuviera bien, y al tanto
de cualquier problema que pudiera haber. Antes no había tanto trabajo como les veo ahora, las comisiones se las
apañaban como podían , apenas había nada. En la época de los 70 y 80 no había infraestructura como la que tenemos
ahora, pero nunca faltaban los tableros y bloques para hacer un buen escenario, cortar palmeras para decorar los arcos
que ponían en la C. Real, o en las puertas de las casas para decorar, las cestas de pirgano y las tachas, que miren
ustedes como estábamos de mal, que después de usarlas se enderezaban para seguir utilizándolas. Y es qué en
aquella época eso si era reciclar. Hoy les agradezco este detalle, el que se acuerden de mi, y a su vez, hacerlo
extensivo a mis compañeros de trabajo de aquella época. Cuando me propusieron ser pregonero mi primera intención
fue hablarles de Sta. Brígida el lugar donde nací, he vivido siempre, y he criado a mis hijos. Lo que recordaba de mi
pueblo y de mis fiestas, porque las Fiestas de Santa Brígida para muchos de nosotros estárán siempre vinculadas a
nuestros recuerdos y vivencias que son parte de nosotros. Quiero contarles a todos como ha llegado a nuestros días
estos festejos, que en este año cumplen 464 años. ¡ 464 años! Isabel Guerra, la nieta de Pedro Guerra,
conquistador de la Isla de Gran Canaria, fue la fundadora de la antigua ermita de Sta. Brígida, construida en torno a
1522. Era una señora rica, dueña de todo el Gamonal, cuyos terrenos tenía plantado de viñas. Pues bién , esta mujer,
antes de fallecer, hizo su testamento en el año 1545, y en él pidió hacer las Fiestas en Honor a Santa Brígida, cuya
imagen irlandesa ya figuraba junto con la de Santa Lucía, en la capilla del templo. Por tal razón hoy puede verse ambas
imágenes ( patrona y copatrona) presidiendo aún el altar mayor de nuestra parroquia. Para cubrir los gastos que
ocasionasen los festejos, la fundadora donó el mejor parral que tenía en el Gamonal. En aquel tiempo según Pedro
Socorro nuestro cronista oficial, la fiesta comenzó a celebrarse el 1 de febrero de cada año, día de Santa Brígida
irlandesa, pero a mediados del siglo XIX (19) hubo que trasladar de fecha la celebración porque era tanto lo que llovía que
poca gente venía a los festejos desde los lejanos barrios. Fue entonces cuando se decidió que el primer sábado de
agosto era el más propicio para celebrar dicha fiestas. La imagen actual no fue la primera escultura. Hubo otras
anteriores. Aunque la más valiosa se hizo cenizas en un incendio en 1897. La iglesia estuvo sin la patrona al menos
veinte años hasta que en 1907 llegó la actual imagen de Barcelona, celebrándose una gran fiesta en el pueblo el 3 de
agosto de aquel año. Yo nací en 1936, cuando en España se desató la Guerra Civil, era una época triste de escasés y
miseria. Mis padres Manuel y Rosario vivian en lo que es ahora la C. Castelar, yo era el menor y único varón de seis
hermanas. Mi infancia trancurrió feliz, entre calles y barrancos jugando con las niñas (Mª Teresa Marrero, Maruca Reyes,
Lara y Antonia Benítez, Mª Luisa Galván...) jugabamos a las casitas, al teje, y con los chiquillos (Jaime el de la farmacia,
Gustavo Déniz , Laureano Rodríguez , Manolín y Tito Rodríguez de la Coba, los hermanos Gonzalo, Pepe Luis y Paco
García, Adolfo y Armando Padrón y muchos más... ) a lo que se jugaba antes, nos dedicabamos a cogerle las avellanas
a D. José Santana, zanahorias y batatas en los cercados de Antoñito Cruz, tocar en las casas y salir corriendo, y a un
juego que nos encantaba, las procesiones que dirigia Manolín Santana. Hacíamos un trono con cuatro palos, alguna que
otra estampa, las flores del barranco y llevabamos nuestra proseción por las calles, hombres a un lado y mujeres a otra,
como nos obligaban en la iglesia y en las proseciones de verdad. Detrás no podía faltar la banda, que armabamos con
cacharros y latas viejas. Desde niño disfruté de las fiestas, y mi padre también ; siempre trabajando. Desde los años
20 del siglo pasado, mi padre Manolito Ventura el guardia, junto con Miguelito Santana Suárez, ahuyentaba a los
aguafiestas que siempre hay en las mismas...), armados entonces con sables de acero que les llegaba a los pies.
Cuando tenía unos diez años a las fiestas venía Pepe Cañadulce, un señor de Las Palmas que siempre era el que
anuanciaba todas las fiestas y nosotros como chiquillos íbamos detrás de él incordiandole un poquito. Los puestos de
los feriantes en la C. Real ofertaban desde zapatos a churros y jareas asadas. Recuerdo también los conciertos de la
Banda de Sta. Brígida, bajo el algarrobero que plantó mi padre en este parque porque en el patio de mi casa ya no cabía.
Recuerdo ver las ruletas girar cuyo premio podría ser un gallo o un gato de tiza, y los puestos de sopladeras y como no,
a Catalinita vendiendo chochos en hojas de ñameras delante de la puerta del cine. Me fascinaban las ruedas de
fuego , en una ocasión fue tanto mi entusiasmo de acercarme a los preparativos de los fuegos artificiales, que caí sobre
una rueda de fuego echándola a perder. Me tropecé con mis botas tachás" compradas nuevas de Agaete y el
fueguista fue a dar con mi padre, que esa noche me dió una buena reprimenda, pero sin sable, y mejor ni les cuento
porque no quiero ni acordarme. Jovencito me puse a trabajar de taxista, un día fuí a un servicio al aeropuerto a recoger a
una joven que venía de Tenerife. Ella venía triste y yo no entendía porque aquella muchacha tan guapa estaba así. Dias
después me atreví a preguntarle y es que había dejado a una tía muy malita en la isla vecina. A partir de ahí seguimos
hablando, hasta que su madre se enteró y se opuso a nuestras conversaciones. Al final, tuve que hablar con su padre y
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éste me dio su consetimiento. Paseábamos en aquella época como todas las parejas, en la C. Calvo Sotelo, de la
Casa de D. Juan Del Río, hasta la subida al cementerio, eso si siempre con carabina, es decir, mi suegra siempre
mandaba a alguna otra de sus hijas a vigilar. Aquella muchacha es hoy mi mujer, Eduvigis, que sigue tan guapa como
el día que la conocí en aquel aeropuerto. Nos casamos el 3 de mayo de 1965, somos muy felices, tenemos cinco hijos y
ahí vamos tirando "pa" lante. Si Ustedes me lo permiten, hoy es un día muy especial para mi, y no quiero perder la
oportunidad de agradecer publicamente a mi mujer, mi compañera de vida Eduvigis, todos estos años compartidos a
mi lado, y los hijos que me ha dado. A mis hijos Lorenzo, Félix, Armiche, Alexis y Angeles, mis nueras, yerno, y a mis
nietos, agradecerles que estén tan cerca de su madre y de mi. Sin más, queridos vecinos, a mi no me queda si no
ejercer con orgullo el papel que me han otorgado, el de pregonar las Fiestas Patronales de Santa Brígida 2014.
Disfruten y pasénlo bien, respetando las normas para que las fiestas no se pierdan, y sigan siendo unión y encuentro de
familiares y amigos : Así que una vez más, : Revuelvan en el ropero y saquen los trajes de romero. De aquí para la
plaza a compartir con los vecinos, el buen vino, las piñas asadas y el baile de taifa. La semana que viene los chiquillos
a los juegos infantiles, y después por la noche el cine de verano en la plaza de la iglesia. El jueves lleven las bicicletas,
porque como antaño tendremos la carrera de cintas. Música y folklóre toda la semana, y el sábado que viene, la
Romería todo el mundo derechito "pa" la iglesia y que nadie se olvide de llevar la ofrenda a la Patrona Santa Brígida!!
Les espero a todos en las calles, nos vemos en las fiestas, y si por casualidad les faltara algo, ya sea herramientas,
tachas o algún tablón, a este su servidor. ¡¡ VIVA LA PATRONA !! ¡¡VIVAN LAS FIESTAS DE SANTA BRÍGIDA !!
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