ES ES PROPUESTA DE RESOLUCIÓN

PARLAMENTO EUROPEO
2014 - 2019
Documento de sesión
9.3.2015
B8-0243/2015
PROPUESTA DE RESOLUCIÓN
tras una declaración de la Vicepresidenta de la Comisión / Alta Representante
de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad
presentada de conformidad con el artículo 123, apartado 2, del Reglamento
sobre la situación en Venezuela
(2015/2582(RSP))
Javier Couso Permuy, Marina Albiol Guzmán, Inês Cristina Zuber, João
Ferreira, Miguel Viegas, Fabio De Masi, Neoklis Sylikiotis, Ángela Vallina,
Paloma López Bermejo, Lidia Senra Rodríguez, Sabine Lösing, Sofia
Sakorafa, Emmanouil Glezos, Younous Omarjee, Kostas Chrysogonos,
Stelios Kouloglou
en nombre del Grupo GUE/NGL
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Unida en la diversidad
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B8-0243/2015
Resolución del Parlamento Europeo sobre la situación en Venezuela
(2015/2582(RSP))
El Parlamento Europeo,
–
Visto el capítulo 1, artículo 1, párrafo 2, de la Carta de las Naciones Unidas de 1945, en
el que se declara el propósito de «fomentar entre las naciones relaciones de amistad
basadas en el respeto al principio de la igualdad de derechos y al de la libre
determinación de los pueblos, y tomar otros medidas adecuadas para fortalecer la paz
universal»,
–
Vistos el artículo 1 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y el artículo
1 del Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, en los que se
afirma que «todos los pueblos tienen el derecho de libre determinación» y que «en
virtud de este derecho establecen libremente su condición política y proveen asimismo a
su desarrollo económico, social y cultural»,
–
Vista la Declaración realizada en la Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la
CELAC (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños) y la UE, de 27 de
enero de 2013, en la que los signatarios reafirmaron su compromiso para con todos los
propósitos y principios consagrados en la Carta de las Naciones Unidas, así como su
respaldo a todos los esfuerzos por defender la igualdad soberana de todos los Estados y
respetar su integridad territorial y su independencia política,
–
Vista la Declaración de Latinoamérica y el Caribe como Zona de Paz acordada en la
Segunda Cumbre de la CELAC celebrada en La Habana los días 28 y 29 de enero de
2014,
–
Visto el principio de no intervención establecido en la Carta de las Naciones Unidas,
–
Vista la Declaración Universal de Derechos Humanos de 1948,
–
Vista la elección de la República Bolivariana de Venezuela como miembro del Consejo
de Derechos Humanos de las Naciones Unidas y las conclusiones del último Examen
Periódico Universal del Consejo de Derechos Humanos respecto a Venezuela,
–
Vista la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, de 1961,
–
Vista la declaración del Secretario General de la Unión de Naciones Suramericanas
(Unasur), de 7 de febrero de 2015, pronunciada tras la visita de Unasur a Venezuela,
–
Vistas las declaraciones sobre la situación en Venezuela pronunciadas por Mercosur,
Unasur y la CELAC, y en particular las declaraciones de Mercosur y la CELAC
rechazando las medidas coercitivas unilaterales de Estados Unidos contra la República
Bolivariana de Venezuela,
–
Vistas las declaraciones sobre Venezuela realizadas por el Premio Nobel de la Paz
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argentino Adolfo Pérez Esquivel,
–
Vistas las declaraciones realizadas por la Vicepresidenta de la Comisión / Alta
Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad sobre
Venezuela, y en particular la última de su portavoz, de 24 de febrero de 2015,
–
Vista sus Resoluciones anteriores sobre Venezuela, en particular las de 24 de mayo de
20071, 23 de octubre de 20082, 7 de mayo de 20093, 11 de febrero de 20104, 8 de julio
de 20105, 24 de mayo de 20126, 27 de febrero de 20147 y 18 de diciembre de 20148,
–
Visto el artículo 123, apartado 2, de su Reglamento,
A.
Considerando que algunos sectores de Venezuela han iniciado en los últimos meses una
guerra económica plasmada en aumentos de precios, contrabando de bienes y
actividades de acaparamiento; que el Gobierno de la República Bolivariana de
Venezuela ha denunciado la llamada «operación Jericó», es decir, la última intentona
golpista contra el Gobierno democráticamente elegido planeada para el 12 de febrero de
2014 por la oposición de extrema derecha y financiada y respaldada por el Gobierno de
los Estados Unidos con el apoyo de varios altos mandos militares venezolanos;
B.
Considerando que según las informaciones facilitadas por el Gobierno venezolano, la
intentona golpista se basada en un plan de cuatro etapas para desalojar del poder al
presidente Maduro, empezando por una guerra económica y acabando con una
insurrección militar violenta apoyada en aviones de combate Tucano para bombardear
diversos objetivos estratégicos, incluidos el canal de televisión Telesur y núcleos
gubernamentales clave como el palacio presidencial y el Ministerio de Defensa; que
estas acciones debían ejecutarse tras la publicación de un manifiesto abogando por una
«transición» y exigiendo la formación de un Gobierno provisional; que este manifiesto
iba firmado por líderes de la oposición, entre los cuales Antonio Ledezma, María Corina
Machado y Leopoldo López;
C.
Considerando que este «Plan para una Transición de 100 días» habría incluido una serie
de medidas que aplicaría una Junta constituida al efecto, incluyendo la convocatoria de
elecciones anticipadas, la privatización de todos los servicios públicos y la intervención
del FMI, el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo en la economía
venezolana;
D.
Considerando que el Presidente Maduro ha anunciado nuevas revelaciones para las
próximas semanas y ha afirmado que presentará pruebas en la Cumbre de las Américas
cuya celebración está prevista para abril de 2015 en Panamá; que los líderes de la
oposición han instado a la renuncia a la lucha armada y al respeto de la Constitución de
1
DO C 120 E de 24.4.2008, p. 484.
DO C 15 E de 21.1.2010, p. 85.
3
DO C 212 E de 5.8.2010, p. 113.
4
DO C 341 E de 16.12.10, p. 69.
5
DO C 351 E de 2.12.2011, p. 130.
6
DO C 264 E de 13.9.2013, p. 88.
7
Textos Aprobados, P7_TA(2014)0176.
8
Textos Aprobados, P8_TA(2014)0106.
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Venezuela;
E.
Considerando que el alcalde mayor de Caracas, Antonio Ledezma, ha sido detenido
siguiendo una orden dictada por la Oficina del Fiscal General, y posteriormente acusado
de conspiración y asociación con fines delictivos por su presunta implicación en la
trama golpista; que ambos delitos están tipificados en el Código Penal venezolano y en
la Ley Orgánica contra la delincuencia organizada y la financiación del terrorismo;
F.
Considerando que tras los disturbios violentos en el Estado de Táchira, Kluivert Roa, un
joven de 14 años resultó muerto por impactos de bala el 24 de febrero de 2015; que el
agente de policía presuntamente responsable de esta muerte fue detenido en menos de
24 horas y se encuentra actualmente encausado por ello;
G.
Considerando que en diciembre 2014 el Presidente estadounidense Barack Obama
anunció la aprobación de una ley de imposición de sanciones a Venezuela; que treinta y
tres Estados de América Latina y el Caribe han condenado estas sanciones unilaterales
impuestas por Estados Unidos a Venezuela; que el Gobierno de Venezuela ha
reaccionado anunciando un conjunto de medidas en aplicación de diversos artículos de
la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas;
H.
Considerando que uno de los componentes del actual proceso de desestabilización en
Venezuela ha sido, y sigue siendo, la financiación multimillonaria de organizaciones y
partidos políticos antigubernamentales durante más de doce años por parte de agencias
estadounidenses tales como USAID y National Endowment for Democracy; que el
Presidente Obama ha autorizado recientemente un fondo especial por valor de 5,5
millones de dólares estadounidenses para financiar grupos opositores al Gobierno
venezolano a través del Departamento de Estado;
I.
Considerando que en febrero de 2014 se puso en marcha el plan conocido como «La
Salida» con una manifestación organizada por estudiantes tras un llamamiento de
partidos políticos derechistas y ultraderechistas y que degeneró en actos de violencia
que se prolongarían durante meses con el claro objetivo de desestabilizar al Gobierno
democráticamente elegido de Venezuela; que, entre febrero y junio de 2014, 43
personas fueron asesinadas y 878 resultaron heridas; que esta estrategia no era nueva, ya
que el escenario es similar al del golpe de 2002 y la violencia que siguió a la elección
democrática del Presidente Nicolás Maduro en abril de 2013; que los líderes de la
oposición se niegan a reconocer los resultados electorales y han impulsado
reiteradamente el clima de violencia; que la noche de las elecciones, once venezolanos,
de los cuales dos eran niños, fallecieron a raíz de ataques a las celebraciones
bolivarianas;
J.
Considerando que el Comité de Víctimas de la Guarimba y el Golpe Continuado,
formado por víctimas de la violencia y sus familiares, ha pedido a la comunidad
internacional que se abstenga de instrumentalizar políticamente los derechos humanos y
que no coopere con los agentes políticos venezolanos que intentan silenciar o manipular
los actos de violencia y odio que lleva sufriendo Venezuela desde febrero de 2014; que
los familiares de las víctimas han pedido que se juzgue a los responsables de estos actos
y se ponga fin a la impunidad de las violaciones de derechos humanos que se está
auspiciando en Venezuela;
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K.
Considerando que la delegación de investigación de Unasur, integrada por el Secretario
General de Unasur, el ex-presidente de Colombia Ernesto Samper y los ministros de
Asuntos Exteriores de Brasil, Ecuador y Colombia, visitó el país los días 6 y 7 de marzo
de 2015 para respaldar los esfuerzos a favor de la paz; que durante su visita el Sr.
Samper reiteró la posición de Unasur, que «está en su Carta Constitutiva y ha sido
refrendada en el Tratado de Cláusula Democrática» y «es absolutamente clara y
contundente en señalar que cualquier intento de desestabilización que se produzca en
una democracia o cualquier intento de desestabilizar un Gobierno contará con el rechazo
unánime de los países de Unasur»; que el portavoz del partido derechista Mesa de
Unidad Democrática, Jesús Chuo Torralba, calificó la visita de Unasur de acto de
provocación contra la oposición venezolana; que ya en marzo de 2014 una misión
ministerial de Unasur visitó Venezuela para apoyar un diálogo integrador, y que en abril
de 2014 se celebraron diversas reuniones entre el Gobierno, la oposición, las
organizaciones estudiantiles, los sindicatos y diversas personalidades empresariales y
grupos religiosos, con la mediación de Unasur y del Vaticano;
L.
Considerando que el Secretario General de las Naciones Unidas Ban Ki-Moon ha
expresado su apoyo a la visita de la delegación de Unasur a Venezuela; que la
Vicepresidenta de la Comisión / Alta Representante ha expresado recientemente su
satisfacción por las iniciativas de Unasur y de los socios regionales de Venezuela para
apoyar la mediación en el país;
M.
Considerando que el Papa Francisco ha instado a Venezuela a que retorne a una senda
común por el bien de la nación, reabriendo espacios de entendimiento y estableciendo
un diálogo constructivo y sincero;
N.
Considerando que la mayoría de los medios nacionales e internacionales están
presentando la situación en Venezuela de manera tendenciosa; que la manipulación de
la información, en particular a través de las redes sociales, está dando lugar a que se
difundan rumores e imágenes falsas tomadas en Siria, Chile, Egipto, España o Singapur
como si fueran de Venezuela;
O.
Considerando que el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, ha hecho un
llamamiento para defender la democracia en Venezuela frente a los intentos por
desestabilizar al Gobierno, advirtiendo de que los intentos de golpes de Estado avanzan
con nuevas metodologías en América Latina y denunciando que multinacionales
mediáticas como CNN y Fox News difunden propaganda de guerra en nombre de la paz
y de odio en nombre de la libertad;
P.
Considerando que, en los últimos catorce años, se han celebrado diecinueve elecciones
diferentes en Venezuela; que, pese a las elecciones democráticas, una parte de la
oposición se niega a reconocer la legitimidad del Gobierno; que la Constitución de la
República Bolivariana de Venezuela prevé mecanismos de democracia participativa,
como la celebración de un referéndum para revocar el mandato del presidente; que este
año está prevista la celebración de elecciones legislativas;
Q.
Considerando que la República Bolivariana de Venezuela ha sido elegida, con amplio
apoyo, miembro del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas; que
Venezuela ha aceptado el 97 % de las recomendaciones del último Examen Periódico
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Universal del Consejo de Derechos Humanos, de 2011; que el 80 % de las
recomendaciones eran de aplicación directa y el Estado venezolano se ha comprometido
a la aplicación de las demás recomendaciones aceptadas; que en octubre de 2014
Venezuela fue asimismo elegida para ocupar uno de los cinco puestos rotatorios en el
Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para el período 2015-2016, por 181 votos
a favor de un total de 193; que los días 6 y 7 de noviembre de 2014 el Estado
venezolano compareció ante el Comité de las Naciones Unidas contra la Tortura, que
examinó el cumplimiento por Venezuela de las disposiciones de la Convención contra la
Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes;
R.
Considerando que, entre 2006 y 2013, Venezuela escaló trece posiciones en el índice de
desarrollo humano de las Naciones Unidas, llegando a situarse en el puesto 67 entre 187
países; que, durante el último decenio, el Gobierno de Venezuela ha aumentado los
gastos sociales en más de un 60,6 %; que, en la actualidad, Venezuela es el país con la
tasa de desigualdad más baja de toda la región;
S.
Considerando que, según la CEPAL (Comisión Económica para América Latina y el
Caribe de las Naciones Unidas), en Venezuela ha disminuido considerablemente la tasa
de pobreza y aumentado la esperanza de vida; que la tasa de extrema pobreza descendió
en 2015 hasta su nivel más bajo, 5,4 %, frente al 21 % registrado en 1998; que la
Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) ha
felicitado al Gobierno de Venezuela por haber reducido considerablemente el número
de personas afectadas por la malnutrición, cumpliendo así uno de los Objetivos de
Desarrollo del Milenio;
T.
Considerando que Venezuela es el quinto mayor exportador de petróleo del mundo y
dispone de las mayores reservas mundiales probadas de petróleo; que, según el proyecto
de presupuesto para 2015, el 38 % del gasto público se destinará a inversiones sociales
―educación, vivienda, desarrollo urbanístico, atención sanitaria, seguridad social,
cultura, comunicaciones, ciencia y tecnología―, lo que supone un 8,2 % del PIB total
de Venezuela;
1.
Condena firmemente el último intento de golpe de Estado y los actos de violencia
relacionados con el mismo a manos de grupos opositores de la derecha y la extrema
derecha en Venezuela; deplora la campaña de permanente desestabilización ejercida
contra la República Bolivariana de Venezuela mediante actos violentos enmarcados en
un contexto similar al de la anterior intentona de 2002;
2.
Lamenta profundamente la pérdida de vidas humanas y transmite su pésame a las
familias de las víctimas; pide que a quienes cometan estos crímenes o inciten a ellos se
les exijan responsabilidades por sus actos; expresa su respeto por el sistema judicial de
la República Bolivariana de Venezuela y, por tanto, rechaza cualquier injerencia en los
procesos judiciales abiertos a nivel nacional;
3.
Lamenta el historial de golpes de Estado de algunos de los miembros de la oposición,
como por ejemplo Antonio Ledezma, María Corina Machado y Leopoldo López,
quienes ya se han situado en anteriores ocasiones fuera del marco democrático para
intentar quebrar el orden constitucional venezolano;
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4.
Recuerda su respeto pleno al principio de no injerencia en los asuntos internos de los
Estados, de conformidad con el Derecho internacional; lamenta profundamente
cualquier injerencia de la UE o de cualquier país en los asuntos internos de terceros
países; deplora, en este sentido, la decisión de Estados Unidos de imponer sanciones
contra Venezuela;
5.
Reitera su pleno apoyo y solidaridad al pueblo de Venezuela, al proceso bolivariano y al
Presidente electo, Nicolás Maduro; rechaza todos los ataques a la democracia y la
soberanía de Venezuela;
6.
Denuncia los objetivos antidemocráticos e insurreccionales de la campaña de
desestabilización; destaca los intereses imperialistas de los EE. UU. al querer
garantizarse el acceso a los recursos petroleros de Venezuela y su objetivo político de
debilitar a los países de la ALBA (Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra
América);
7.
Apoya los principios contenidos en la Declaración de Latinoamérica y el Caribe como
Zona de Paz, e insta a toda la comunidad internacional a respetar plenamente esta
Declaración en sus declaraciones con los países de la CELAC, incluyendo el
compromiso de no intervenir directa ni indirectamente en los asuntos de cualquier otro
Estado y de observar los principios de soberanía nacional, igualdad de derechos y
autodeterminación de los pueblos;
8.
Subraya que el diálogo con los terceros países no debe dar lugar bajo ninguna
circunstancia a la imposición de restricciones al derecho de los pueblos a la
autodeterminación; deplora que la UE y sus Estados miembros otorguen con excesiva
frecuencia prioridad a las consideraciones diplomáticas, políticas o económicas frente a
los derechos humanos, planteamiento este que, además, da lugar a una política
caracterizada por los dobles raseros e incompatible con una visión universal de los
derechos humanos; denuncia la espuria utilización de los derechos humanos con fines
políticos por parte del Parlamento Europeo, en particular en el caso de Venezuela;
recuerda que la presente es la novena resolución del Parlamento sobre este país desde
2007, y que la mayoría de estas resoluciones fueron presentadas en períodos de
campaña electoral o coincidiendo con algún proceso de desestabilización;
9.
Lamenta el papel desempeñado por la mayoría de los medios de comunicación
internacionales al difundir rumores e imágenes falsas con objeto de generar un clima de
violencia y desestabilización que debilite al Gobierno venezolano; recuerda que la
libertad de información es un derecho humano fundamental, y pide a los medios de
comunicación internacionales que actúen de forma responsable y que su cobertura de
los acontecimientos sea justa, precisa y equilibrada, a diferencia de lo que ocurre en la
actualidad;
10.
Acoge con satisfacción la aplicación en Venezuela de políticas de inclusión social
basadas en la responsabilidad social, la justicia, la igualdad, la solidaridad y los
derechos humanos, lo que ha contribuido a reducir las desigualdades en el país, en
particular en términos de desarrollo social, y los notables progresos alcanzados en la
reducción de la pobreza o en el terreno de la educación, incluida la erradicación del
analfabetismo en 2005 y la multiplicación del número de alumnos de estudios
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superiores;
11.
Recuerda la importancia del papel de Venezuela en la creación y consolidación de un
proceso de cooperación e integración en beneficio de los pueblos de América Latina;
destaca el notable progreso logrado en la cooperación e integración regionales a favor
de los pueblos de América Latina; celebra los importantes logros de la ALBA y la
CELAC en los ámbitos de la salud, la educación, la cultura y la integración financiera;
12.
Encarga a su Presidente que transmita la presente Resolución al Consejo, a la Comisión,
al Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela, al Parlamento del Mercosur, a la
Asamblea Parlamentaria Euro-Latinoamericana y a los organismos regionales
latinoamericanos, incluidos Unasur, ALBA y CELAC.
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