Unidad Didáctica 1: Prostitución de calle Prostitución de calle Nieves de León Reyes Casal Petit. Oblatas Prostitución de Calle. Nieves de León SUMARIO Presentación ...................................................................................................... 2 Objetivos ............................................................................................................ 3 Objetivo general:............................................................................................. 3 Objetivos específicos:..................................................................................... 3 Contenidos ......................................................................................................... 4 1.- Mitos y estereotipos en relación a la prostitución. ..................................... 4 2.- Definición de conceptos............................................................................. 5 3.- Factores condicionantes de la prostitución de calle .................................. 9 3.1.- Factores para el ejercicio de la prostitución ........................................ 9 3.2.- Actores implicados ............................................................................ 11 3.2.1.- Clientes ...................................................................................... 11 3.2.2.- Proxenetas ................................................................................. 15 3.2.3.- Prostitutas .................................................................................. 17 4.- Cambio de perfil de las mujeres atendidas.............................................. 19 5.- Etapas del modelo de cambio ................................................................. 24 Propuesta de actividades ................................................................................. 28 Recursos .......................................................................................................... 29 Temporalización. .............................................................................................. 29 Evaluación........................................................................................................ 29 Bibliografia........................................................................................................ 30 1 Prostitución de Calle. Nieves de León Presentación La prostitución en un fenómeno social que en los últimos años ha cobrado protagonismo en la opinión pública. Han proliferado artículos y libros que intentan acercarse a la realidad de la prostitución desde diferentes enfoques. Pero nos preguntamos, ¿si la opinión pública está siendo informada de manera suficiente, o por el contrario está siendo manipulada por las diferentes corrientes, sólo mostrando los picos de una problemática que se tiene que estudiar en profundidad? Creemos que en la mayoría de los casos se ofrecen informaciones parciales y sesgadas de una problemática que va más allá de la presencia de una mujer que “vende” su cuerpo en una esquina de las calles de las grandes y pequeñas ciudades de casi todo el mundo. Debemos ayudar a los/as ciudadanas a crear esa conciencia crítica ante el fenómeno, pero como paso necesario y simultáneo, necesitamos que los profesionales de los diferentes servicios públicos existentes en Mallorca estén concienciados, y con capacidad crítica para hacer actuaciones que favorezca y no discrimine a la mujer que ejerce prostitución. Con esta Unidad Didáctica que lleva por título, Prostitución, se pretende proporcionar los conocimientos básicos sobre el fenómeno, acercarnos a la realidad que las mujeres están viviendo, y cómo generar mecanismos que rompan la exclusión social en que tradicionalmente se ha enmarcado al colectivo de mujeres que ejercen prostitución. Los elementos de análisis están tomados de la bibliografía actual disponible sobre el tema pero también, y mayoritariamente, del trabajo que se realiza desde el Casal Petit, Centro de Atención a la Mujer. En un Centro privado cuya titularidad es de las H. Oblatas, institución que se dedica desde el siglo XIX al trabajo con mujeres en contextos de prostitución. Consta de una sesión de tres horas de duración, se pretende abordar con una metodología participativa, donde lo conocimientos sean compartidos y debatidos en grupo. Las personas que se matriculen deberán tener conocimientos básicos del sistema de servicios sociales de las Islas Baleares, ganas de aceptar esta metodología participativa y de involucración personal en el proceso. 2 Prostitución de Calle. Nieves de León Objetivos Objetivo general: 1. Proporcionar los conocimientos elementales para un análisis de la realidad de la prostitución de calle. Objetivos específicos: 1.1. Tomar conciencia de las ideas preconcebidas que tenemos respecto al fenómeno de la prostitución. Mitos y Estereotipos 1.2. Definir conceptos. 1.3. Describir factores condicionantes del fenómeno de la prostitución. 1.4. Cambio de perfil de las mujeres 1.5. Etapas del modelo de cambio 3 Prostitución de Calle. Nieves de León Contenidos 1.- Mitos y estereotipos en relación a la prostitución. Podemos definir mito como las creencias o las opiniones bien sistematizadas y compartidas por todos o parte de los miembros de un sistema social, respecto de lo que es correcto pensar o hacer. Los mitos tienen como característica que intentan oscurecer una realidad que es compleja, por tanto resulta más cómodo creer en el mito y no cuestionarse el contenido que hay detrás. El mito tiene una funciona de amortiguación en las relaciones sociales, quien cuestione el mito es un transgresor. Los mitos se muestran muy reacios al cambio, y presentan pocas modificaciones en el tiempo. Por ejemplo, aunque hoy se han conseguido avances importante en el cuanto a la ciencia histórica, aún se sigue manifestando que la prostitución es el oficio más viejo del mundo. Los estereotipos son creencias sobre colectivos humanos que se crean y comparten en los grupos y entre los grupos dentro de una cultura. El estereotipo puede considerarse “una forma inferior de pensamiento” si este es erróneo por no coincidir con la realidad, por obedecer a una motivación defensiva o por ser rígido o etnocéntrico (Miller)1. Un ejemplo claro que nos viene a la memoria en el tema de prostitución sería la afirmación: todas las mujeres son putas Mitos y estereotipos existentes con relación a la prostitución: 1. Es el oficio más viejo del mundo 2. Es una forma fácil de ganar dinero 3. Lo hacen porque les gusta 4. En una elección libre, lo asumen de manera voluntaria 5. La prostitución VIP es de libre elección, no es lo mismo que la prostitución de las mujeres pobres. 6. La prostitución es un trabajo 7. Son mujeres de vida alegre 8. Si la prostitución no existiera habría más violaciones 9. La mujer como provocadora y el varón como víctima no responsable. 10. No es posible que una prostituta sea violada 11. Todas las mujeres son putas. 1 http://www.geocities.com/rincondepaco2001/estereotipo.html 4 Prostitución de Calle. Nieves de León 2.- Definición de conceptos La palabra “prostitución” tiene su origen en el verbo latino “prostituere” que significa traficar o comerciar. Por lo que podemos decir que el fenómeno social de la prostitución es aquel que tiene que ver con el comercio sexual y que se manifiesta cuando alguien trafica con su cuerpo a petición de otro alguien que está dispuesto a pagar por ello. Sin embargo, no es fácil definir dicho fenómeno, quizá debido al uso que a lo largo de la historia se ha hecho de la palabra prostitución y de la diversidad de definiciones con que contamos. A saber: Según el Diccionario de la Lengua española, prostitución se refiere a la “acción y efecto de prostituir o prostituirse; actividad a la que se dedica la persona que mantiene relaciones sexuales con otras, a cambio de dinero”2. El Nuevo Diccionario de Teología Moral presenta la complejidad y la dificultad de intentar definir el fenómeno de la prostitución, además distingue entre prostitución, comportamiento prostitutivo y organización de la prostitución o proxenetismo: “La prostitución, como actualmente se concibe, se realiza cuando una persona concede con frecuencia a otros su cuerpo por dinero. Generalmente la ejercen las mujeres, pero también los hombres y niños, y las prestaciones sexuales pueden realizarse de forma heterosexual u homosexual (...). Por comportamiento prostitutivo hay que entender toda explotación del cuerpo por intereses no afectivos, como puede ocurrir en personas fáciles a darse para obtener ventajas ocasionales, o en personas obligadas a ceder a los chantajes de quien puede favorecerla en el trabajo o en la carrera (...). En la base de la prostitución hay una extensa organización con ramificaciones internacionales, que impone un código de comportamiento. La organización de la prostitución se llama proxenetismo”3. Los diferentes enfoques que podemos percibir en el tratamiento de este tema, en la bibliografía consultada, van de planteamientos individuales a sociales, desde entender el tema como una actividad sexual a pensar en la globalidad de la persona o del fenómeno social. Las perspectivas desde las que se aborda también son muy amplias: moralistas, higienistas, psicologistas, económicas, de género, reivindicativas, etc.. “La prostitución es la consecuencia de la subordinación de las mujeres en el conjunto de las sociedades y de la relación de fuerza entre las categorías de sexos; es su situación más extrema. El fenómeno de la prostitución sólo puede 2 REAL ACADEMIA ESPAÑOLA, Diccionario de la Lengua Española. Espasa Calpe, Madrid 21 1992 . 3 G. DAVANZO, Prostitución : F. COMPAGNONI, et al., Nuevo diccionario de Teología Moral, Paulinas, Madrid 1992, 1537-1551. 5 Prostitución de Calle. Nieves de León entenderse mediante el análisis de la articulación del concepto del patriarcado y el de la estratificación social (clases sociales)”4. “Siendo la prostitución un fenómeno social, la solución del problema corresponde a la sociedad, pero ¿cómo puede hacerlo?. Las siguientes medidas podrían ser útiles: creación de una conciencia del problema en la mente del público donde, al igual que las guerras, nace la prostitución; desmitificación de prejuicios: “la prostitución no es un mal necesario sino un flagelo de la humanidad”,”la persona no nace prostituta sino que se convierte en prostituta”; establecimiento de estructuras apropiadas para el rescate de los niños que están en peligro; reinserción social para evitar recidivas; dirigirse a los gobiernos, en el marco de una acción concertada a nivel internacional, para obtener la creación de estructuras especiales de control”5. “Consideramos que la sexualidad de la prostitución no es una experiencia sexual para el cuerpo de la mujer tratado en forma de mercancía. Al buscar en esta reunión las causas de la prostitución y a la luz de los nuevos trabajos del movimiento feminista, nosotras iniciamos un nuevo discurso que considera la prostitución como una forma de discriminación y violencia sexual, y como una violación de la dignidad humana”6. “Institución masculina patriarcal según la cual un número indeterminado de mujeres no llega nunca a ser distribuido a hombres concretos del colectivo de varones a fin de que queden a merced de uno sólo, sino de todos los hombres que deseen tener acceso a ellas, lo cual suele estar mediatizado por una simple compensación económica. Una vez hecha posible y creada la institución, por y para los hombres, la evolución de la misma y formas de concretarse son muy numerosas. A las prostitutas se las llama a veces “mujeres libres” en el sentido de que no tienen un amo único (marido) pero en cambio están expuestas al tratamiento autoritario y patriarcal de todos o cualquiera de los varones”7. “La prostitución va más allá de lo que vemos y de quienes vemos. Es un fenómeno cambiante que está sujeto a factores económicos y que no sólo se refiere al estrato social de las prostitutas, sino a quienes obtienen beneficios económicos elevados, rápidos y con pocos riesgos, a pesar de usar la explotación de terceras personas. No sólo es prostitución la mujer que ejerce y no sólo es prostitución la ejercida en espacios abiertos. La prostitución es redes de tráfico y explotación de personas, es proxenetas, es clientes, es maltrato físico, sexual y psicológico, es falta de recursos personales, es abandono, es drogas, pobreza, miseria...; Y las personas que ejercen la prostitución pueden 4 ONU, Causas de la prostitución y estrategias contra el proxenetismo, Reunión internacional de expertos sobre las causas socioculturales de la prostitución y estrategias contra el proxenetismo y la explotación sexual de las mujeres, Madrid 1986. Ministerio de Cultura, Instituto de la Mujer, Madrid 1988, 10. 5 G. KOUASSI, El colonialismo y la aparición de la prostitución: FEDERACIÓN ABOLICIONISTA INTERNACIONAL, Cultura, sexo y dinero. Sus efectos sobre la mujer y el niño. Conferencia Regional para África, Noviembre 1991, 40. 6 ONU, o. c., 14. 7 Z. E. RAMÍREZ, Prostitución y subdesarrollo, una aproximación teórico-feminista., Centro Feminista Latinoamericano de Estudios Interdisciplinarios (CEFLEIN), Caracas 1994, 159. 6 Prostitución de Calle. Nieves de León hacerlo en espacios abiertos como calles, parques, polígonos industriales o puertos, pero también en hoteles, domicilios propios, casas de masajes, bares de alterne, clubes, locales de espectáculo”8. “La prostitución, partiendo de un hecho biológico, es transformada en un fenómeno social en virtud de determinados condicionamientos económicos, culturales, religiosos y políticos. Y sobre todos ellos un denominador común: la prostitución como forma simple y primitiva de la lucha de la mujer por su subsistencia”9. “La prostitución y el tráfico de mujeres constituye una violación fundamental de los derechos humanos de las mujeres. No debe asociarse, bajo ningún concepto, a terminología tal que “forzada” o “libre”, ya que “la libre elección” es un factor relativo, influenciado por cuestiones económicas, sociales, culturales y por las opciones políticas de las mujeres. La desigualdad restringe ampliamente la libertad de elección. Ya que la prostitución y el tráfico de mujeres son violaciones de los derechos humanos, la obtención de un protección efectiva de estos derechos depende de la situación de las mujeres en todos los ámbitos. Ésta se encuentra íntimamente unida a la puesta en práctica de estrategias específicas, que permitan a mujeres y a hombres negociar bajo la forma de un contrato de género. Las estrategias destinadas a hacer frente a la prostitución y al tráfico de mujeres deben distinguirse por su carácter polivalente. Por un lado, deben responder a las necesidades de las mujeres cuyos derechos son violados, y a su vez, deben dirigirse medidas hacia los clientes, los proxenetas y otras personas que se benefician de la industria del sexo (...). Se debe educar a la opinión pública sobre el hecho de que la venta de seres humanos representa una violación de los derechos fundamentales, y por tanto debe considerarse como ilegal”10. “La prostitución es a la vez un síntoma de un orden social injusto y una institución que explota económicamente a las mujeres (...), esclavitud sexual organizada”11. “Una institución no igualitaria que se apoya sobre la explotación de los derechos humanos, mayoritariamente de las mujeres y los niños, ya que la demanda prostitucional proviene exclusivamente de los hombres (...), estimamos que el comercio del sexo, en cualquiera de sus modalidades y soportes, perpetúa un sistema de esclavitud. Nos oponemos a la idea subyacente en toda proposición acerca de la legalización según la cual se podría distinguir entre una prostitución forzada -la trata de seres humanos- y una prostitución libre que sería la manifestación de una opción personal. 8 Mª J. BARAHONA, Participación en la mesa redonda Medios de comunicación, Internet y prostitución: DIRECCIÓN GENERAL DE LA MUJER, Simposio internacional sobre prostitución y tráfico de mujeres con fines de explotación sexual, Madrid 26-28 junio 2000. Pub. DGM, Madrid 2001, 258. 9 FUNDACIÓN SOLIDARIDAD DEMOCRÁTICA, La prostitución de las mujeres, Ministerio de Cultura, Instituto de la mujer, Madrid 1988, 11. 10 Lobby europeo de Mujeres (LEF), Resolución adoptada en la Asamblea General del lobby de Mujeres Europeas: Prostitución y tráfico de mujeres. Junio 1998. 11 K. BARRY, Esclavitud sexual de la mujer. La Sal Edicions de les Dones, Barcelona 1988. 7 Prostitución de Calle. Nieves de León Consideramos que esta distinción pertenece a ciertos grupos de presión que no se corresponden con la realidad”12. “Podemos decir que la prostitución es un fenómeno social complejo, y no individual. Por tanto, si lo consideramos así, es algo que concierne a la sociedad en su conjunto”13. “La prostitución es un tema en constante mutación, y son precisamente estas mutaciones las que nos permiten captar la verdadera naturaleza de la prostitución, que no es el oficio más viejo del mundo, ni un dique de contención contra la violencia sexual en las ciudades, ni un medio de educación sexual. Es un problema que fluctúa con la actualidad económica y política, y constituye el reflejo y el espejo deformado y deformante de las relaciones entre los “bloques” Norte/Sur, Este/Oeste, Campo/Ciudad, (...) es un problema de actualidad”14. “El reconocimiento de la prostitución como una decisión legítima de trabajo para adultos, ya sea una decisión hecha por elección o necesidad”15. “Descriminalizar la prostitución y reglamentar las relaciones con terceras partes de acuerdo con los códigos de comercio ordinarios (...), deben incluirse cláusulas especiales para impedir que se abuse de las prostitutas y se las estigmatice (...). No debería existir ninguna ley que implique una distribución sistemática de zonas de prostitutas. Las prostitutas deben tener el derecho a elegir su lugar de trabajo y su residencia (...). No debería existir ninguna ley discriminatoria contra las prostitutas que se asocian y trabajan colectivamente para adquirir un grado alto de seguridad personal (...). Las prostitutas deben tener los mismos beneficios sociales que todos los demás ciudadanos de acuerdo con las diferentes reglamentaciones de los diferentes países (...), las prostitutas deben pagar impuestos regulares sobre la misma base que los demás contratantes y empleadores, y deben recibir los mismos beneficios”16. “El ejercicio (de la prostitución) puede y debe ser legalizado, la explotación no. Jurídicamente hablando, pues, la legalización de la prostitución supone sólo que esta última sale del ámbito de las conductas consideradas socialmente peligrosas -por derogación total o parcial de la ley de peligrosidad social- y, por tanto, pasa a ser una conducta legal”17. “La consideración de la prostitución como asunto público, materia de empleo y lucha por la emancipación marcó una separación radical de las ideologías dominantes que establecen que la prostitución es un tema de justicia 12 UNIVERSITÉ DES FEMMES (Bruxelles), Motion sur la prostitution du ‘Groupe prostitution de l´Université des Femmes’. Folleto, n/p, (traducción personal). 13 W. TAMZALI, Informe universidad de Pensilvania. Reunión Internacional de expertos sobre explotación sexual, violencia y prostitución. Abril 1991. 14 W. TAMZALI, De la necesidad de un debate sobre la prostitución en Europa. Pub. DGM, Consejería de Servicios Sociales, Madrid 1999. 15 G. PHETERSON, Nosotras, las putas. Talasa, Madrid 1989, 74. 16 Carta Mundial por los derechos de las prostitutas. Comité internacional por los Derechos de las Prostitutas, Ámsterdam, febrero 1985: G. PHETERSON, o.c., 83. 17 R. OSBORNE, Feminismo y prostitución. Buenas intenciones y malas comprensiones: R. OSBORNE, Las mujeres en la encrucijada de la sexualidad, La Sal Edicions de les Dones, Barcelona 1989, 104. 8 Prostitución de Calle. Nieves de León criminal (con la prostituta como proscrita sospechosa), salud pública (con la prostituta como agente sospechoso de la transmisión de enfermedades) y/o reforma social (con la prostituta como víctima indefensa que necesita de rehabilitación)”18. Si recogemos los elementos comunes, podemos elaborar una “definición estándar” del fenómeno de la prostitución, que, aunque no recoge la complejidad de dicho fenómeno, sí podría ser extrapolable a cualquier contexto y momento histórico: “El fenómeno de la prostitución es la manifestación pública del comercio del sexo, que se realiza entre personas que llevan a cabo actos sexuales a cambio de dinero o cualquier otro beneficio económico”. 3.- Factores condicionantes de la prostitución de calle 3.1.- Factores para el ejercicio de la prostitución Cuáles son los factores que condicionan para que una mujer se vea obligada a ejercer prostitución. Partimos del hecho de que una mujer no piensa en principio en la prostitución como una salida profesional entre otras, sino se ve condicionada por una serie de factores tanto físicos, como sociales, económicos, etc. El capítulo segundo del libro: Manual de Intervención Social con Mujeres Prostituidas, de Mª José Barahona y Luis García Vicente, que publicó la Dirección General de la Mujer de la Comunidad de Madrid, habla de los factores de influencia la entrada de la mujer en la prostitución. 19 Benjamín Masters, señalan tres factores causales por los que las mujeres pueden terminar ejerciendo la prostitución: 1. FACTORES PREDISPONENTES: incluyen hogares rotos, promiscuidad parental y aprobación o tolerancia de la prostitución en su entorno social inmediato. 2. FACTORES ATRAYENTES: ventajas de la carrera de prostitución para un individuo (grandes ingresos, una vía más interesante y excitante) 3. FACTORES PRECIPITANTES: presión económica, satisfactoria, seducción por un proxeneta o prostituta. relación no Los autores aportan otra clasificación basada en las observaciones que han realizado en el trabajo de calle, y con la que nosotras también sintonizamos, desde nuestro trabajo con las mujeres que ejercen prostitución de calle en el “Barrio Chino” de Palma, por eso nos parecía interesante reproducirla. 18 G. PHETERSON, El prisma de la prostitución. Talasa, Madrid 2000, 13. Mª JOSÉ BARAONA Y LUIS MARIANO GARCÍA VICENTE. Manual de Intervención Social con Mujeres Prostituida. Madrid. 2004 19 9 Prostitución de Calle. Nieves de León 1. FACTORES INDIVIDUALES: Son los que son vividos por la mujer de manera personal. Que pueden ser vividos por muchas mujeres pero no conducen a todas a ejercer prostitución. a. haber sido víctima de malos tratos b. abusos sexuales y violaciones intrafamiliares o extrafamiliares. c. embarazos a edades tempranas y producto de ello la expulsión. d. rechazo o huída del entorno familiar. e. consumo de drogas legales e ilegales f. ausencia de expectativas de futuro g. baja autoestima y autopercepción distorsionada h. escaso o nulo desarrollo de habilidades sociales i. desarraigo familiar como producto de procesosmigratorios individuales (internacionales y intranacionales). 2. FACTORES MICROSOSICALES: Son los que están relacionados con la red de de sistemas informales más cercanos a la mujer, y que han formado parte de su proceso de socialización: a. FAMILIARES: i. antecedentes familiares en la prostitución ii. presencia de adicciones intrafamiliares iii. baja cohesión familiar iv. clima afectivo inadecuado v. estilo educativo familiar vi. dependencia afectiva y económica de la pareja b. GRUPALES: i. presión del grupo ii. aislamiento social iii. grupo de iguales con conductas problemáticas iv. actitudes del grupo hacia la prostitución v. miembros del grupo de referencia con vinculación a la prostitución 10 Prostitución de Calle. Nieves de León c. EDUCATIVOS: i. bajo nivel de estudios ii. fracaso escolar iii. absentismo escolar iv. falta de integración escolar v. escasa cualificación profesional para vincularse al mercado de trabajo ordinario 3. FACTORES MACROSOCIALES: Son los que se ubican dentro de la esfera social, nos vienen impuestos por el país, la época histórica, y demás factores que nos tocan vivir. i. feminización de la pobreza ii. diferencia y desigualdad de género en el acceso al mundo laboral iii. facilidad para acceder al mundo de la prostitución iv. actitudes sociales tolerantes hacia un tipo de prostitución v. sistema colectivo de valores (culto al dinero, las tendencias al escepticismo, al hedonismo y al individualismo) vi. confuso discurso social sobre la prostitución vii. doble estándar moral de las sociedades patriarcales viii. pasividad social ix. aumento de redes de tráfico de mujeres con fines de explotación sexual. La vinculación e interrelación de estos factores vivido en momentos diferentes son los que llegan a determinar el momento y los motivos para que una mujer entre en la prostitución. Es obvio el interés del estudio de los factores condicionantes de la entrada de la mujer en la prostitución, pues si los podemos manejar, pondremos abordar programas de prevención e intervención adecuados. 3.2.- Actores implicados 3.2.1.- Clientes Lo primero que hemos de resaltar es la estrategia de la invisibilidad de los clientes, por la que la estigmatización social recae sobre uno solo de los integrantes del acto sexual “negociado”, normalmente la mujer. Esto es debido a lo que se ha denominado doble moral, que castiga la actividad sexual de las mujeres fuera de los márgenes permitidos, al tiempo que considera normal, e 11 Prostitución de Calle. Nieves de León incluso valora como un indicador de virilidad, la misma actitud en los hombres. Como consecuencia, las políticas de represión de la prostitución se centran en la rehabilitación de las mujeres y nunca en la re-educación de los clientes, vistos como personas normales de cualquier clase social20. Por tanto, los clientes permanecen en el anonimato, tienen derecho a “ser respetados”. Sin embargo, son uno de los factores condicionantes del fenómeno de la prostitución, hacen que ésta exista. En este sentido, la Resolución del Parlamento Europeo del 11 de junio de 1986 sobre las agresiones a la mujer, ponía de manifiesto que: “llama la atención la hipocresía de aquellas sociedades que condenan y penalizan a las prostitutas, mientras que los clientes, los últimos responsables de la frecuencia de este fenómeno, no tienen marca, ni estigma, ni persecución por la que temer”21. Tras la entrada en vigor de la nueva Ley de Suecia, que penaliza a los clientes, la única referencia que recoge la Resolución adoptada por el Parlamento Europeo, el 19 de mayo de 2000, es acerca de la organización de “actividades de información y de sensibilización tendentes a reducir la demanda” ( 12.p.11). Así, nos preguntamos acerca de la figura del cliente: • El estudio realizado por el Instituto de la Mujer22 establece una tipología del cliente: o El cliente tradicional, de más edad: suele ser educado y respetuoso. Es el que acude a clubs y casas de citas y busca mujeres que ya conoce. No suele ser violento ni exigente. o El cliente “de paso”, sobre todo acude a clubs de carretera y casas de citas. De cualquier edad. o Los clientes jóvenes, aquellos con los que las mujeres tienen las experiencias más negativas en cuanto a engaños y situaciones de agresión y violencia. Acuden a requerir los servicios de las mujeres en prostitución en grupos de dos o tres, normalmente en la calle y en zonas apartadas. • K. Barry23 habla de los clientes en términos de mercado y distingue: o El mercado de los hombres de negocios y marinos. o El mercado de los trabajadores migrantes. o El mercado militar. 20 D. JULIANO, o. c. M. FERRANDO, La prostitució: un tema complex. Alimara, 36 (1995) 75. 22 INSTITUTO DE LA MUJER, Las notas características de la prostitución y acceso a los servicios sociales. 1997-1998 (n/p). 23 Cfr. K. BARRY, Esclavitud sexual de la mujer. La Sal Edicions de les dones, Barcelona 1988. 21 12 Prostitución de Calle. Nieves de León • Kinsey24 presenta un perfil del cliente. De sus observaciones se desprende que más del 70% de la población masculina ha tenido algún contacto con el mundo de la prostitución como clientes. Apunta, además que la proporción de relaciones por medio del comercio sexual aumenta conforme envejece el hombre, lo que es debido a la disminución de la habilidad de éste para encontrar parejas jóvenes o porque considera más sencillo negociar que conquistar. Afirma que los hombres, al pagar, se evitan complicaciones sociales o legales, en sus relaciones extramatrimoniales, porque se escudan en el anonimato. Y señala que los que más acuden a la prostitución son los de un nivel social bajo. • Acosta25 opina, por el contrario, que en sus averiguaciones ha podido establecer que las personas que visitan los prostíbulos son el profesional, el industrial, el burócrata, el político, el comerciante, el obrero cualificado, etc., que tienen dinero suficiente y de sobra. Además dice que hoy es menos frecuente la asistencia de estudiantes universitarios y hombres jóvenes. • El sociólogo sueco Axel-Sven Mansson26, en los resultado del estudio de su departamento acerca de “los clientes y la imagen de los hombres y de la masculinidad en la sociedad moderna”, destaca: “en EE.UU. el 16% de los hombres han pagado por sexo, en España el 40%, en Gran Bretaña el 6,6% y en Suecia el 13% (...), entre los motivos que revelaron los 700 entrevistados para acudir a la compra de sexo se descubren factores, causas, razonamientos sociales e individuales. Entre los demandantes hay dos grupos: clientes que compran sexo esporádicamente y otros que lo consumen en grandes cantidades. Unos confiesan que este consumo se debe a problemas de contacto sexual o de soledad. Otros consideran que la mujer prostituta no vale nada, es un cliente que deshumaniza a la mujer y la usa a cambio de dinero (...); dentro de la prostitución, las posibilidades son absolutas siempre que el cliente esté dispuesto a pagar. Esto representa una visión acomodada de la sexualidad según la cual el sexo es más un producto de consumo que el resultado de una relación íntima. Sin embargo, del total de clientes, casi la mitad desempeña en sus encuentros sexuales con las prostitutas un papel pasivo (...). La dimensión del consumo está ligada a una cuestión cultural. Y en los países mediterráneos está muy arraigado el sentido machista. Es muy frecuente el hombre, el padre, el tío, que dice mi primera experiencia ha sido con una prostituta. En general cuando un hombre se dirige a la prostitución cree que afianza su masculinidad (...). El perfil del hombre que consume prostitución es de 40 años de media, que tiene una situación social buena, tiene familia y tiene unos ingresos bastante buenos (...), es un hombre que tiene experiencia sexual (...), también es bastante común el hombre joven que está metido en Internet (...). Internet ha atraído muchos clientes, gente joven que tiene un nivel universitario bastante bueno y que está buscando una acción pasiva”27. 24 Cfr. A. KINSEY, La conducta sexual del varón. Interamericana, S.A., México 1979. Cfr. R. ACOSTA, o. c. 26 Cfr. S. - A. MANSSON, l. c., 231-248. 27 Ibidem, 235. 25 13 Prostitución de Calle. Nieves de León En realidad, no se puede establecer un status social determinado del cliente, porque del mismo modo que hay diversas formas de prostitución, desde la más marginal hasta la más sofisticada, así existen diferentes tipos de clientes. De hecho, la oferta se diversificará en función de la variabilidad en la demanda. De fondo se percibe un tratamiento de la mujer como objeto, ante el hombre como sujeto. Fruto de una visión patriarcal de la sociedad, más tolerante con el hombre en este contexto de prostitución. El cliente está más justificado que la mujer. A este respecto parece necesario recoger las palabras de Gail Petherson, “no resulta trasgresor para los hombres usar sexualmente a las mujeres dentro del modelo de las relaciones tradicionales, ya sea en el papel de amante, esposo o cliente. Lo que es trasgresor para los hombres es el uso no autorizado de las mujeres, como en el adulterio, la violación fuera del matrimonio, el incesto o el ejercer de chulo. Lo que es trasgresor para las mujeres no es ni el proporcionar servicios a los hombres ni recibir dinero u otro tipo de bienes a cambio de un servicio sexual; la trasgresión de las mujeres consiste en requerir de forma explícita servicios sexuales y recibir dinero a cambio -o negarse a prestar el servicio a los hombres en cualquier ámbito, ya sea afirmando su derecho a elegir su reproducción, insistiendo en su propio placer sexual, rechazando el matrimonio o reclamando su autonomía sexual y económica como lesbianas-”28. Para determinar los MOTIVOS por los que los hombres acuden en busca de una mujer par la prostitución se puede dividir en 5 categorías: 29 Relación afectiva insatisfactoria Relación sexual insatisfactoria Egocentrismo – vanidad Fantasías Diversión – entretenimiento Por la FINALIDAD por la cual se acude: buscando afecto buscando sexo y afecto buscando sexo Para determinar la VARIABILIDAD de la mujer con la que se establece contacto: con las misma mujer 28 G. PHETERSON, El prisma de la prostitución. Talasa, Madrid 2000, 22-23. Mª JOSÉ BARAONA Y LUIS MARIANO GARCÍA VICENTE. Manual de Intervención Social con Mujeres Prostituida. Madrid. 2004 29 14 Prostitución de Calle. Nieves de León con distintas mujeres Para determinar la REGULARIDAD con la que acude a la prostitución: frecuente o habitual ocasional o esporádico Relativo a la CONCURRENCIA: acude solo acude en grupo Muchas veces nos preguntamos qué lleva a las mujeres a ejercer la prostitución, la pregunta debería ser por qué muchos hombres eligen comprar sexo y qué es, en realidad, lo qué compran. 3.2.2.- Proxenetas Según el Nuevo Diccionario de Teología Moral, “la organización de la prostitución se llama proxenetismo, en la cual actúan cuatro categorías distintas. Los protectores, los dueños de los locales en los cuales tiene lugar el comercio prostitutivo, las alcahuetas y los traficantes”30. El Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua31 define al proxeneta como sinónimo de alcahuete o celestina, “persona que, con móviles de lucro, interviene para favorecer relaciones sexuales ilícitas”. Podemos acercarnos a la figura del proxeneta como el inductor de que una persona trafique con su cuerpo o como la persona que facilita los medios necesarios para que se desarrolle la actividad prostitutiva. “El fin último del proxeneta es la obtención de ganancias económicas con la venta del cuerpo ajeno”32. En algunos de los modos de prostitución existentes, en concreto en la prostitución más marginal, el proxeneta asume el papel de “chulo” o “rufian”, al establecer relaciones afectivas con la persona que se prostituye, apropiándose de la ganancia adquirida bajo amenazas físicas o chantajes emocionales, y siempre apareciendo como el “protector” y defensor de la mujer que se está prostituyendo. “El “chulo” resulta especialmente indeseable, no porque ocasionalmente maltrate a su compañera, ya que esta conducta está muy extendida en la sociedad global, sino porque invierte las conductas que aseguran el dominio legitimado de los hombres. Cobra en lugar de pagar, lo que le hace dependiente económicamente de su compañera, y acepta explícitamente compartir con otros sus servicios sexuales, lo que cuestiona la presunta base instintiva de la posesividad masculina. Sin embargo, para que el modelo no se 30 G. DAVANZO, Prostitución : F. COMPAGNONI et al, Nuevo diccionario de Teología Moral, Paulinas. Madrid 1992, 1539. 31 REAL ACADEMIA ESPAÑOLA, Diccionario de la Lengua Española. Espasa Calpe, Madrid 21 1992 . 32 Cfr. FUNDACIÓN SOLIDARIDAD DEMOCRÁTICA, o. c. 15 Prostitución de Calle. Nieves de León derrumbe totalmente, se le asignan en el imaginario el mantenimiento de algunos rasgos considerados masculinos: poder, inteligencia para controlar, capacidad para dominar... es curioso que a pesar de que muchas veces la prostituta comparte sus ganancias con otras personas, como dueños de bares, y que históricamente tanto las regentes de los burdeles, las “madames”, como las inductoras o alcahuetas eran mujeres, se haya masculinizado la imagen pública de la figura del explotador y se hayan concentrado los recelos en el compañero afectivo de estas mujeres”33. Barry34 denuncia el proxenetismo como una “de las demostraciones más despiadadas del poder masculino y de la dominación que se ejerce en el plano sexual”. Si analizamos el fenómeno de la prostitución como expresión de la interpenetración entre dos sistemas presentes en nuestra sociedad: • El sistema patriarcal, en el que se han constituido los Estados, costumbres, legislaciones, religiones, etc.; presente en la mayoría de los mecanismos culturales actuales e institucionalizado tanto a nivel estatal como de mercado, en la industria global del sexo, de la pornografía y la prostitución, del tráfico de personas y de otras formas de explotación humana y sexual. • El sistema del capitalismo liberal, fundado en la universalización de la ley del beneficio económico, que puede llevar a la mercantilización sexual de los seres humanos. Podemos considerar la existencia en nuestra sociedad de un sistema prostitucional, que “es una de las formas de dominación patriarcal que organiza y legitima la puesta a disposición sexual de algunos seres humanos, de sexo femenino en la inmensa mayoría de los casos, para mantener y reforzar el poder masculino... Bajo el control, la responsabilidad y en aras del beneficio de los Estados, los proxenetas, que pueden ser personas físicas o jurídicas, garantizan, de forma potencial a todos los hombres y de forma efectiva a los clientes, la posibilidad de acceso al mercado del sexo, ofertado por un grupo de personas denominadas prostitutas, del que forman parte, en la mayoría de los casos, mujeres adultas, adolescentes y niñas/os”35. En este sistema prostitucional, teniendo en cuenta la situación actual de globalización de la explotación sexual, hemos de señalar el uso de las tecnologías de la comunicación, Internet, así como la transmisión por satélite y otros medios -anuncios, líneas eróticas, agencias matrimoniales o de señoritas de compañía, etc.-, al servicio del mercado del sexo. Además incorporamos en la categoría “proxeneta” las mafias y redes de tráfico de personas, mujeres y niños, con fines de explotación sexual. 33 Cfr. D. JULIANO, Las prostitutas: el polo estigmatizado del modelo de mujer, (borrador), n/p, Cfr. K. BARRY, Esclavitud sexual de la mujer. La Sal Edicions de les dones, Barcelona 1988. 35 Cfr. M. V. LOUIS, Hacia un nuevo abolicionismo. DIRECCIÓN GENERAL DE LA MUJER, l. c., 203-218. 34 16 Prostitución de Calle. Nieves de León El Consejo de la FIFCJ (Federación Internacional de Mujeres de Carreras Juristas), reunido en Estambul, del 1 al 4 de septiembre de 2001, para debatir sobre el tráfico de seres humanos, ha llegado a las siguientes conclusiones: “El tráfico de mujeres y niños de ambos sexos, con propósito de prostiruírlos sexualmente, es una forma actual de la esclavitud (...). Como consecuencia de la globalización que afecta principalmente a la economía y a las tecnologías de la comunicación y la información, están aumentando de manera sustancial la pobreza y las desigualdades económicas y sociales en todo el mundo (...). Las facilidades para la información, el transporte y la comunicación hacen que desde las regiones más pobres se haya iniciado un proceso de nuevas migraciones hacia las zonas más prósperas. Estos flujos migratorios son el caldo de cultivo del inhumano tráfico de personas, en especial de mujeres, niñas y niños (...). Denunciamos la deshumanización de las redes organizadas de trata de personas (...). El tráfico de seres humanos con fines de explotación sexual discurre en paralelo a los flujos migratorios laborales (...). En muchos países del mundo desarrollado y en algunas zonas más ricas de países pobres, los negocios del sexo proliferan y se desenvuelven cada vez con mayores facilidades, movilizando ingentes cantidades de dinero, ante la pasividad de las autoridades y la indiferencia de la opinión pública (...). La falta de estructuras jurídicas internacionales adecuadas a la globalización económica están impidiendo averiguar y perseguir eficazmente las organizaciones criminales, por lo que es necesario incrementar los esfuerzos realizados para construir un nuevo derecho penal internacional y armonizar las legislaciones de todos los países (...). Es necesario involucrar a los Gobiernos, a las organizaciones internacionales y a las ONGs de los países de origen, tránsito y destino para que cooperen entre sí en la erradicación del fenómeno del tráfico de seres humanos”. Podemos concluir afirmando que “con independencia del sexo de la víctima, la explotación sexual es siempre un fenómeno con múltiples explicaciones: la miseria y la sociedad de consumo que inducen a su práctica; la impunidad de los que viven de la explotación sexual de las mujeres, los niños y los adolescentes, y el abuso sexual y los malos tratos sufridos en seno de la propia familia”36. Al enmarcar la prostitución en la industria internacional del sexo, como un intercambio mercantil donde media una remuneración económica, reconocemos la existencia de los beneficiarios de dicho intercambio, que favorecen y sustentan la existencia de dicha industria. 3.2.3.- Prostitutas Las mujeres que trabajan en prostitución y se asocian para reivindicar sus derechos como trabajadoras del sexo, afirman que la investigación social científica, en concreto la investigación del sexo, está llena de prejuicios contra las mujeres etiquetadas como prostitutas. Sugieren que la categoría prostituta 36 D. FELIZARDO, Conferencia, Foro Mundial de Mujeres contra la Violencia, Valencia del 23 al 25 de noviembre de 2000. (n/p). 17 Prostitución de Calle. Nieves de León se basa más en las representaciones simbólicas y legales de las malas mujeres que en un conjunto real de características que se dan dentro de este grupo de personas. Dicen que los artículos científicos, en repetidas ocasiones, llegan a conclusiones sobre la prostituta o sobre prostitutas en general partiendo de muestras de mujeres determinadas, con las que la mayoría de las trabajadoras sexuales tienen poco que ver. Al utilizar la expresión “la categoría prostituta” como uno de los factores condicionantes del fenómeno de la prostitución, lo que pretendo es resaltar ese imaginario social que existe alrededor de las mujeres que están en prostitución y que afirma que sin ellas no existiría tal fenómeno, haciéndoles las únicas responsables del mismo. Según dicho “imaginario”, podríamos preguntarnos acerca de quiénes son las prostitutas, y nos encontramos con que son definidas por su comportamiento: el acto de pedir dinero a cambio de sexo. Es importante resaltar que aquellas personas que solicitan dinero a cambio de sexo quedan definidas por su actividad, mientras que aquellos que pagan por el sexo raras veces se les distingue de la población masculina en general. La etiqueta de “puta” se aplica a toda persona que trabaja o ha trabajado en la industria del sexo como prostituta, modelo pornográfico, bailarina de striptease, masajista, subrogado sexual o cualquier otro servicio o entretenimiento sexual. La puta como prostituta o como trabajadora sexual es el prototipo de mujer estigmatizada o de hombre feminizado. Pero no sólo las prostitutas son etiquetadas como putas. Cualquier mujer puede ser llamada “puta” dentro de un particular entorno cultural, especialmente si es emigrante, blanco de la discriminación racista, trabajadora independiente o víctima de una violación. Quedando, así, en una situación de vulnerabilidad frente a los controles y castigos legales, cuando se dan, y atrapada en tal estatus, ya que en la mayoría de las sociedades permanece fijado, independientemente de cualquier cambio de conducta. “Dado que la prostitución funciona como regulador institucionalizado de los preceptos de género, cualquier conducta transgresora por parte de las mujeres o de personas identificadas como mujeres dentro de un contexto dado puede suscitar el estigma “prostituta” o “puta” y sus consecuencias punitivas. Por ejemplo, las mujeres que trabajan o simplemente se mueven en la esfera pública (“mujeres públicas”/”mujeres comunes”) y las mujeres que viajan solas o acompañadas de otras mujeres (“mujeres libres”), independientemente de su ocupación o su intención, han sido etiquetadas, golpeadas y a veces arrestadas por prostitución igual que lo han sido las mujeres acusadas de quebrantar los códigos de discriminación de género dentro del matrimonio, de la migración o en el vestir”37 37 G. PHETERSON, El prisma de la prostitución. Talasa, Madrid 2000, 35-36. 18 Prostitución de Calle. Nieves de León Es a las prostitutas a las que se elige como único punto de mira para la investigación sobre la prostitución, o para cualquier otro tipo de análisis de la conducta sexual-social-económica. Afirma Gail Pheterson que de forma general, los investigadores no examinan el intercambio sexual-económico en la vida de las personas que no poseen la etiqueta de “prostituta”, ni se preguntan si la categoría prostituta significa otra cosa que no sea estatus social, o si ese estatus tiene alguna relevancia para la materia de estudio que tienen entre manos38. Al estudiar la prostitución como un fenómeno social y sopesar todos los elementos que entran en juego, nos encontramos con la ausencia de investigaciones sobre los clientes, su sexualidad, sus carencias, las causas y las consecuencias derivadas de su ejercicio de la prostitución; además, la variable género muy pocas veces aparece en la investigación. Puede que la cuestión esté en que cliente sexual no es un estatus social, sino una actividad de personas dominantes (varones), libres de control médico, legal y social (generalmente). “Quizá si hubiera más mujeres que tuvieran el dinero, la licencia sexual y la inclinación psicológica para comprar sexo, clienta de la prostitución se convertiría en un estatus adicional estigmatizado asociado al género femenino”39. 4.- Cambio de perfil de las mujeres atendidas El fenómeno de la prostitución no es nuevo, pero va mostrando perfiles diferentes respecto de las mujeres que ejercen la prostitución. Es importante tener en cuenta la diversidad y complejidad de esta cuestión. Al hacer un análisis respecto de los cambios que ha sufrido el perfil de las mujeres que ejercen la prostitución, parece obligado hablar del aumento de mujeres extranjeras que la ejercen en España. Este es un aspecto muy importante; pero sería muy simple quedarnos en esta constatación. Dos preguntas surgen ante este dato, por un lado, tendríamos que analizar qué ha pasado y qué está pasando para que se haya dado este cambio. Y, por otro, qué pasa con las mujeres españolas que ejercen esta actividad. Respecto a la primera cuestión, hay varias hipótesis: - Se ha dado un aumento importante de la población inmigrante en nuestro país. - Las dificultades de la población inmigrante, en general, de regularizar su situación y, por tanto, de encontrar trabajo. Y ante la necesidad y urgencia de pagar una deuda económica y enviar dinero continuamente a su familia en su país de origen, terminan por ejercer la prostitución. 38 39 Ibidem. Ibidem, 48. 19 Prostitución de Calle. Nieves de León - Sabemos también que hay mujeres que al venir a España ya lo hacían con el proyecto de ejercer aquí esta actividad. Entre éstas hay mujeres que vienen a España sabiendo que van a ejercer la prostitución y que “no se consideran víctimas, más que del sistema burocrático español”. “Y que en lo que se han sentido engañadas, ha sido en las condiciones laborales y que no se imaginaban que el trabajo fuese tan duro”. - No hace tantos años que oíamos hablar de “la trata de blancas”, es decir mujeres españolas que eran engañadas y se les llevaba a otros países cuyo destino era la prostitución, justo al revés que en la actualidad: son mujeres de otros países las que vienen engañadas a España y son obligadas al ejercicio de la prostitución. Son mujeres de países pobres o en estado bélico que redes de explotación les han prometido contratos de trabajo como bailarinas o en servicio doméstico, aprovechándose de su difícil situación económica y la falta de empleo en su país. En los estudios recogidos, podemos ver que el grupo de mujeres españolas que ejercen esta actividad es minoritario, y podemos decir que en su mayoría son: - Mayores que llevan muchos años en la prostitución. - Jóvenes toxicómanas. En un intento de hacer un cuadro comparativo para ver las diferencias de perfiles, no es fácil. Dado que los pocos estudios que existen son locales, y muy pocos a nivel cuantitativo que nos permitiera establecer una comparación. Y los que existen se refieren principalmente a las personas atendidas en los proyectos dirigidos a este colectivo, por tanto no son significativos de la prostitución a nivel nacional. Sin embargo, siendo conscientes de esta realidad, sí pueden servirnos para elaborar nuestro análisis. Así, podemos establecer la siguiente comparación: CUADRO COMPARATIVO40 - PROSTITUCION DE CALLEANTES AHORA Prácticamente sólo mujeres Predominan las mujeres. Van apareciendo transgénero y hombres Más del 95% españolas 40 Entre el 70 y el 85 % son extranjeras Los datos hacen referencia principalmente a dos fuentes: - Fundación Solidaridad Democrática (1988): La prostitución de las mujeres. Madrid. - Médicos del Mundo (2002): VII Informe sobre Exclusión Social. Madrid. No obstante, algunos aspectos son también observados en nuestro trabajo con las mujeres que ejercen la prostitución y con las que se contacta a través de nuestros proyectos. 20 Prostitución de Calle. Nieves de León En situación de irregularidad Entre 18 y 37 años, son el 88 %. Las edades suelen oscilar entre los 18 y 50 años. Con una media de 30 a 35 años que difiere según la nacionalidad. Entre las españolas la media es más alta. Casi 40 % no tienen ni estudios primarios Casi la mitad: estudios primarios Predomina nivel de estudios primarios Muy pocas con más estudios Seguido del secundario Un alto porcentaje ha sufrido abusos sexuales en la infancia No hay sexuales. muchos casos de abusos Con los datos que nos arroja este cuadro, podríamos decir: - Que han ido apareciendo cada vez más varones y personas transgénero (travestís y transexuales) como actores de la prostitución. - Se ha invertido el porcentaje de españolas por el de extranjeras. - No se da el alto porcentaje de abusos en la infancia que se daba en épocas anteriores. Podemos hablar de nuevas formas de prostitución, que aunque no es el tema concreto puede darnos pistas para ver diferentes tipologías de personas que la ejercen, dado que esta variación también hace más complejo el enfoque sobre problemas y soluciones. Así como hace unos años sólo podíamos hablar de: - Prostitución de calle, - Clubs - Casas de citas. En la actualidad se habla de: - Hoteles de lujo - Salones de masajes - Servicios de acompañamiento - Turismo sexual 21 Prostitución de Calle. Nieves de León - Prostitución vía Internet - Teléfono erótico Todas se sustentan sobre un sistema de redes a escala nacional e internacional, que producen incalculables beneficios económicos. En el informe se prostitución elaborado por la Comisión para la investigación de malos tratos a mujeres, se relata una evolución de la tipología de mujeres41: De acuerdo con la especialista en la materia, Maria José Barahona (v.blb.), la segunda mitad de los años ochenta supone un periodo crítico dentro de la prostitución. Hasta esa fecha, lo que había predominado era la prostitución clásica, y una subcultura de la prostitución relacionada con redes de apoyo internas y mecanismos más grupales de supervivencia. El carácter de esta prostitución estaba fuertemente marcado por experiencias migratorias (de Extremadura, de Andalucía...) dirigidas hacia el servicio doméstico como internas siendo su principal razón la económica. Era el sueño de llegar a la capital y prosperar. Entonces, estábamos ante un fenómeno miméticamente igual al que ocurre ahora con las migrantes internacionales. El sueño no se lograba, las condiciones de trabajo eran de semiexplotación, y aparecía la figura de iniciación: bien una compañera, una tocaya o bien una figura masculina, un "novio". Ejercer la prostitución era una forma de reivindicar un éxito económico que no se había conseguido en realidad a través de la ocultación de la verdadera actividad. Otra causa fundamental era el índice de embarazos no deseados, extremadamente alto, que se daba entre estas migrantes de provincias: rechazadas por sus familias y/o abandonadas por sus parejas, pocas estrategias de supervivencia podían poner en práctica además de la prostitución. Este era el perfil que correspondía a la mujer prostituida clásica, que se mantenía en determinadas zonas de ejercicio, que eran además el lugar donde vivía. La figura del chulo era fundamental: entendiendo al chulo como la figura afectiva que, a través del engaño, conducía o mantenía a mujeres en situaciones de vulnerabilidad en el ejercicio de la prostitución. A finales de los años ochenta aparece la figura de la drogodependiente, que cambia radicalmente el mundo de la prostitución y provoca un rechazo radical en la mujer prostituida clásica. Aparece entonces, la drogodependiente que se había mantenido oculta o no había ejercido la prostitución. Las principales razones de estas mujeres era conseguir los medios para continuar con su dependencia a la droga. Es decir, no eran mujeres prostituidas que fuesen drogodependientes, sino al revés. Eran pocas y aisladas, a veces sí estaban protegidas por la mujer prostituida clásica: bien porque se habían conocido en círculos de precariedad donde, antes de caer en la prostitución, se 41 Comisión para la investigación de malos tratos a mujeres (2002): Informe sobre el tráfico de mujeres y la prostitución en la Comunidad de Madrid. Pp. 51-53 22 Prostitución de Calle. Nieves de León había caído en la droga; bien porque eran hijas de mujeres prostituidas clásicas a las que había que proteger. Sin embargo, cuando el fenómeno va evolucionando se producen verdaderos conflictos entre las dos tipologías: las clásicas no estaban dispuestas a dejarse desplazar geográficamente, ni a ver cómo se deterioraban los espacios, los precios y su medio de supervivencia. Las cifras se invierten de manera muy rápida y la mujer prostituida clásica empieza a ser una minoría frente a la drogodependiente. Desaparece prácticamente la tipología clásica. Desplazaron de los lugares tradicionales a las mujeres que ejercían la prostitución, en un contexto donde la drogodependiente podía alcanzar niveles de agresividad extremos y que además se veía rodeada de hombres más violentos que también eran dependientes del consumo de drogas. La prostitución se transformó. Se deterioró hacia un espacio de competencia, donde los precios cayeron y el tiempo que se tenía que dedicar al ejercicio se incrementó, empeorando así la situación de las mujeres. La mujer drogodependiente se incorpora al mundo de la prostitución porque su compañero es drogodependiente, esa es también la razón principal por la que se inició en el consumo. Se trata de evitar que su "hombre" robe o realice alguna acción que le condujese a prisión, trataban de mantener su apoyo afectivo. Ante este cambio se empezó a producir el fenómeno inverso: la mujer prostituida de perfil más clásico acabó cayendo en la drogodependencia para aguantar la presión ambiental y el propio ejercicio de la prostitución: alcohol y cocaína eran las principales sustancias, y el motivo principal era consumir algo que las ayudara a poder seguir ejerciendo. Así, a principios de los años noventa, nos encontrábamos con tres perfiles de prostitución: la clásica, la drogodependiente y la prostitutadrogodependiente. Empieza entonces la prostitución ejercida por emigrantes de origen latinoamericano, pero no en la calle sino en espacios cerrados (principalmente clubs). Su presencia en las calles comienza a ser una realidad a partir de la mitad de los noventa (1994-1995). Hasta entonces, la presencia extranjera de mujeres prostituidas había sido principalmente europeas con algún tipo de adicción: portuguesas, suizas, francesas, holandesas... El paraíso de la droga estaba en España. Alrededor del año 94, surge la presencia paulatinamente masiva de mujeres africanas ejercientes en la Casa de Campo. Decían provenir de Liberia y Nigeria y venían de manera absolutamente planificada, es decir, a través de mafias relacionadas con la migración y, a veces, la falsificación documental. Se mantenían en el ejercicio a través de la coacción relacionada con la práctica de wodoo para la continuación del pago de su deuda: el viaje y toda la estancia, ropa... Trabajando en turnos exactos de diez horas. Otros orígenes eran Sudán y Sierra Leona. Su situación empezó a cambiar con la presencia de otros colectivos: por ejemplo, el precio del pago por emigrar se incrementó sustancialmente y, por lo tanto, su deuda. También comienza el maltrato físico y el sistema coactivo a 23 Prostitución de Calle. Nieves de León través de la violencia y la brutalidad. Por imitación de las mafias del este comienzan a pedir el dinero diario a las mujeres prostituidas y de la vigilancia se pasa al maltrato. Alrededor del año 98-99, se estanca la progresión de mujeres subsaharianas y comienza el fenómeno de la prostitución ejercida por mujeres de Europa del Este y Latinoamérica. Las mujeres del Este ejercen una prostitución aislada socialmente, sin contacto con otras mujeres y fuertemente controladas. Vienen con unas mafias más organizadas, no redes, algunas con experiencia previa en prostitución en Países árabes y/o europeos. No se conoce la cabeza de la mafia y viven una situación de maltrato continuo y sometimiento. Las mujeres latinoamericanas empiezan también a tener presencia en la calle. Sus orígenes principales son de Ecuador, pocas de República Dominicana, y muy posteriormente de otras nacionalidades. Sus redes son diferentes basadas sobre todo en el endeudamiento familiar, y cuantitativamente acaban superando al resto de los colectivos. De este modo, se produce una diversificación de orígenes que van desplazando geográficamente al colectivo anterior que, a su vez, había desplazado a otro, creándose nuevos espacios, especialmente en los alrededores de la capital (siempre hablando de prostitución de calle). El incremento de mujeres ejerciendo la prostitución supone no sólo la lucha geográfica entre grupos sino que, como ocurrió con el inicio de la drogodependiente-prostituta, supone un deterioro de las condiciones del ejercicio de la prostitución. La coacción y violencia que somete a gran parte de las mujeres a través de sus mafias o redes, implica la diversificación de los precios. Es decir, estamos ante una prostitución sin los valores de grupo tradicionales, sin las redes de autoayuda, basadas en el aislamiento social, relacional y afectivo de quien lo ejerce, ante lo cual esa mujer sometida sólo tiene la opción de estar en la calle mucho más tiempo, cobrando menos y accediendo a todo tipo de prácticas demandadas por unos clientes que saben que pueden solicitar cualquier servicio, porque siempre habrá una "oferta" que se lo proporcione. 5.- Etapas del modelo de cambio Lo que se explica a continuación está tomado de: Manual de Intervención Social con Mujeres prostituidas. De la Dirección General de la Mujer de La Comunidad de Madrid. En este estudio se analizaron los resultados de la experiencia de diferentes profesionales en la atención a mujeres en situación de prostitución, y se consideran una serie de fases que recogen el “modo de estar” de las mujeres durante el ejercicio de la prostitución. Las fases son las siguientes: Rechazo inicial 24 Prostitución de Calle. Nieves de León Luna de miel Sobrevivencia Búsqueda de alternativas Rechazo final Teniendo en cuenta que no tienen por qué seguir esa secuencia lineal: RECHAZO INICIAL: Se produce al inicio de la entrada de la mujer en la prostitución. El rechazo puede tener distintos grados, desde absoluto hasta ligero dependiendo de los motivos que llevaron a la mujer a la “entrada” en la prostitución. Se puede producir en este momento una disonancia cognitiva entre sus elementos cognoscitivos y su conducta Las excusas que aparecen son: - Estaré por poco tiempo - Sólo quiero conseguir algo de dinero, luego lo dejaré. LUNA DE MIEL Se trata de la fase de autojustificación como mujer prostituida, en la que se valoran los elementos prostitutivos de su presencia en la prostitución, los beneficios subjetivos que adquieren en este momento: - gano mucho dinero… - soy libre… - soy independiente… - yo elijo mis clientes… - yo fijo mi tarifa… - yo elijo las prácticas sexuales que quiero - es ocasional… Sacan más ventajas que inconvenientes SOBREVIVENCIA Supone la estabilización dentro del ejercicio; se trata de un modo de sentir su condición de mujer prostituta, con una actitud de pasividad ante sus 25 Prostitución de Calle. Nieves de León conductas y sus pensamientos, actitud materializada en un fuerte automatismo e inercia. Se caracteriza en un “hacer sin reflexionar” No es posible una visión de futuro en esta etapa, ni a corto, medio o largo plazo. Su vida viene marcada por la inmediatez del día a día. BUSQUEDA DE ALTERNATIVAS Se produce un cierto despertar incipiente, en cuanto a plantearse otras alternativas o itinerarios que pueda tomar su vida, siempre y cuando estas alternativas se las proporcionen agentes externos, siendo en ellos en los que la mujer alega sus posibilidades de cambio. Las expresiones son: - “estoy harta de esto, quiero dejarlo, a ver si me buscas un trabajo o algo para salir de esto”. Se quiere el cambio pero falta voluntad firme y decidida. RECHAZO FINAL Son múltiples las circunstancias que pueden llevar a esta fase: - Percepción de llevar mucho tiempo en prostitución - Edad avanzada - Vivencias de sucesos desencadenantes de crisis - Presión familiar por el crecimiento de los hijos - Cambios en la tipología de la prostitución - Las expresiones son: - Yo debo… - Yo tengo que dejarlo. En esta fase se dan los tres elementos necesarios para iniciar un proceso de cambio: - El deseo - La voluntad - La motivación 26 Prostitución de Calle. Nieves de León RECHAZO INICIAL RECHAZO FINAL BÚSQUEDA DE ALTERNATIVAS LUNA DE MIEL SOBREVIVENCIA 27 Prostitución de Calle. Nieves de León Propuesta de actividades 1. Escribir su propia definición de prostitución y responder personalmente a dos cuestiones. 2. Debate abierto sobre lo que opina tras la presentación de diferentes mitos. 3. Charla sobre la definición prostitución de calle y sobre los factores que condicionan la 4. Presentación de imágenes de la prostitución actual 5. Charla sobre el cambio de perfil de las mujeres. 6. Rol Playing. Escenificación de dos casos de prostitutas que acuden a los servicios a buscar alguna solución para cambiar de vida. 7. Charla sobre el modelo de las etapas de cambio. 8. Cuestionario para recoger lo aprendido 28 Prostitución de Calle. Nieves de León Recursos - Cañón - Ordenador Temporalización. ACTIVIDAD TIEMPO REQUERIDO HORARIO Escribir su propia definición de prostitución 30 minutos 11:30 a 12:00 Debate sobre estereotipos 10 minutos 12:00 a 12:10 Charla sobre la definición y sobre los factores que condicional la prostitución de calle 20 minutos 12:10 – 12:30 Presentación de imágenes de la prostitución actual 5 minutos 12:30 – 12:35 Charla sobre el cambio de perfil 15 minutos 12:35 – 12:50 Descanso 10 minutos 12:50 – 13:00 Rol playing 20 minutos 13:00 - 13:20 Charla sobre etapas del modelo de cambio 30 minutos 12:20 - 13:50 Cuestionario aprendido 10 minutos 13:50 – 14:00 los para mitos recoger y lo Evaluación. Se pasa otra vez el cuestionario del principio con la siguiente pregunta. Después de lo que has oído hoy, que cambiarías de lo que has contestado al principio. 29 Prostitución de Calle. Nieves de León Bibliografia. GUEREÑA, JEAN – LOUIS. La prostitución en la contemporánea. Madrid. Marcial Pons, Ediciones de Historia, 2003. España BRUQUETAS DE CASTRO, FERNANDO. 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