Clonazepam: es un fármaco de tipo benzodiacepínico que actúa sobre el sistema nervioso central, con propiedades ansiolíticas, anticonvulsionantes, miorrelajantes, sedantes e hipnóticas. El Clonazepam es de vida media intermedia, fluctuando entre las 30 y las 40 hs. ¿Para cuáles condiciones o enfermedades se prescribe este medicamento? El Clonazepam se usa solo o en combinación con otros medicamentos, para controlar determinados tipos de convulsiones. También se usa para aliviar ataques de pánico (ataques súbitos e inesperados de miedo intenso y la preocupación que dichos ataques generan). El Clonazepam pertenece a una clase de medicamentos llamados benzodiazepinas. Actúa disminuyendo la actividad eléctrica anormal del cerebro. ¿Cómo se debe usar este medicamento? Las presentaciones del Clonazepam son en tabletas normales y en tabletas solubles (que se disuelven rápidamente en la boca) para administrarse por vía oral. Suele tomarse de una a tres veces al día, con o sin alimentos. Tome el Clonazepam aproximadamente a la misma hora todos los días. Siga atentamente las instrucciones de la receta y pídale a su médico o a su farmacéutico que le expliquen cualquier cosa que no entienda. No trate de romper el papel metálico empujando la tableta soluble. En vez de eso, desprenda el papel metálico con las manos secas. Saque la tableta y colóquela de inmediato en la boca. La tableta se disolverá rápidamente y puede tragarse con o sin líquido. Es probable que el médico le recete al principio una dosis baja de Clonazepam y la aumente de manera gradual, no más de una vez cada 3 días. El Clonazepam puede crear hábito. No aumente la dosis, ni la tome más seguido o por más tiempo ni de manera distinta de la indicada por su médico. Tome el Clonazepam según lo indicado. No aumente ni disminuya la dosis, ni la tome con más frecuencia que la indicada por su médico. El Clonazepam puede ayudar a controlar su afección, pero no la curará. Quizás transcurran algunas semanas o más antes de que sienta el beneficio total del Clonazepam. Siga tomando el Clonazepam aunque se sienta bien. No deje de tomar Clonazepam sin consultar a su médico, incluso si experimenta efectos secundarios, como cambios inusuales en el comportamiento o el estado de ánimo. Si deja de tomar Clonazepam repentinamente, puede tener síntomas de abstinencia como aparición o empeoramiento de convulsiones, alucinaciones (ver cosas o escuchar voces que no existen), cambios en el comportamiento, sudoración, temblor incontrolable de alguna parte del cuerpo, retortijones o calambres musculares, ansiedad o dificultad para dormir o para permanecer dormido. Es probable que el médico opte por disminuirle gradualmente la dosis. ¿Cuáles son los efectos secundarios que podría provocar este medicamento? El Clonazepam puede provocar efectos secundarios. Avísele a su médico si cualquiera de estos síntomas es grave o no desaparece: somnolencia inflamación de los ojos, la cara, los labios, la lengua o la garganta mareos inestabilidad dificultad para respirar o tragar problemas de coordinación ronquera dificultad para pensar o recordar dificultad para respirar mayor cantidad de saliva dolor en los músculos o las articulaciones ganas frecuentes de orinar visión borrosa cambios en el deseo o la capacidad sexual Algunos efectos secundarios pueden ser graves. Si presenta cualquiera de estos síntomas, llame a su médico de inmediato: sarpullido urticaria