ARTE RUPESTRE 4 29/5/08 18:28 Página 155 Cuadernos de Arte Rupestre • Número 4 • Año 2007 • Páginas 155-161 Arte rupestre levantino. Su difícil datación: lamentables olvidos José Aparicio Pérez * RESUMEN Planteamos algunas de las cuestiones a considerar a la hora de abordar el problema de la cronología del arte levantino, destacando el papel que puede desempeñar la Cueva de la Cocina. PALABRAS CLAVE Arte Levantino, cronología, cueva de la Cocina. ABSTRACT We take into consideration some issues regarding the problem of the crhonology of Levantine Art and point out the role that some materials from Cave of Cocina may perform. KEY WORDS Levantin art, chronologie, cave of Cocina. 1. Introducción Es un acierto, sin duda, dedicar una nueva obra en recuerdo de tres de nuestros maestros, D. Antonio Beltrán, D. Eduardo Ripoll y D. Francisco Jordá, y de dos investigadoras de gran relevancia, Pilar * SEAV - Diputación Provincial de Valencia. C/Mar, 33. 46003 – Valencia. joapa2005@hotmail.com ARTE RUPESTRE 4 29/5/08 18:28 Página 156 CUADERNOS DE ARTE RUPESTRE Acosta y Charo Lucas, que se suma y que se sumará a las que se le han dedicado ya o se les dedicarán en el futuro; sus merecimientos lo aconsejan. El constante recuerdo, perpetuando la memoria, es el espejo de la eternidad. De D. Antonio Beltrán recibimos, además, su constante amistad y colaboración, que comenzó en 1980 cuando iniciamos en Gandía el Aula de Humanidades y Ciencias Valencianas, en la que participó durante veinticinco años aportando su magisterio y su afecto, junto a su mujer, Trini, que nunca faltó a la cita como inseparable compañera. Hoy, continua su magisterio, colaboración y amistad su hijo, Francisco Beltrán. En 1999 iniciamos dentro del Aula los Seminarios de Estudio sobre Arte Rupestre, que con tanta dedicación y éxito dirigió científicamente D. Antonio y en los que han participado muchos de los centros y de los investigadores que se dedican a esta especialidad. Hasta el año 2006 los celebramos en Gandía y, en 2007, en el Parque Cultural y Museo de la Valltorta que, actualmente, dirige Guillermo Morote Barberá. Sin duda ninguna que a D. Antonio le hubiera encantado continuar con nosotros aquí la tarea que iniciamos en Gandía. D. Eduardo Ripoll también ha sido uno de los grandes especialistas mundiales en Arte Prehistórico, al que dedicaron esfuerzos con éxito notable el Dr. Jordá y la Dra. Acosta. La Dra. Charo Lucas deja una notable obra. A los cinco nuestro recuerdo y homenaje. 2. Cronología del Arte Rupestre Levantino En la prehistoria hispana, uno de los asuntos más debatidos es el de la cronología del A.R.L., convertido en un auténtico problema, al que nos aplicamos todos los que lo tratamos. D. Antonio Beltrán le dedicó muchos trabajos y esfuerzos desde que, hace más de cuarenta años, se comenzó a ocupar de ello. En 1999, el número 17 de la Serie Arqueológica lo dedicamos a la “Cronología del Arte Rupestre Levantino”, con trabajos del Dr. Beltrán, la Dra. Alonso Tejada, el Dr. Royo Lasarte y el investigador Alejandro Grimal, además del nuestro en colaboración con D. Guillermo Morote Barberá. Ese mismo año, el I Seminario de Estudio también lo dedicamos a ello, “Bases objetivas para la datación del Arte Rupestre Levantino”, con ponencias del Dr. Beltrán, del Dr. Mesado Oliver, la Dra. Alonso Tejada y D. A. Grimal, Dr. Baldellou Martínez, Dra. Utrilla Miranda, Dr. Royo Lasarte y la nuestra. Desde entonces, con mayor o menor intensidad, la cronología ha sido tema de permanente debate en nuestros seminarios. 156 4 • 2007 ARTE RUPESTRE 4 29/5/08 18:28 Página 157 Arte rupestre levantino. Su difícil datación: lamentables olvidos Hoy el asunto continua irresoluto. Es más, las controversias se han exacerbado y las distancias entre las diversas tendencias se han ampliado. Nuevos datos han complicado la situación y las posturas se radicalizan. El mismo Dr. Beltrán que, si bien en un principio era partidario de una cronología baja, últimamente aceptó elevarla, aunque sin aceptar nunca el enlace con el Paleolítico y sí manteniendo la ruptura, aunque ampliándolo también a la baja, por lo que en el número 17 de la Serie Arqueológica, página 30, llegaba a afirmar: Por nuestra parte pensamos que: el arte Levantino, aparte de su extrema complejidad y sus vinculaciones con las etapas pre-levantinas no paleolíticas, es Epipaleolítico, prolongándose su vigencia estilística y cronológica a lo largo del Neolítico y la Edad del Bronce, con progresiva estilización y tendencia al esquematismo de sus figuras... Podría asegurarse que se trata de un arte postpaleolítico y preneolítico, sin perjuicio de sus vinculaciones con las fases finales paleolíticas y con las iniciales del Neolítico e incluso del Eneolítico. Y, ya antes, apuntaba las causas que impedían poder avanzar más y precisar sobre su inicio y su final, escribiendo en la página 10 de la obra citada: Las dificultades de datación del arte levantino y del prehistórico en general se originan, por una parte, en la carencia, casi sin excepción, de indices cronológicos seguros de carácter arqueológico como los estratos que asignan a los deshechos una data anterior o grabados recubiertos por capas datables como ocurre en la cueva francesa de Pair non Pair, en la cueva Ambrosio de Almería o en los abrigos del Nervión, cerca de Oviedo. Tampoco se plasmó el arte levantino en manifestaciones mobilifares paralelas halladas en estratos fechados que permitan establecer por comparación fechas para las pinturas y grabados parietales partiendo de las que resultan válidas para los objetos. Los esfuerzos para utilizar con estos fines los hallazgos mobiliares litorales de Seriña, San Gregori de Falset, La Roca y otros yacimientos alicantinos, el formidable conjunto de El Parpalló o los hallazgos de Les Mallaetes y la Cocina no nos sirven... A lo último habría que añadir el caballo grabado en la pared en la Cova del Parpalló, encontrado por nosotros en 2001 y cuya publicación inicial ofrecimos al Dr. Beltrán, lo que hizo de inmediato dada su trascendencia entre otras razones por establecer que en Parpalló también se utilizó la roca de la pared como soporte y que sus ocupantes lo pudieron practicar en otras cavidades próximas. Expuesta la situación por el Dr. Beltrán quedan en evidencia las dificultades, al parecer insuperables, sobre las que hemos insistido; sin embargo, conviene que lo hagamos sobre dos datos que proporciona la Cueva de la Cocina. J. Aparicio 157 ARTE RUPESTRE 4 29/5/08 18:28 Página 158 CUADERNOS DE ARTE RUPESTRE 3. La aportación de Cocina La Cueva de la Cocina continúa siendo uno de los yacimientos clave, esenciales para el conocimiento del Mesolítico en su fase tercera y final, del proceso de neolización y de los inicios del Neolítico (fig. 1). Lamentablemente, tras los estudios de Fortea sobre los materiales antiguos, es decir los procedentes de las excavaciones del Museo de Prehistoria que dirigió el Dr. Pericot desde 1962 a 1945, no se ha continuado trabajando sobre ellos para publicar su exhaustivo inventario. Tampoco se ha sabido nada, y esto es todavía más lamentable, de las cinco campañas que dirigió, posteriormente, el Dr. Fortea pero, sobre ello va a girar lo esencial de nuestra aportación, como diremos. En el número 17 de la Serie Arqueológica, que nos sirve de referencia, ya dentro de nuestro trabajo Yacimientos arqueológicos y datación del A.R.L., presentamos un resumen de nuestra valoración de los niveles de excavación de Pericot, producto del estudio que realizamos de sus materiales y que publicamos en 1979 en nuestro libro sobre El Mesolítico en Valencia y el Mediterráneo Occidental, estudio que hemos ido incorporando y reiterando en otras publicaciones posteriores. Pero, para el tema que nos ocupa, reproducimos lo que describíamos: La memoria de 1980 (La Labor... 1980, pág. 91. Valencia, Figura 1. Cueva de la Cocina. (Fotografía de J. Aparicio). 158 4 • 2007 ARTE RUPESTRE 4 29/5/08 18:28 Página 159 Arte rupestre levantino. Su difícil datación: lamentables olvidos 1981)... dice expresamente “Canto de caliza conformado por algunas percusiones laterales en el que hay una pequeña cabeza de cierva de factura estilizada”, es decir se describe una obra de arte mueble encontrada en este nivel, correspondiente al Estrato H1 de Fortea, acompañado de triángulos con o sin apéndice lateral, es decir de tipo Cocina, microburiles, junto a fragmentos cerámicos lisos o decorados (impresa, cardial en cuadrícula contigua) y presente la fauna doméstica junto a la salvaje predominante. Resulta chocante y alarmante a la vez, sin embargo, que nunca más se haya vuelto a mencionar la plaqueta en cuestión, ni se hayan publicado las dataciones de C14 que se anunciaron, lo que obliga a sospechas que sólo la claridad desvanecería. Pues bien, ocho años después de aquella publicación continuamos en la misma situación. No se sabe nada de la plaqueta en cuestión, una pesada sombra se ha cernido sobre ella, ni Fortea ha dicho nada ni tampoco el Museo de Prehistoria de Valencia, quien tiene la responsabilidad de la custodia de sus materiales. El olvido total de la misma por parte de su excavador y por parte de los responsables de ello es la nota dominante. Como si no existiera, como si nunca se hubiera encontrado. Tratándose de un documento de tanta trascendencia para la prehistoria valenciana y la mediterránea, este lamentable olvido, y evitamos utilizar expresión más comprometedora, es incomprensible. También lo es que la datación anunciada no se haya dado a conocer, lógico olvido si se olvida la plaqueta. La pregunta que, inevitablemente, surge es: ¿por qué este olvido?, ¿a qué obedece? Todos sabemos que podría desmontar ingeniosas teorías sobre secuencias cronológico-culturales en las que se ha puesto gran énfasis, divulgándolas con aparato extraordinario. Si fuera por este motivo sería imperdonable. En todo caso es hora de reclamar su publicación o, en todo caso, clarificar su situación. No obstante, de lo expuesto en la memoria se deduce que la plaqueta es un probable testimonio de que el Arte Rupestre Levantino, exclusivamente parietal, también lo es mueble y que esta plaqueta podría datarlo con cierta precisión, aumentando el valor de las de Filador, Sant Gregori y el Tossal de la Roca. En esta misma página 91 añadíamos: La presencia de esta plaqueta, junto a la identificación de las pinturas de la pared, cubiertas por los niveles que excavó Pericot, son argumento para justificar el alto valor que otorgamos a este ya viejo yacimiento... Estas pinturas o restos de ellas nunca fueron tomadas en consideración, aunque se mencionara su existencia; la confusión e inexactitud a la hora de interpretar los niveles que las cubrían no permitían profundizar en ello. Pero ahora sabemos que eran niveles del J. Aparicio 159 ARTE RUPESTRE 4 29/5/08 18:28 Página 160 CUADERNOS DE ARTE RUPESTRE Figura 2. Dibujo de los motivos pintados en la Cueva de la Cocina. A, según F. J. Fortea; B, según A. Grimal. Mesolítico final, con geométricos, por lo tanto anteriores al 5.000 sin duda alguna. En el número 17 de la Serie Arqueológica, repetidamente citado, A. Alonso escribe: ... En primer lugar disponemos de las pinturas, reconocidas por nosotros como levantinas, de la Cueva de la Cocina (Grimal, 1992; Grimal e.p. b, Alonso, 1993) que, cubiertas por estratos arqueológicos, tuvieron que ser realizadas en momentos adscribibles al Epipaleolítico según apuntó Pericot (1945) y ratificó Fortea (1975, 197). De manera que este yacimiento adquiere una singular importancia ya que se constituye, hasta el momento, en el único en que el registro arqueológico sellaba las manifestaciones pictóricas y nos posibilita concluir que hacia mediados del VI milenio se está pintando Arte Levantino (fig. 2). 160 4 • 2007 ARTE RUPESTRE 4 29/5/08 18:28 Página 161 Arte rupestre levantino. Su difícil datación: lamentables olvidos 4. Conclusiones Reclamamos, pues, el que se de a conocer la plaqueta de Cocina olvidada y la datación de su nivel, si existe. Independientemente, pues, el que se de esto tal y como proponen A. Alonso y Grimal con las pinturas y nosotros con las plaquetas, es evidente que el Arte Rupestre Levantino tiene segura cronología mesolítica. Sobre su origen, insistimos en su derivación del Arte Parpallense o Arte Paleolítico Mediterráneo, sobre lo que volveremos en futuros trabajos. 5. Bibliografía ALONSO TEJADA, A. y GRIMAL, A. (1999): «El Arte Levantino: una manifestación pictórica del Epipaleolítico peninsular», Cronología del Arte Rupestre Levantino: 43-76. Serie Arqueológica de la Sección de Prehistoria y Arqueología de la R. A. C. V. Valencia. APARICIO PÉREZ, J. (1979): «El Mesolítico en Valencia y en el Mediterráneo Occidental», Serie de trabajos varios del S.I.P. 59. Valencia. APARICIO PÉREZ, J. y MOROTE BARBERÁ, J. G. (1999): «Yacimientos arqueológicos y datación del A.R.L.», Cronología del Arte Rupestre Levantino 77-184. Serie Arqueológica de la Sección de Prehistoria y Arqueología de la R. A. C. V. Valencia. BELTRÁN MARTÍNEZ, A. (1999): «Cronología del Arte Levantino: cuestiones críticas», Cronología del Arte Rupestre Levantino : 7-41. Serie Arqueológica de la Sección de Prehistoria y Arqueología de la R. A. C. V. Valencia. FORTEA PÉREZ, J. (1971): «La Cueva de la Cocina. Ensayo de Cronología del Epipaleolítico (facies geométrica)», Serie de Trabajos Varios del S.I.P. 40. Valencia. FORTEA PÉREZ, J. (1980): «La Labor del S.I.P. y su Museo en el pasado año 1979», Valencia. PERICOT GARCÍA, L. (1945): «La Cueva de la Cocina (Dos AguasValencia)», Archivo de Prehistoria Levantina II: 39-71. Valencia. VV. AA. (1999): Cronología del Arte Rupestre Levantino. Serie Arqueológica de la Sección de Prehistoria y Arqueología de la R.A.C.V. Valencia. J. Aparicio 161