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Proceso de Integración Tisular de la Malla de Polipropileno
a las Paredes Abdominales.
Guidobono, Juan A. - Civetta, Julio D. - Ayala, Néstor E.
Briend, María Susana - Sarasúa, María T.
Laboratorio de Anatomía del Desarrollo - Cátedra I de Anatomía Humana - Facultad de Medicina - UNNE.
Sgto. Cabral 2001 - (3400) Corrientes - Argentina.
Teléfono/Fax: +54 (3783) 423478
E-mail: jdcivetta@med.unne.edu.ar - jguidobonoar@yahoo.es
Servicio de Cirugía - Hospital Dr. J. R. Vidal
ANTECEDENTES
El alto porcentaje de la población adulta afectada por algún tipo de hernia o eventración y el elevado índice de
recidivas experimentadas luego de su reparación quirúrgica por técnicas tradicionales que implican aroximación
de tejidos por sutura a tensión e isquemia en sus puntos de aplicación, hicieron de esta patología centro de
controversia durante muchos años. A estos factores, se agregaron no hace mucho tiempo, el resultado de estudios
que concluyeron que la labilidad del tejido mesenquimático es tal vez el verdadero factor coadyuvante en la
aparición de la hernia o su recurrencia al hallar deficiencia de colágena en las paredes abdominales, hecho
observado algunas veces en familias enteras. Se mencionan tambien a la obesidad y al tabaquismo como causales
de su aparición.
Actualmente la aplicación de prótesis en forma de malla o tapón para el refuerzo de la pared, siendo el
polipropileno monofilamento el material más utilizado, al cumplir con la mayoría de los requisitos exigidos para
su aplicación, referidos a la resistencia a infecciones, ser monofilamento, no provocar fenómenos de rechazo y
tener relativo bajo costo, es lo preferido por todos los grupos quirúrgicos.
Su uso adoptado universalmente, obligó a la adopción de nuevas técnicas quirúrgicas, de sencilla concepción
y espectaculares resultados, ya que el índice de recidivas se acerca en estos momentos al 0%, sus complicaciones
son mínimas y los pacientes (algunos operados con anestesia local infiltrativa) en su mayoría se reintegran a sus
tareas habituales en un plazo de 10 (diez) días.
MATERIAL Y METODOS
Con el objeto de demostrar lo expuesto se tomaron muestras de pared abdominal, en la pared posterior del
trayecto inguinal (complejo oblicuo menor – transverso – hoz del transverso) de pacientes herniados, y bordes de
anillo de eventración. Al mismo tiempo, se implantó polipropileno monofilamento en forma supra-aponeurótica
en 12 (doce) ratas previamente anestesiadas con cloroformo, siendo las mismas sacrificadas en forma seriada a
los 7 – 15 – 21 y 30 días, recuperando la zona operatoria para su estudio histológico.
Se estudiaron también muestras de polipropileno rescatadas de pacientes, a los que se había aplicado el
material.
RESULTADOS
Los tumores herniarios o eventrógenos llevan a la destrucción de estructuras anatómicas parietales,
entendiéndose por este término a la hipofuncionalidad, hipotrofia y atrofia tisular, observadas en el estudio
realizado.
En la serie estudiada histológicamente de material humano se observó hipotrofia, atrofia muscular,
infiltración grasa y ausencia casi total de tejido conectivo, elementos esenciales si se pretendiera resolver el
problema herniario con técnicas de aproximación, interpretándose como responsables de las recidivas precoces o
alejadas a estos hallazgos.
El proceso de integración del polipropileno a la pared abdominal, en la serie de ratas estudiadas; se efectúa
de la siguiente manera:
♦
7 Días: Se observa proceso inflamatorio agudo de características exudativas en el área correspondiente al
sitio de colocación de la malla.
♦
15 Días: El exudado inicial ha sido reemplazado en su totalidad por tejido de granulación, con vasos de
neoformación, infiltrado inflamatorio predominantemente linfoplasmocitario, con polimorfonucleares,
fibroblastos, macrófagos que rodean a los filamentos de la malla y estroma conectivo laxo.
♦
21 Días: En la zona de colocación de la malla se presenta una franca disminución del componente
inflamatorio del tejido de granulación, con numerosos fibroblastos y el estroma conectivo se conserva de
aspecto laxo.
♦
30 Días: El tejido conectivo de apariencia más densa, que se pone de manifiesto en la coloración
tricrómica, con incremento de fibras colágenas que se colorean de azul, disminución de la celularidad y de
la vascularización.
Por último, el polipropileno rescatado de pacientes ya operados, muestra un patrón histológico similar,
aunque con tejido conectivo más maduro, que el observado a los 30 días del implante. La celularidad
inflamatoria, mínima, se conserva alrededor de los filamentos de la malla.
CONCLUSIONES
Los excelentes resultados logrados en la aplicación del polipropileno monofilamento han universilazado su uso
independientemente del modo de aplicación (pre-peritoneal, supra-aponeurótica o por vía laparoscópica). En
nuestro medio su uso también se ha sistematizado, con resultados similares a la estadísticas nacional e
internacional consultadas. Los hallazgos histológicos obtenidos en esta investigación que demuestran el
verdadero reforzamiento de la pared, confirman las ventajas de aplicar el material, siendo actualmente el ideal
en la larga historia del tratamiento de esta afección.
BIBLIOGRAFIA
♦
The Lichtenstein Hernia Institute.
♦
Maingot. Operaciones Abdominales, 10ª ed. 1998
♦
Clínicas Quirúrgicas de Norteamérica, ed. 1998
♦
Revista Argentina de Cirugía, Septiembre 1997
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