Circulación de Virus Dengue en Población de la Ciudad de Posadas Alonso, José M. - Gorodner, Jorge O. - Fabre, Adriana R. Galván, Miria - Merino, Daniel E. - Balbachán, Silvia E. Instituto de Medicina Regional – Universidad Nacional del Nordeste. Av. Las Heras 727 - (3500) Resistencia - Chaco - Argentina Fax: +54 (03722) 422793 - E-mail: jalonso@bib.unne.edu.ar ANTECEDENTES La OPS ha considerado al dengue como el mayor problema de salud pública de América luego del SIDA, encontrándose casi dos tercios de la población mundial en zonas propicias. Es posible que cada año 80.000.000 de personas contraigan la enfermedad. El dengue es una enfermedad de carácter agudo y febril, con frecuencia epidémica. Es la infección humana mas prevalente de las causadas por miembros de la familia Flaviviridae, siendo propia de regiones subtropicales y tropicales donde es trasmitida al ser humano por mosquitos del género Aedes. Existen cuatro serotipos conocidos del virus del dengue. Si bien existe inmunidad para cada serotipo, la protección de carácter cruzado no es permanente, pudiendo constatarse infecciones por varios serotipos simultáneos. Se conocen diferentes patrones epidemiológicos en la transmisión del virus, pudiendo modificarse por la disminución de la población susceptible o por los cambios climáticos y la reducción de la presencia vectorial. En América, existe un patrón de epidemias intermitentes en las últimas décadas, constatándose transmisión casi continua en el Caribe, América Central, México, Colombia, Venezuela, y hacia el sur en Brasil, Paraguay, Bolivia, Ecuador y Perú, siendo más susceptibles de contraer la enfermedad en las personas adultas. Otro patrón epidemiológico es típico del Sudeste Asiático, en donde los cuatro serotipos son hiperendémicos y se encuentran circulando en forma simultánea y permanente con mayor afectación infantil. La prevalencia serológica en los adultos jóvenes es cercana al l00 %. Cuando las condiciones climáticas para el mosquito son apropiadas y la población de susceptibles es elevada, existe una infestación alta por el vector, pudiendo aparecer una situación de hiperendemia con aumento de los casos hemorrágicos. En trabajos realizados en Cuba, no se encontró una relación directa entre precipitaciones y temperaturas con el número de focos vectoriales, por lo que la vigilancia del insecto debe ser permanente. En las regiones tropicales y subtropicales de América, el dengue ha tenido características endémicas durante siglos, desde su probable introducción con los buques negreros procedentes de Africa hasta el ingreso del virus y los vectores por medio de modernas naves marítimas y aéreas. Los pasajeros aéreos pueden viajar durante el periodo de incubación de la enfermedad (2 a 7 días), siendo éste el principal mecanismo de diseminación y de generación de epidemias. ETIOLOGÍA DEL DENGUE El virus del dengue pertenece a la familia Flaviviridae, que cuenta con doce especies antropopatógenas, entre las que se destacan el de la fiebre dengue, fiebre amarilla, encefalitis de San Luis, encefalitis japonesa y fiebre hemorrágica de Omsk. El virus del dengue presenta forma esférica de 37-50 mm de diámetro y cuenta en su interior con una nucleocápside icosaédrica que contiene al genoma constituido por RNA monocatenario de polaridad positiva. En su genoma existen siete genes que codifican proteinas no estructurales y que son expresados por la célula infectada. Estos provocan la respuesta de anticuerpos y los mecanismos de defensa celular, como así también participan en la inmunopatogenia del dengue hemorrágico. Los viriones se acumulan en el retículo endoplásmico y se replican exclusivamente en forma intracelular. Desde la membrana plasmática pueden liberarse por exocitosis o lisis celular. Existen cuatro serotipos diferentes que aunque generan cuadros clínicos idénticos, no producen inmunidad protectora entre ellos. La infección por alguno de ellos estimula la inmunidad homóloga y anticuerpos de reacción cruzada aún con otros flavivirus. La inmunidad homotípica es completa y permanente, siendo la protección cruzada muy incompleta y transitoria, existiendo la posibilidad de infecciones heterotípicas. Sabin y Schlesinger aislaron las cepas de Hawai y Nueva Guinea en l944, denominadas posteriormente DEN l y DEN 2. En l954, un síndrome “nuevo“ denominado fiebre hemorrágica dengue es estudiado en Filipinas procediéndose al aislamiento de los serotipos DEN 3 y DEN 4. Para la preservación de la patología se requiere la presencia de un vector, siendo el mosquito del género Aedes su transmisor. Varias son las especies de Aedes conocidas como vectores de estos virus, siendo el A. aegypti el vector principal. Requiere condiciones de temperatura y humedad, permaneciendo en estado adulto desde octubre o noviembre hasta junio en nuestra región. Los huevos permanecen viables durante 1 año eclosionando la larva cuando se dan las condiciones climáticas. Otro vector el Aedes albopictus ha demostrado capacidad de transmisión transovárica del virus, no descartándose la misma en el A. aegypti. Comparten áreas urbanas y rurales o selváticas por lo que pueden resultar de nexo entre una y otra zona, pudiendo inclusive fecundar una a otra especie. El A. albopictus, implicado en Asia y Oceanía, se ha establecido en algunas partes del continente americano, como ser, Estados Unidos, México, Centroamérica, Brasil y Guatemala y se supone que tiene gran capacidad vectorial, aunque su papel en la transmisión natural aún debe ser evaluado. Otros vectores que han sido implicados son el A. scutellaris, A. polynesiensis, A. cooki y A. mediovitatus. DIAGNÓSTICO DE LABORATORIO El virus dengue se puede identificar luego de su aislamiento en cultivos celulares, a través de la observación de un efecto citopático inducido (infección citocidal), por la detección de los componentes virales proteicos ó por detección de los ácidos nucleicos. Varias líneas celulares han mostrado susceptibilidad a los dengue virus, destacándose las células de mosquito y las de riñón de mono. Ambas crecen bien formando monocapas sobre las que luego se pueden cultivar los dengue virus, cuantificar anticuerpos o preparar antígenos virales. También se puede emplear la inoculación en ratones lactantes, pero es una técnica laboriosa, cara y que requiere de una estrecha observación de los animales inoculados, pues la infección en el ratón puede pasar inadvertida. La muerte de los ratones se produce alrededor del quinto día y la tipificación del aislamiento se hace por Fijación del Complemento (FC) o por Inmunofluorescencia Indirecta (IFI), usando anticuerpos monoclonales. Debido a los costos y a la experiencia necesaria, son pocos los laboratorios que realizan estas pruebas. Las modernas técnicas de biología molecular también están siendo empleadas para el reconocimiento del virus Dengue. La Reacción en Cadena de la Polimerasa (PCR) es una de las técnicas utilizadas con un amplio espectro de aplicaciones y que puede convertirse en los próximos años en la mas empleada para el diagnóstico de las infecciones por dengue virus en sus formas graves. La amplificación en miles de veces de una secuencia blanco se realiza en pocas horas y es especialmente útil para la confirmación rápida de los casos sospechosos de Dengue. Los métodos serológicos se emplean para la confirmación diagnóstica de casos sospechosos, para la evaluación del curso de una infección o para determinar si una infección es primaria ó secundaria. Los métodos serológicos más utilizados son ELISA, Inmunoelectrofluorescencia indirecta (IFI), Neutralización (NT), Inhibición de la Hemoaglutinación (IH) y la Fijación del Complemento (FC). También se han descripto los de difusión en gel, la electroforesis, el radioinmunoensayo, la hemadsorción y el Dot ELISA, entre otros. La detección de anticuerpos específicos de clase IgM por enzimoinmunoensayo (Mac ELISA) y UMELISA es un marcador de infección reciente. Estos anticuerpos pueden detectarse desde el comienzo de la fiebre y persisten a niveles dosables durante 3-8 semanas posteriores. MEDIDAS PREVENTIVAS Para la vigilancia y el control del dengue debe procurarse la participación de los distintos sectores de la población. Esta tiene dos componentes: la vigilancia entomológica, en la que se utilizan ovitrampas y el Indice de Breteau para evaluar la densidad larvaria en recipientes que acumulan agua en los ámbitos domiciliarios y peridomiciliarios, y la vigilancia serológica en la que deben estudiarse los anticuerpos antivirales en grupos poblacionales de las áreas de mayor riesgo, a fín de conocer la situación epidemiológica frente al virus. OBJETIVOS El objetivo de esta investigación consistió en estudiar la circulación del virus Dengue entre la población de la ciudad de Posadas (Misiones). Este trabajo se enmarca en una investigación de mayores dimensiones, cuyo propósito es evaluar las enfermedades emergentes humanas en el área de influencia de la represa de Yacyretá, región subtropical sujeta a importantes modificaciones ambientales. Se presentan acá los resultados obtenidos en un primer muestreo, que continúa. M ATERIALES Y MÉTODOS Se estudiaron 161 sueros (102 mujeres y 59 varones) correspondientes a residentes permanentes de la ciudad de Posadas, de ambos sexos y con edades correspondientes entre los 2 y los 75 años. La distribución por sexo y edad de las muestras estudiadas se muestra en la Tabla 1. RANGO DE EDAD MUJERES VARONES TOTAL 0-10 36 32 68 11-20 19 14 33 21-30 19 6 25 31-40 12 2 14 41-50 11 3 14 51-60 2 1 3 61-70 2 1 3 71-80 1 0 1 TOTAL 102 59 161 Tabla 1: Distribución por sexo y edades de la población estudiada. Posadas, 1999. En todos los casos se efectuó un ultramicro enzimo inmunoensayo heterogéneo, por captura de la IgG de origen comercial *. El ensayo consistió en la captura de la IgG humana con un anticuerpo monoclonal fijado a la fase sólida, la cual se hizo reaccionar con antígeno específico de virus dengue y posteriormente se enfrentó con un suero monoclonal anti dengue conjugado con fosfata alcalina. La reacción se reveló con un sustrato fluorigénico (4-metilumbelifenilfosfato) y la fluorescencia emitida se midió con un fluorímetro especialmente adaptado para la lectura de micropolicubetas. *Umelisa Dengue Ig G, Centro de Inmunoensayos, La Habana, Cuba. RESULTADOS Los 161 sueros estudiados resultaron Negativos, es decir no se encontró ningún individuo con anticuerpos de clase IgG contra el antígeno del grupo Dengue. CONCLUSIONES Diferentes factores antrópicos como el aumento de la población, la urbanización descontrolada, el aumento en la frecuencia de los viajes y de los viajeros, y otros no antrópicos como el aumento de la densidad de mosquitos, el calentamiento global, etc., han facilitado la emergencia del dengue en América. El mundo tropical está sufriendo una pandemia con alrededor de 80 millones de personas afectadas anualmente y con epidemias en el sudeste asiático, Centro y Sudamérica, Africa oriental, China y Australia. En América las campañas de erradicación de Aedes se deterioraron en las décadas de 1970 y 1980 con el consiguiente incremento en las poblaciones de mosquitos. Países que estaban libres de dengue por muchos años como Bolivia, Brasil, Paraguay , Perú, Costa Rica y Panamá reportaron brotes epidémicos. Asimismo, una situación seria también se observa en relación a la fibre hemorrágica por dengue y al shock por dengue desde 1981, cuando ocurrió el primer brote en Cuba. Por ello, las Américas enfrentan una situación similar a la del sudeste asiático en términos de morbilidad y mortalidad. A fin de prevenir esta enfermedad y controlar la situación americana actual, un Comité de expertos de la OPS propuso el establecimiento de un sistema de vigilancia para dengue basado en exámenes de laboratorios a fin de proveer información temprana y precisa a las autoridades de salud sobre la aparición y/o expansión de esta enfermedad. El diagnóstico de dengue se ha transformado así en un objetivo importante de todos los laboratorios públicos de salud. Los resultados encontrados en el presente estudio, si bien constituyen un informe preliminar, permiten suponer la ausencia de circulación del virus dengue entre la población del área de la ciudad de Posadas. En una investigación realizada en 1987 por este grupo de trabajo, se estudiaron 626 personas adultas de la ciudad de Posadas mediante la inhibición de la hemoaglutinación para los serotipos 1 y 2 de dengue, encontrándose un 8,2% de reactividad, siendo en todos los casos a títulos serológicos bajos. Estos resultados fueron interpretados como indicadores de ausencia de casos recientes y que sólo señalaban la reacción a algún otro virus relacionado por el tipo de antígeno empleado en esa oportunidad. En la otras provincias del NEA se estudiaron en el mismo año 1248 sueros, obteniéndose valores similares. La información disponible actualmente en relación a la vigilancia serológica, señala también la ausencia de reacciones positivas en 950 sueros estudiados en los años 1998 y 1999, con la misma metodología empleada en el presente trabajo y en las cuatro provincias del NEA en un trabajo coordinado por el Dr. Alfredo Seijo de la Comisión para el estudio de las Patologías Regionales Argentinas ( CEPRA). Todo esto nos permite pensar que, a pesar de haberse notificado algunos casos de dengue clásico en la región, éstos podrían ser producto de infecciones adquiridas en los países vecinos y por el momento no se encontraría circulando el virus dengue dentro de la región NEA. BIBLIOGRAFÍA 1. Alonso, J; Risso, A; Mangiaterra, M; Guillerón, D; Gorodner, J. Prevalencia de dengue en un área de riesgo en la Argentina. Medicina (Bs.As.) 47 :551-552, 1987. 2. Alonso, J; Risso, A; Mangiaterra, M; Guillerón, D; Gorodner, J. La infección por virus dengue en áreas de riesgo del NEA. Bol. Inst. Pat. Reg. 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