2: TODOS LOS LUGARES DE TRABAJO DEBEN SER OBJETO DE INSPECCIONES REGULARES POR PARTE DE LA AUTORIDAD EJECUTORA - Las inspecciones salvan vidas. Los sindicatos quieren ver en todos los países del mundo una inspección laboral pública dotada de los recursos adecuados y que tenga que rendir cuentas como la autoridad de aplicación en materia de salud y seguridad Existe una clara relación entre las inspecciones y los niveles de seguridad. A medida que las inspecciones disminuyen, aumentan las lesiones. Los empleadores son más propensos a hacer mejoras en el lugar de trabajo, simplemente porque saben que el lugar de trabajo puede ser inspeccionado. La necesidad de cumplir con la ley es el principal motor para que los empleadores cambien su comportamiento. Los sindicatos quieren ver más inspecciones de los lugares de trabajo. Es la forma más eficaz de garantizar el cumplimiento de la ley y también de ofrecer el apoyo que necesitan a las empresas y los trabajadores. El Convenio 81 de la OIT sobre la inspección del trabajo establece los derechos y deberes de los Inspectores de Trabajo para inspeccionar los lugares de trabajo y para insistir en mejoras para garantizar el cumplimiento de la ley y la protección de la salud y la seguridad de los trabajadores. El Convenio 81 ha sido ratificado por 142 países, sin embargo, muy pocos de ellos cumplen con las normas que los sindicatos esperan que cumplan, debido a la falta de recursos, equipo y capacitación para los inspectores de trabajo. En sectores como la construcción y la silvicultura hay una necesidad de inspectores laborales específicos, debidamente capacitados, que dispongan de recursos y de equipo para que puedan visitar los lugares de trabajo y asesorar sobre la manera de cumplir con las normas relativas a la salud, la seguridad, el bienestar y laborales.