Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes Lecciones aprendidas de la iniciativa Microfinanzas integradas para jóvenes (AIM Youth) Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes Lecciones aprendidas de la iniciativa Microfinanzas integradas para jóvenes (AIM Youth) Freedom from Hunger – INFORME TÉCNICOMayo 2014 Autoras: Rossana Ramírez y Candace Nelson Se permite la reproducción o copia del contenido de este documento sin autorización de Freedom from Hunger, siempre y cuando los segmentos reproducidos se distribuyan sin fines de lucro de manera gratuita o al costo. Sírvase hacer mención a Freedom from Hunger y su trabajo “Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes: Lecciones aprendidas de la iniciativa Microfinanzas integradas para jóvenes (AIM Youth)” en las secciones así reproducidas. Para reproducciones comerciales, por favor solicite autorización de: Freedom from Hunger 1644 DaVinci Court Davis, Californie 95618. USA Tel.: +1-530-758-6200 info@freedomfromhunger.org Contenido Abreviaturas…………………………………………………………………………………………………… ii Agradecimientos……………………………………………………………………………………………… iii Resumen ejecutivo…………………………………………………………………………………………… iv Introducción…………………………………………………………………………………………………… 1 Alcance y limitaciones del informe…………………………………………………………………………… 1 Generalidades sobre el modelo de integración de servicios de Freedom From Hunger……… 2 Descripción del proyecto…………………………………………………………………………………… 3 Países, asociadas ejecutoras y período de ejecución………………………………………………………… 3 Perfil de la población meta de jóvenes……………………………………………………………………… 6 Descripción de los servicios integrados……………………………………………………………………… 8 El modelo de integración y estrategia de cobertura de Ecuador………………………………………… 10 El modelo de integración y estrategia de cobertura de Malí……………………………………………… 14 Monitoreo del proyecto y metodología de investigación…………………………………………… 19 Resultados del programa y cifras del impacto………………………………………………………… 21 Resultados del programa…………………………………………………………………………………… 21 Cifras del impacto………………………………………………………………………………………… 26 Sostenibilidad de la prestación de servicios integrados…………………………………………… 31 Sostenibilidad de los servicios financieros formales……………………………………………………… 31 Sostenibilidad de los servicios no formales………………………………………………………………… 34 Lecciones aprendidas sobre los diferentes modelos de servicios integrados………………… 35 Recomendaciones para integrar el ahorro juvenil con la educación financiera……………… 37 Conclusión…………………………………………………………………………………………………… 38 Anexo A.……………………………………………………………………………………………………… 40 Anexo B.……………………………………………………………………………………………………… 42 Anexo C.……………………………………………………………………………………………………… 43 Anexo D.……………………………………………………………………………………………………… 45 Anexo E.……………………………………………………………………………………………………… 47 Notas al pie de página……………………………………………………………………………………… 52 Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes i Abreviaturas ACAhorro Comunitario AIM Youth Microfinanzas integradas para jóvenes (AIM Youth) CAEB Conseils et Appui pour l’Education à la Base CERCAD Centre d’Études, de Recherche, de Communication et d’Animation pour le Développement CAG Cuentas de ahorro grupal CAI Cuentas de ahorro individual CYFI Child and Youth Finance International FFH Freedom from Hunger GAJGrupos de ahorro para jóvenes IMF Institución microfinanciera PSF Proveedor de servicios financieros EF Educación financiera ONG Organización no gubernamental SMB San Miguel de los Bancos (cooperativa ecuatoriana) Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes ii Agradecimientos El proyecto AIM Youth ha sido un verdadero trabajo colectivo que convocó a varios actores. Son muchas las personas a las que debemos agradecer por sus aportes, labor infatigable con los jóvenes, coordinación y apoyo técnico. En primer lugar, queremos agradecer a la Fundación MasterCard por su asociación con Freedom from Hunger para la implementación de este proyecto. Igualmente, quisiera expresar mi agradecimiento al personal de nuestras asociadas ejecutoras. En Ecuador, tengo una deuda especial con el equipo administrativo y el equipo de campo de nuestras asociadas en la Etapa I, Cooperativa San José y Cooperativa Santa Ana, quienes se mantuvieron fieles al proyecto y siguieron ofreciendo los servicios a los jóvenes a pesar de los grandes desafíos iniciales. Aprecio mucho el apoyo de las asociadas de la Etapa II, Cooperativa San Miguel de los Bancos y Cooperativa Cooprogreso, por su apertura para ensayar nuevas tecnologías. Siempre recordaré con asombro la dedicación del personal de CAEB, Le Tonus y Nyèsigiso en Malí, quienes siguieron prestando los servicios a pesar de que el país atravesaba un momento de turbulencia económica y política. Las palabras no alcanzan para expresar mi agradecimiento al personal de Freedom from Hunger que contribuyó enormemente a lo largo de los procesos de diseño, implementación, investigación y documentación, incluyendo a Bobbi Gray, Megan Gash, Perth Rosen, Jessie Tientcheu, Cassie Chandler y Marja Sainio. Quisiera extender un reconocimiento especial al arduo trabajo de nuestro equipo de campo en Ecuador, Amelia Kuklewicz y Rocío Chávez, y en Malí, Nadège Gbaguidi e Yvonne Gaba. Sin sus incansables esfuerzos y perseverancia contra viento y marea, el proyecto no habría tenido éxito. T ambién es necesario agradecer a nuestros colegas que partieron de Freedom from Hunger: Maazou Oumarou, Mamadou Diallo, Lisa KuhnFraioli, Chris Dunford, Laura Fleischer-Proaño y Jessica Chin-Foo. No podría dejar de mencionar a nuestros compañeros de Freedom from Hunger que trabajaron laboriosamente en muchos aspectos de este proyecto: Julie Uejio, Brent Farrar, Jessica Delgado, Conan Wickham, Ron Forrest y Dana Mueller. Asimismo, quiero agradecer a mis colegas que revisaron este documento: Ruth Dueck-Mbeba de Fundación MasterCard, Kathleen Stack y Bobbi Gray de Freedom from Hunger, Jennifer Denomy de MEDA; Jennefer Sebstad de USAID; Chris Dunford y Lisa Kuhn Fraioli. Finalmente, quisiera agradecer a todos los jóvenes que participaron en este proyecto. Los resultados positivos que alcanzamos fueron posibles gracias a su fuerte deseo de participar, aprovechar al máximo los servicios y trabajar duro para sentar las bases de un futuro mejor. Quisiera dedicar este informe a José Guillén, Director General de Cooperativa San José, quien perdió la batalla contra el cáncer hacia el cierre del proyecto. Sin su dedicación para ofrecer los servicios a los jóvenes, este proyecto no habría sido tan exitoso. Descanse en paz. El presente informe representa el punto de vista y el análisis de la autora, sin que necesariamente refleje las opiniones de los revisores. Los revisores y sus organizaciones no están necesariamente de acuerdo con todo el contenido de este informe. Rossana Ramírez Mayo de 2014 Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes iii Resumen ejecutivo La transición de la adolescencia a la adultez puede ser precaria para los jóvenes a medida que tratan de navegar en un mar de nuevas responsabilidades y afirmar su independencia. Para los jóvenes que viven en situación de pobreza, esta transición enfrenta aún más desafíos pues se caracteriza por la presencia de tensiones entre las crecientes presiones financieras por una parte, y el acceso limitado a recursos y oportunidades, por otra parte. Estos factores pueden reproducir un círculo vicioso de pobreza a medida que estos jóvenes crecen y forman sus propias familias. Por esta razón, la revisión de soluciones a los desafíos que los jóvenes enfrentan al principio de su vida está recibiendo mucha atención en las estrategias de mitigación de la pobreza. Freedom from Hunger considera que el hecho de ofrecer a los jóvenes una combinación de conocimientos, habilidades e instrumentos financieros prácticos para ayudarles a administrar sus limitados recursos podría ayudarles a formar su capacidad financiera durante esta etapa de transición y encaminarlos hacia un futuro más seguro. Con el fin de evaluar el impacto y eficacia de esta combinación de servicios en distintos escenarios, en 2009 Freedom from Hunger estableció una alianza con la Fundación MasterCard para lanzar la iniciativa Microfinanzas integradas para jóvenes (AIM Youth). A través de AIM Youth, Freedom from Hunger se propuso ofrecer servicios financieros y educación financiera a jóvenes en edades de 13 a 24 años en Malí y Ecuador. Para la puesta en marcha de esta iniciativa, Freedom from Hunger trabajó con sus asociadas ejecutoras en el diseño de servicios apropiados para la población meta, tomando en cuenta esta etapa de sus vidas y sus recursos. Muchas otras organizaciones que trabajan en el desarrollo de la capacidad financiera y la promoción de la inclusión financiera de los jóvenes han adoptado un enfoque integrado que combina la educación financiera con un servicio financiero.1 Aún así, al buscar el modelo de integración más adecuado, los especialistas enfrentan interrogantes que guardan conexión con los programas de microfinanzas con valor agregado.2 ¿De las múltiples necesidades de los jóvenes, cuáles debe abordar el programa? ¿Cuál es la combinación más eficaz de servicios financieros y no financieros? ¿Cuáles son las repercusiones operacionales de la prestación de servicios integrados? ¿Quién proporciona los diferentes servicios? ¿Cuál es el impacto de estos servicios? ¿Cómo sostener los servicios no financieros? A través de su iniciativa AIM Youth, Freedom from Hunger ha buscado responder a estas preguntas y ha podido compilar una serie de reflexiones a medida que ha experimentado éxitos y desafíos. La teoría del cambio de AIM Youth se centró en comprender el grado en que la combinación de estos servicios para jóvenes podría influenciar en su capacidad socio-financiera3, su habilidad para afrontar eventos del ciclo de vida, su autoconfianza y empoderamiento, capital social y conocimientos y actitudes respecto al manejo del dinero en el corto plazo. Los cambios positivos en los resultados a corto plazo deben llevar a una mejor participación económica y ciudadana, así como a un mejor acceso y uso de los alimentos en el largo plazo. Esta teoría del cambio se sometió a prueba a través de un programa de investigación con varias metodologías que incluía información cualitativa y cuantitativa. Además, periódicamente se recopilaron datos sobre los servicios prestados con miras a medir la eficacia de cada método en el logro de los resultados previstos. Esta información, combinada con visitas de monitoreo y conversaciones permanentes con las contrapartes en campo, aportó valiosas reflexiones sobre la viabilidad operacional y financiera de cada enfoque. Con AIM Youth, Freedom from Hunger diseñó y sometió a prueba tres modelos diferentes para ofrecer servicios financieros y educación financiera a jóvenes de Malí y Ecuador. Para que los resultados y cifras de impacto del proyecto resulten más relevantes y útiles para el diseño de otros programas dirigidos a jóvenes de escasos recursos en el futuro, evaluamos los hallazgos principalmente con base en la capacidad de cada modelo para mejorar la capacidad financiera de los jóvenes y el nivel de eficacia alcanzado en la integración y prestación de estos servicios. Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes iv En resumen, hallamos evidencia de que la combinación de servicios da como resultado mejores comportamientos de ahorro y conocimientos financieros en todos los modelos, aunque la eficacia de la integración varía según el modelo: Cuentas de ahorro individual (CAI) y educación financiera En Ecuador se implementó un método diferente a través de las cooperativas: el personal de campo facilitó las sesiones de educación financiera en las escuelas y promovió la apertura voluntaria de CAI. Los jóvenes de las escuelas donde se trabajó reportaron mejoras en sus ahorros totales y ahorros para emergencias e indicaron sentirse satisfechos con los montos ahorrados y motivados para ahorrar. Aunque los conocimientos financieros y comportamientos de ahorro mejoraron entre los jóvenes, no todos los que participaron en la educación financiera abrieron una cuenta de ahorro. En lugar de ello, muchos otros jóvenes de la comunidad abrieron una cuenta de ahorro para jóvenes, principalmente los jóvenes mayores de 18 años. Los resultados sugieren que la educación financiera por sí misma probablemente fue más exitosa en cambiar las actitudes, motivaciones y percepciones sobre la situación financiera personal, pero no fue suficiente para superar los desafíos en el acceso a los servicios financieros formales. Este enfoque tiene potencial de ser sostenible en el largo plazo si es co-subsidiado por otros productos financieros más rentables a los que los jóvenes y sus redes puedan acceder a lo largo del tiempo. No obstante, el inconveniente de este modelo es una oferta más limitada de la educación financiera. Cuentas de ahorro grupal (CAG) y educación financiera Se implementó un enfoque grupal a través de una federación de cooperativas en Malí, con un modelo diseñado para que los jóvenes pudieran ahorrar en una cuenta de ahorro formal.4 Bajo este enfoque, los jóvenes aumentaron su nivel total de ahorro pero no mostraron tanta mejoría en los conocimientos financieros, ya que éstos eran elevados desde el principio, probablemente a consecuencia de haber atraído a jóvenes de más edad que quizás tenían más experiencia con los servicios financieros. El modelo, implementado en un contexto urbano, enfrentó muchos más retos para congregar a los jóvenes, y en especial para garantizar la equidad entre los participantes hombres y las participantes mujeres. Al final el número de participantes hombres que abrieron cuentas fue superior al de mujeres, ya que las cuentas fueron ofrecidas en mayor parte a los hombres. Sin embargo, como en el caso de los Grupos de Ahorro para jóvenes (GAJ), este modelo grupal también fue eficaz para proporcionar un paquete integrado de servicios de ahorro y de educación, así como para eliminar los principales obstáculos a los servicios financieros formales. Sin embargo, su implementación requirió muchos más recursos, lo que resultó en una limitación a nivel de la cobertura y dificultades para lograr sostenibilidad financiera sin subsidios externos. Grupos de Ahorro para Jóvenes (GAJ) y educación financiera En Malí, se adaptó un enfoque basado en el ahorro para jóvenes de zonas rurales el cual se implementó a través de organizaciones no gubernamentales de desarrollo comunitario. El modelo logró resultados significativos tanto a nivel de la cobertura como a nivel del impacto, y fue especialmente exitoso en la prestación de servicios a niñas adolescentes. Pese al golpe de estado que afectó al país durante el periodo del proyecto, los jóvenes participantes experimentaron un aumento en su ahorro total (incluyendo el valor del ganado), mejoras en sus actitudes respecto a los asuntos financieros, mejoras en sus conocimientos financieros y la capacidad de conservar estos cambios positivos a lo largo del tiempo. El enfoque grupal también resultó ser muy eficaz en la prestación de servicios integrados, ofreciendo un mismo espacio y tiempo para los componentes tanto financieros como no financieros. Sin embargo, la falta de dinero para ahorrar y la migración fueron los dos obstáculos más grandes para acceder y usar los servicios financieros. Si bien se desconoce cuánto tiempo se seguirán reuniendo los GAJ en el largo plazo, los grupos sirven como una plataforma que permitirá a los jóvenes desarrollar capacidades financieras y mecanismos de resiliencia. Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes v El Cuadro 1 muestra la cobertura total de los tres modelos durante la implementación del programa, por segmentos de jóvenes que participaron en las sesiones de educación financiera y el ahorro para jóvenes (a través de una cuenta de ahorro o como parte de un GAJ). Cuadro 1: Indicadores de cobertura por modelo integrado (a 31 de diciembre de 2013) Malí Ecuador Malí CAI y educación financiera CAG y educación financiera GAJ y educación financiera Total Jóvenes con ahorro 5,701 2,606 24,070 32,377 Jóvenes con educación financiera 12,763 2,372 19,391 34,526 Nota: Debido al diseño de los servicios en Malí, no todos los jóvenes que participaron en el ahorro grupal pudieron recibir la educación dentro del periodo de duración del proyecto. En el caso de Ecuador, los datos sobre la cobertura del ahorro y de la educación financiera provienen de dos bases de datos diferentes. Entre las lecciones globales aprendidas de la investigación y del monitoreo del proyecto figuran: El acceso a los servicios financieros integrados para los jóvenes puede ayudarles a formar su capacidad financiera La educación financiera no conlleva automáticamente a la apertura de cuentas de ahorro Los métodos grupales que parten del ahorro como base fundamental son muy eficaces en la entrega de servicios integrados Los jóvenes valoran la educación financiera pero necesitan más que educación para satisfacer sus necesidades financieras; por ejemplo, necesitan capacitación y apoyo en sus actividades económicas y acceso al crédito Los padres desempeñan un papel crucial en la vida financiera de sus hijos, especialmente como facilitadores entre los jóvenes de menos edad del acceso y uso de los servicios financieros La tecnología ofrece una serie de posibilidades para que más jóvenes entren a participar en los servicios y para que la adopción se haga de forma más eficaz La oferta de educación financiera por parte de las instituciones financieras debe corresponderse con la capacidad, recursos y estrategia de las instituciones El diseño del producto puede ayudar a superar algunos de los obstáculos para acceder a servicios financieros formales, pero probablemente sería más eficaz contar con un sector de servicios financieros más competitivo. Aunque no es posible aislar el efecto de cada servicio de manera independiente, la integración de la educación financiera con una estrategia de ahorro es alentadora dentro del campo del desarrollo. En este informe se presentan hallazgos apoyados en la evidencia y se ofrecen recomendaciones para las organizaciones que desean desarrollar capacidades financieras en los jóvenes y promover su inclusión financiera mediante la oferta de servicios de ahorro y educación financiera. Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes vi Introducción Los jóvenes ocupan en este momento las portadas del desarrollo como uno de los sectores de mayor prioridad, debido en gran parte, a la convergencia de la “explosión de la juventud” (“youth bulge” un fenómeno demográfico en el que la proporción de jóvenes dentro de la población llega a un punto máximo) y los altos niveles de desempleo juvenil, lo que exacerba los niveles de pobreza.5 Reconociendo la complejidad que subyace a los esfuerzos por atender las diferentes necesidades y desafíos de los jóvenes que viven en situación de pobreza, el sector del desarrollo está perfeccionando estrategias multisectoriales dirigidas a los jóvenes, integrándolos en diversos tipos de programas de desarrollo.6 La acumulación de ahorros y activos es un enfoque que suscita creciente interés por su potencial para mejorar el bienestar económico de las personas que viven en situación de pobreza.7 Aunque el ahorro por sí mismo no sacará a los jóvenes de la pobreza, sí puede reforzar sus capacidades para enfrentar crisis financieras al ayudarles a acumular activos (incluso en la forma de pequeños ahorros) desde temprano en la vida, antes de que deban asumir mayores responsabilidades financieras y sociales como adultos. No obstante, los jóvenes deben enfrentar una serie de obstáculos para ahorrar, tales como disponer solamente de montos pequeños e irregulares de ahorro, tener un acceso limitado o simplemente ningún tipo de acceso a instrumentos de ahorro seguros, no poder cumplir los requisitos para abrir cuentas de ahorro, no sentir la urgencia de ahorrar y no ser muy conscientes de la importancia de ahorrar para el futuro y para superar dificultades financieras.8 En respuesta a algunos de estos desafíos se observa una tendencia que va cobrando fuerza, la cual busca ofrecer educación financiera a los jóvenes junto con instrumentos de ahorro, partiendo de la teoría de que la educación puede contribuir al desarrollo de las capacidades financieras de los jóvenes al ayudarles a concretizar sus conocimientos financieros en acciones apropiadas.9 Freedom from Hunger, con su experiencia en el ofrecimiento de servicios de valor agregado en el campo de las microfinanzas, sabía que la integración de servicios financieros y educación financiera debería tomar distintas formas para responder adecuadamente a los variados contextos y necesidades de la población meta. En 2009, Freedom from Hunger acordó una alianza con la Fundación MasterCard para lanzar la iniciativa Microfinanzas integradas para jóvenes (AIM Youth) que buscaba someter a prueba y documentar una combinación de servicios financieros adaptados (principalmente en la forma de ahorros) y educación financiera en Malí y Ecuador, para jóvenes de 13 a 24 años de edad. La integración de estos servicios es congruente con el enfoque sugerido en un informe reciente del Banco Mundial sobre inclusión financiera, en el que los autores concluyen que “la combinación de programas de educación financiera para poblaciones específicas con otras intervenciones resulta particularmente útil para los hogares pobres, los cuales suelen tener múltiples limitaciones para acceder a los servicios de ahorro y otras actividades financieras.”10 Al asociarse con diferentes tipos de proveedores en distintos contextos, AIM Youth sirvió como un laboratorio de aprendizaje que de un lado ha permitido informar múltiples enfoques que buscan desarrollar las capacidades financieras de los jóvenes, y de otro lado ha conducido a una serie de reflexiones sobre las estrategias eficaces para integrar servicios financieros y no financieros y promover la inclusión financiera de los jóvenes. Alcance y limitaciones del informe Este informe documenta la experiencia de Freedom from Hunger y sus asociadas ejecutoras en la oferta de tres paquetes diferentes que integraban servicios financieros y educación financiera para jóvenes, así como el impacto de dichos paquetes en la capacidad financiera de los jóvenes participantes. El documento sintetiza los resultados obtenidos a través de sistemas cualitativos y cuantitativos de monitoreo y datos recopilados a lo largo de cuatro años de implementación en Ecuador y Malí. Este informe técnico está dirigido principalmente Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 1 a las instituciones interesadas en desarrollar las capacidades financieras y la promoción de la inclusión financiera de los jóvenes mediante la oferta combinada de servicios financieros y educación financiera. Entre las instituciones interesadas podrían figurar desde proveedores de servicios financieros (PSF) que ofrecen productos de ahorro formal como cuentas de ahorro y préstamo, hasta organizaciones comunitarias (OC) u organizaciones al servicio de la juventud (OSJ) que puedan facilitar programas financieros comunitarios como los Grupos de Ahorro. Los servicios financieros formales que se sometieron a prueba a través de AIM Youth se ofrecieron exclusivamente a través de cooperativas, las cuales tienen una filosofía y estructura diferente a la de los bancos comerciales o instituciones microfinancieras (IMF). Las cooperativas son propiedad de sus socios y, como tales, tienden a tener un vínculo muy fuerte con las comunidades en las que operan.11 Por ello, su interés y mecanismos para ofrecer servicios integrados son en parte un reflejo de su visión y misión institucional. Sin embargo, muchos de los aprendizajes adquiridos a partir de su experiencia podrían aplicarse a otros tipos de instituciones financieras dotadas de una fuerte misión social. El objetivo del presente informe es proporcionar una guía detallada para el diseño e implementación de productos de ahorro o educación financiera para jóvenes. La intención principal es ofrecer orientación y algunas reflexiones importantes sobre varios enfoques de prestación de un servicio financiero, fundamentalmente en la forma de ahorros, integrado con educación financiera para los jóvenes que viven en situación de pobreza. Las recomendaciones contenidas en este informe pueden complementar la información proporcionada por otras organizaciones que documentan el proceso de desarrollo de productos para los servicios financieros dirigidos a los jóvenes, tales como SEEP,12 Women’s World Banking,13 MEDA14 y FNUDC.15 Finalmente, no nos propusimos someter a prueba el mismo enfoque en dos contextos diferentes, de manera que no podemos saber con certeza si un enfoque dado funcionaría en un contexto diferente. Sin embargo, los enfoques evaluados, bien se trate de servicios financieros formales o no formales, reflejan en gran parte el contexto cultural, geográfico y económico en que se implementaron y eran adecuados para el perfil de la población de jóvenes a quienes iban dirigidos. Generalidades sobre el modelo de integración de servicios de Freedom From Hunger En el curso de los últimos años, en respuesta tanto a una serie de resultados negativos asociados con las microfinanzas (como el sobre-endeudamiento) como a un creciente compromiso con el desempeño social, han surgido desde varios frentes iniciativas que buscan apoyar a los clientes con servicios adicionales. Adicionalmente, la creciente diversidad de proveedores y productos ha dado lugar a la necesidad de educar a los clientes con el fin de fortalecer sus capacidades para elegir y utilizar las nuevas opciones financieras. Freedom from Hunger goza de reconocimiento como experta intercesora a favor de la prestación de servicios integrados en las microfinanzas desde finales de los años ochenta. La organización ha sido pionera en la implementación de mecanismos innovadores de integración de los servicios microfinancieros con servicios no financieros, tales como protección de la salud, educación financiera y educación en temas de salud y negocios. La estrategia de Freedom from Hunger típicamente comienza con la formación de grupos. Las reuniones regulares de los grupos sirven de plataforma para el desarrollo del aprendizaje, de lazos de apoyo mutuo y la autoconfianza. En sus servicios educativos, Freedom from Hunger recurre a una capacitación basada en el diálogo en la que los miembros pueden participar aunque no sepan leer o escribir. El aprendizaje ocurre con la participación y el apoyo de los miembros del grupo. Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 2 Freedom from Hunger ha elaborado un marco de referencia para comprender las opciones de prestación de los servicios integrados, el cual es ahora ampliamente usado y citado en el sector (ver Cuadro 2).16 Cuadro 2. Opciones para la prestación de servicios integrados Tipo Vinculado Paralelo Unificado Descripción Dos o más instituciones prestan diferentes servicios especializados; una puede organizar grupos para fines de ahorro y crédito mientras que otra utiliza dichos grupos para prestar otro servicio (como educación en temas de salud, extensión agrícola, etc.). Diferentes equipos de personal de la misma institución prestan servicios diferentes. Todos los servicios son proporcionados por el mismo personal de la misma institución. Por ejemplo, el animador en Malí que forma y capacita a los Grupos de Ahorro también les imparte educación sobre la malaria. Freedom from Hunger reconoce que estas opciones de prestación de servicios no son rígidas y que puede darse versiones híbridas. Para AIM Youth, Freedom from Hunger y sus asociadas ejecutoras optaron por usar versiones del modelo unificado para maximizar la eficacia y aprovechar la experiencia con los servicios integrados. La idea subyacente es que la sinergia entre la educación financiera y los servicios financieros hace que ambos aspectos sean relativamente fáciles de manejar por el mismo empleado. Además, Freedom from Hunger considera que el modelo unificado es el enfoque más sostenible ya que a menudo es el que representa costos más bajos.17 La participación de una segunda institución en la prestación de los servicios puede incrementar los costos y afectar la sostenibilidad. Sin embargo, en el modelo unificado es necesario prestar atención a la carga de trabajo del personal, ya que hay un límite de tareas o responsabilidades que un solo empleado puede administrar eficazmente. Descripción del proyecto AIM Youth se implementó en Ecuador y Malí desde 2010. El enfoque principal que se siguió en ambos países consistía en ofrecer a los jóvenes un conjunto de sesiones de educación financiera participativas y dinámicas basadas en el diálogo, junto con un mecanismo de ahorro que pudiera ayudarles a aplicar los conceptos y metas financieras definidas durante la educación financiera. En esta sección se presenta una breve descripción de los países y asociadas participantes, la población meta, los servicios ofrecidos y los diversos modelos del piloto. Países, asociadas ejecutoras y período de ejecución Freedom from Hunger optó por implementar AIM Youth en Malí y Ecuador por varias razones. En primer lugar, la población de ambos países presenta un alto porcentaje de jóvenes, personas que viven en situación de pobreza y personas que viven en zonas rurales (Ver Cuadro 3). Freedom from Hunger ha concentrado su trabajo históricamente en las poblaciones rurales debido a su vulnerabilidad al hambre crónica.18 Asimismo, Freedom from Hunger ya tenía amplia experiencia trabajando en estos países y operando oficinas locales. Cuadro 3. Principales Características de los países seleccionados Ecuador Malí Porcentaje de población total que tiene menos de 15 años de edad 30.9% 46.7% Porcentaje de población total que tiene entre 15 y 24 años de edad 19.2% 18.6% Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 3 Porcentaje de población rural total Porcentaje de personas que viven en situación de pobreza en zonas rurales Ecuador Malí 32.5% 65.1% 49% 51% Fuentes: División de Población del Departamento de Asuntos Económicos y Sociales del Secretariado de las Naciones Unidas, 2010. Banco Mundial, Indicadores de Desarrollo Mundial. Los datos de Ecuador son de 2012 y los de Malí, de 2010. En cuanto a la selección de las asociadas locales para la implementación, Freedom from Hunger trabajó con un conjunto diverso de instituciones locales: cuatro cooperativas en Ecuador, dos federaciones de cooperativas en Malí y dos organizaciones no gubernamentales (ONG) en Malí.19 En la selección de sus asociadas, Freedom from Hunger se fijó dos criterios iniciales: que las instituciones comprendieran o tuvieran experiencia en la implementación de servicios integrados para jóvenes o adultos y que las instituciones tuvieran el compromiso institucional de beneficiar a los jóvenes con sus servicios. Freedom from Hunger dio prioridad a las instituciones con potencial para llegar a los jóvenes de bajos ingresos, especialmente a los jóvenes que viven en zonas rurales donde los niveles de pobreza y hambre crónica tienden a ser mayores. Para las instituciones a cargo de la ejecución, la participación de este proyecto les dio la oportunidad de llegar a una población que deseaban acoger como clientes futuros. En el Cuadro 4 se presentan todas las asociadas implementadoras en los países en los que se trabajó y su experiencia con los servicios integrados. Cuadro 4. Perfil de las asociadas ejecutoras País Institución Tipo de institución Enfoque geográfico Experiencia con servicios integrados Ecuador San José Cooperativa Rural CCE* Santa Ana Cooperativa Rural CCE* Cooprogreso Cooperativa Urbana CCE* Malí San Miguel de los Bancos Cooperativa Rural No CAEB Organización no gubernamental Rural AC** Le Tonus Organización no gubernamental Rural AC** Nyèsigiso Federación de cooperativas Urbana CCE* Kondo Jigima*** Federación de cooperativas Urbana/periurbana CCE* * CCE, Crédito con Educación es la innovación emblemática para la prestación de servicios de Freedom from Hunger y se ofrece en asociación con IMF locales. Se trata de un programa integrado de microfinanzas con educación para adultos basada en el diálogo, específicamente diseñado para atender las necesidades propias de las mujeres pobres de zonas rurales. **AC, Ahorro Comunitario es una iniciativa de microfinanzas con base en el ahorro desarrollada por Freedom from Hunger con Oxfam America y Strømme Foundation de Noruega. El enfoque de las microfinanzas con base en el ahorro es una metodología emergente en la que los socios ahorran juntos, otorgan préstamos sobre sus ahorros a los integrantes o socios de los grupos y comparten las ganancias. ***La alianza con Kondo Jigima bajo el marco de AIM Youth comenzó en marzo de 2010 y terminó a principios de septiembre 2012 en razón de los cambios institucionales que atravesó la cooperativa en ese entonces. Debido al corto período de implementación con Kondo Jigima, este informe no refleja la experiencia adquirida con esta institución. Malí en especial representaba una valiosa oportunidad para explorar los servicios informales para jóvenes ya que Freedom from Hunger había colaborado anteriormente con las asociadas seleccionadas en la implementación de Ahorro Comunitario, una iniciativa muy exitosa y amplia con grupos de ahorro que la organización pretendía replicar entre la población joven. Por su parte, Ecuador brindaba la oportunidad de poner a prueba y comparar la integración de los servicios en un contexto diferente, puesto que las cooperativas asociadas de dicho país tienen una orientación social similar a la de las federaciones de cooperativas de Malí. Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 4 Mali Ecuador El papel de Freedom from Hunger Freedom from Hunger desempeñó una función técnica importante, además de asumir la gestión del proyecto. En el área técnica, Freedom from Hunger lideró el proceso de investigación de mercado, incluyendo la recopilación y análisis de datos, propiciando entre las asociadas el uso de los hallazgos en el diseño de los servicios financieros y de la educación financiera. Además, Freedom from Hunger diseñó el módulo de educación financiera y capacitó al personal de campo de las asociadas en la metodología de facilitación. Para los servicios financieros basados en la metodología grupal, Freedom from Hunger adaptó las guías de capacitación de los Grupos de Ahorro y colaboró con las asociadas para capacitar al personal de campo en la formación y manejo de los grupos. En el caso de las cuentas de ahorro individual (CAI), Freedom from Hunger brindó asistencia técnica en su diseño y en la capacitación del personal. Adicionalmente, Freedom from Hunger dirigió el diseño de las investigaciones, la recopilación de datos y el análisis de los hallazgos. A lo largo de la implementación del proyecto, Freedom from Hunger congregó a sus asociadas en una serie de reuniones para monitorear y evaluar los avances, identificar aprendizajes e intercambiar ideas sobre la sostenibilidad de los servicios. Cronograma del proyecto El proyecto se diseñó en tres etapas: una etapa inicial que abarcó la investigación de mercado y el diseño del producto y dos etapas de implementación donde inicialmente solo dos asociadas de cada país lanzaron un piloto de los servicios. Este método escalonado permitiría a Freedom from Hunger evaluar la eficacia de los servicios antes de lanzarlos con otras asociadas. El método de cuentas de ahorro grupales (CAG) presentó algunos retrasos, lo que limitó la posibilidad de evaluar el modelo antes de lanzarlo con la segunda asociada. Las actividades de monitoreo se realizaron a lo largo de todo el período de ejecución; sin embargo, las actividades de investigación estuvieron más delimitadas, durando aproximadamente 18 meses. En el Cuadro 5 se presenta la secuencia real de la implementación de los servicios desde 2011 hasta 2013 (las flechas señalan el momento en que las asociadas empezaron a lanzar sus servicios para jóvenes). Las labores de investigación de mercado y diseño de productos se realizaron en 2010 (no se muestra). Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 5 Cuadro 5: Secuencia de la implementación 2011 Trimestres 1ro 2do 3ro 2012 4to 1ro 2do 3ro 2013 4to 1ro 2do 3ro 4to Ecuador San José (C) è Santa Ana (C) è Cooprogreso (C) è San Miguel de los Bancos (C) è Mali CAEB (ONG) Tonus (ONG) è è Nyèsigiso (FC) è Kondo Jigima (FC) è C - Cooperativa FC – Federación de cooperativas El contexto es definitivo Con la iniciativa AIM Youth nos propusimos someter a prueba diferentes enfoques que contemplaban contextos económicos muy distintos. En Malí, donde un gran porcentaje de la población vive en zonas rurales y en condiciones de pobreza, la profundidad y alcance del sector de servicios financieros son muy limitados. Por ello, sabíamos que no podíamos depender exclusivamente de los servicios financieros formales para llegar a los jóvenes muy pobres de las zonas rurales. Según el Informe sobre Competitividad Global publicado por el Foro Económico Mundial, Malí ocupa el lugar 127 en disponibilidad de servicios financieros y el 104 en accesibilidad a dichos servicios (entre 144 países).* En Ecuador, la proporción de población rural es ligeramente menor y existe un sector de servicios financieros más sólido y dinámico en comparación con Malí. El sector de servicios financieros de Ecuador ocupa el lugar 87 en disponibilidad de servicios y el 82 en accesibilidad.** Por lo anterior, la implementación de un enfoque de servicios formales en Ecuador resultaba una opción lógica. * http://www3.weforum.org/docs/WEF_GlobalCompetitivenessReport_2013-14.pdf (Fecha de acceso: 9 de enero de 2014) ** Ibídem. Perfil de la población meta de jóvenes Freedom from Hunger definió como población meta de esta iniciativa a los jóvenes de 13 a 24 años de edad. Si bien la Organización de Naciones Unidas define a los jóvenes como toda persona que se encuentra entre los 15 y 24 años de edad,20 la organización optó por ampliar el rango porque sabíamos que al fijar el mínimo de edad en 15 años muchas adolescentes de Malí no hubieran podido participar: 60 por ciento de las niñas se casa antes de los 18 años y tiene hijos al poco tiempo.21 Al fijar la edad mínima en 13 años fue posible que más mujeres adolescentes aprendieran habilidades financieras antes de tener que enfrentar la responsabilidad de ser esposas y madres. Desde el inicio, Freedom from Hunger y sus asociadas ejecutoras optaron por trabajar con jóvenes hombres y mujeres. Esta estrategia brindaría la oportunidad de comparar los resultados obtenidos por ambos grupos. La estrategia de llegar a los jóvenes a través de las escuelas en Ecuador hizo que el método de grupos mixtos (hombres y mujeres) fuera una elección obvia ya que no se estaba trabajando con escuelas o cursos para hombres o para mujeres exclusivamente. Además, un aspecto más crítico sería que la prestación de servicios Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 6 desagregados por grupos de hombres y mujeres sería más difícil de sostener financieramente. Las cooperativas no podrían diseñar un producto rentable si su mercado se reducía a la mitad. En Malí, la decisión de implementar un programa mixto era menos evidente ya que la estrategia de Grupos de Ahorro para Jóvenes (GAJ) se diseñó a partir de un programa dirigido específicamente a mujeres adultas. No obstante, debido a que las jóvenes aún no administran los recursos del hogar ni destinan recursos al bienestar de la familia como sus madres, no hay tanta urgencia de concentrarse exclusivamente en las mujeres. Adicionalmente, las ONG locales y las comunidades en las que se trabajó expresaron su fuerte deseo de permitir la participación de ambos sub-segmentos (hombres y mujeres) en un esfuerzo por ofrecer mayores incentivos para que los jóvenes, especialmente los hombres, permanezcan en sus comunidades o por lo menos aplacen su emigración. Las características generales de los jóvenes participantes de Malí y Ecuador son muy diferentes, en buena medida porque reflejan el contexto y método de entrega de cada institución ejecutora. En el Cuadro 6 se presentan las características de los jóvenes que participaron en las actividades de investigación, los cuales son representativos de la población total de jóvenes que participaron en los servicios de AIM Youth. Agitación política en Malí En marzo de 2012, Malí fue sacudido por un golpe de estado militar que ocasionó agitación política y económica y dejó a una parte del norte ocupada por grupos extremistas musulmanes. La crisis política conllevó a una suspensión de la ayuda multinacional y bilateral a Malí, ocasionando una recesión económica en todo el país. Durante este período más de 350.000 personas fueron desplazadas.* La crisis humanitaria y política exacerbó las precarias condiciones económicas de la población. A pesar del conflicto y la inestabilidad política, las asociadas locales a cargo de la ejecución en Malí continuaron prestando los servicios de AIM Youth en varias regiones del país. Ninguna tuvo que interrumpir sus servicios por completo ya que se encontraban fuera de la zona directa de conflicto, aunque muchos jóvenes informaron que la crisis afectó su capacidad para ganar dinero ya que toda la economía se vio impactada por la incertidumbre política. El personal de las asociadas confirmó este hecho. Aunque es difícil hacer mediciones bajo tales condiciones, es probable que el conflicto y la inestabilidad política atenuaran parte del impacto y los resultados de los servicios en Malí.** * Arieff, A. Crisis in Mali. Congressional Research Service.( 14 de enero de 2013) <http://www.fas.org/sgp/crs/row/R42664.pdf> (Fecha de acceso: 7 de abril de 2014) ** Gash, M. Impact of Integrated Financial Services for Young People in Mali: A Comprehensive Research Report. Davis, CA: Freedom from Hunger. 2014. Cuadro 6: Características de los jóvenes de Malí y Ecuador Ecuador Malí Malí Rural/Urbano Rural Urbano Hombres 59% 45% 83% Mujeres 41% 55% 17% Edad de 13 a 17 41% 80% 31% Edad de 18 a 24 59% 20% 69% No se ha casado 93% 85% 94% Característica Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 7 Característica Ecuador Malí Malí Rural/Urbano Rural Urbano Va a la escuela 74% 60% 44% Inseguridad alimentaria 1% 44% (mayo); 95% (oct.) 6% 15.2% 66% 4% 5% 25% 0% Ingreso percibido en los 7 días anteriores US$20.83 US$0,50–$1 US$4-$7 Gastos en los 7 días anteriores US$18.56 US$0,50–$1 US$2-$5 Por debajo de la línea nacional de pobreza Emigró el año pasado para trabajar Justificación de los servicios seleccionados ¿Por qué el ahorro? De toda la gama de productos y servicios financieros, Freedom from Hunger y sus asociadas optaron por dar prioridad al ahorro como punto de partida para trabajar con los jóvenes dado que todos los jóvenes de 13 a 24 años pueden acceder a los servicios de ahorro, formales o no formales, mientras que al crédito solo pueden acceder los jóvenes que son legalmente mayores de edad (generalmente 18 años). Inculcar una cultura del ahorro desde una edad temprana genera confianza y hábitos que pueden servir para toda la vida. Asimismo, el ahorro es el producto financiero que se puede poner más fácilmente al acceso de la población meta y es pertinente para los jóvenes que aún están en la escuela y tienen menos probabilidad de participar en actividades de subsistencia para las que se requiere crédito. El proyecto no pretendía descartar el crédito para los jóvenes que calificaran pero no hubo suficiente tiempo ni recursos para realizar un piloto con un componente de crédito.* ¿Por qué la educación financiera? De las muchas carencias y necesidades que tienen los jóvenes en desventaja (salud, oportunidades emprendedoras, habilidades para ejercer un oficio, etc.), Freedom from Hunger concluyó que la educación financiera era el servicio más adecuado, pertinente y eficaz para la integración con el ahorro. La educación financiera y los servicios financieros comparten conceptos y se refuerzan entre sí; la educación financiera ayuda a los jóvenes a comprender y emprender la gestión financiera a la que conduce el acceso a nuevos mecanismos de ahorro. Aunque la capacitación para los negocios se ofrece a menudo a los jóvenes de más edad junto con el acceso a servicios financieros, la educación financiera resulta más apropiada para los adolescentes, ya que es menos probable que éstos participen en una actividad comercial. * Freedom from Hunger y Santa Ana en Ecuador lanzaron un componente de crédito grupal para jóvenes a finales de 2013, pero no hubo suficiente tiempo para evaluar la eficacia de este servicio y presentar los resultados en este informe. De manera similar, Freedom from Hunger y Nyèsigiso desarrollaron un módulo educativo dirigido a jóvenes interesados en acceder a productos de crédito, pero el módulo se estaba terminando al mismo tiempo que se preparaba la versión final de la presente publicación. Descripción de los servicios integrados Freedom from Hunger decidió integrar los servicios de ahorro y la educación financiera para jóvenes con el objetivo de mejorar su capacidad para hacer frente a las crecientes responsabilidades financieras de la adultez. Nuestra hipótesis fue que la combinación de estos servicios guiaría y estimularía a los jóvenes a fijarse metas financieras y alcanzarlas, arrojando mejores resultados económicos en el futuro. A través de la educación, los jóvenes desarrollan conocimientos y habilidades para tomar decisiones acertadas sobre cómo administrar su dinero, lo que posteriormente podría aplicarse a un instrumento de ahorro. Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 8 Freedom from Hunger también tomó en cuenta las lecciones iniciales aprendidas en la prestación de los servicios para jóvenes. En India, Freedom from Hunger ofreció educación financiera y educación en temas de salud a niñas y adolescentes, sin ofrecerles acceso a un servicio financiero. Concluimos que hubo mejoras en los comportamientos de salud pero no en los comportamientos financieros.22 El personal del proyecto formuló la hipótesis de que la falta de un instrumento financiero complementario podría explicar la falta de impacto en los comportamientos financieros. Freedom from Hunger también tomó en cuenta la experiencia del proyecto Tap and Reposition (TRY) en Kenia, un programa microfinanciero implementado por Population Council y K-Rep (una IMF keniana), dirigido a abordar las limitaciones en las estrategias de subsistencia que enfrentan las niñas adolescentes en riesgo de VIH/SIDA en un barrio marginal urbano en Kenia. El proyecto concluyó que el servicio de ahorro que se ofreció a las adolescentes tuvo mayor éxito que el componente de crédito, del que muchas participantes se retiraron. Al reflexionar sobre los éxitos y los desafíos, las organizaciones a cargo de la implementación recomendaron comenzar con un producto de “ahorro y capacitación sobre el manejo del dinero como punto de partida para el trabajo con niñas adolescentes.23” Respecto al componente de educación financiera, Freedom from Hunger recurrió a su vasta experiencia en la capacitación no formal, adaptando las sesiones educativas de 30 minutos para adultos que ha implementado con éxito en África, Asia y Latinoamérica. La adaptación para un público joven incorporó “juegos” (unidades de aprendizaje diseñadas para satisfacer el deseo de los jóvenes de participar en actividades animadas y creativas como cuentos, representaciones, canciones, rimas, etc.) facilitando en los participantes la captación de nuevos conocimientos y habilidades. Freedom from Hunger había asimismo desarrollado previamente un módulo de educación financiera para jóvenes como parte del Programa Global de Educación Financiera, el cual fue diseñado para un público joven más genérico.24 Freedom from Hunger adaptó el contenido de la educación financiera al contexto y las condiciones específicas que inciden en la forma en que los jóvenes se relacionan con el dinero en Malí y en Ecuador, siguiendo los principios fundamentales del aprendizaje para jóvenes. En el Anexo A se presenta una breve descripción del contenido de la educación y los objetivos de aprendizaje definidos para cada país, así como los principios fundamentales del aprendizaje para jóvenes. Además de los tipos de servicios ofrecidos, la forma en que las instituciones entran en contacto con los jóvenes (el “punto de entrada”) tuvo importantes repercusiones en la eficacia de la entrega de los servicios integrados y su recepción entre los beneficiarios previstos. Para la implementación de AIM Youth, los tres diferentes modelos tenían estrategias distintas de cobertura y entrega, las cuales revelaron ciertas ventajas y desventajas. Educación financiera tipo “regla de oro” para jóvenes Según Drexler, Fischer y Schoar (2013), un método de capacitación tipo “regla de oro” con mensajes simples puede ser más eficaz que las capacitaciones más complejas, especialmente si el público meta está conformado por clientes con poca experiencia con los servicios financieros. A manera de ilustración, los autores se refieren a una capacitación tipo “regla de oro” usada por ADOPEM, una IMF de República Dominicana: “La capacitación tipo ‘regla de oro’ estableció una regla fija para guardar el dinero en dos cajones (o bolsos) diferentes y transferir el dinero de un cajón al otro siempre que se dejara una nota tipo ‘Pagaré’ entre el cajón del negocio y el cajón del hogar. Al final del mes, las participantes podían contar el dinero del cajón del negocio y saber cuánto habían ganado”. La capacitación en educación financiera diseñada por Freedom from Hunger recurre a un mecanismo de simpleza similar, donde los conceptos son presentados ante los jóvenes a través de actividades creativas y Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 9 dinámicas como juegos, cuentos, representaciones y canciones. Por ejemplo, a través de un juego, los jóvenes aprenden estrategias básicas para ahorrar más dinero: Apartar algo de dinero para no gastarlo todo Hablar con la familia de la meta de ahorro y convertirla en un proyecto familiar Ahorrar más cuando se tiene más dinero El aprendizaje ocurre a través de un juego en el que hay que llegar a una meta final cumpliendo varios pasos. Si el facilitador lee en voz alta una decisión financiera que les ayudaría a aumentar sus ahorros, los jóvenes deben dar un paso adelante y si la decisión no les ayuda, deben permanecer en su lugar. El modelo de integración y estrategia de cobertura de Ecuador El modelo Cuentas de ahorro individual (CAI) y educación financiera en Ecuador En Ecuador, las cooperativas asociadas de Freedom from Hunger trabajaron con un objetivo común, consistente en llegar a los jóvenes principalmente a través de las escuelas de educación secundaria, donde el personal de las cooperativas impartía las sesiones de educación financiera y alentaba a los jóvenes a abrir y usar una cuenta de ahorro. Cada institución lanzó un producto de ahorro para jóvenes bajo el marco de este proyecto. A pesar de que la mayoría de las cooperativas ya ofrecían una cuenta de ahorro para los hijos, ésta se promocionaba principalmente entre los padres de niños menores de 18 años. La nueva cuenta de ahorro se diseñó y promocionó entre los jóvenes de 13 a 24 años, aunque los jóvenes menores de 18 aún necesitaban contar con un co-firmante adulto para cumplir con las regulaciones nacionales. El personal de las cooperativas brindaba información durante las sesiones de educación financiera impartidas en las escuelas sobre el proceso de apertura y cómo hacer depósitos y retiros. Los jóvenes podían entregar los documentos requeridos para abrir una cuenta durante las visitas que el personal de las cooperativas hacía a las escuelas; solo una de las cooperativas exigió una visita a la sucursal para depositar el monto mínimo de apertura y firmar los documentos correspondientes. Para atender este nuevo mercado, las cooperativas tuvieron que clasificar a los nuevos titulares como clientes sin voto (contrario a los socios de la cooperativa que tienen derecho al voto), permitiéndoles posponer la compra obligatoria de su membresía en la cooperativa hasta que cumplieran 18 años. Esta distinción hizo que la cuenta de ahorro para jóvenes fuera más accesible para la cohorte de jóvenes de menos edad al disminuir el monto mínimo de apertura. Para los jóvenes de 18 años y más se mantuvo el requisito de convertirse en socios. Durante la segunda etapa del proyecto, algunas de las cooperativas ecuatorianas también pudieron aprovechar el surgimiento de nuevas tecnologías para promover el ahorro entre los jóvenes. Dos cooperativas pusieron en marcha un sistema de mensajes de texto a través del cual se enviaba un conjunto de mensajes semanales a los celulares de los participantes que tenían una cuenta de ahorro. Dichos mensajes reforzaban los conceptos clave de la educación financiera. En el Anexo B se incluye algunos de los mensajes que se enviaron. La otra innovación tecnológica adoptada por tres cooperativas tiene que ver con el uso de teléfonos inteligentes para captar ahorros a distancia. A través de este sistema, el personal de campo de las cooperativas recolectaba los depósitos de ahorro durante las visitas a las escuelas. Al llevar los servicios financieros a los Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 10 jóvenes en lugar de hacer que éstos acudieran a la sucursal para hacer un depósito, las cooperativas derribaron con éxito uno de los principales obstáculos que enfrentan los jóvenes para acceder a los servicios financieros formales. El uso de esta tecnología fue posible gracias a la amplia penetración de la telefonía móvil en Ecuador y el reciente aumento en el acceso a Internet móvil,25 así como a la existencia de un entorno normativo que permite que las cooperativas capten ahorro a distancia. Las cooperativas querían adoptar esta tecnología porque consideraban que podría promover el ahorro entre su clientela joven y adulta, especialmente en las zonas rurales. Una alternativa al enfoque unificado Una alternativa al enfoque unificado es el modelo vinculado donde las instituciones incluyen a una entidad externa para que proporcione el servicio no financiero. Este enfoque permite que el personal de la institución financiera se dedique a promover la apertura y uso de las cuentas de ahorro. En Ecuador pudimos probar parcialmente este modelo a través de una de las cooperativas que vinculó a estudiantes universitarios para que impartieran la educación financiera a otros jóvenes, principalmente a sus compañeros de estudio. Freedom from Hunger capacitó a los estudiantes, quienes posteriormente impartieron la educación a sus compañeros gratuitamente como parte de un servicio social obligatorio. El personal de las cooperativas participó en algunas de las sesiones para brindar información sobre el producto de ahorro. Similarmente, Xac Bank y Women’s World Banking han implementado un enfoque vinculado que ofrece sesiones de educación financiera para jóvenes a través de estudiantes universitarios capacitados por una ONG local especializada en educación.26 No obstante, la educación no se ha impartido de manera consistente ya que depende del horario de los estudiantes. La educación se suspende durante las vacaciones. Este modelo no aprovecha al máximo el tiempo y recursos que el personal dedica a ofrecer uno de los servicios. Por otra parte, la implementación sostenida de un modelo de este tipo requiere que una entidad proporcione los fondos para cubrir la capacitación permanente de nuevos grupos de estudiantes a cargo de la educación. La estrategia de promoción adoptada por las cooperativas ecuatorianas comprendía dos niveles: su estrategia principal consistía en llegar a los jóvenes a través de las escuelas (especialmente en el caso del grupo de 13 a 17 años) para facilitar las sesiones de educación financiera y ofrecer las cuentas de ahorro individual. En segundo lugar, realizaron campañas de mercadeo dirigidas a toda la comunidad para promover las cuentas de ahorro para jóvenes. Las escuelas como punto de entrada al programa La estrategia de enviar personal de la cooperativa a las escuelas públicas para enséñenla entrega de la educación financiera a los jóvenes reposa en un fundamento sólido. Las escuelas representan un lugar natural para congregar a un gran número de jóvenes al mismo tiempo y la forma más eficaz de darles educación financiera puesto que ya están organizados en una estructura grupal. La facilitación de las sesiones educativas Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 11 fue posible debido a que la administración de las escuelas respaldaba la educación y porque ocurría durante un receso entre clases. Si bien los jóvenes podían optar por no asistir, no se reportó que ninguno lo hiciera. Todos los jóvenes entrevistados dijeron haber disfrutado de la educación. Algunos incluso dijeron que preferían la educación financiera a las clases normales. Por otra parte, la educación financiera es un reflejo de la responsabilidad social corporativa de las cooperativas, y les permitió acceder a las escuelas (sin ella, es probable que las escuelas no les hubieran permitido llegar a los estudiantes). No obstante, la implementación de esta estrategia a través de las escuelas consume mucho tiempo y esfuerzo. Las cooperativas han tenido que negociar acuerdos individuales con cada escuela. Aunque las cooperativas ecuatorianas participantes han tenido una trayectoria de relaciones largas y sólidas con las comunidades en las que trabajan y han invertido anteriormente en eventos comunitarios, en ocasiones no pueden llegar a ningún acuerdo. En regiones caracterizadas por un ambiente altamente competitivo entre las instituciones financieras, como es el caso de Ecuador, el director de una escuela puede sentirse incómodo al favorecer a una institución financiera en lugar de otra. Otro punto crítico tiene que ver con el hecho de que las visitas escolares no se tradujeron en la apertura inmediata de cuentas. Aunque la mayoría de las cooperativas tenía políticas que permitían al personal de campo reunir los requisitos de apertura durante las visitas, los jóvenes que recibieron la educación financiera no abrieron cuentas en grandes cantidades. Adicionalmente, una vez el personal terminaba de impartir el módulo en una escuela muchas veces no regresaba con tanta frecuencia ya que debía realizar otras actividades, limitando las oportunidades para estimular más a los jóvenes a abrir una cuenta de ahorro y hacer depósitos. Los eventos comunitarios como un punto de entrada al programa Aparte de trabajar en las escuelas, las cooperativas lanzaron campañas de mercadeo dirigidas a toda la comunidad. Durante eventos especiales se repartieron materiales promocionales como gorras y camisetas y se ofreció una serie de incentivos para que los jóvenes abrieran una cuenta de ahorro, incluyendo tarjetas de minutos de teléfonos celulares y descuentos en negocios locales. Probablemente esto hizo que más personas que no eran estudiantes de las escuelas se enteraran de los productos de ahorro para jóvenes. Sin embargo, no resulta claro qué tan importante fue la contribución de estas campañas e incentivos: Al inicio del proyecto se pidió a los jóvenes que clasificaran por orden de importancia las diez características de una cuenta de ahorro que les resultaban más atractivas, incluyendo aspectos como seguridad, tasa de interés, distancia hasta la oficina, personal agradable y regalos. En todos los casos, los jóvenes clasificaron la seguridad como uno de los aspectos más importantes mientras que los regalos aparecieron consistentemente en los últimos lugares. En las conversaciones con grupos focales realizadas durante otras etapas del proyecto, los jóvenes señalaron que tener un lugar seguro para ahorrar era la principal razón para abrir una cuenta de ahorro. Además, las campañas se llevaron a cabo durante el lanzamiento de los productos y en ciertos momentos del año que coincidían con festividades, pero fueron bastante limitadas. Distribución del tiempo del personal de las cooperativas para prestar los servicios El personal de las cooperativas no se dedicaba únicamente a trabajar en los servicios para jóvenes. De hecho, tras el primer año de implementación, la gerencia de las cooperativas empezó a limitar la porción del tiempo que el personal de campo podía dedicar a la facilitación de las sesiones educativas. Una de las cooperativas participantes incluso implementaba dos sesiones de educación financiera a la vez (con un tiempo total de una hora) con el fin de cubrir todo el módulo en solo cinco visitas a las escuelas. Esta estrategia le permitió al personal dedicar más tiempo a la promoción de las cuentas de ahorro para jóvenes y, especialmente, productos financieros más rentables para adultos, generando eficazmente un subsidio Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 12 cruzado para los servicios para jóvenes. Sin embargo, esta estrategia también redujo la cantidad de tiempo que el personal podía dedicar a facilitar las sesiones de educación financiera, así como el número de oportunidades que tenían para alentar a los jóvenes a abrir una cuenta y/o hacer depósitos en ella desde la escuela. En el Cuadro 7 se desglosa el tiempo dedicado a los distintos servicios de acuerdo con una encuesta realizada al personal de campo de San José y Cooprogreso, las dos cooperativas implementadoras de la iniciativa AIM Youth más grandes de Ecuador. Cuadro 7. Desglose de la distribución del tiempo del personal en Ecuador No. promedio de horas por semana Porcentaje de tiempo dentro de una semana de trabajo de 40 horas Facilitación de las sesiones educativas Promoción de las cuentas de ahorro para jóvenes 2,9 horas 7,2 7% 18% Educación financiera vinculada con un producto Para AIM Youth, Freedom from Hunger diseñó modelos de educación financiera vinculados con los productos para jóvenes, lo cual se consideró necesario para maximizar la adopción de las cuentas y alcanzar una mayor sostenibilidad. En Ecuador, la educación financiera se diseñó originalmente de manera independiente de la información sobre el producto de ahorro. Sin embargo, durante la evaluación inicial aprendimos que los jóvenes no sabían muy bien cómo abrir una cuenta de ahorro. Debido a que la apertura de cuentas de ahorro en las cooperativas era muy lenta en un primer momento, se añadieron e integraron tres sesiones al módulo de educación financiera para promocionarlas. No obstante, los jóvenes tenían total libertad de decidir si abrir o no, y cuándo hacerlo, una cuenta individual. En Malí, si bien puede considerarse que la educación está vinculada al producto, el enfoque tenía diferencias cruciales: Después que el facilitador de la cooperativa formaba un grupo de jóvenes interesados en la cuenta de ahorro, los jóvenes participaban en una capacitación que los guiaría durante el proceso de apertura y administración de la cuenta grupal. Los jóvenes seleccionaban entre ellos nuevos miembros del grupo y eran libres de retirarse en cualquier momento. La educación financiera se facilitaba después de la formación del grupo, cuando ya se había cumplido con los requisitos de apertura de la cuenta. En ambos enfoques la línea entre educación financiera y estrategia de promoción es borrosa, poniendo de manifiesto un problema del que suele discutirse a menudo al hablar de la educación del consumidor.27 En este caso, Freedom from Hunger y sus asociadas en la implementación tenían la teoría de que dicha estrategia sería determinante para la sostenibilidad y adopción de los servicios para jóvenes. Además, la apertura de las cuentas permitiría el financiamiento cruzado de la educación. Lo que es claro es que aún cuando se vincula la educación financiera con un producto, no debe obligarse a los jóvenes a adquirir ningún producto y que las instituciones financieras deben seguir ciertas medidas de protección al cliente como las que defienden FNUDC y Child and Youth Finance International.28 Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 13 El modelo de integración y estrategia de cobertura de Malí El modelo Grupos de Ahorro para Jóvenes (GAJ) y educación financiera En las zonas rurales, el modelo de integración se construyó a partir de la metodología de Ahorro Comunitario (AC), un exitoso programa de Grupos de Ahorro para jóvenes. Freedom from Hunger y sus asociadas para la implementación —CAEB ( Conseils et Appui pour l’Éducation à la Base) y Le Tonus—organizaron GAJ en las mismas comunidades rurales en las que las mujeres adultas ya eran socias de grupos activos de Ahorro Comunitario. Bajo este enfoque, un grupo de 10 a 15 jóvenes (del mismo sexo o mixto) se reúnen semanalmente para ahorrar y otorgar préstamos mutuamente. Con el apoyo inicial de un facilitador capacitado, los socios eligen un Comité Administrativo que dirige las reuniones y vela por el cumplimiento de las reglas del grupo. El grupo decide el monto que todos los miembros ahorrarán en cada reunión, el cual se deposita en una caja. A medida que se acumula el dinero, los socios acuerdan usar el fondo para hacer préstamos a los miembros del grupo. Asimismo, se fijan una meta social hacia la cual trabajarán colectivamente, como por ejemplo un proyecto de saneamiento o la promoción de estrategias para la prevención de la malaria. Los miembros continúan reuniéndose de manera periódica por espacio aproximado de un año, al cabo del cual se distribuye el fondo grupal. Este método funciona particularmente bien en las zonas rurales de Malí adonde aún no han llegado proveedores formales de servicios financieros y no existen por tanto opciones confiables de ahorro. La metodología de los GAJ fue en esencia la misma que la de los grupos de adultos, con unas cuantas diferencias. En primer lugar, el proceso de formación de los grupos requirió más tiempo porque se incorporaron más elementos dinámicos y participativos al proceso de capacitación. Además, los jóvenes decidían si querían tener una de grupo o no. La madrina del GAJ por lo general era una socia de un Grupo de Ahorro para adultos a quien los jóvenes podían consultar cuando necesitaban tomar decisiones difíciles o cuando había un conflicto en el grupo. Aunque era opcional, la elección de una madrina por los participantes demostraba respeto a los mayores y su afiliación al GAJ convalidaba este respeto frente al resto de la comunidad. La capacitación inicial para la formación de los grupos (durante la cual los socios elegían al Comité Administrativo y decidían todas las reglas para el ahorro y préstamos) duraba hasta tres meses. Las sesiones de educación financiera se impartían después de la formación del grupo por un periodo de dos meses. La educación se impartía durante las reuniones regulares del grupo, después de realizar las transacciones financieras. Debido a esta estructura, los dos servicios estaban fuertemente integrados y ocurrían como parte del mismo ciclo del grupo, aunque las sesiones se habían organizado siguiendo un orden secuencial. Este caso pone de manifiesto la eficacia que puede obtenerse a partir del enfoque unificado. Los jóvenes tienen la oportunidad de aplicar inmediatamente los nuevos conocimientos adquiridos durante la educación financiera a sus actividades semanales de ahorro y préstamo. Las comunidades rurales como un punto de entrada al programa La implementación de un enfoque GAJ fue un proceso sencillo y probablemente el menos problemático de implementar de los tres modelos. Freedom from Hunger y sus ONG asociadas en Malí planearon intencionalmente introducir los GAJ en las mismas comunidades en las que ya habían implementado los Grupos de Ahorro para adultos porque ya se contaba con la confianza y el apoyo de la comunidad. Debido a que los líderes y miembros de la comunidad ya conocían el modelo, la formación de los GAJ no representó mayores desafíos. Los padres ya estaban convencidos del valor del modelo y querían que sus hijos pudieran acceder a él.29 Su apoyo reforzó el modelo, que a su vez usó con éxito la confianza y el apoyo entre compañeros para alentar a los jóvenes a ahorrar de manera regular.30 Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 14 Quizás igual de importante resulta el hecho de que los GAJ se realizaban en la comunidad. Cada aspecto (el ahorro semanal, el préstamo, el pago y la repartición del fondo) sucedía localmente, eliminando un importante obstáculo a la participación en los servicios financieros. Nadie tenía que gastar tiempo ni dinero para desplazarse hacia una institución financiera y realizar sus transacciones. Por último, los GAJ funcionaron en zonas remotas que a menudo no están atendidas adecuadamente por los proveedores de servicios financieros. En parte, su éxito responde al hecho de haber sido la única opción. Sin embargo, hubo algunos inconvenientes al usar las comunidades rurales como punto de entrada para el programa. En primer lugar, el personal de campo dedicaba una cantidad importante de tiempo para desplazarse a cada comunidad, aumentando el costo de la implementación. Los gastos de transporte de los GAJ representaron entre 16 y 25 por ciento de los costos totales de implementación, en contraste con el 9% que representaron los gastos de transporte para las CAG en las zonas urbanas. Además, en el campo de Malí, los jóvenes son móviles -los hombres jóvenes emigran en busca de trabajo mientras que las mujeres jóvenes se casan y emigran al hogar de sus esposos. Según la encuesta cuantitativa realizada en Malí, 25 por ciento de los jóvenes dijo haber emigrado el último año en busca de trabajo. Adicionalmente, fueron más los hombres que las mujeres y más los jóvenes de mayor edad que los de menor edad quienes emigraron (Ver Diagrama 1).31 Diagrama 1. Emigración por sexo y edad Emigrantes Hombres/Mujeres 40% 30% 40% 39% 38% 30% 20% 15% 10% Emigrantes por edad 0% 20% 10% 17% 0% Hombres Mujeres 13-17 años 18-24 años Distribución del tiempo del personal de las ONG para prestar los servicios A diferencia del personal de las cooperativas ecuatorianas, el personal de las ONG de Malí estaba dedicado por completo a la promoción y capacitación del grupo, así como a la educación financiera de los jóvenes. El personal se reunió con cada GAJ de manera semanal durante los primeros seis meses y continuó reuniéndose con ellos durante el resto del ciclo, aunque con menor frecuencia. El número total de horas que el personal dedicó a capacitar cada grupo fue mayor que el de Ecuador, principalmente porque se dio más capacitación para ayudar a los socios de los grupos a llegar hasta el fin de un ciclo y comenzar uno nuevo (ver Cuadro 8). El resto del tiempo del personal se dedicó a promover y administrar los grupos, llenar formularios de monitoreo y desplazarse a cada comunidad. Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 15 Cuadro 8. Desglose de la distribución del tiempo del personal para los GAJ en Malí Tipo de capacitación Horas No. de horas para la capacitación sobre formación de grupos (por grupo) 19.3 No. de horas por módulo de educación financiera (por grupo) 3.5 No. total de horas de capacitación/educación (por grupo) 22.8 No. estimado de horas a la semana dedicadas a la capacitación/educación (por animador) 8.8 Porcentaje de tiempo de una semana de 40 horas de trabajo destinado a la capacitación/educación (por animador) 22% El modelo Cuentas de ahorro grupal (CAG) y educación financiera La estrategia para llegar a las zonas urbanas y periurbanas contemplaba la participación de la federación de cooperativas Nyèsigiso para organizar a los jóvenes en grupos que abrieran cuentas colectivas de ahorro.32 Estos grupos tenían una estructura similar a los GAJ organizados por las ONG, pero las cuentas grupales tenían notorias diferencias. En primer lugar, los fondos de las CAG no podían usarse para préstamos internos a los socios. En segundo lugar, los grupos no repartían el fondo colectivo al final de un período predeterminado. La intención de las cuentas grupales era ayudar a los jóvenes a acumular ahorros durante tanto tiempo como fuera posible. A pesar de ello, se definió un proceso de retiro los jóvenes que necesitaban tener acceso a sus fondos. Cuentas de ahorro grupal (CAG) En Nyèsigiso, la cooperativa asociada de Freedom from Hunger en Malí, el personal tenía que diseñar una forma asequible y accesible para que los jóvenes participaran en la cooperativa debido a los montos mínimos de apertura, cargos de la cuenta y la necesidad de presentar un documento de identificación. Después de largas conversaciones con Freedom from Hunger, Nyèsigiso optó por formar grupos de 5 a 15 miembros que pudieran pagar los cargos de apertura y de mantenimiento anual de la cuenta al abrir una CAG, cuyos costos serían compartidos por todos los miembros. Además, la estructura grupal exigía una identificación únicamente a los tres miembros del Comité Administrativo. Al igual que los GAJ, los jóvenes de estos grupos tomaban decisiones conjuntas sobre el manejo del ahorro en la cuenta grupal. No obstante, y a diferencia del GAJ, estos jóvenes no tomaban préstamos de los fondos de ahorro grupal, principalmente porque se les dificultaría juntar el monto mínimo requerido para la cuenta. En este modelo, la federación de cooperativas Nyèsigiso contrató a agentes de mercadeo para reunir a los jóvenes en grupo que abrirían una cuenta de ahorro de manera conjunta. Estos agentes organizaron a los jóvenes y los orientaron respecto a la estructura grupal, mientras que los jóvenes decidieron y acordaron las políticas y prácticas de sus grupos. El período de capacitación para la formación de grupos duró aproximadamente tres meses. En muchas de las sesiones de capacitación se cubrieron los requisitos y procesos específicos para administrar las CAG. Asimismo, todos los jóvenes participaron en las sesiones de educación financiera que se integraron a las reuniones periódicas, inmediatamente después de que el grupo realizara sus transacciones financieras. Los centros vocacionales como un punto de entrada al programa No obstante, identificar a los jóvenes en una zona urbana resultó una tarea difícil, ya que al parecer estaban más ocupados y eran más móviles. Los agentes de mercadeo tuvieron más éxito en los centros vocacionales Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 16 donde los jóvenes recibían capacitación en una serie de oficios (como carpintería, herrería, plomería, electricidad y albañilería) y donde podían congregarse para las reuniones del grupo. Un resultado de esta medida es que la mayor parte de los jóvenes participantes tenían más edad y eran de sexo masculino. El personal de las cooperativas llevó a cabo algunas actividades de promoción en las escuelas, donde podían encontrar a jóvenes de menos edad, por debajo de los 18 años. Pese a ello, no fue posible congregar a los jóvenes para llevar a cabo las reuniones semanales en las instalaciones escolares. Los agentes de mercadeo se dieron cuenta de que para realizar la reunión grupal era necesario reunirse en la casa de algún joven pero fue muy difícil encontrar suficientes jóvenes con afinidades en un mismo barrio y en últimas, este intento fracasó. Distribución del tiempo del personal de las cooperativas para prestar los servicios A diferencia de sus contrapartes ecuatorianas, el personal de campo de las cooperativas de Malí trabajaba a tiempo completo en la formación y gestión de los grupos de jóvenes que abrieron cuentas colectivas.33 El proceso de formación de los grupos exigió mucho tiempo, lo que también limitó la capacitad de lograr una mayor cobertura por parte de los agentes de mercadeo. En el Cuadro 9 se desglosa el tiempo dedicado a la educación y la capacitación para la formación de grupos. Las cifras representan únicamente el número de horas dedicadas a las capacitaciones en la formación de grupos y la educación. El resto del tiempo se dedicó a promover y administrar las cuentas, actividades que requieren mucho tiempo. Cuadro 9. Desglose de la distribución del tiempo del personal en las CAG en Malí Tipo de capacitación Número de horas para la capacitación sobre formación de grupos (por grupo) Horas 12 No. de horas por módulo de educación financiera (por grupo) 3.5 No. total de horas de capacitación/educación (por grupo) 15.5 No. estimado de horas a la semana dedicadas a la capacitación/educación (por agente de mercadeo) 5.7 Porcentaje de tiempo de una semana de 40 horas de trabajo destinado a la capacitación/educación (por agente de mercadeo) 14% En el Cuadro 10 se presenta una sinopsis de los tres modelos de AIM Youth (en el Anexo C se presenta una descripción más detallada según las asociadas en la implementación de los servicios financieros prestados) Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 17 Cuadro 10. Resumen de los modelos de AIM Youth Ecuador Malí Malí Modelos CAI y educación financiera CAG y educación financiera GAJ y educación financiera Descripción de los servicios Las cooperativas ofrecen CAI Los jóvenes menores de 18 años deben tener un cofirmante adulto; se requiere identificación del joven y del co-firmante Sin cargos de apertura (a excepción de San Miguel de los Bancos) Sin cuotas de mantenimiento Los montos mínimos oscilan entre US$2 y $6 para los menores de 18 años y entre US$2 y $11 para los mayores de 18 años Se paga un interés de 1,5% a 4% Grupos de ahorro para Las federaciones de jóvenes (GAJ) organizados cooperativas ofrecen las CAG por las ONG Los jóvenes participan en una capacitación de 12 horas sobre las funciones del grupo y de la cuenta durante un período de 10 semanas Los grupos abren las cuentas por lo general en 8 semanas Permite que los miembros compartan los costos y requisitos de apertura de la cuenta Los cargos por apertura de cuenta son de US$4 Monto mínimo de apertura y membresía de US$14 Posibilidad de hacer depósitos Cargo de mantenimiento anual de US$4 a distancia 6% de interés sobre el saldo Descripción de la educación financiera (EF) 10 sesiones de 30 minutos c/u 7 sesiones de 30 minutos c/u Objetivos de aprendizaje: • Elaborar un plan de ahorro • Mantener el dinero a salvo • Saber cómo abrir y usar una cuenta de ahorro • Tomar decisiones informadas sobre el manejo del dinero Método de integración Educación financiera impartida principalmente a través de las escuelas CAI abiertas independientemente de la educación financiera Objetivos de aprendizaje: Los jóvenes participan en una capacitación de 12 horas durante un período de 10 semanas sobre las funciones del grupo Los jóvenes empiezan a ahorrar después de tres semanas Los socios acuerdan reunirse regularmente y juntar sus ahorros Los miembros pueden tomar prestado del fondo grupal pero pagan interés sobre los préstamos El grupo se reparte todos los fondos grupales al final del ciclo, usualmente a los 9-12 meses 7 sesiones de 30 minutos c/u Objetivos de aprendizaje: • Tomar decisiones informadas sobre ahorro y préstamo • Tomar decisiones informadas de ahorro y préstamo • Aumentar el ahorro y ahorrar en lugares seguros • Aumentar el ahorro y ahorrar en lugares seguros Grupos formados en los centros vocacionales Grupos formados en las comunidades rurales Educación financiera facilitada Educación financiera facilitada inmediatamente después de la inmediatamente después de la capacitación sobre formación capacitación sobre formación del grupo del grupo y apertura de la cuenta Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 18 Monitoreo del proyecto y metodología de investigación Con el fin de demostrar avances en las actividades del proyecto, Freedom from Hunger solicitó a sus asociadas recolectar datos trimestrales de monitoreo. Los datos de monitoreo se centraron en medir el avance hacia el logro de las metas del programa, tales como número de cuentas de ahorro que se habían abierto, número de jóvenes que participaron en la educación y número de jóvenes que participaban en los grupos de ahorro formal y no formal. Además, para probar la hipótesis de la teoría del cambio de AIM Youth, Freedom from Hunger llevó a cabo investigaciones cuasi-experimentales con metodologías múltiples junto con cuatro asociadas (en Malí, CAEB y Nyèsigiso y en Ecuador, San José y Cooprogreso) en colaboración con compañías locales de investigación y universidades. Si bien no se pudieron establecer relaciones de causalidad, este enfoque de métodos múltiples garantizó la triangulación de los resultados de las siguientes metodologías: estudios cuantitativos de impacto (línea de base y línea final), diarios financieros, evaluación cualitativa de la satisfacción de los jóvenes e historias de impacto. En los informes finales de investigación de Malí34 y Ecuador35 puede encontrarse una descripción completa de los métodos. El Anexo E describe la teoría del cambio de AIM Youth y una breve descripción de los métodos de investigación utilizados.36 En el caso de los estudios cuantitativos de impacto y los diarios financieros, el diseño de la investigación contemplaba la participación de jóvenes seleccionados al azar que habían recibido los servicios ofrecidos y un grupo de comparación seleccionado al azar, compuesto de jóvenes en regiones donde no se prestarían los servicios. En Ecuador, la selección se hizo a nivel de las escuelas; en las zonas rurales de Malí, la selección se hizo a nivel de las comunidades rurales y en las zonas urbanas, a nivel de los distritos. En el caso de Malí, las encuestas cuantitativas de línea de base y línea final se llevaron a cabo únicamente con los jóvenes rurales que participaron en los GAJ y no con los jóvenes urbanos de las CAG, aunque en los diarios financieros se incluyó a ambos. Desafíos de los datos de monitoreo e investigación Un desafío importante al monitorear los servicios en Ecuador consistió en establecer una correspondencia entre los jóvenes que tenían cuentas de ahorro con los jóvenes que recibían la educación financiera porque las cooperativas usaban bases de datos separadas para los diferentes servicios. Usaban su sistema de información gerencial (SIG) tradicional para los clientes con cuenta de ahorro, pero llevaban una base de datos diferente para dar seguimiento a los jóvenes que participaban en la educación financiera a través de las escuelas. Dado que la educación no era parte de sus responsabilidades principales, usaron una hoja de cálculo sencilla para dar seguimiento a estos jóvenes. Con este método, no nos fue posible establecer el número de jóvenes que participaron en la educación financiera y abrieron una cuenta. Sin embargo, como indican los datos de monitoreo (Cuadro 1), sabemos que fueron más los jóvenes que recibieron la educación que los que abrieron cuentas. Un segundo aspecto de este desfase puede ser un asunto de sincronización. Es decir, los jóvenes que recibieron la educación financiera podrían abrir una cuenta de ahorro en cualquier momento. Dar seguimiento a los jóvenes que recibieron la educación para identificar si abrieron cuentas puede ayudar a las instituciones financieras a calcular el valor agregado de la educación. Sin embargo, la implementación de este tipo de monitoreo sería difícil y costosa. Los formularios de apertura de cuenta solicitan información de identificación como domicilio, fecha de nacimiento e información del co-firmante adulto en el caso de los jóvenes menores de 18 años. Pedir información similar a los jóvenes que participan en la educación financiera puede ser engorroso y complejo. Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 19 Notablemente, todas estas dificultades no existen o se minimizan en un esquema grupal. Los datos de monitoreo no fueron difíciles de obtener en el caso de las CAG en Malí para la federación de cooperativas porque los nombres en el registro del grupo eran los mismos: los miembros del grupo que abrieron la cuenta de ahorro de manera colectiva fueron los mismos que recibieron la educación. En cuanto al monitoreo de la calidad de los servicios prestados, las cooperativas se concentran más en los resultados que en la calidad: número de sesiones impartidas, número de cuentas abiertas y monto de los depósitos de ahorro. Freedom from Hunger realizó visitas técnicas para monitorear la calidad de la educación y ofreció apoyo técnico en los procesos de supervisión. No obstante, las cooperativas necesitarían realizar una inversión adicional para desarrollar capacidades suficientes que les permitan monitorear adecuadamente y por su cuenta la calidad de la educación que se imparte. Para esto sería necesario establecer estándares sobre los que se capacitaría al personal, y formularios y procesos de evaluación a cargo de los supervisores u otro personal de monitoreo. El sistema SIG usado por las ONG en Malí consistía en una adaptación de un sistema estándar ampliamente utilizado en las microfinanzas gestionadas por la comunidad.37 Debido a que Freedom from Hunger se asoció con organizaciones no gubernamentales que ya tenían experiencia con los Grupos de Ahorro para adultos, los supervisores y la gerencia ya estaban familiarizados con el SIG y pudieron adoptar fácilmente la versión adaptada. Además, debido al modelo de integración de los GAJ, los jóvenes participantes reciben ambos servicios de manera secuencial, de manera que un solo SIG captura los datos de todos los jóvenes. Las ONG tenían asimismo amplia experiencia en el monitoreo de la calidad de la capacitación que facilitaba el personal de campo. Debido a la naturaleza estandarizada de los Grupos de Ahorro, el personal de campo pudo utilizar el mismo sistema de monitoreo que ha usado con los adultos. ¿Jugar o no jugar? Durante las entrevistas cualitativas y las visitas de monitoreo surgió un punto común a tratar tanto en Ecuador como en Malí. Los jóvenes participantes de todas las edades expresaron un alto nivel de satisfacción con la educación financiera. Sin embargo, el personal de campo señaló que los juegos de las sesiones de educación financiera resultaron demasiado infantiles para algunos de los jóvenes de más edad, especialmente los mayores de 18 años. La discrepancia podría explicarse por la incomodidad que el personal pudo haber sentido al facilitar los juegos con los jóvenes de más edad. A pesar de ello, dado que la mayoría de los jóvenes que reciben la educación son menores de 18 años, las asociadas continúan facilitando los juegos en las sesiones educativas. Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 20 Resultados del programa y cifras del impacto En esta sección se presentan los resultados a nivel programático (número de jóvenes que participaron en la educación financiera, número de jóvenes con ahorro) y los impactos a nivel de los clientes (conocimientos, comportamientos y actitudes de los jóvenes). Asimismo, se comparan los resultados y se ofrecen algunas reflexiones para ayudar a comprender las diferencias y similitudes entre los tres enfoques. Resultados del programa Con AIM Youth, Freedom from Hunger se propuso ofrecer servicios integrados a 37.000 jóvenes, 22.000 en Malí y 15.000 en Ecuador. Al final de las actividades de campo, a finales de 2013, el proyecto había superado su meta y 40.000 jóvenes estaban recibiendo sus servicios. Sin embargo, no todos los jóvenes recibieron los dos servicios durante la implementación del proyecto. Ello sucedió principalmente en Ecuador, donde el número de jóvenes que participó en las sesiones de educación financiera fue mayor al número de jóvenes que abrieron cuentas de ahorro. En el Cuadro 11 se presenta un desglose detallado de los resultados del programa, haciendo una distinción entre los jóvenes que participaron en la educación financiera y los jóvenes que tenían ahorros, bien sea a través de cuentas formales o como parte de un GAJ. Cuadro 11. Desglose de los resultados del programa AIM Youth Ecuador Meta original Malí Ecuador Malí Malí CAI y educación financiera CAG y educación financiera GAJ y educación financiera 15,000 4,600* 17,400 No. de CAI No. de socios de CAG No. de socios de GAJ** Ahorro para jóvenes*** 6,441 De 13 a 17 años 1,142 18% 2,606 824 De 18 a 24 años 5,299 82% 1,782 68% 3,899 16% Mujeres 3,458 54% 604 23% 15,418 64% Hombres 2,983 46% 2,002 77% 8,652 36% Jóvenes que recibieron educación financiera*** 12,763 De 13 a 17 años 11,305 89% De 18 a 24 años 1,422 11% Mujeres 6,389 50.1% Hombres 6,374 49.9% 2,372 24,070 32% 18,711 78% 19,391 No aplica (los jóvenes que tienen ahorros y reciben educación financiera son los mismos) * La meta original de las CAG incluía a 2.400 jóvenes a través de Kondo Jigima, pero esta asociación canceló antes de tiempo. Los datos incluyen 344 jóvenes que participaron en las CAG que ofreció Kondo Jigima hasta septiembre de 2012. ** Las cifras del rango de edad de los GAJ no suman 100% porque hubo jóvenes menores de 13 años y mayores de 24 ***El desglose de los datos de las CAI de Ecuador solo está disponible hasta septiembre de 2013, mientras que los datos sobre educación financiera del mismo país van hasta diciembre de 2013. En el Cuadro 12 se presentan el monto total y el monto promedio del ahorro por modelo, con un desglose adicional por sexo y edad para el caso ecuatoriano. El enfoque grupal en Malí no permite este desglose adicional porque los grupos a menudo incluyen integrantes hombres y mujeres y de diferentes edades. Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 21 Cuadro 12. AIM Youth - Ahorro (a 30 de septiembre de 2013) Ahorro total Ahorro promedio de todos los jóvenes Ahorro total de jóvenes de 13 a 17 años (% de todo el ahorro) Ahorro total de jóvenes entre 18 y 24 años (% de todo el ahorro) Ahorro total mujeres (% de todo el ahorro) Ahorro total hombres (% de todo el ahorro) Ahorro promedio de jóvenes de 13 a 17 años Ahorro promedio de jóvenes entre 18 y 24 años Ahorro promedio mujeres Ahorro promedio hombres Ecuador Malí Malí CAI CAG GAJ $ 751,871 $ 124.73 $ 8,222 $ 3.19 $ 115,198 $ 4.79 $ 121,457 (16%) $ 630,413 (84%) $ 365,541 (49%) $386,329 (51%) $ 106.36 $ 118.97 $ 105.71 $ 129.51 Datos no disponibles Nota: Para calcular los saldos totales y promedio de ahorro se winsorizaron los valores atípicos a un nivel de 0,1%. Resultados del programa en Ecuador En Ecuador, la estrategia de cobertura basada en el uso de las escuelas para impartir la educación financiera explica la prevalencia de una cohorte más joven. No obstante, el hecho de que un mayor número de jóvenes de 18 a 24 hayan abierto una cuenta de ahorro pone de manifiesto la desconexión que existe entre los jóvenes que recibieron la educación y los jóvenes que abrieron las cuentas. Igualmente, estos datos demuestran que aún subsiste el reto de promover la inclusión financiera de los jóvenes que se encuentran por debajo de la edad legal. Los resultados sugieren que los jóvenes que participaron en la educación financiera posiblemente abrirán una cuenta en el futuro, cuando cumplan la edad legal. Esperar hasta poder abrir una cuenta por sí mismos puede ser producto de que los jóvenes no deseen realizar el paso adicional de obtener la firma e identificación de sus padres o que no quieran que sus padres se involucren en sus ahorros. Un análisis más detenido de las tendencias de crecimiento de la educación financiera en comparación con la apertura de cuentas de ahorro ofrece algunas perspectivas adicionales. El Diagrama 2 muestra el aumento en el número de jóvenes que participaron en las sesiones de educación financiera entre marzo de 2011 y septiembre de 2013 y el aumento en el número de cuentas de ahorro que se abrieron durante el mismo período. Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 22 Diagrama 2. Crecimiento de las cuentas de ahorro y la educación financiera Crecimiento de las cuentas de ahorro en Ecuador (No. de cuentas de ahorro) Crecimiento de la educación financiera en Ecuador (Cobertura de EF) 6,000 6,000 5,000 5,000 4,000 4,000 3,000 3,000 2,000 2,000 1,000 1,000 0 T1 T2 2011 T3 San José T4 T1 T2 2012 T3 Cooprogreso T4 T1 T2 2013 T3 T4 SMB Santa Ana 0 T1 T2 2011 T3 San José T4 T1 T2 2012 T3 Cooprogreso T4 T1 T2 2013 T3 T4 SMB Santa Ana Una tendencia importante a señalar a partir de este diagrama es la estrategia adoptada por una de las cooperativas, San José. San José fue una de las primeras asociadas que empezó a ofrecer los servicios a inicios de 2011. A las cooperativas ecuatorianas que participaron en la primera etapa del proyecto AIM Youth les preocupaba mucho no poder cumplir los plazos de educación financiera del proyecto, ya que este era el componente que parecía ser más difícil de alcanzar. En consecuencia, se puso mucho énfasis en facilitar la educación, pero dicho énfasis tuvo un efecto retardante en la habilidad de las instituciones financieras para abrir cuentas de ahorro. Posteriormente, las cooperativas, en especial San José, rectificaron esta estrategia y redujo el tiempo que el personal de campo debía dedicar a la educación. Este cambio le permitió al personal concentrarse en la apertura y uso de las cuentas de ahorro individual y otros productos más rentables para adultos. La nueva estrategia les permitió ampliar de manera importante el número de cuentas de ahorro para jóvenes. Los elevados saldos de ahorro total de las CAI son probablemente un reflejo de los jóvenes que abrieron las cuentas. Es decir, en Ecuador, los jóvenes de más edad que posiblemente tienen un mayor ingreso disponible fueron quienes más abrieron las cuentas de ahorro. Además, algunas de las cooperativas promovieron activamente los depósitos en las cuentas mediante la implementación de mensajes de texto y un sistema de ahorro a distancia. Cabe resaltar que los jóvenes de menos edad (13 a 17 años) tenían saldos promedio casi tan altos como los de los jóvenes de más edad (18 a 24 años). Esto puede obedecer a que los padres depositaban con frecuencia en las cuentas de ahorro para jóvenes, y probablemente sus depósitos eran por un monto mayor que los de los jóvenes (ver Recuadro 10). El papel de la tecnología Las dos innovaciones tecnológicas adoptadas por las cooperativas ecuatorianas tienen el potencial de beneficiar tanto a la institución (al aumentar los saldos) como a los jóvenes (al ayudarles a ahorrar), aunque actualmente se cuenta con datos limitados para cuantificar este impacto. Aunque la tecnología se ha estado usando por un tiempo muy corto en el programa AIM Youth de Ecuador, y las cooperativas no cuentan con un sistema para monitorear el ahorro captado a distancia o el ahorro que responde directamente a los mensajes de texto, sí se cuenta con información del impacto percibido de la tecnología. Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 23 En una encuesta a profundidad realizada entre los jóvenes (n=26) y los empleados (n=10), los jóvenes que recibieron los mensajes de texto de la educación financiera dijeron haber leído el mensaje y acordarse de ahorrar. No obstante, solo unos cuantos dijeron haber ahorrado inmediatamente después de recibir el mensaje. También aprendimos que uno de los retos de este sistema radica en que algunos de los jóvenes menores de edad no estaban recibiendo los mensajes porque el programa que maneja las cuentas con frecuencia captura el teléfono del co-firmante (a menudo uno de los padres) en lugar del teléfono de los jóvenes. En cuanto a la captación del ahorro a través de los teléfonos inteligentes a distancia, casi la mitad de los jóvenes que tuvieron acceso a este sistema dijo haberlo usado para hacer depósitos. A través de entrevistas con el personal de campo supimos que cuando salían en sus rutas regulares para captar depósitos a través de teléfonos inteligentes de las cuentas de ahorro programadas (por lo general, de adultos), también promovían las cuentas de ahorro para jóvenes. Esta estrategia les permitió captar ahorros para las cuentas de los jóvenes. Sin embargo, los depósitos a menudo provenían de los padres que se encontraban en el hogar o en su negocio. Los jóvenes no siempre estaban en sus hogares al momento de las visitas. Como Zimmerman et al sugieren en su estudio sobre tecnología y ahorro entre los jóvenes, las innovaciones tecnológicas pueden “catalizar la inclusión financiera de los jóvenes en los países en desarrollo... [y] mejorar la capacidad financiera de los jóvenes.” A pesar de ello, aún subsisten varios obstáculos que deben abordarse para maximizar la eficacia de estas innovaciones.38 Resultados del programa en Malí En los enfoques grupales de Malí, los grupos que recibieron la educación fueron los mismos que participaron en las CAG o en los GAJ. Las cifras de educación que se muestran son un poco inferiores que las del ahorro debido a un retraso. Tanto en los enfoques formales como en los informales en Malí, el personal primero organizaba a los jóvenes para que ahorraran en grupo, un proceso que duraba casi tres meses, y luego facilitaba las sesiones de educación financiera. Con este método secuencial, se formaron algunos grupos al final del proyecto que aún no habían participado en la educación. Los grupos de ahorro para jóvenes de Malí alcanzaron la mayor cobertura, aportando 61 por ciento del total de los participantes del programa en ambos países.39 Esta importante cobertura es un reflejo de la estrategia de implementación, consistente en formar los GAJ en las comunidades rurales donde ya se había formado Grupos de Ahorro para adultos. Los ancianos del pueblo y los padres que ya conocían el sistema de ahorro y estaban convencidos de sus beneficios estimularon y apoyaron a sus hijos para que participaran. Los participantes de los GAJ pertenecen principalmente al grupo cohorte de menos edad (78%). Probablemente esto responde al hecho de que estos son los jóvenes que aún viven en sus hogares paternos y pueden participar en los Grupos de Ahorro. Las jóvenes de más edad probablemente están casadas y ya participan en un Grupo de Ahorro para adultos, o bien no pueden participar debido a las responsabilidades del hogar, mientras que los jóvenes de más edad probablemente han emigrado en busca de trabajo. En cuanto a la distribución entre hombres y mujeres, los GAJ tuvieron el mayor éxito entre las mujeres jóvenes (64%), si bien esto no sorprende del todo debido a que la metodología es una adaptación de una estrategia de microfinanzas gestionada por la comunidad que está dirigida principalmente a las mujeres. Por su parte, la participación de 46% de los hombres jóvenes también sugiere que este segmento tiene una necesidad no atendida de contar con un mecanismo de ahorro seguro y en grupo. Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 24 Cuando tienen la oportunidad de formar sus propios Grupos de Ahorro, los jóvenes realizan una autoselección y muchos grupos se componen tanto de hombres como de mujeres (la mitad de los grupos eran mixtos). El personal del programa informó que la participación conjunta de hombres y mujeres jóvenes generó un mayor sentido de igualdad entre las mujeres. De manera similar, muchos grupos señalaron no tener problemas con los grupos mixtos, y algunos jóvenes (incluyendo hombres) dijeron que era más fácil trabajar con mujeres que con hombres, por lo que preferían los grupos mixtos. Algunos grupos de sólo mujeres dijeron que no les gustaría estar en un grupo mixto. Al parecer, hubo un sesgo de autoselección: los grupos que tenían experiencia con los grupos mixtos no consideraban que hubiera un problema con los grupos mixtos, mientras que los jóvenes que participaban en grupos de un solo sexo señalaron que nos les gustaría participar en uno mixto.40 Los jóvenes urbanos que participaron en las CAG eran principalmente de más edad y de sexo masculino porque ese es el tipo de joven que tiende a asistir a los centros vocacionales, donde se realizan la mayoría de las actividades de promoción y formación de los grupos. Es posible que las mujeres tuvieran más restricciones a la movilidad en un centro urbano, especialmente en un contexto donde las jóvenes mujeres pueden tener más obligaciones relacionadas con el hogar. Comparación de los resultados del programa Si bien cada uno de los modelos se ejecutó usando estrategias de cobertura completamente diferentes (escuelas en Ecuador, centros vocacionales en zonas urbanas de Malí y comunidades en zonas rurales de Malí), existen algunas similitudes interesantes, así como diferencias clave. Por ejemplo, en cuanto a la titularidad de las cuentas de ahorro, las cooperativas tanto de Ecuador como de Malí tenían perfiles de edad similares, siendo la mayoría de los titulares mayores de 18 años (81% y 68% en Ecuador y Malí, respectivamente). No obstante, hubo marcadas diferencias entre hombres y mujeres, ya que 54 por ciento de los jóvenes de las cooperativas ecuatorianas era de sexo femenino, comparado con solo 23 por ciento en Malí. Asimismo, vale la pena señalar que la experiencia de Nyèsigiso al no poder llegar a los jóvenes de menos edad a través de las escuelas contrasta radicalmente con la experiencia de las cooperativas ecuatorianas. Es probable que los jóvenes de ambos países necesitaran desalojar las instalaciones escolares justo después de que las clases del día terminaban. Sin embargo, los jóvenes ecuatorianos participaron en la educación financiera durante el horario escolar, mientras que las reuniones de las CAG de Malí se realizaban después del horario escolar porque las escuelas no permitían que los jóvenes de los grupos se reunieran durante el horario escolar. Los saldos de ahorro de las CAG son los más bajos de los tres modelos. Puede haber varias explicaciones para esto. En primer lugar, de acuerdo a los datos de línea de base mostrados anteriormente (Cuadro 5), los niveles de ingreso de los jóvenes de Malí (urbanos y rurales) son significativamente inferiores a los de los jóvenes ecuatorianos. Asimismo, las CAG tienen cuotas de apertura y mantenimiento que sumadas representan $8, lo que puede erosionar las cantidades que el grupo haya acumulado inicialmente. Las CAG también empezaron entre 6 y 9 meses después de que los GAJ empezaran a ahorrar. Por último, puede ser posible que los jóvenes no estén depositando la totalidad de su ahorro potencial en la cuenta. De acuerdo a los diarios financieros realizados con los socios de la CAG, el monto medio del ahorro total aumentó de $40 a $50 (sin contar el ganado).41 Las dos estrategias diferentes que se implementaron en Malí también tuvieron resultados muy distintos, algunos de los cuales se esperaban. En primer lugar, hubo una cantidad mucho más grande de jóvenes participando en los GAJ. Esto se debió en parte a la estructura de financiación, ya que se consiguieron más Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 25 fondos para la implementación de los GAJ en comparación con las CAG. Pero incluso después de tomar en cuenta esta diferencia en la financiación, los GAJ llegaron a más jóvenes. Los fondos de los GAJ eran cinco veces más altos que los de las CAG formales, mientras que los GAJ llegaron a casi diez veces más jóvenes. Otra forma de comprender esto es observando que el costo promedio por persona para formar el GAJ y facilitar la educación financiera equivale a la mitad del monto requerido para apoyar a los jóvenes a abrir una CAG y ofrecerles educación financiera. En el Cuadro 13 se presentan estas diferencias. Cuadro 13. Comparación de los enfoques grupales formales y no formales de Malí GAJ CAG Cociente aproximado GAJ: CAG No. de jóvenes atendidos 24,070 2,646 10:1 Monto de la financiación $ 765,456.00 $ 153,353.00 5:1 $ 31.80 $ 57.96 1:2 Costo promedio por joven Cifras del impacto La hipótesis de Freedom from Hunger era que en el corto plazo, los jóvenes que participaban tanto en la educación financiera como en un servicio de ahorro tendrían mejoras en sus conocimientos y actitudes respecto al ahorro y el manejo del dinero, su capacidad de afrontar eventos del ciclo de vida, capital social, autoconfianza y empoderamiento, y capacidad socio-financiera. Pero la teoría también sugiere que el desarrollo de capacidades para el manejo del dinero durante la adolescencia puede conllevar a resultados de largo plazo, tales como mayores niveles de participación económica y ciudadana y una mayor seguridad alimentaria en el hogar a medida que los jóvenes entran en la adultez. Para probar esta teoría, Freedom from Hunger implementó un programa de investigación que incluía múltiples métodos, entre ellos métodos de estudio cuantitativos y cualitativos. Con los diferentes métodos hemos podido triangular y comprender mejor algunos de los resultados. Ecuador En Ecuador, los jóvenes que participaron en la educación financiera y que abrieron o no una cuenta de ahorro (grupo de tratamiento) tenía más probabilidad que el grupo de control de: 42 Reportar que tenían ahorros en general Tener mejores conocimientos sobre el manejo de las cuentas de ahorro Reportar mayores montos de ahorro total y ahorro para emergencias Reportar que ahorraban más en proporción al dinero recibido Sentirse satisfechos con los montos ahorrados y más motivados para ahorrar Sentirse menos estresados por pagar sus gastos educativos y del hogar Ser de los primeros en abrir las CAI para jóvenes si sus padres ya eran socios de las cooperativas. En el Cuadro 14 se muestran algunos resultados del ahorro desde la línea de base hasta la línea final para el grupo de tratamiento y el de control. Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 26 Cuadro 14: Conocimientos y comportamientos de ahorro - Línea de base vs. línea final y grupo de tratamiento vs. grupo de control Indicador Línea de base Tratamiento Control Línea final Tratamiento Control n=138 n=138 n=134 n=136 76.10* 65.20 78.4%** 61.8% — — 27.2% 38.2% Ahorra dinero en casa 43.50% 36.2% 58.2%^,*** 30.2% Monto promedio de ahorro total Tiene ahorros (en algún lugar) Tiene una cuenta de ahorro en Cooprogreso o San José $59.53 $69.25 $78.00* $73.10 Jóvenes que indican que sus padres ahorran en una cooperativa 46% 40% 41.8% 32.4% Conoce los cinco requisitos para abrir una cuenta de ahorro (documento de identidad de los padres, tarjeta de elector, factura de servicios públicos, documento de identidad propio, fotografía) 10.9% 15.2% 32.8%***,^^^ 16.2% n=88 n=68 n=57 n=56 21% 26% 61%^^^,*** 21% Padres que indican ahorrar en Cooprogreso o San José**** Diferencias significativas entre los resultados de los grupos de tratamiento y control: * p≤0,05, **p≤0,01, ***p≤0,001 Diferencias significativas entre los resultados de la línea de base y la línea final: ^ p≤0,05, ^^ p≤0,01, ^^^ p≤0,001 **** A los padres con hijos menores de 18 años se les pidió que firmaran una autorización para que sus hijos participaran en el estudio El denominador representa el número total de padres con un hijo menor de 18 años y que permitieron que su hijo participara en el estudio. El numerador representa el número total de padres que indicaron ser socios de la Cooperativa San José o Cooprogreso. Aunque el grupo de tratamiento presentó un mayor aumento en el conocimiento de los requisitos para abrir una cuenta de ahorro, el grupo de control tenía la misma probabilidad de abrir una cuenta de ahorro. Hay varias explicaciones posibles para esta incongruencia: en primer lugar, aunque solo el grupo de tratamiento participó en las sesiones de educación financiera, técnicamente todos los jóvenes del grupo de tratamiento y del grupo de control podían abrir una cuenta de ahorro. Cuando los grupos de tratamiento y de control se definieron antes de la línea de base, las cooperativas aún no habían diseñado una estrategia comunitaria ya que en un primer momento se pensó que la educación financiera desempeñaría una función de promoción. A pesar de ello, debido a que las cooperativas permitieron que toda la comunidad tuviera acceso a las cuentas, es muy probable que el grupo de control se enterara de las cuentas para jóvenes a través de la promoción activa de las cuentas de ahorro. De hecho, 43 por ciento de los jóvenes del grupo de control también se enteró de la cuenta de ahorro a través de los encuestadores encargados de recolectar los datos. Finalmente, el grupo de control tenía ligeramente más edad en la línea de base que el grupo de tratamiento, por lo que pudieron haber abierto cuentas más fácilmente dado que no necesitaban un co-firmante adulto. Aunque el grupo de tratamiento no tenía mayor probabilidad que el grupo de control de abrir una cuenta de ahorro, el hecho de que sus miembros tuvieran mayores montos de ahorro en general sugiere que es probable que la educación financiera ayudara a los jóvenes a reflexionar sobre el valor del ahorro y a acumular mayores montos de dinero a lo largo del tiempo.43 Estos hallazgos también sugieren que aunque la educación financiera parece desempeñar un papel en la formación de conocimientos y la promoción de comportamientos financieros positivos, la apertura de una Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 27 cuenta formal de ahorro requiere mucho más que conocimientos y habilidades. Los jóvenes mayores de 18 años pueden encontrarse en una situación en la que es más fácil abrir una cuenta, posiblemente por la confluencia de tener una mayor capacidad de generación de ingresos (hay más dinero en juego), y no tener que cumplir con los engorrosos requisitos adicionales de contar con un padre como co-firmante y posiblemente no querer que uno de sus padres u otro adulto se involucre en sus ahorros.44 Una pregunta importante tiene que ver con el papel que los padres desempeñaron en la decisión de sus hijos de abrir o no una cuenta de ahorro, o bien hasta qué grado se dio una venta cruzada donde los jóvenes convencieron a sus padres de abrir una cuenta. Los datos cualitativos encontraron que los jóvenes que abrieron cuentas de ahorro recibieron el apoyo de sus padres, mientras que los jóvenes que no abrieron una cuenta señalaron que sus padres no les ayudaron a abrir una cuenta. Por lo anterior, la participación de los padres se convierte en un factor más allá de los requisitos para abrir una cuenta. Además, cuando se preguntó a los jóvenes que tenían una cuenta si ellos o sus padres habían abierto su cuenta primero, la mayoría (92%) señaló que sus padres abrieron la cuenta primero, lo que sugiere que la experiencia de los padres con el sector bancario influye en la capacidad o motivación de los jóvenes para abrir una cuenta de ahorro. Por lo anterior, al parecer el hecho de provenir de un hogar donde los padres ya tienen una cuenta mejora las probabilidades de que una persona joven abra una cuenta y probablemente hace que los jóvenes comprendan mejor los beneficios de abrir una cuenta.45 La educación financiera en dos contextos diferentes Si bien el proceso de diseño de la educación financiera fue idéntico en ambos países, las diferencias culturales y geográficas necesariamente conllevaron a la definición de objetivos diferentes. En Malí, los jóvenes ya tenían metas de ahorro muy específicas pero tenían pocas opciones de ahorro. Igualmente, viven bajo influencia directa de las fluctuaciones financieras relacionadas con el ciclo agrícola, de manera que la educación financiera se centró en proporcionarles habilidades y reforzar su confianza para hacer planes para el futuro, planificar para las épocas difíciles e identificar lugares seguros dónde ahorrar. En Ecuador, los jóvenes disponen de mayores ingresos discrecionales y, en consecuencia, gastan más dinero en artículos que no son esenciales y aunque muchos quieren ahorrar para su educación, no todos tienen una meta financiera clara en mente, de manera que la educación se concentra en ayudarles a reconocer la diferencia entre necesidades y deseos, y a fijarse metas de ahorro de corto y largo plazo. A pesar de que los objetivos de aprendizaje fueron diferentes, se usó la misma metodología compuesta de métodos participativos, dinámicos y basados en el diálogo. Con el tiempo se hizo aparente que la cohorte de jóvenes de menos edad (13 a 17 años) apreciaba más el programa de enseñanza que la cohorte de más edad (18 a 24 años). Algunos de los jóvenes de más edad y personal de las asociadas han manifestado que las actividades son demasiado infantiles y el contenido demasiado básico, aunque no todos concuerdan con esta opinión. Los jóvenes de más edad han expresado un fuerte interés por aprender más sobre cómo crear sus propias empresas y cómo obtener y administrar un préstamo. Malí En Malí hallamos evidencia de lo siguiente:46 Los jóvenes que participaron en el programa reportan montos más altos de ahorro total, incluyendo el valor del ganado Las mejoras alcanzadas por los jóvenes en cuanto al ahorro, comportamientos financieros y conocimientos financieros se mantuvieron a pesar del golpe de estado que golpeó al país durante el curso del proyecto. Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 28 Las metas de ahorro de los jóvenes hombres y mujeres evolucionaron con el tiempo, pasando de vestuario a metas más productivas, tales como juntar dinero para comprar ganado, guardar para emergencias y para adquirir sus ajuares (en el caso de las mujeres) Los jóvenes apreciaron mucho la educación financiera. Consideran que es una ayuda valiosa para aprender a ahorrar en el futuro, malgastar menos y administrar mejor su dinero Los socios de los GAJ mostraron tener mejoras más importantes en los indicadores sobre conocimientos y actitudes financieras en comparación a los socios de las CAG; sin embargo los socios de los GAJ también tuvieron un mayor margen de mejoras. En términos generales, el programa en Malí llegó a más jóvenes en situación de pobreza a través de los GAJ que las CAG debido a que los GAJ iban dirigidos a las zonas rurales, donde hay más jóvenes viviendo en situación de pobreza En el Cuadro 15 se muestran algunos resultados del ahorro desde la línea de base hasta la línea final para el grupo de tratamiento y el de control. Cuadro 15: Algunos resultados del ahorro Tratamiento Indicador Control Línea de base Línea final Línea de base Línea final ¿Tienes una meta de ahorrar para algo especial? 90% 85% 91% 35%*** ¿Qué tan confiado(a) te sientes de que podrás ahorrar suficiente dinero para alcanzar tu meta de ahorro? Muy confiado(a) 70% 67% 67% 47%* ¿Has apartado algo de tus ahorros en efectivo para tiempos difíciles (como una emergencia)? 28% 23% 25% 16%* Diferencias significativas entre los resultados de la línea de base y la línea final: *p≤0,1 (10%), **p≤0,05 (5%), ***p≤0,01 (1%) El mayor porcentaje de jóvenes del grupo de tratamiento con una meta de ahorro, aunque no es estadísticamente significativo, puede ser un reflejo del impacto de la educación financiera, durante la cual se fijan metas de ahorro y estrategias para alcanzarlas. Con el tiempo, las metas de ahorro de los hombres y mujeres cambiaron y ambos sub-segmentos mostraron una creciente preferencia por ahorrar para comprar ganado, aunque en el caso de las mujeres también creció el interés de ahorrar para su ajuar y entre los hombres, ahorrar para emergencias. Aunque no es posible determinar el grado en que la inestabilidad política en Malí afectó a los jóvenes de las zonas rurales, ciertos resultados proporcionan algunos indicadores posibles de su evolución durante el conflicto. En varios de los indicadores ambos grupos experimentaron una baja en cuanto a los comportamientos financieros positivos. Sin embargo, en el grupo de tratamiento se observó una disminución menos sustancial que en el grupo de control, demostrando mayor resiliencia en medio de la incertidumbre política. Mientras que en la línea de base el grupo de tratamiento y el de control tuvieron resultados similares en el indicador “apartar dinero para épocas difíciles”, esta práctica era menos común entre el grupo de control en la línea final. Además, el monto medio que el grupo de tratamiento apartaba para los tiempos difíciles (US$5) también es más elevado que el monto del grupo de control (US$2,50). Por último, el número de jóvenes que invirtieron en ganado para hacer frente a los tiempos difíciles es menor tanto en el grupo de tratamiento como en el de control, siendo la disminución mayor en el caso del grupo de control. La evidencia de resiliencia en el grupo de tratamiento también se hace aparente en varios de los resultados relativos a las actitudes en la línea final. Los resultados en la línea final que se incluyen en el Diagrama 3 Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 29 muestran que al final del estudio el grupo de tratamiento tiene mayor confianza y una mejor perspectiva que el grupo de control en temas como confianza en los demás, la dificultad para ahorrar, la necesidad de ahorrar, las metas de ahorro, confianza en su capacidad para alcanzar las metas de ahorro, y guardar su dinero en un lugar seguro. Lo que la ilustración no muestra es que en el caso de muchos de estos resultados hubo una caída estadísticamente significativa entre los resultados de la línea de base y la línea final del grupo de control (una caída que el grupo de tratamiento evitó). Aunque los resultados del grupo de tratamiento pudieron no haber aumentado significativamente a lo largo del tiempo por sí mismos, en promedio este grupo pudo mantener la confianza en comparación a la pérdida de confianza en el grupo de control. Estos resultados sugieren que el programa dotó a los miembros del grupo de tratamiento de la capacidad para enfrentar mejor la agitación política en comparación con los miembros del grupo de control. Diagrama 3. Actitudes financieras de los jóvenes en el campo de Malí 100% 90% 80% 70% 60% 50% 40% 30% 20% 10% 0% Confío en la gente de mi comunidad Le entregaría mi dinero a alguien para que me lo guarde Ahorrar dinero por más de un mes es muy difícil No es necesario Tengo la meta de ahorrar cuando ahorrar para algo uno todavía vive importante de mi en la casa con la futuro familia (no está de acuerdo) Tratamiento Podré ahorrar suficiente para lograr mi meta Guardo el dinero que ahorro solo en lugares seguros Control No tener dinero para ahorrar y la migración fueron los mayores obstáculos para acceder y usar tanto los GAJ como las CAG. Los miembros de las CAG señalaron que entre las desventajas de ahorrar en una cuenta grupal figuran no poder participar todas las semanas, dificultad para generar suficiente dinero para ahorrar cada semana y tomar decisiones en grupo sobre el dinero. Comparación de las cifras del impacto En cuanto al impacto, se puede observar que los tres modelos presentan algunas tendencias similares, la más importante de las cuales es que el ahorro total de los participantes aumentó en ambos países. Aunque no todos los jóvenes participantes en Ecuador abrieron una cuenta de ahorro, los datos indican que estaban ahorrando más en general. Además, a pesar de las diferencias que existían en los indicadores financieros en la línea de base tanto en Ecuador como en Malí, en la línea final las jóvenes mujeres se estaban beneficiando por igual que los chicos y estaban ahorrando montos similares a los de ellos (en los casos en que se definieron como población meta por igual). Aunque los jóvenes de más edad ahorraron mayores montos que los jóvenes de menos edad tanto en la línea de base como en la final, los jóvenes de menos edad ahorraron una mayor proporción del dinero que recibían (en comparación con los jóvenes de más edad) en la línea de base como en la línea final. Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 30 Sabemos especialmente que los jóvenes en general apreciaron la educación financiera. Tanto en Malí como en Ecuador, los jóvenes consideraron que la educación financiera fue valiosa porque era muy diferente del tipo de educación que recibían en la escuela. Asimismo, les estimulaba en parte a pensar sobre su propio futuro financiero. Los jóvenes de Malí consideraron que la educación financiera hizo que ganaran el respeto de sus familias, les ayudó a planear para el futuro, malgastar menos y administrar mejor su dinero. En cuanto a las principales diferencias, los jóvenes de los Grupos de Ahorro en Malí tendían a ahorrar de manera regular mientras que los jóvenes en Ecuador ahorraban con menos frecuencia (ver Cuadro 16). La diferencia entre la frecuencia del ahorro en Ecuador y Malí muy probablemente obedece a la estructura de los GAJ, en los que los jóvenes se reunían semanalmente y se les estimula a ahorrar con regularidad a través de las dinámicas grupales.47 Además, de acuerdo a información cualitativa de Malí, los padres a menudo ayudaban a sus hijos a juntar su cuota semanal. Algunos jóvenes incluso afirmaron que tuvieron que retirarse del GAJ cuando sus padres ya no podían darles el dinero para el ahorro grupal.48 A pesar de que los jóvenes ecuatorianos también se reunieron periódicamente durante las siete sesiones de la educación financiera, no se incorporó un mecanismo para promover el ahorro regular además de las visitas posteriores de los animadores, que dejaron de ser frecuentes una vez se llevaron a cabo todas las sesiones educativas. Además, no todos los jóvenes ecuatorianos podían hacer depósitos de ahorro durante la visita de un agente de campo de las cooperativas porque no habían abierto una cuenta o porque los agentes no contaban con teléfonos inteligentes para captar el ahorro a distancia. Cuadro 16. Frecuencia del ahorro Indicador Tratamiento Control 65%* 16%*** 9% 16% Malí – Ahorraba dinero durante las semanas la mayoría de las semanas Ecuador – Ahorraba semanal o diariamente Diferencias significativas entre los resultados de los grupos de tratamiento y control: *p≤0,1 (10%), **p≤0,05 (5%), ***p≤0,01 (1%) Sostenibilidad de la prestación de servicios integrados La naturaleza diversa de los tres métodos requiere que su sostenibilidad se defina de manera diferente también, especialmente al comparar un servicio de ahorro formal con uno no formal. De acuerdo a los métodos que se implementaron en Ecuador y Malí, deben considerarse varias dimensiones al evaluar la sostenibilidad: la sostenibilidad financiera de los servicios financieros formales y la sostenibilidad a nivel comunitario en el caso de los servicios no formales. Sostenibilidad de los servicios financieros formales Si bien el apoyo técnico y la asociación financiera terminaron en diciembre de 2013, todas las cooperativas que participaron en la iniciativa AIM Youth han asegurado que piensan seguir ofreciendo estos servicios. La decisión de continuar, sin embargo, depende de la sostenibilidad financiera potencial de los servicios. En el caso de las cooperativas, no es probable que los productos de ahorro para los jóvenes sean rentables por sí mismos en el corto plazo (uno a tres años), aunque existe cierta evidencia emergente de la viabilidad financiera cuando las instituciones fijan la rentabilidad de los jóvenes titulares en el mediano o largo plazo (tres a cinco años).49 Freedom from Hunger realizó un estudio de costos e ingresos de los servicios para jóvenes que ofrecieron las tres asociadas de AIM Youth (en Ecuador, San José y Cooprogreso; en Malí, Nyèsigiso).50 En los Cuadros 17 a 19 Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 31 se muestran las proyecciones financieras de largo plazo para las tres instituciones, basándose en los gastos e ingresos reportados a la fecha sobre las cuentas de ahorro para jóvenes y la educación financiera, así como en el crecimiento estimado de las instituciones financieras esperan para los cinco años siguientes. Cuadro 17. Proyecciones de la rentabilidad de los servicios para jóvenes de Nyèsigiso Organizaciones 2012 2013 2014 2015 2016 2017 2018 Déficit/Superávit neto ($31,828) ($31,936) ($32,918) ($33,899) ($7,527) $22,533 $72,809 Déficit/Superávit acumulado ($31,828) ($63,764) ($96,682) ($130,582) ($138,108) ($115,575) ($42,766) Fuente: Cálculos realizados con base en información recolectada por el PSF. Cuadro 18. Proyecciones de la rentabilidad de los servicios para jóvenes de Cooprogreso Organizaciones 2012 2013 2014 Déficit/Superávit neto ($19,392) ($12,645) $16,312 Déficit/Superávit acumulado ($19,392) ($32,037) ($15,725) 2015 2016 2017* 2018 $27,427 $9,332 ($6,971) $2,072 $11,702 $21,034 $14,063 $16,135 Fuente: Cálculos realizados con base en información recolectada por el PSF. * El déficit de 2017 se debe a una estrategia de expansión agresiva que implica contratar más personal, la cual esperamos que la gerencia de Cooprogreso pueda disminuir como resultado de este análisis. Cuadro 19. Proyecciones de la rentabilidad de los servicios para jóvenes de San José Organizaciones 2011 2012 2013 2014 2015 2016 2017 2018 Déficit/Superávit neto ($29,243) ($17,176) ($8,100) $36,159 $54,056 $65,883 $72,668 $76,099 Déficit/Superávit acumulado ($29,243) ($46,419) ($54,520) ($18,360) $35,696 $101,579 $174,247 $250,347 Fuente: Cálculos realizados con base en información recolectada por el PSF. Según estas proyecciones, los servicios ofrecidos por las cooperativas ecuatorianas tienen mayor probabilidad de alcanzar el umbral de rentabilidad en el mediano plazo, mientras que los servicios ofrecidos por la federación de cooperativas en Malí alcanzarán un punto de rentabilidad varios años después que las cooperativas de Ecuador. Los mayores ingresos proyectados para las cooperativas ecuatorianas responden a varios factores: Se espera que las cooperativas ecuatorianas alcancen el umbral de rentabilidad en el mediano plazo como resultado de su estrategia de entrega del servicio, donde el personal dedica un porcentaje bastante limitado de su tiempo a la educación y una mayor parte a promover las cuentas para jóvenes y otros productos para adultos. No necesariamente se trata de una estrategia de venta cruzada para llegar a los adultos a través de los jóvenes (la información de AIM Youth sugiere que esto puede no estar ocurriendo ampliamente). Más bien se trata de dedicar una mayor porción del tiempo del personal de campo a productos con mejores retornos, permitiendo que la institución financiera financie indirectamente sus servicios para jóvenes con otros productos. Cooprogreso y San José colectan montos de ahorro mucho mayores que Nyèsigiso, y estos fondos pueden generar ingresos mucho mayores al destinarlos al crédito. Cooprogreso y San José esperan generar ingresos a partir de la venta cruzada de préstamos para jóvenes Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 32 antes que Nyèsigiso. Dados los elevados saldos captados a través de las cuentas individuales de ahorro para jóvenes, las cooperativas ecuatorianas están interesadas en llegar al mercado de jóvenes con productos más rentables. En cambio, Nyèsigiso aún no está lista para ofrecer préstamos para jóvenes, especialmente tomando en cuenta que los jóvenes tienen ingresos menores y el monto de los préstamos a los que podrían acceder sería muy limitado. Se espera que el monto promedio de los préstamos provenientes de la venta cruzada a los padres de los jóvenes sea mucho mayor en Ecuador que en Malí. Los costos de nómina representan una mayor proporción para Nyèsigiso, lo que se refleja en el enfoque de la prestación de los servicios de las CAG, el cual requiere más personal. La evidencia de Ecuador muestra que los jóvenes participantes están ahorrando 6,7 por ciento más que los no participantes ($78 vs. $73,10 respectivamente), un resultado que es estadísticamente significativo.51 Por ello, la inversión en la educación financiera puede contribuir a la acumulación de mayores ahorros y formar consumidores de productos financieros con mayor capacidad. Combinados, estos elementos contribuyen a la viabilidad de los servicios a largo plazo, tanto en términos financieros como en el cumplimiento de los objetivos sociales de largo plazo de las cooperativas. Las cooperativas de Ecuador absorben la falta de rendimiento de los servicios para jóvenes en el corto plazo porque ofrecer educación financiera se ha convertido en parte integral de su estrategia de cobertura y parte de su responsabilidad social corporativa. En Malí, la sostenibilidad financiera del enfoque grupal resulta más compleja. Por una parte, la cuenta grupal permite a los jóvenes ahorrar más que la cuenta individual, pero el personal dedica una porción considerablemente mayor de su tiempo para organizar los jóvenes en grupos, facilitar el proceso de apertura de la cuenta y brindar apoyo permanente a los grupos. En el Diagrama 4 se muestra la proporción de costos de personal y otros costos de las tres asociadas ejecutoras que se contemplaron en el estudio de costos.52 Diagrama 4. Estructura de costos de las asociadas - 2012 100.00% 90.00% 80.00% 70.00% Costos de inversión 60.00% Intereses 50.00% Market/Adm 40.00% Transporte 30.00% Salarios 20.00% 10.00% 0.00% En el caso de las cuentas de ahorro grupal, Nyèsigiso ha dependido en gran medida de los ingresos generados por la apertura de cuentas y los cargos de mantenimiento (40% de los ingresos totales en 2012 y 51% en 2013). A pesar de ello, estos montos aún son modestos ($1.245 en 2012 y $2.114 en 2013), dado el escaso número de cuentas que se han abierto en Nyèsigiso. Por otra parte, de acuerdo a las proyecciones financieras, la proporción de ingresos provenientes de los cargos de las cuentas disminuirá a 10 por ciento a medida Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 33 que los ingresos por la venta cruzada de productos más rentables a los jóvenes y sus redes aumenten con el tiempo (a más de 90% para 2018). A medida que el sector de servicios financieros para jóvenes se desarrolle y la competencia crezca, los cargos de estas cuentas deberían disminuirse o incluso eliminarse. Los cargos de las cuentas se mencionan a menudo como uno de los obstáculos al acceso de servicios financieros por parte de los jóvenes y potencialmente representan un importante desafío para un mayor crecimiento.53 La sostenibilidad en el caso de las instituciones financieras formales también debería tomar en cuenta la calidad de los servicios prestados, especialmente la educación financiera. Si la calidad de la educación financiera es deficiente, podría haber rendimientos decrecientes, en especial en cuanto a los comportamientos deseados de ahorro. Generar la capacidad institucional, o pagar la asistencia de terceros para mantener y monitorear la calidad de la educación es fundamental si la institución tiene el compromiso de prestar servicios de valor agregado en el largo plazo. Sostenibilidad de los servicios no formales En el caso de las ONG, cuya oferta se limita a servicios financieros no formales, la viabilidad financiera depende de la capacidad para adquirir fondos externos. Dado que los grupos no proporcionan un flujo de ingreso para la ONG facilitadora, ésta siempre necesitará fondos subsidiados para ampliar el programa y organizar más grupos de jóvenes. Estas organizaciones no tienen una meta comercial puesto que su preocupación principal es generar capacidades a nivel de las comunidades con las que trabajan de manera que puedan superar una serie de problemas sociales, económicos e incluso políticos. Los GAJ informales alcanzarían sostenibilidad si los jóvenes que se han organizado y capacitado continuaran reuniéndose sin apoyo externo. De acuerdo con datos de los Grupos de Ahorro para adultos de Malí, 95 por ciento de los grupos continúan reuniéndose, ahorrando y tomando préstamos después de seis años.54 No obstante, no existe certeza sobre el tiempo en que los GAJ continuarán reuniéndose por cuenta autónoma, dado que los jóvenes tienen a emigrar en busca de trabajo o para casarse, en el caso de las mujeres. La naturaleza transitoria de los participantes de los miembros del grupo representa un riesgo para la estabilidad del grupo, el cual es mucho mayor que en los Grupos de Ahorro para adultos. De acuerdo a las visitas de monitoreo y conversaciones con el personal, a lo largo del proyecto se retiraron entre dos y tres socios de cada GAJ de 15. De hecho, aproximadamente 23 jóvenes (18 por ciento) del grupo de tratamiento que fueron entrevistados durante la línea final se habían retirado del grupo de ahorro (aun así fueron ubicados y entrevistados en la línea final). Entre las principales razones de su retiro figuran: 1) No tener el dinero (39%); 2) Emigrar para trabajar (26%); y 3) Disolución del grupo (17%). La composición demográfica de los jóvenes que se retiraron es proporcional a la composición de la muestra en general, compuesta en partes iguales por hombres y mujeres y con un mayor número de jóvenes de menos edad. Sin embargo, durante el período de implementación de los GAJ, el problema de la salida de algunos miembros se mitigó ya que sus hermanos menores entraron a reemplazarlos. En algunos casos, cuando un joven se ausentaba de su comunidad por un período corto, el padre o madre puede hacer las contribuciones en su nombre. A pesar de la presión que existe para emigrar, los jóvenes siguen considerando que la participación en un Grupo de Ahorro es valiosa. Según los resultados de la investigación final, aunque 25 por ciento de los encuestados dijo haber emigrado el año anterior, 91 por ciento recomendaba el grupo, sugiriendo que quienes pueden llegar a emigrar aún así se unen a los grupos. Al final de las actividades de campo en junio de 2013, monitoreamos durante cuatro meses a una muestra de los GAJ que se habían formado con anterioridad. Más o menos la mitad de los grupos continuaban operando, Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 34 reuniéndose regularmente para ahorrar y seguir los procedimientos grupales adecuadamente. No obstante, la otra mitad no se reunía o bien no seguía las reglas de la reunión, lo cual es fundamental para la estabilidad del grupo. Según el informe del personal de campo, los grupos que tenían mayor experiencia antes del fin de las actividades de campo, es decir, aquellos que habían recibido apoyo de un facilitador por un periodo de tiempo mayor (por lo menos un ciclo completo) tenían mayor probabilidad de seguir operando por su cuenta. Jóvenes H/M que se retiraron (Grupo de tratamiento) Hombres 48% 52% Mujeres Jóvenes mayores/menores que se retiraron (Grupo de tratamiento) Menores de 18 años 26% 74% Mayores de 18 años Aunque es posible que no todos los grupos de jóvenes sigan reuniéndose a lo largo del tiempo, el enfoque de los GAJ puede lograr un cierto grado de sostenibilidad a través de la réplica, en la que se capacita a los jóvenes socios para que organicen nuevos grupos y ellos mismo actúen como replicadores en sus propias comunidades o en otras comunidades una vez el proyecto haya terminado. La simplicidad de los Grupos de Ahorro facilita su réplica y de hecho, se ha dado el caso de muchos programas que trabajan con grupos de ahorro para adultos que reportan una réplica espontánea significativa, a través de la cual los socios ayudan a sus familiares o vecinos a formar grupos nuevos.55 Aunque no hay datos disponibles sobre la réplica de los grupos de jóvenes, durante nuestras visitas de monitoreo observamos a menudo una réplica espontánea de grupos de niños en las comunidades donde se formaron GAJ, lo que sugiere que existe demanda de un mecanismo de ahorro de este tipo entre los más jóvenes. El éxito que el enfoque grupal tiene al formar la capacidad financiera de los jóvenes, resultando potencialmente en un hábito para toda la vida, hace que valga la pena reflexionar sobre la posibilidad de implementar una estrategia de réplica. Lecciones aprendidas sobre los diferentes modelos de servicios integrados A través de los estudios de investigación y actividades de monitoreo realizados para AIM Youth, hemos aprendido mucho sobre lo que funciona y no funciona en la prestación de un paquete integrado de servicios de ahorro y educación financiera para jóvenes. En esta sección resumimos las principales lecciones aprendidas a partir del análisis y los datos presentados en el presente documento. El acceso a los servicios financieros integrados para los jóvenes puede forjar su capacidad financiera. Al comparar el impacto en ambos países se encuentra evidencia de que los jóvenes que participaron en los tres modelos presentaron mejoras en el tiempo en cuanto a sus comportamientos financieros, en especial en lo relativo al ahorro. Estas mejoras ocurrieron a pesar de los obstáculos observados como la apertura limitada de cuentas por parte de los menores de 18 años y un golpe de estado en Malí durante el curso del Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 35 proyecto. Además, aunque no es posible determinar con exactitud el papel que desempeñaron la educación financiera, el acceso y uso de los servicios de ahorro en el mejoramiento de los conocimientos financieros, los resultados registrados en Malí y Ecuador sugieren que los conocimientos financieros ciertamente mejoraron en los jóvenes que participaron en AIM Youth. El efecto combinado de las mejoras en los comportamientos sobre el así como en los conocimientos financieros constituye un elemento crítico en el fortalecimiento de la capacidad financiera. La educación financiera no conlleva automáticamente a la apertura de cuentas de ahorro. Al inicio del proyecto definimos como una hipótesis que era necesario ofrecer educación financiera para promover un producto de ahorro y garantizar el uso del mismo. No obstante, aunque hay evidencias de que la educación financiera genera comportamientos de ahorro positivos, la educación por sí sola no puede remediar dificultades muy importantes que los jóvenes deben enfrentar (en especial los menores de edad) al acceder a los servicios financieros formales y buscar la inclusión financiera. Abrir una cuenta de ahorro individual resulta muy complicado para los jóvenes. Dado que su experiencia es definida básicamente por la familia, los amigos y la escuela que por las responsabilidades financieras, por lo menos en el caso ecuatoriano, los jóvenes en edad escolar pueden no tener la motivación o el conocimiento para abrir una cuenta de ahorro. Esta falta de urgencia entre los jóvenes, combinada con un proceso de apertura engorroso en el que se exige la participación de un co-firmante, perjudica la demanda, por lo que puede no ser realista esperar que la educación financiera pueda compensar eficazmente estos factores. Los métodos grupales que parten inicialmente del ahorro son muy eficaces en la entrega de servicios integrados. Ahorrar a través de la participación en un grupo no solo sirve para practicar lo aprendido y desarrollar nuevas habilidades en el manejo del dinero entre los jóvenes sino que también puede ayudarles a desarrollar el hábito del ahorro. Además, la estructura de los enfoques grupales de Malí posibilitó que la mayoría de los jóvenes recibieran ambos servicios. Los GAJ fueron aún más eficaces para llegar a un número más grande de jóvenes debido a la ausencia de los requisitos engorrosos de las cuentas de ahorro formal. Los GAJ resultan particularmente efectivos para llevar la inclusión financiera a los jóvenes de zonas rurales, quienes de otra forma serían excluidos de los servicios financieros. Si bien hay que tomar en cuenta que los grupos por sí mismos pueden no ser sostenibles en el largo plazo, el modelo de los Grupos de Ahorro es eficaz en el desarrollo de capacidades financieras entre sus miembros y brinda una plataforma ideal para prestar otros servicios. Mantener los grupos a lo largo del tiempo no debe ser una meta en sí misma, sino preparar a los jóvenes a medida que pasan a una nueva etapa en sus vidas. De manera similar, es posible que las CAG no sean financieramente sostenibles en el , pero pueden ser efectivas para ayudar a los jóvenes a acceder cuentas formales como un punto de partida y conducir a un punto en el que los participantes se gradúen y pasen a abrir cuentas de ahorro individual. Los jóvenes valoran la educación financiera pero necesitan más para satisfacer sus necesidades financieras. En todas las encuestas que se realizaron en Malí y Ecuador, los jóvenes subrayaron que habían disfrutado la educación financiera. La educación financiera al parecer marca una diferencia en los conocimientos financieros adquiridos por los jóvenes, así como en los comportamientos de ahorro, y parece ser una inversión que vale la pena considerar para el desarrollo de las capacidades de las siguientes generaciones de consumidores de productos financieros. No obstante, los jóvenes de ambos países, especialmente en Malí, indicaron necesitar también capacitación sobre las actividades económicas y apoyo para acceder al crédito. Las cooperativas participantes igualmente desean que sus clientes jóvenes accedan con el tiempo a productos más rentables como los préstamos. Los padres desempeñan un papel fundamental en la vida financiera de sus hijos. El campo de las microfinanzas ya ha reconocido la importancia del apoyo de los padres para que los jóvenes accedan a los servicios financieros. Pero los padres desempeñan un papel mucho más significativo en el acceso al Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 36 dinero, la forma como los jóvenes acceden o no a los servicios financieros formales y en la manera como administran sus propios fondos. La tecnología ofrece buenas oportunidades para una adopción de los servicios más amplia y más eficaz. A través de los mensajes de texto, las instituciones financieras pueden reforzar los mensajes de la educación financiera y promover el ahorro adicional a un bajo costo. Gracias al uso de teléfonos inteligentes para captar ahorros a distancia, las cooperativas pueden captar más ahorros, tanto de los jóvenes como de sus padres. No obstante, las expectativas sobre el uso de la tecnología deben tomar en cuenta que por sí misma, ésta no puede eliminar algunas de las barreras que los jóvenes aún enfrentan al usar los servicios financieros formales. La oferta de educación financiera por parte de las instituciones financieras debe corresponderse con su capacidad institucional, recursos disponibles y estrategias. Para las cooperativas ubicadas en zonas rurales y que tienen un gran compromiso con las comunidades en las que trabajan, pero capacidad y recursos limitados, la identificación de este equilibrio puede traducirse en una oferta limitada de servicios no financieros. De hecho, Dunford había advertido en 2001 que “un sistema unificado de prestación de servicios obsesionado con satisfacer las necesidades de aprendizaje y otras necesidades de los clientes puede fácilmente volverse en contra de la sostenibilidad a largo plazo de las operaciones de crédito, afectando el interés de los clientes.56” Aunque en el caso de AIM Youth el producto financiero en juego era el ahorro, la advertencia sigue siendo válida. El diseño del producto puede ayudar a superar algunos de los obstáculos para la inclusión financiera de los jóvenes, pero probablemente sea más eficaz contar con un sector de servicios financieros más competitivo. En Malí, las CAG han podido abordar algunos de los principales obstáculos que los jóvenes enfrentan para acceder a los servicios financieros formales pero aún subsisten importantes retos, principalmente los cargos de la cuenta que erosionan el ahorro y los montos mínimos que impiden que los jóvenes abran cuentas individuales. El sector de servicios financieros en Malí necesita contar con políticas y normas que impulsen la competitividad, lo que a su vez motivaría a las instituciones a hacer que sus productos sean más asequibles y accesibles. En Ecuador, aunque las cuentas son asequibles (bajos montos de apertura, sin cuotas) y accesibles (es posible abrir cuentas sin tener que desplazarse a la sucursal), los jóvenes de menos edad (menores de edad) no están accediendo a ellas, posiblemente porque no quieren que sus padres tengan acceso a sus ahorros. Contar con regulaciones que permitan a los jóvenes abrir una cuenta de ahorro independientemente de sus padres podría dar lugar a una mayor tasa de apertura de cuentas. Recomendaciones para integrar el ahorro juvenil con la educación financiera A partir de las lecciones aprendidas durante la experiencia de AIM Youth en Ecuador y Malí, elaboramos algunas recomendaciones para desarrollar y prestar servicios de ahorro y educación financiera para jóvenes. Estas recomendaciones están dirigidas a instituciones financieras y ONG enfocadas en el desarrollo comunitario, aunque hay otros actores importantes que deberían participar, tales como organizaciones de desarrollo internacional, organismos de regulación, organizaciones multilaterales y organizaciones de financiación. Debe tomarse en cuenta que no todas las recomendaciones necesariamente apliquen en cada situación. Como se ha visto, el contexto es crucial para moldear la estrategia y los resultados esperados. Desarrollar un método escalonado, empezando por los grupos de ahorro, que gradualmente habilite a los jóvenes a acceder a servicios financieros formales, incluyendo el crédito. Los métodos grupales constituyen Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 37 una plataforma eficaz para reforzar la capacidad financiera de los jóvenes. La estrategia de los GAJ puede ser especialmente beneficiosa para los jóvenes que viven en zonas rurales, antes de que emigren a entornos urbanos. Ofrecer educación financiera a través de una estrategia múltiple para promover comportamientos financieros positivos entre los jóvenes a través de las escuelas, las instituciones financieras y redes sociales. Estos múltiples puntos de contacto pueden reforzar mensajes clave y llegar a diferentes segmentos de jóvenes (escolares, los que no asisten a la escuela, los que trabajan). Incluir capacitación de preparación para la subsistencia dirigida a los jóvenes de más edad. El ahorro y la educación financiera son un primer paso sólido para mejorar el bienestar financiero de los jóvenes, pero este segmento necesita más apoyo para atender sus crecientes necesidades financieras. Desarrollar programas integrales dirigidos a los hogares compuestos de educación financiera y servicios financieros tanto para los jóvenes como para sus padres o tutores. Los padres desempeñan un papel fundamental en la vida financiera de los jóvenes. Estos programas deben garantizar que los jóvenes estén protegidos de intervenciones no deseadas de sus padres o tutores. Usar la tecnología para promover hábitos de ahorro positivos a través de una combinación de mensajes de texto y la captación del ahorro a distancia. Sin embargo, también existe la necesidad de investigar más a fondo el impacto costo-beneficio de la tecnología para formar la capacidad financiera y promover la inclusión financiera de los jóvenes. Incluir un método de réplica para la expansión de los GAJ. Dicho método podría incorporar a los jóvenes de más edad como replicadores pues es posible que sean más maduros e inspiren más respeto entre los jóvenes de menos edad. Capacitar a estos jóvenes con el apoyo de los adultos de la comunidad para asumir algunas de las responsabilidades de los facilitadores generaría un recurso sostenible para otros jóvenes de la comunidad, quienes podrían contar con el apoyo de sus propios compañeros. Conclusión Toda discusión sobre la prestación de servicios integrados debe incluir la siguiente pregunta: ¿Qué lograría uno solo de los servicios sin el otro? Aunque la iniciativa AIM Youth no se diseñó con la intención de probar el valor de la educación en comparación con el valor del ahorro, los distintos métodos han dado luz sobre el valor de la educación por sí misma, así como del ahorro por sí mismo. Gracias a la información recopilada durante la investigación sabemos que la combinación de servicios produce los mejores resultados en los comportamientos financieros. La educación financiera desempeñó un papel fundamental en el desarrollo de la capacidad financiera de los jóvenes en diferentes contextos. En Ecuador, la educación por sí misma pudo no haber conducido a que los jóvenes abrieran cuentas de ahorro, por lo menos en el corto plazo, pero aprendimos que ofrecer servicios para los jóvenes (tanto educación como cuentas de ahorro) puede llegar a ser financieramente sostenible para las instituciones financieras en el largo plazo mediante el financiamiento indirecto de productos financieros más rentables. Aunque la educación puede tener una escala limitada, las instituciones financieras tienen el incentivo de ofrecer la educación porque puede contribuir a incrementar los saldos de ahorro. Sin embargo, las cooperativas también han demostrado tener un fuerte compromiso con la continuación de la oferta de la educación financiera como parte de su responsabilidad social corporativa. Las cooperativas ecuatorianas aún tienen el desafío de promover la inclusión financiera entre los jóvenes de menos edad. Promover el acceso a las cuentas de ahorro por parte de los jóvenes puede requerir Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 38 cambios en el contexto normativo que actualmente impide a los jóvenes menores de edad abrir cuentas independientemente de sus padres. En Malí, encontramos que la integración de la educación financiera con un servicio de ahorro es muy eficaz a través de un método grupal que ofrezca ahorros como punto de partida. En el caso de los servicios de ahorro formal, no se espera que el ofrecimiento de una cuenta grupal sea sostenible financieramente o capaz de lograr una amplia escala, debido a obstáculos institucionales más amplios (como los cargos de apertura o mantenimiento) que resultan excesivamente engorrosos para los jóvenes y erosionan el ahorro, así como a una estrategia que no incluye otros productos más rentables. Aunque la gerencia de la institución ha reiterado su compromiso de ofrecer servicios de valor agregado para jóvenes, por ahora, no es muy probable que el método de CAG continúe a menos que el producto tenga un costo más asequible para una mayor variedad de jóvenes y reciba financiamiento cruzado de otros productos financieros. El método de los GAJ en Malí resultó muy eficaz para llegar a un gran número de jóvenes en las zonas rurales, especialmente niñas adolescentes, que de otra forma serían excluidas de los servicios financieros.57 Debido a las presiones sociales y financieras que les obliga a emigrar o desplazarse, los grupos por sí mismos quizás no sean sostenibles, pero los comportamientos de ahorro que promueven tienen el potencial de convertirse en hábitos para toda la vida de cada uno de los participantes. Pensando a futuro, la lección más importante de esta experiencia es que si bien la combinación de servicios financieros y educación financiera es eficaz para lograr el objetivo de formar la capacidad financiera de los jóvenes, la eficacia en la promoción de la inclusión financiera de los jóvenes varía según el modelo y el entorno normativo. Igualmente, estos servicios no son suficientes para satisfacer la totalidad de las necesidades financieras de los jóvenes que están pasando rápidamente de una etapa en la vida a otra. Existen muchas necesidades aún no satisfechas, principalmente apoyo en la generación de ingresos y un enfoque escalonado para acceder al crédito (para los jóvenes mayores de edad. A través de AIM Youth, Freedom from Hunger se propuso someter a prueba y documentar varios métodos de prestación de servicios financieros a los jóvenes junto con educación financiera, caracterizada por tomar en cuenta las necesidades de aprendizaje de los jóvenes. Nuestra hipótesis era que la combinación de estos servicios guiaría y estimularía a los jóvenes a fijarse metas financieras y alcanzarlas, creando mejores opciones para el futuro. Ahora tenemos evidencia de que los servicios integrados tuvieron un impacto positivo en el corto plazo. Aún así, en los sectores del desarrollo y de las microfinanzas, aún existe la necesidad de identificar cuál es la mejor forma de que estos comportamientos se traduzcan efectivamente en mejores opciones y mejores resultados económicos para los jóvenes en el futuro. Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 39 Anexo A. Descripción del programa de educación financiera de Malí Alcanza tus metas: Maneja tu dinero sabiamente Juegos de aprendizaje para jóvenes Objetivos del módulo: Tomar decisiones informadas de ahorro y préstamo Aumentar el ahorro y ahorrar en lugares seguros Título de la sesión Objetivos Al terminar el juego de aprendizaje, los participantes habrán: Organizado su meta en pasos que pueden lograr uno por uno Pasos para alcanzar una meta Comprometido hablar de su meta con su familia Examinado diferentes estrategias de ahorro Aumenta tus ahorros Seleccionado una estrategia para aumentar sus ahorros Categorizado las formas en que los jóvenes guardan su dinero como más o menos seguras Mantener tus ahorros a salvo Decidido qué hacer para proteger sus ahorros Hacer planes para épocas difíciles Identificado las épocas en las que las presiones financieras son mayores Decidido cómo ahorrarán para las épocas difíciles Pedir prestado sabiamente Diferenciado entre las buenas y malas decisiones de préstamo Cuándo pedir prestado y cuándo usar los ahorros Comparado las ventajas y desventajas de pedir prestado y usar el ahorro propio Repasado los juegos de aprendizaje anteriores Alcanzando tus metas Decidido qué paso tomarán para lograr su meta Descripción del programa de educación financiera de Ecuador Temas y objetivos de los juegos de aprendizaje Alcanza tus metas: Maneja bien tus recursos Número y título Educación financiera: estrategias de comunicación para jóvenes, adolescentes y sus padres Objetivos Al terminar el juego de aprendizaje, los participantes habrán: Hecho preguntas sobre los temas de los juegos de aprendizaje Definido buenas estrategias de comunicación Establecido una cultura de responsabilidad compartida entre jóvenes y padres respecto a sus compromisos Metas de largo plazo Identificado su meta de largo plazo Metas de corto plazo Fijado una meta financiera de corto plazo Un plan de ahorro para alcanzar mi meta Analizado las fuentes de ingreso para jóvenes y adolescentes Elaborar un plan de ahorro ¿Cuál es la diferencia entre gastar en una necesidad y gastar en las cosas que queremos? Distinguido entre gastar en una necesidad y gastar en las cosas que desean Opciones de ahorro Analizado las opciones de ahorro Identificado las mejores opciones de ahorro Identificado las cosas que quieren y las cosas en las que no van a gastar más su dinero Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 40 Temas y objetivos de los juegos de aprendizaje Alcanza tus metas: Maneja bien tus recursos Número y título Objetivos Al terminar el juego de aprendizaje, los participantes habrán: Mi dinero, mis derechos Identificado sus derechos y responsabilidades como titulares de una cuenta de ahorro Usar un préstamo sabiamente Hablado de sus responsabilidades cuando toman dinero prestado Diferenciado entre buenas y malas decisiones al tomar dinero prestado Cuándo pedir prestado y cuándo usar el ahorro Comparado las ventajas entre pedir prestado y usar el ahorro propio Cinco principios del aprendizaje para jóvenes Dinámico Cuando aprenden, los jóvenes quieren Participar con sus emociones y sentidos (tacto, vista, oído) a través de una variedad de actividades con el fin de concentrarse en el aprendizaje, y Aprender por medio del humor y juegos interactivos Respeto Cuando aprenden, los jóvenes quieren Que se respete su capacidad de resolver sus propios problemas, tomar sus propias decisiones o llegar a sus propias conclusiones dentro de un entorno de apoyo donde se sientan guiados, reconocidos y premiados, y Sentir que sus ideas y contribuciones serán valoradas, que no se les ridiculizará o menospreciará Contenido útil Cuando aprenden, los jóvenes quieren Aprender habilidades e información que puedan aplicar inmediatamente en su vida diaria Abordar los problemas que están experimentando en sus vidas, y Reconocer sus necesidades, esperanzas y problemas en los métodos y materiales que se están usando Participación Cuando aprenden, los jóvenes quieren Participar activamente en su aprendizaje y tener el control del mismo Desarrollar una identidad propia que puedan explorar y aclarar a través de las conversaciones y preguntas, Participar en conversaciones con otros jóvenes a través de grupos pequeños Participación de las familias Los familiares deben Tener la oportunidad de conectarse con el programa y comprender su contenido para apoyar a los jóvenes a cambiar sus comportamientos y alcanzar sus metas. Anexo B. Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 41 Ejemplos de los mensajes de texto de la educación financiera 1. ¿Cuánto gastas en refrescos y dulces? ¡Mucho! ¡Ahorra ese dinero y cómprate algo especial dentro de seis meses! 2. ¿Cuánto más te hace falta para estudiar en la universidad? ¡Ahorra 50 centavos al día y alcanza tu meta! 3. ¿Tienes sueños para tu futuro, como viajar? ¡Entonces ahorra un dólar HOY para hacer que tu sueño se vuelva realidad! 4. ¿No tienes dinero para ahorrar? Aparta 25 centavos cada día y al final de la semana tendrás $1,75. 5. Cuando uno ahorra, cada centavo cuenta. Puedes comprarte una computadora, un iPod o hasta un celular nuevo. ¡Ahorra ya! 6. ¿Has pensado en empezar un negocio algún día? ¡Puedes hacerlo! Alcanza tu meta ahorrando tu dinero de la merienda o tu salario cada día. 7. ¿Quieres ayudar a tus hermanos menores? ¡Enséñales la importancia de ahorrar, así sea 10 centavos! Ellos te lo agradecerán. 8. ¿Ya has abierto tu propia cuenta de ahorro? ¿Qué estás esperando? ¡Hazlo ahora! Eres inteligente. Mantén tu dinero a salvo de la tentación de gastarlo. 9. Haz un presupuesto mensual para manejar tus ingresos y tus gastos. Así sabrás cuánto puedes ahorrar. 10. ¡Empieza ya! Ahorra 25 centavos hoy y tendrás $5 cada mes. ¡En un año tendrás $60! Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 42 Anexo C. Descripción de los servicios financieros de Ecuador Institución San José Santa Ana San Miguel de los Bancos Cooprogreso Ubicación Provincias de Bolívar y Los Ríos Provincia de Manabí Provincia de Pichincha Provincias de Pichincha y Manabí Cuenta individual Cuenta individual Cuenta individual Cuenta individual “Ahorrando Ando” “Fabrica Sueños” “Ahorro Positivo” “Yo Soy” Producto de ahorro Depósito mínimo de US $2 para jóvenes de 13 a 17 de edad, y $11 para jóvenes entre 18 y 24, sin cargos de apertura Tasa de interés anual de 4% Sin cargos administrativos Sin restricciones sobre quién puede hacer los depósitos Características Tarjeta de débito para titulares mayores de 18 años Opción de abrir las cuentas sin ir a la sucursal Depósito mínimo de $2, sin cargos de apertura Depósito inicial de $6 (cargo de apertura de $2) Depósito mínimo de $5, sin cargos de apertura Tasa de interés anual de 4% Tasa anual de 3% Saldo mínimo de $1 Sin cargos administrativos Tasa de interés anual de 1,5% Sin cargos administrativos Sin restricciones sobre quién puede Sin restricciones hacer los depósitos sobre quién puede hacer los depósitos Tarjeta de débito para todos los Retiros participantes (los autorizados para menores de edad menores con deben contar con la autorización previa autorización de su del representante representante legal) legal Tarjeta de débito para titulares mayores de 18 años Es posible abrir las cuentas sin ir a la sucursal Aprobación inicial del representante para autorizar los depósitos y retiros efectuados por los menores de edad Al cumplir los 25 años, la cuenta se transfiere a una cuenta de ahorro normal Sin cargos administrativos Sin restricciones sobre quién puede hacer los depósitos Los menores pueden hacer retiros si están acompañados de su representante legal Tarjeta de débito para titulares mayores de 18 años Es necesario abrir las cuentas en una sucursal Es posible abrir las cuentas a distancia Tecnología implementada Teléfonos inteligentes – captación de ahorro a distancia Tableta – captación de ahorro a distancia Teléfonos inteligentes Mensajes de texto de la educación – captación de financiera ahorro a distancia Mensajes de texto de la educación financiera Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 43 Institución San José Santa Ana San Miguel de los Bancos Cooprogreso Meta inicial de jóvenes que recibirían servicios integrados 7.804 3.326 1.500 7.000 Jóvenes que recibieron educación financiera a dic. 2013 (real) 2.680 1.862 1.900 6.321 Jóvenes con CAJ a dic. 2013 3.124 483 884 1.210 Descripción de los servicios financieros de Malí Institución CAEB Le Tonus Nyèsigiso Ubicación Bougouni y Kolokani Koulikoro y Kati Región de Bamako Producto de ahorro GAJ GAJ Características del producto De 10 a 15 jóvenes por grupo De 10 a 15 jóvenes por grupo Reuniones semanales Reuniones semanales Ahorro y préstamo entre los miembros del grupo Ahorro y préstamo entre los miembros del grupo Ciclo del grupo de 9 a 12 meses Ciclo del grupo de 9 a 12 meses CAG para jóvenes Wassa Jeunes (Mara ni Wassa) De 5 a 15 jóvenes por grupo Depósito durante por lo menos 3 meses sobre el que se paga interés Depósito de apertura de CFA 9.000 que incluye: 5.000 de acción inicial 1.250 de cargo de mantenimiento 750 cargo de libreta 2.000 de saldo mínimo Cada grupo tiene que tener 3 representantes autorizados Meta original 12.600 jóvenes 4.800 jóvenes 2.200 jóvenes Cobertura real 18.119 jóvenes 5.951 jóvenes 2.262 jóvenes *Además, Kondo Jigima tenía una meta original de 2.400 jóvenes; al terminar la asociación en septiembre de 2012 la cobertura había llegado a 344. Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 44 Anexo D. Diseño de los servicios Temas de la investigación de mercado Preguntas clave de la investigación Presiones financieras ¿Qué presiones enfrentan los jóvenes? Estrategias financieras ¿Cómo responden los jóvenes a sus presiones y necesidades financieras? Papel de los jóvenes en la economía del hogar ¿Cuáles son las relaciones financieras que los jóvenes tienen con sus padres o tutores adultos? Acceso y conocimiento de los servicios financieros ¿Qué experiencia y conocimientos tienen los jóvenes respecto a los servicios financieros? Ecuador Presiones financieras Hallazgos del estudio de mercado Diseño de los servicios integrados Los jóvenes quieren ahorrar para alcanzar sus metas, como continuar con su educación. La educación financiera ayuda a los jóvenes a elaborar un plan para alcanzar sus metas de ahorro. Los jóvenes pueden ahorrar hasta $1 por semana. Las cuentas de ahorro se promocionan como una forma de ayudar a los jóvenes a alcanzar sus metas. El monto mínimo de apertura se reduce para facilitar el acceso ($2 para la mayoría de las asociadas) Estrategias financieras Cuando necesitan dinero, los jóvenes piden prestado a sus padres, amigos o a prestamistas La educación financiera orienta a los jóvenes en el proceso de establecer prioridades entre necesidades y deseos Los jóvenes gastan dinero en necesidades no esenciales La educación financiera ayuda a los jóvenes a definir cuándo pedir prestado y cuándo ahorrar Los jóvenes desean tener mejores capacidades para generar ingresos Los jóvenes ahorran de forma irregular Papel de los jóvenes en la economía del hogar Los jóvenes dependen económicamente de sus padres Los jóvenes trabajan a menudo para sus padres para ganar dinero La educación financiera orienta a los jóvenes en el proceso de manejar sus cuentas de ahorro y hacer depósitos y retiros Los jóvenes quieren ser independientes y controlar su dinero y sus ahorros Una sesión de educación financiera diseñada para que los padres puedan apoyar a sus hijos a alcanzar sus metas Los jóvenes consideran que las cuentas de ahorro no valen la pena porque piensan que se les cobrará cargos de mantenimiento Las cuentas de ahorro no cobran cuota de mantenimiento y en la educación se informa a los jóvenes de esta característica Acceso y conocimiento de los servicios Los jóvenes no confían en las instituciones financieros financieras La educación financiera y las campañas promocionales eliminan mitos sobre los servicios y las instituciones financieras Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 45 Malí Presiones financieras Hallazgos del estudio de mercado Diseño de los servicios integrados Con los Grupos de Ahorro, los jóvenes El gasto más importante es el ajuar o dote pueden acumular sumas más grandes para de la novia y aunque los padres son los atender las presiones financieras. principales responsables, las jóvenes sienten mucha presión para aportar económicamente. La educación financiera ayuda a los jóvenes a elaborar un plan para alcanzar sus metas de Los jóvenes tienen oportunidades limitadas ahorro. para conducir actividades económicas y éstas a menudo están relacionadas con el ciclo La educación también ayuda a los jóvenes a agrícola. planificar para épocas financieramente difíciles. Los jóvenes que viven en entornos urbanos tienen una capacidad de generación de ingresos ligeramente mayor. Los jóvenes ahorran y toman préstamos informalmente, a menudo de sus padres. Estrategias financieras Los GAJ ofrecen un mecanismo estructurado para ahorrar y tomar préstamos. Tomar prestado es una estrategia más común que el ahorro. Los jóvenes emigran para buscar trabajo o casarse (en el caso de las jóvenes mujeres). Papel de los jóvenes en la economía del hogar Acceso y conocimientos de los servicios financieros Los jóvenes contribuyen al hogar mediante trabajos agrícolas o domésticos. Se espera que los jóvenes aporten recursos económicos a sus familias cuando tienen un ingreso. Los jóvenes están limitados a tomar préstamos y ahorrar a través de sus padres. Incluso se les excluye de los Grupos de Ahorro más formales debido a su edad (y por ser hombres). Los jóvenes saben de la existencia de los bancos pero no tienen acceso a servicios financieros formales. A través de la educación, se estimula a los jóvenes a hablar de sus metas financieras con sus familias. Los GAJ son el único mecanismo formalizado disponible tanto para mujeres como para hombres. Las CAG permiten que los jóvenes con ingresos limitados cumplan con los requisitos de un servicio financiero formal. Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 46 Anexo E. Proceso de beneficios de AIM Youth 1. Mejores conocimientos y actitudes respecto al manejo del dinero Servicios financieros ONG e IMF capaces de prestar servicios integrados a los jóvenes 2. Mayor capacidad para hacer frente a eventos del ciclo de vida Educación financiera no formal 1. en gran escala y 2. de manera sostenible Características del mecanismo de entrega Participación económica y ciudadana Mejor acceso y/o uso de los alimentos 3. Mayor capital social 4. Mayor autoconfianza y empoderamiento 5. Mayor capacidad socio-financiera Resultados en el mediano plazo Entradas del program Mayor seguridad alimentaria familiar y mejor salud y nutrición de la familia Impactos de largo plazo Teoría del cambio de AIM Youth y descripción de las actividades de investigación Metodología de la investigación Principales preguntas abordadas Evaluación dirigida por el grupo (Conversaciones en grupos Cómo influyeron los servicios en los resultados del focales) modelo de beneficios Estudio de impacto cuantitativo (Encuestas de línea de base Cómo influyeron los servicios en los resultados del y línea final) modelo de beneficios Mayor ahorro Diarios financieros (Serie de encuestas) Cómo influyeron los servicios en los resultados del modelo de beneficios Mayor ahorro Evaluación cualitativa de la satisfacción de los jóvenes (Conversaciones en grupos focales y entrevistas) Satisfacción de los jóvenes con los servicios Condiciones y dificultades para acceder a los servicios Historias de impacto (Entrevistas cualitativas) Satisfacción de los jóvenes con los servicios Condiciones y dificultades para acceder a los servicios Actividades de investigación y tamaños de la muestra de AIM Youth Ecuador Línea de base Evaluación intermedia T* C** Solo T Cooperativa San José 108 108 108 Cooperativa Cooprogreso 30 30 — Línea final T C Diarios financieros Historias de impacto Entrevistas cualitativas N° total de entrevistas*** T C T C 108 108 110 110 **** 20 19 20 819 26 60 60 ***** 8 10 17 269 28 Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 47 Línea de base Objetivos principales Evaluación intermedia Línea final Comprender los cambios en los que influyó el programa Historias de impacto Entrevistas cualitativas Comprender las transacciones financieras de corto plazo Comprender integralmente a los jóvenes Ayudar a explicar los resultados cuantitativos Preguntas 1, 4, 5 Preguntas 1, 3, 4, 5 Preguntas 3, 4 Diarios financieros Preguntas 1 a 5 Preguntas clave de la investigación relativas a los métodos usados Total en Ecuador N° total de entrevistas*** 1,088 * Tratamiento ** Control ***En esta cifra se cuentan varias veces los jóvenes que participaron en varias actividades de evaluación, tales como el estudio de línea de base y los diarios financieros. ****Se entrevistó cinco o seis veces a 40 jóvenes durante un período de tres meses. *****Se entrevistó seis veces a 20 jóvenes durante un período de tres meses. Calendario estacional y de investigación en Ecuador Jul– Sept 2011 Principales eventos, actividades y feriados en Ecuador Los jóvenes de San José inician el año académico en septiembre. Los jóvenes de Cooprogreso tienen vacaciones entre julio y agosto y parte de septiembre Oct–Dic 2011 EneMar 2012 AbrJun 2012 Jul–Sept 2012 Los Los jóvenes de jóvenes de San José Cooproinician el greso no año acaasisten a démico en Vacaciones la escuela septiemAlgunas de navidad en enero. bre. Los escuelas Algunas y receso jóvenes de de San escuepara todos José tienen Cooprolas de los estugreso vacaciones San José diantes en tienen en abril ubicadas diciembre vacaciones en la costa entre julio están cery agosto y radas de parte de febrero a septiemmarzo. bre Oct–Dic 2012 EneMar 2013 AbrJun 2013 Los jóvenes de Cooprogreso no asisten a Vacaciones la escuela Algunas de navidad en enero. escuelas Algunas y receso de San escuepara todos José tienen las de los estuvacaciones San José diantes en en abril ubicadas diciembre en la costa están cerradas de febrero a marzo. Línea de base* Cooprogreso (tratamiento y control) San José (tratamiento) Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 48 Jul– Sept 2011 Oct–Dic 2011 Ene- Abr- Mar Jun 2012 2012 Jul–Sept 2012 Oct–Dic 2012 EneMar 2013 AbrJun 2013 San José (Control) Intermedia San José (solamente tratamiento) Estudios cualitativos Todas las asociadas Diarios financieros Todas las asociadas Línea final Todas las asociadas Historias de impacto * Se entrevistó al grupo de tratamiento de San José entre agosto y octubre de 2011. Debido a un ajuste del trabajo en conjunto, las entrevistas del grupo de control se realizaron entre los meses de noviembre de 2011 y febrero de 2012. Los grupos de tratamiento y control de Cooprogreso se entrevistaron entre abril y mayo de 2012. Cooprogreso inició su proyecto de AIM Youth casi un año después de la Cooperativa San José. Actividades de investigación y tamaños de la muestra de AIM Youth Malí 2011 Programa evaluado CAEB Tipo de encuestados 2012 2013 Evaluación dirigida por el grupo Estudio de impacto cuantitativo: Línea de base Estudio de impacto cuantitativo: Línea final Diarios financieros Evaluación cualitativa de la satisfacción de los jóvenes Historias de impacto GAJ GAJ GAJ GAJ y CAG GAJ y CAG GAJ y CAG 300 240 (150 grupo de tratamiento y 150 grupo de control) (130 grupo de tratamiento y 110 grupo de control) (cada uno se entrevistó 15 veces) 119 4 Jóvenes nuevos Participantes en el estudio cuantitativo de impacto 97 Jóvenes nuevos Jóvenes nuevos Igual que la línea de base Participantes en el estudio cuantitativo de impacto No de jóvenes entrevistados* 516 Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 49 2011 — Nyèsigiso 2012 — — Tipo de encuestados — Le Tonus — — 2013 36 (cada uno se entrevistó 7 veces) 113 4 189 Jóvenes nuevos Jóvenes nuevos Participantes en el estudio cuantitativo de impacto — 118 — 118 Jóvenes nuevos Tipo de encuestados Calendario estacional y de investigación en Malí Abr– Jun 2011 Principales eventos, actividades y feriados en Malí Condiciones meteorológicas y estaciones agrícolas Temporada escolar Temporada de calor Jul–Sept 2011 Oct– Dic 2011 EneMar 2012 Temporada TemVacaciones escolar, porada escolares, golpe de Ramadán* escolar; Jul 30-Ago Tabaski** estado Mar 21 Nov 9 28 Temporada de lluvia/ Temporada de hambre (soudure) Cosecha Temporada fría Abr– Jun 2012 Temporada escolar Temporada de calor Jul–Sept 2012 Oct– Dic 2012 Vacaciones Temporaescolares, da escolar, Ramadán Tabaski Jul 20-Ago Oct 26 19 Temporada de lluvia/ Temporada de hambre (soudure) Cosecha EneMar 2013 Abr– Jun 2013 Temporada escolar Temporada escolar Temporada fría Temporada de calor Evaluación dirigida por el grupo Estudio de impacto cuantitativo Diarios financieros de CAEB Diarios financieros de Nyèsigiso Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 50 Abr– Jun 2011 Jul–Sept 2011 Oct– Dic 2011 EneMar 2012 Abr– Jun 2012 Jul–Sept 2012 Oct– Dic 2012 EneMar 2013 Abr– Jun 2013 Evaluación cualitativa Historias de impacto * Ramadán es el noveno mes del calendario islámico durante el cual los musulmanes se abstienen de ingerir alimentos y bebidas, y de realizar ciertas actividades desde la salida hasta la puesta del sol cada día. El festivo conocido como Eid al-Fitr marca el fin de este mes. Los jóvenes son menos activos económicamente durante este período.Ver http:// en.wikipedia.org/wiki/Ramadan. ** Fête de Tabaski, también llamada Eid Al-Adha, es el festivo musulmán más importante del año y se celebra dos meses y diez días después del Ramadán. Durante el Tabaski, los musulmanes sacrifican un animal doméstico, por lo general un chivo (u otros animales) y se dan regalos a los jóvenes. \ Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 51 Notas al pie de página 1. UNCDF YouthStart Program,YouthSave Consortium, MEDA, Women’s World Banking, Plan International y Child and Youth Finance International. 2. Freedom from Hunger define las “microfinanzas con valor agregado” como todo programas microfinancieros que combina servicios financieros con otros servicios de desarrollo importantes, tales como educación y protección de la salud. 3. Child and Youth Finance International define la capacidad socio-financiera como “la habilidad para tomar decisiones financieras informadas que beneficien al individuo y a la comunidad”. A Guide to Economic Citizenship Education: Quality Financial, Social, and Livelihoods Education for Children and Youth. Guidebook. 2012. 4. En este informe “servicios financieros formales” son aquellos ofrecidos por instituciones que se encuentran reguladas por las entidades gubernamentales como proveedoras de servicios financieros. 5. Banco Mundial. Children and Youth: A Framework for Action. Diapositivas. 2005. | Ortiz, I. y M Cummins. “When the Global Crisis and Youth Bulge Collide: Double the Jobs Trouble for Youth.” Social and Economic Policy. UNICEF. Febrero de 2012. 6. Como lo demuestra principalmente la política de jóvenes y desarrollo de USAID http://transition.usaid. gov/our_work/policy_planning_and_learning/documents/Youth_in_Development_Policy.pdf (Fecha de acceso: 9 de abril de 2014). 7. McKay, A. Assets and Chronic Poverty: Background paper. Working Paper #100. Chronic Poverty Research Center. Octubre de 2009 | Sherraden, M. Assets and the Poor: A New American Welfare Policy. Nueva York: ME Sharpe. 1991. 8. Ramirez, R. y L. Fleischer Proaño. Ahorrando juntos: Programas grupales para promover el ahorro entre jóvenes. Freedom from Hunger. Diciembre de 2013. 9. Johnson, E y M Sherraden. From Financial Literacy to Financial Capability Among Youth. Working Paper 06–11. Center for Social Development. St. Louis, MO: Washington University. 2006. | “Youth Savings in Developing Countries: Trends in Practice, Gaps in Knowledge.” YouthSave Consortium. Mayo de 2010. 10. Global Financial Development Report 2013: Financial Inclusion. Washington, D.C. Banco Mundial. 2014. 11. What is a credit union? http://www.woccu.org/about/creditunion (Fecha de acceso: 20 de enero de 2014). 12. SEEP Youth and Financial Services Working Group Resources. http://www.seepnetwork.org/youth-andfinancial-services-working-group-resources-pages-349.php (Fecha de acceso: 9 de abril de 2014) 13. Women’s World Banking. “Banking on Youth.” 2012. http://www.womensworldbanking.org/publications/ publications_banking-youth-guide-developing-innovative-youth-savings-programs/ (Fecha de acceso: 9 de abril de 2014). 14. MEDA. “MEDA Youth Economic Opportunities.” https://www.meda.org/youth-economic-opportunitiesyeo/publications-yeo (Fecha de acceso: 9 de abril de 2014). 15. UNCDF “YouthStart Programme.” http://www.uncdf.org/en/publications/youthstart (Fecha de acceso: 9 de abril de 2014) Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 52 16. Dunford, C. Building Better Lives. Davis CA: Freedom from Hunger. 2001. 17. Vor der Bruegge, E, JE Dickey y C Dunford. Cost of Education in the Freedom from Hunger version of Credit with Education Implementation. Research Paper No. 6. Davis CA: Freedom from Hunger. 1997. 18. Los programas de Freedom from Hunger se concentran en las personas pobres que sufren de hambre crónica. 19. Las cooperativas individuales suelen tener un fuerte enfoque comunitario y una marcada orientación social. Las cooperativas individuales pueden definirse como cooperativas financieras organizadas bajo un esquema de membresía y dirigidas por una mesa directiva elegida por los socios. Las federaciones de cooperativas agrupan a cooperativas individuales que unen sus fuerzas a través de una entidad paraguas con normas y estatutos propios con el objetivo de poner a su disposición y alcance una gama de servicios de apoyo técnico de bajo costo. Las cooperativas mantienen su independencia y participan en una asamblea general de la federación a la que asisten representantes de cada socia. 20. UNESCO. http://www.unesco.org/new/en/social-and-human-sciences/themes/youth/youth-definition/ (Fecha de acceso: el 9 de enero de 2014). 21. Banco Mundial. “Youth in Numbers: Sub-Saharan Africa.” http://web.worldbank.org/WBSITE/EXTERNAL/ TOPICS/EXTCY/0,,contentMDK:20333437~pagePK:148956~piPK:216618~theSitePK:396445,00.html (Fecha de acceso: 23 de julio de 2009). 22. Gray, B y S Chanani. Advancing Women’s and Adolescent Girls’ Access to Resources and Influence in Rural India. Research Paper No. 11. Davis, CA: Freedom from Hunger. Julio de 2010. 23. Hall, J. Tap y Reposition Youth (TRY) Program. Providing Social Support, Savings, and Microcredit Opportunities to Adolescent Girls at Risk for HIV/AIDS In Kenya. Population Council. 2006. 24. Global Financial Education Program. http://www.globalfinancialeducation.org/ (Fecha de acceso: 19 de marzo 2014). 25. IFC. IFC Mobile Money Scoping Country Report: Ecuador. 8 de septiembre de 2011 http://www.ifc. org/wps/wcm/connect/26b58d804a052a1e8accffdd29332b51/MobileMoneyScopingReport-EcuadorPresentation.pdf?MOD=AJPERES (Fecha de acceso: 5 de marzo de 2014). | “Aumento de Conexiones de Internet Fijo y Móvil, mejoran el acceso de Internet en Ecuador” http://www.telecomunicaciones.gob.ec/ aumento-de-conexiones-de-internet-fijo-y-movil-mejoran-el-acceso-de-internet-en-ecuador/ (Fecha de acceso: 5 de marzo de 2014). 26. Women’s World Banking. Banking on Youth. http://www.womensworldbanking.org/wp-content/uploads/ imported/pdf/english/wwb_banking_on_youth_-_a_guide_to_developing_innovative_youth_savings_ programs_nov_2012.pdf (Fecha de acceso: 9 de abril de 2014). 27. El programa YouthStart de UNCDF promueve que “las sesiones de educación financiera lleguen también a los jóvenes sin convertirlas en una ‘oportunidad de mercadeo’ para la institución”. Client Protection for Youth Clients. Nota técnica de YouthStart, UNCDF. Abril de 2013. 28. Client Protection for Youth Clients. Nota técnica de YouthStart de UNCDF. Abril de 2013. http://www.uncdf.org/sites/ default/files/Documents/YouthStart_Client%20Protection_0.pdf | Child and youth friendly banking certificate guidebook. Child and Youth Finance International. http://childfinanceinternational.org/library/cyfi-publications/ Child-and-Youth-Friendly-Banking-Product-Certificate-CYFI.pdf (Fecha de acceso: 9 de abril de, 2014). Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 53 29. Para mayores detalles sobre este tema, ver Ramírez, R and V Torres. “De una generación a otra: El papel de los padres en la inclusión financiera de los jóvenes.” Freedom from Hunger. Junio de 2014. 30. Ramirez, R and L Fleischer Proaño. Ahorrando juntos. Davis CA: Freedom from Hunger. Diciembre de 2013. 31. Gash, M. AIM Youth in Mali—Comprehensive Research Report. Davis CA: Freedom from Hunger. Enero de 2014. 32. La federación de cooperativas Kondo Jigima también ofrecía CAG, pero su experiencia no se refleja en este informe. 33. Esta diferencia es en gran medida el resultado de la estructura de la asociación establecida entre Nyèsigiso y Freedom from Hunger. Explicamos las implicaciones de estas diferencias de base en nuestra próxima publicación: “Dónde está el dinero: Costos e ingresos de los servicios de ahorro y educación financiera.” 34. Gash, M. “Impact of Integrated Financial Services for Young People in Mali: A Comprehensive Research Report for the Freedom from Hunger AIM Youth Project.” Freedom from Hunger: Davis, CA. A publicarse en 2014. 35. Gray, B. “Microfinanzas integradas para jóvenes en Ecuador: Reporte completo de investigación. Freedom from Hunger: Davis, CA. 2014. 36. En los informes completos de investigación de cada país se detallan los métodos e impactos del programa: Gray, B. AIM Youth en Ecuador—Reporte completo de investigación. Davis CA: Freedom from Hunger. Enero 2014. | Gash, M. AIM Youth in Mali—Comprehensive Research Report. Davis CA: Freedom from Hunger. Enero de 2014. 37. El sistema de información gerencial de los grupos de ahorro para jóvenes fue desarrollado por VSL Associates. 38. Zimmerman, J, L Nowak, E Carls et al. “Beyond the Buzz: The Allure and Challenge of Using Mobile Phones to Increase Youth Financial Inclusion.” New America Foundation. Septiembre de 2013. 39. En este cálculo, el número total de jóvenes ecuatorianos corresponde el número de jóvenes que recibieron la educación financiera. 40. Diallo,V y R Ramirez. “Key Qualitative Findings of AIM Youth Services in Mali.” Freedom from Hunger. Octubre de 2013. Sin publicar. 41. Gash, M. AIM Youth in Mali—Comprehensive Research Report. Davis CA: Freedom from Hunger. Enero de 2014. 42. Todos los datos de esta sección fueron tomados de Gray, B. AIM Youth in Ecuador—Comprehensive Research Report. Davis CA: Freedom from Hunger. Enero de 2014. 43. Gray, B. AIM Youth en Ecuador—Reporte completo de investigación. Davis CA: Freedom from Hunger. Enero de 2014. 44. Ramirez, R y V Torres. “De una generación a otra: El papel de los padres en la inclusión financiera de los jóvenes”. Freedom from Hunger. Junio de 2014. 45. Exploramos estas preguntas con más detenimiento en: “De una generación a otra: El papel de los padres Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 54 en la inclusión financiera de los jóvenes”. Freedom from Hunger. Junio de 2014. 46. Todos los datos de esta sección fueron tomados de Gash, M. AIM Youth in Mali—Comprehensive Research Report. Davis CA: Freedom from Hunger. Enero de 2014. 47. Exploramos el potencial de los grupos para cultivar el hábito del ahorro en Ahorrando juntos: Programas grupales para promover el ahorro entre jóvenes. Ramirez, R y L Fleischer Proaño. Davis CA: Freedom from Hunger. Diciembre de 2013. 48. Ramirez, R y V Torres. “De una generación a otra: El papel de los padres en la inclusión financiera de los jóvenes”. Freedom from Hunger. Junio de 2014. 49. Loupeda, C. “está el dinero: Costos e ingresos de los servicios de ahorro y educación financiera.” Freedom from Hunger. Por publicar. | Muñoz, L, M Perdomo y D Hopkins. Building the Business Case for Youth Services: Insights of the YouthStart Programme. Septiembre de 2013. 50. Loupeda, C. “Dónde está el dinero: Costos e ingresos de los servicios de ahorro y educación financiera.” Freedom from Hunger. Por publicar. 51. Gray, B. AIM Youth en Ecuador—Reporte completo de investigación. Davis CA: Freedom from Hunger. Enero de 2014. 52. Loupeda, C. “Dónde está el dinero: Costos e ingresos de los servicios de ahorro y educación financiera.” Freedom from Hunger. Por publicar. 53. Ibídem. 54. Cojocaru, L y J Matuszeski. The evolution of savings groups: An analysis of data from Oxfam America’s “Savings for Change” program in Mali. Oxfam America. 2011. 55. Post-Project Replication of Savings Groups in Uganda. Datu Research, LLC. http://www.daturesearch.com/wpcontent/uploads/DatuResearchUgandaReport.WEB_lr.pdf. Noviembre de 2013. (Fecha de acceso: 9 de abril de 2014). 56. Dunford, C. Building Better Lives. Davis CA: Freedom from Hunger. 2001. 57. Es interesante señalar que un programa similar que sometió a prueba el ofrecimiento de servicios de ahorro y educación financiera para niñas adolescentes en varios países tuvo resultados similares. En dicho proyecto, el modelo de los Grupos de Ahorro atrajo a miles de participantes mientras que las cuentas de ahorro formal que ofrecieron los bancos tuvieron una respuesta más lenta y crecieron en una escala significativamente menor. Este proyecto tuvo el apoyo de Nike Foundation en cinco países: Kenia, Uganda, Burundí, Mongolia y República Dominicana. Microfinance Opportunities apoyó el componente de educación financiera en todos los países. Los prestadores de los servicios financieros fueron CARE, Women’s World Banking, K-REP, Faulu, Adopem y XacBank.Ver Girls and Their Money: Strategies for Promoting Savings, Financial Education and Social Support for Adolescent Girls in Low-Income Countries por Jennefer Sebstad, Nov. 2011, con un resumen de estos programas en www.microfinanceopportunites.org Modelos para integrar los servicios financieros con la educación financiera para jóvenes 55