Muy buenas tardes, con el permiso que se merecen, respetable auditorio mi nombre es Briseida Carmona Ruiz soy alumna del Instituto la Loma del Carmen de la Ciudad de Cuajinicuilapa, Guerrero de la región Costa Chica, vengo de una comunidad en la que la descendencia africana dejo su huella en la sangre de muchos hombres y mujeres en su color de piel y en sus costumbres, pero al final de cuentas guerrerenses y mexicanos como cualquiera de ustedes. Hoy les hablare de una de las mayores formas de injusticia que se ha dado y se sigue dando en la actualidad: la esclavitud. Gran cantidad de personas son explotadas y abusadas física y mentalmente. Hace doscientos años en nuestro país el color de piel, la raza o la pobreza, eran símbolos de esclavismo y así duramos mucho tiempo, a doscientos años que el generalísimo Morelos aquí en esta hermosa ciudad de Chilpancingo cuna de los Sentimientos de la Nación, fue quien anidó en su pensamiento y en su corazón después de haber visto de propia cuenta la situación de muchos de nuestros paisanos guerrerenses y mexicanos la situación de esclavitud en la que vivían, tanto los indígenas así como los negros traídos a la nueva España lo que ahora es nuestra nación México, que llegaron en barcos con cadenas en el cuello, en condiciones infrahumanas para trabajar en las haciendas azucareras, en las minas y en las casas de los ricos españoles como sirvientes, “que condiciones más duras para un ser humano no poder expresar sus pensamientos como nosotros cuando asistimos a la escuela y participamos sobre lo que nos preocupa”, esos hombres y mujeres que no tenían libertad para trasladarse de un lugar a otro, de no tener un pedazo de tierra para trabajar y de no poder tener acceso a la educación, además de trabajar sin parar horas y horas, sin derechos como cualquier ser humano, esa mirada del generalísimo Morelos fue lo que logró que quedara plasmado en el acta de los “Sentimientos de la Nación” cuando dice “que la esclavitud se proscriba para siempre, y lo mismo la distinción de castas, quedando todos iguales, y solo distinguirá a un americano de otro el vicio y la virtud”, la abolición de la esclavitud, la eliminación de estar en condición de esclavos y que todos sin importar el color de piel, la condición económica todos y todas mujeres y hombres niños y niñas seamos iguales ante las leyes con los mismos derechos y obligaciones, que nos deben proteger a todos por igual, que hermosa condición se estableció hace doscientos años la libertad del ser humano, que impacto más grande para ejemplo a todas las naciones de América y para el mundo el respeto de la condición de ser humano, y el respeto de la garantía de la libertad, eliminar la esclavitud y que todos somos mexicanos sin distinguir razas o por condiciones económicas. A doscientos años de la proclamación del los Sentimientos de la Nación en esta laureada ciudad de Chilpancingo, sede de lo que después y ahora es la base del constitucionalismo mexicano y ejemplo de otras naciones en el mundo. Quiero proponerles señoras y señores diputados que como mexicanos y como mexicanas, como niños y niñas todos juntos día con día refrendemos el compromiso del generalísimo Morelos, de seguir en donde nos encontremos, de vivir la libertad heredada en los Sentimientos de la Nación no esclavizando a niños en la calle, a mujeres vendiendo su cuerpo, a hombres indígenas, negros y campesinos en trabajos esclavizados, mal pagados y sin hacer antigüedad; rescatemos la esencia misma de nuestra patria, la libertad y una vez más a doscientos años que la abolición de la esclavitud sirva para que nunca más en México y en el mundo entero se prohíban las libertades de expresión, opinión de nosotros como mexicanos por que como niños queremos un México mas libre, un México sin violencia, un México en que la educación que se nos imparta sea de calidad, porque solo la educación nos hará libres, un México en el que podamos vivir con libertad en la justicia y la democracia ya que nadie somos superiores ni somos inferiores. En conclusión: un hombre nace con libertad, pero esa libertad se destruye cuando el mismo hombre se la impide y se encadena, señoras y señores, no hay camino hacia la libertad, la libertad es el camino. GRACIAS.