AMPARO EN REVISION 3/93. Número de registro: 1220 Octava Época Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito Fuente: Semanario Judicial de la Federación Tomo: Tomo XI, Abril de 1993 Página: 127 AMPARO EN REVISION 3/93. INSTITUTO DEL FONDO NACIONAL DE LA VIVIENDA PARA LOS TRABAJADORES. CONSIDERANDO: TERCERO.- Los agravios transcritos son parcialmente fundados. Entre otras cosas en ellos alega el recurrente, esto es, el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores, que el Juez de Distrito aplica indebidamente los artículos 77, fracción III, y 78 de la Ley de Amparo, en atención a que el inconforme reclamó, del Director de Desarrollo Urbano, Obras y Servicios Municipales, dependiente del Ayuntamiento Municipal de Apizaco, Tlaxcala, la orden decretada para suspender las obras de construcción que se están llevando a cabo en el inmueble propiedad de dicho instituto, aduciendo que tal orden es violatoria de los artículos 14 y 16 constitucionales pues la responsable determina que "se hace del conocimiento que no se cuenta con las autorizaciones correspondientes de esta dirección", pero tal determinación no se apoya en reglamento o disposición legal alguna aplicable al caso concreto, ni especifica la responsable a qué autorización se refiere, violando con ello el artículo 16 constitucional, el cual establece que la autoridad debe fundar y motivar su resolución; situación que no fue analizada por el Juez de Distrito, quien se limitó a decir que el quejoso no demostró tener autorización para continuar con la construcción. Estos motivos de inconformidad son sustancialmente fundados, porque el instituto quejoso efectivamente reclamó, del citado director, el acuerdo contenido en el oficio número doscientos trece, de veintitrés de septiembre de mil novecientos noventa y dos, por el que se decreta la orden de suspensión de obras de construcción que se realizan en terrenos propiedad del quejoso; así como la ejecución material de dicha orden llevada a cabo por el inspector adscrito a dicha dirección, quien realizó la clausura y colocación de sellos. Al precisar los actos reclamados; el peticionario manifestó que el Director de Desarrollo Urbano, Obras y Servicios Municipales, dependiente del Ayuntamiento Municipal de Apizaco, Tlaxcala, "decreta la multicitada suspensión de obras sin causa ni fundamento legal alguno", y al relatar los antecedentes de los actos reclamados, el amparista concluyó diciendo: "Por lo expuesto y con documentos correspondientes, que se anexan al presente, queda plenamente justificada la violación a las disposiciones constitucionales invocadas, y -1- AMPARO EN REVISION 3/93. justificada la ilegalidad de la orden decretada por la responsable, a más de no fundar su actuación conforme a derecho". Por su parte, como se advierte de la transcripción del tercer considerando de la resolución recurrida, el Juez de Distrito tan sólo consideró que la orden reclamada, contenida en el oficio número doscientos trece de veintitrés de septiembre de mil novecientos noventa y dos, que obra a foja treinta y cuatro, que se comunicó al Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores, fue con motivo de no contar con los permisos correspondientes, sin que sea obstáculo que el quejoso haya ofrecido como prueba copia fotostática certificada del recibo número setenta mil cincuenta y ocho, porque con éste únicamente justifica el pago por los conceptos que en él se especifican, pero de ninguna manera contar con las autorizaciones para continuar con la construcción, de modo que la suspensión impugnada no viola garantías individuales. Es decir, el Juez Federal, tal como lo señala el recurrente, no estudió el motivo de inconformidad que se hizo consistir en que el acto reclamado no está fundado, siendo de advertir que si bien es cierto que el quejoso no alegó tal circunstancia en el rubro especial de conceptos de violación, también es cierto que debe tenerse en cuenta que la demanda de garantías debe analizarse en su integridad, de manera que los argumentos tendientes a demostrar la violación de garantías alegada no deben desatenderse aun cuando se esgriman al precisar el propio acto reclamado o en los antecedentes del asunto, como sucedió en el caso, de ahí que el agravio que se analiza es fundado. Por otra parte, el contenido del oficio número doscientos trece, de veintitrés de septiembre de mil novecientos noventa y dos, que obra en la foja treinta y cuatro de los autos del juicio de amparo a que este toca se refiere, dice textualmente: "Por este conducto hago de su conocimiento, que la construcción que están llevando a cabo, en el fraccionamiento 'Jardines de Apizaco' de esta ciudad de Apizaco; no cuenta con las autorizaciones correspondientes de esta Dirección.- Sin embargo las constructoras que están a cargo de la edificación tienen un avance bastante considerable.- A solicitud del C. Alvaro Moreno, se trasladó personal técnico de esta Dirección a verificar la posible invasión de su propiedad, comprobándose que en realidad se está edificando en dicho predio.- Por lo tanto deberán suspender la construcción, hasta contar con los permisos correspondientes; y aclaración de la propiedad del predio en cuestión, siendo la orden de suspensión a partir de esta fecha.- Le ruego de la manera más atenta presentarse en estas oficinas a la mayor brevedad posible para aclarar lo antes citado.Sin más por el momento, reciba un cordial saludo". De la anterior transcripción se desprende que la orden de suspensión de la obra está totalmente infundada, dado que no menciona precepto legal alguno en el que pudiera apoyar su determinación la autoridad señalada como responsable, violando manifiestamente el artículo 16 constitucional, que en lo conducente señala que la autoridad competente debe -2- AMPARO EN REVISION 3/93. fundar y motivar su resolución, siendo aplicable al caso el criterio sustentado por este Tribunal Colegiado, al resolver los juicios de amparo números 194/88, 367/90, 20/91 y 67/92, que dice: "FUNDAMENTACION Y MOTIVACION DE LOS ACTOS ADMINISTRATIVOS.- De acuerdo con el artículo 16 constitucional, todo acto de autoridad debe estar suficientemente fundado y motivado, entendiéndose por lo primero que ha de expresarse con precisión el precepto legal aplicable al caso y por lo segundo, que también deben señalarse con precisión, las circunstancias especiales, razones particulares o causas inmediatas que se hayan tenido en consideración para la emisión del acto, siendo necesario además, que exista adecuación entre los motivos aducidos y las normas aplicables, es decir, que en el caso concreto se configure la hipótesis normativa. Esto es, que cuando el precepto en comento previene que nadie puede ser molestado en su persona, propiedades o derechos sino en virtud de mandamiento escrito de autoridad competente que funde y motive la causa legal del procedimiento, está exigiendo a todas las autoridades que apeguen sus actos a la ley, expresando de qué ley se trata y los preceptos de ella que sirvan de apoyo al mandamiento relativo. En materia administrativa, específicamente, para poder considerar un acto autoritario como correctamente fundado, es necesario que en él se citen: a).- Los cuerpos legales y preceptos que se están aplicando al caso concreto, es decir, los supuestos normativos en que se encuadra la conducta del gobernado para que esté obligado al pago, que serán señalados con toda exactitud, precisándose los incisos, subincisos, fracciones y preceptos aplicables, y b).- Los cuerpos legales, y preceptos que otorgan competencia o facultades a las autoridades para emitir el acto en agravio del gobernado". En tal situación, es evidente que el quejoso demostró la violación de garantías alegada, razón por la cual procede revocar la sentencia que se revisa y conceder la protección solicitada. Por lo expuesto y con fundamento en los artículos 83 fracción IV, 85 fracción II, 86, 88, 89, 90, 91, de la Ley de Amparo, 43 y 44 Capítulo IV de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación, se resuelve: PRIMERO.- Se revoca la sentencia sujeta a revisión. SEGUNDO.- La Justicia de la Unión ampara y protege al INSTITUTO DEL FONDO NACIONAL DE LA VIVIENDA PARA LOS TRABAJADORES, contra los actos que reclamó del Director de Desarrollo Urbano, Obras y Servicios Públicos Municipales, dependiente del Ayuntamiento Municipal de Apizaco, Tlaxcala, e inspector ejecutor adscrito al anterior, los cuales quedaron precisados en el resultando primero de esta ejecutoria. Notifíquese, con testimonio de la presente resolución, devuélvase el expediente de amparo al Juez a quo; envíese copia simple autorizada de la misma para la autoridad responsable ordenadora y en su oportunidad archívese el toca. -3- AMPARO EN REVISION 3/93. Así por unanimidad de votos, lo resolvieron los señores Magistrados que integran el Segundo Tribunal Colegiado del Sexto Circuito, licenciados Tarcicio Obregón Lemus, Gustavo Calvillo Rangel, José Galván Rojas, siendo ponente el último de los nombrados, quienes firman con el secretario de Acuerdos que da fe. -4-