DOSSIER 1: INTRODUCCIÓN • ¿ Qué es la Historia? Se podría decir que la historia es el estudio de los acontecimientos del pasado relativos al hombre y a las sociedades humanas. Según el diccionario de la RAE, la historia es la narración y exposición de los acontecimientos pasados y dignos de memoria, sean públicos o privados. Y también se entiende como la disciplina que estudia y narra estos sucesos. • Rasgos básicos del mundo contemporáneo En el mundo contemporáneo nos encontramos una revolución en muchos campos sociales, y sin embargo revolución no significa evolución en algunos casos. Las reformas sociales pretendían llevar a una igualdad social, y a una mayor y mejor convivencia. No obstante, todavía predominan las clases, siendo la predominante la burguesa o clase alta o media− alta. En lo económico predomina el sistema capitalista, que lleva a la máxima individualidad y a la propiedad y fomenta en su expresión más radical las diferencias en el nivel de vida de los ricos con respecto a los pobres o menos favorecidos. En lo político se caracteriza por el triunfo en occidente del sistema liberal que luego evolucionará hasta la democracia, y más tarde, ya en el siglo XX, la aparición de los sistemas comunistas, caídos ya hoy. • Definición y distinción ende Modernidad y Edad Contemporánea Edad contemporánea es la que comienza con la Revolución Francesa y que se extiende hasta los hechos y situaciones históricas recientes. Y Modernidad, sin embargo, se refiere al proyecto de nacionalismo y secularización. En este sentido, la contemporaneidad es un concepto de la modernidad. DOSSIER II: ESPAÑA ANTE LA REVOLUCIÓN FRANCESA. • El impacto de la Revolución Francesa en la política y en la sociedad española Desde 1739 España y Francia habían sido aliadas contra Gran Bretaña, por la unión familiar entre los Borbones franceses y los españoles. La Revolución Francesa cambió esto. España se vio obligada a girarse hacia Francia. La política conjunta de ambos países en territorios coloniales había provocado la pérdida de múltiples territorios en las Américas de los británicos. Con ésta en un estado de revolución, la alianza franco−española peligraba seriamente, y lo que era peor para España, la nación podría verse contagiada de las ideas revolucionarias y rebelarse el pueblo en España también. La solución para acabar con el peligro que suponía la revolución no era atacar Francia, ya que se perdería, en caso de entrar en guerra, una alianza muy valiosa contra los ingleses. Para impedir esto y mantener la alianza, se buscaron salidas diplomáticas y políticas que además impidieran un posible contagio revolucionario. Floridablanca, político ya de la época de Carlos III, temía en gran medida la Revolución Francesa y su efecto en España, y Carlos IV a través de él lo va a evitar. Evitó la llegada de cualquier idea, persona o cosa que llegase de Francia, usando cordones sanitarios en los Pirineos como excusa, y con gran censura por parte del Santo Oficio español. A pesar de todo, múltiples publicaciones clandestinas llegan a España. Aranda sustituye a Floridablanca en el Gobierno por orden de Carlos IV. Aranda llevó una política mucho más abierta que la de su predecesor, entendiendo que si colaboraba con Francia evitaría que los revolucionarios se radicalizasen. Pero la Revolución Francesa llegó a cauces más sangrientos, y Aranda fue destituido y en su lugar llegó el joven Godoy. 1 • La guerra de Convención La guerra de convención 1793 fue la lucha entre las potencias europeas y Francia, incluida España. Los países del Antiguo Régimen buscaban con esta guerra que los antirrevolucionarios franceses se levantasen contra el sistema liberal revolucionario establecido, y se acabase así con él. En Francia se dio un sentimiento de unión contra el enemigo extranjero, y el ejército francés se defendió admirablemente de sus enemigos. Así, no se consiguió el efecto deseado, e incluso las tropas francesas entraron en España. Todo esto y que España necesitaba a Francia para luchar contra Inglaterra, llevó a Godoy a firmar la paz con Francia, ya que el valido español se dio cuenta de que el verdadero enemigo era aún Gran Bretaña, además de que el ánimo revolucionario volvió a moderarse. Con ello, España y Francia firmaron la paz (1795), se aliaron de nuevo en el tratado de San Ildefonso (1796), y declararon la guerra a Gran Bretaña (1797). • Napoleón Napoleón va a introducir una nueva política, el control de Europa. En estos momentos mantiene la alianza con España contra Gran Bretaña, pero las pretensiones del francés ya no son las mismas que había antes de la Revolución Francesa. Napoleón se olvida de las colonias en América y se concentra en formar un gran imperio continental en Europa. Para ello, necesita la flota Española, considerada la segunda mejor del mundo, para acabar con Inglaterra. Napoleón va a convencer a Godoy de que España puede ejercer un control ultramarino y Francia un poder militar en tierra que haga un gran imperio. El Emperador francés quiere en realidad la flota española para invadir Gran Bretaña. El problema es que la propia flota británica es muy superior a la española. A pesar de un plan para acabar con los barcos ingleses, Nelson no cae en la trampa de españoles y franceses, y éstos se enfrentan a la flota británica en Trafalgar (1805), donde toda la armada española es destruida. A partir de este momento España ya no tiene utilidad ninguna para Napoleón. España no es más que un estado satélite francés. El miedo a Francia lleva a España y a Godoy al servilismo. Nuestro país concede a las tropas francesas permiso para que tomen Portugal, aliado éste de Inglaterra, tras el tratado de Fontainebleau (1807). Este permiso llevó a que los franceses tomasen también España sin ninguna oposición, para que Napoleón la repartiese posteriormente entre sus generales. España se sumiría entonces en una de las crisis más importantes de su historia. Por la situación, sería incapaz de comunicarse con otras potencias del continente y tampoco podría reconstruir su ejército o su armada. DOSSIER III: ESPAÑA BAJO EL DOMINIO FRANCÉS • Proceso revolucionario y carácter del levantamiento antifrancés El levantamiento español y las medidas tomadas suponen realmente un proceso revolucionario. El pueblo se levanta a favor de Fernando, pero esto no quita la idea revolucionaria de detrás. Están creando juntas soberanas para atribuirse la soberanía. Para ello cobran impuestos, declaran la guerra a Francia y convocarán las Cortes, se saben actores de un proceso revolucionario. El principal punto de divergencia entre Miguel Artola y Federico Suárez es si el levantamiento español y las medidas tomadas suponen realmente un proceso revolucionario o no. Para Federico Suárez, en España se habían organizado juntas anteriormente, y según Artola posteriormente, lo que por tanto hacía perder el carácter novedoso de estas juntas. Además, las juntas no tomarán más decisiones que las que se limiten al proceso bélico contra Francia. • Fases de la guerra Por eso de que España estaba aislada del resto de las potencias europeas, la guerra fue algo distinta para España a lo que fue en el resto de Europa. Dividamos las guerras napoleónicas en tres fases: − De Mayo de 1808 a Julio de 1808: Las tropas napoleónicas más importantes hacían la guerra en otros territorios más prioritarios y más destacados que España. Por esto, Francia envió a nuestro territorio a jóvenes inexpertos y veteranos que no daban demasiado de sí. El ejército español, en rápidas maniobras, venció al 2 todopoderoso ejército francés en Bailén, en Julio de 1808. Esta derrota a manos de los españoles suponía un gran desprestigio para los cuerpos franceses. − De Julio de 1808 a 1812: Napoleón, disgustado con el fracaso militar en España, envía la Grande Armée, lo mejor de sus ejércitos a España, e incluso él mismo va a dirigir la campaña. En ese momento aparece en España la guerra de guerrillas contra los franceses, principalmente porque se sabe inferior en campo abierto y porque existe una hostilidad general a los franceses. A la guerrilla se va uniendo poco a poco más gente y su papel consiste en meter miedo y tensión constantes a los franceses y convencerles de que la guerra no es rentable. La campaña en España no avanzó en absoluto. El Zar Alejandro I de Rusia observa los problemas de Napoleón en el lado occidental de Europa, y aprovecha la circunstancia para avanzar hacia el Oeste. Alarmado por esta situación, que puede significar que Inglaterra comercialice Napoleón llevará a todo su ejército hacia Rusia en 1812. − De 1812 a 1814−15: España, en los dos años que Napoleón estuvo en el Este, complicará aún más la vida a los franceses, y en 1814 acabará de expulsar a los cuerpos napoleónicos y el Emperador firmará la paz con España. En Rusia tampoco le irá mucho mejor a Napoleón. Los problemas en Occidente obligarán a retroceder al ejército francés en Rusia, pero a la vuelta el duro invierno ruso diezmará las tropas de Napoleón. Aunque logró levantar un nuevo ejército, Napoleón se enfrentó a una alianza global europea contra él en 1815, en la que no participa España, y será derrotado definitivamente. • Grupos políticos: Actitudes de afrancesados, liberales y realistas Los afrancesados son los hijos de la Ilustración, son monárquicos y buscan garantizar el orden y la estabilidad. Son enemigos de la revolución, y aceptan la necesidad de reformas. Además no ven con buenos ojos una guerra con Francia. Piensan que esta es muy superior a España y, aparte de la destrucción del territorio nacional, traería la pérdida de las colonias y una importante crisis. Los afrancesados aceptan que las reformas planteadas son necesarias, pero no están de acuerdo con la manera de llevarlas a cabo. Para ellos, las verdaderas y acertadas reformas serán las que traiga Napoleón. Los afrancesados no son realmente liberales. Ellos apoyan y afirman la soberanía del rey, en su momento José I. Los liberales llevan a cabo las reformas porque no les queda más remedio y son necesarias, y como el rey no está para hacerlas, ellos las harán por él. Apoyan una soberanía nacional compartida con el rey. Ellos se llevan a cabo las reformas tras una "encuesta" a la que se responde con problemas prácticos. Dichas reformas serán de un programa claramente liberal, que implica a la educación e incluye un plan de desamortización, entre otras cosas. Como el resto de los españoles, los liberales luchan por su rey preso en Francia, con la idea de que Fernando VII aceptará el liberalismo cuando vuelva a España. El enemigo es el francés, es el invasor. Por su parte en los realistas encontraremos lo que se dividirá durante el reinado de Fernando VII en tradicionalistas y fernandinos. Todavía no está este concepto claro, pero los primeros apoyan la soberanía del rey en conjunto con las viejas Cortes, que rafificaban al rey en su coronación. Éstos quieren acabar también con el francés y esperan la vuelta del rey para que convoque a estas Cortes y las reformas se hagan a la manera tradicional, entre rey y Cortes. Los fernandinos son los que apoyan una monarquía absoluta al estilo de los Luises franceses. El poder debe residir sólo y exclusivamente en el rey. Él es el soberano, y como por primera vez ocurrirá en España, Fernando VII se autoafirmará como rey por derecho divino. Esto es lo que defienden los absolutistas. Luchan por la vuelta del rey de su secuestro en Francia y esperan que anule las reformas liberales y que se lleven a cabo otras pertinentes más acorde con el sistema absolutista. Los tradicionalistas son señalados por algunos como origen del carlismo, y sin duda éstos serán los que más apoyen a Don Carlos en un futuro, pero la base ideológica no viene directamente de ellos, porque ni siquiera en 1830 se podía hablar de una ideología carlista. Contra los liberales y en defensa de la tradición, los tradicionalistas apoyarán al carlismo porque esperan que éste vuelva al antiguo sistema de rey y Cortes. 3 También se dice que la iglesia, por los ataques que sufre de los liberales, será la base ideológica del carlismo, y esto es cierto ya muy avanzado el siglo XIX, donde la Iglesia, como encargada de la educación, implantará en el bando carlista algunos ideales, como el de "defensor de la religión", que sería la bandera carlista hasta la época de Cánovas. • Las Corres de Cádiz Hay un claro espíritu reformista desde 1808. La preocupación principal está en torno a cuestiones prácticas y hay un cansancio respecto al despotismo ministerial. Teóricamente las Cortes de Cádiz ofrecían una separación de poderes tal y como se establece en el sistema liberal. Es una constitución impuesta al rey ante su ausencia y esto obliga a los diputados de Cádiz a asumir las responsabilidades del monarca ausente, y por tanto se confunden y se unen, ya que las Cortes dirigía ambos poderes. Esta situación contrasta claramente con la del llamado trienio liberal, en la que el rey Fernando VII estaba enfrentado con las Cortes y obstruía en lo posible la labor de dicha cámara. Cuando el rey vuelve la constitución no sirve, y además el rey en esta época se enfrentaba incluso a los propios liberales en una tendencia radical y una moderada, ésta última englobando a la mayoría de los liberales que estuvieron dentro del sistema liberal de Cádiz, El sistema de las Cortes de Cádiz defraudó al pueblo en dos sentidos: El primero fue que la representación de los votantes, de un censo bastante restringido, se deformó, ya que algunos de los diputados elegidos no pudieron acudir a Cádiz por eso de la guerra, y fueron sustituidos por ciudadanos gaditanos, con lo cual el pueblo no estaba realmente representado. Sin embargo, lo que los españoles consideraron una traición en la Constitución de 1812 es la propia Constitución, ya que se pensaba que todas las cosas venidas de Francia eran malas, incluso las propias ideas. En cuanto a los principios constitucionales del liberalismo español, la Constitución de Cádiz no explicaba claramente cual era el concepto de la nación española. De esto simplemente decía que España es la reunión de todos los españoles de ambos hemisferios, sin dejar por tanto clara la definición de España. Sin embargo, sí se denota en la Constitución una idea de igualdad e identidad española en todos los territorios. Se defiende la soberanía nacional frente a la real. Eso sí, votan sólo ciertas personas con cierto número de propiedades, además con voto indirecto, y se evita así la participación del pueblo. Se vincula a la Iglesia con el Estado, y sólo se puede ser católico. Se da así una confesionalidad brutal. El Estado busca con esto proteger a la Iglesia para luego utilizarla. Por supuesto, la Iglesia no se deja proteger. En cuanto a la separación de poderes, las Cortes no cumplen realmente con esto, ya que éstas cumplirán con la función legislativa, pero también con la ejecutiva ya que el rey, está ausente. Entre las reformas que quisieron llevar a cabo las Cortes, destacan la abolición de los restos del régimen feudal, la supresión de pruebas de nobleza para ingresar en las academias militares, la institución de la Orden de San Fernando, una serie de decretos en orden a la Hacienda y complementarias a la Constitución, y sobre todo la supresión de la Inquisición. Además, la desamortización (tanto civil como eclesiástica), el liberalismo económico, la igualdad y el intento de poner a la Iglesia bajo el control del Estado de una manera indirecta, forman claramente parte de un programa que llevaría a un sistema político liberal. Con todas estas medidas se trata de establecer la igualdad entre los ciudadanos y garantizar la libertad (hablando siempre en un plano ideal), y con la Iglesia a la merced del Estado para llevar a éste a un mayor control de los feligreses que tanto caso hacían a la Iglesia. Godoy tomó medidas más fuertes que los ilustrados de Carlos III: Junto con otras potencias continentales, se dio una unión entre todas para declararle la guerra a Francia y con ello acabar con la Revolución, no por las armas, sino por los propios franceses. DOSSIER IV: EL REINADO DE FERNANDO VII 4 • La Restauración La restauración fue un movimiento que se dio en todos los países europeos para restablecer el Antiguo Régimen tras la caída de Napoleón. Se caracterizó por el intento de la vuelta del absolutismo y las fronteras que existían en 1792. • Consecuencias de la Guerra de Independencia Aparte de lo que propiamente conlleva una guerra (muerte, hambre, pobreza y destrucción), podemos destacar: − Imperio colonial en ruinas: Las colonias comienzan a perderse al comienzo de la guerra de contra los franceses, aunque aún no se ha perdido todo. − Conflicto entre el pueblo y las Cortes − Fenómeno de El Deseado: Fernando VII es aclamado como rey en España por el pueblo, y es muy querido. Para los españoles, él había sido el primero en luchar contra los franceses, ya que había estado secuestrado en Francia. − Surgen grupos políticos tras la guerra: • Tradicionalistas: Quieren una soberanía compartida entre rey y Cortes tradicionales • Liberales; Defienden el modelo creado en Cádiz • Fernandinos: También llamados absolutistas. Son partidarios de la gestión personal del rey • Hundimiento del Viejo Sistema que se constata con el levantamiento contra los franceses en 1808. Hay una necesidad de cambio. Además, recogieron el poder que desapareció en España en la guerra los mismos que llevaron a cabo la guerra: el ejército. • Evolución internacional europea en el reinado de Fernando VII Tras las guerras napoleónicas, las naciones europeas deciden la vuelta al Antiguo Régimen, y salvaguardarán a éste en caso de una posible revolución liberal. Esto era el llamado principio de legitimidad. Así, numerosas revoluciones liberales fueron sofocadas para mantener el sistema. Sin embargo, a partir de 1830 la sociedad se dirigió necesariamente hacia un cambio, y por ese año, varios países acabaron por adoptar el sistema liberal de gobierno, como Francia. Esto dejaba al régimen de Fernando VII un poco aislado de otros países absolutistas como Rusia. • La política de Fernando VII Fernando VII quería gobernar él y sólo él en España. Esto le llevó a restaurar el Antiguo Régimen y a hacer un gobierno absoluto y aunque tuvo que aceptar el trienio liberal, volvió al absolutismo en cuanto tuvo ocasión. Sin embargo, en 1830 varios factores le obligaron a acercarse a los liberales. En Europa se dio un creciente número de países que adoptaron un sistema liberal, y Fernando VII quedó un poco 5 aislado en su absolutismo. Además, en ese año el monarca español tuvo una hija. Esto suponía un problema, ya que la Ley Sálica aún seguía en vigencia. Sin embargo, dicha ley no era propia de la tradición española, y además el rey, si quería anularla, debía convocar Cortes, como las que pedían los persas, y Fernando VII no quería convocarlas. Sabía que con una ley sálica que parecía en vigencia, que no había llegado a ser anulada con las Cortes por Carlos IV, supondría un enfrentamiento entre los tradicionalistas y el infante Don Carlos con la hija de Fernando, Isabel. Para garantizar que su hija subiese al trono, Fernando VII tuvo que buscar apoyo en los sectores ideológicamente enemigos de los tradicionalistas: Los liberales. • Pronunciamiento Hay que distinguir entre pronunciamiento, que es militar y liberal, de la partida, que es popular y tradicionalista. El pronunciamiento es la primera forma de intervención militar en la política. Se caracteriza por ser una decisión más o menos espontánea de un militar de manera independiente. El militar se subleva y se pronuncia, exponiendo sus quejas. Trata de que el Gobierno cambie así su política. Además, el pronunciado espera que sus compañeros de armas le apoyen. Otras formas de intervención serán el golpe de estado, los generales como políticos o el régimen caudillesco como el de Franco. DOSSIER V: GUERRA Y REVOLUCIÓN • ¿ Qué implica y en qué se fundamenta la llamada La transacción histórica entre las clases nobiliarias del antiguo régimen y los grupos burgueses revolucionarios? Esta transacción se da entre las viejas elites del Antiguo Régimen y los nuevos burgueses. Con las desamortizaciones de Mendizábal, la nobleza puede ya vender mayorazgos, dividirlos y hacer otras transacciones, lo que lleva a nobles sin dinero con muchas tierras a vender y a hacerse burgueses. Además, los propios burgueses siempre podían comprar tierras, de manera que aumentaban también su patrimonio. Esto es lo que se llamó transacción histórica. Los burgueses compraban tierras porque ésta significaba todavía una fuente de riqueza y valor en muchos casos. El problema estuvo en los señoríos, que no eran una propiedad real. O noble o campesino debían demostrar la validez de su propiedad. Los liberales, para que los nobles les apoyasen en la lucha contra el carlismo, afirmaron que la tierra de un señorío sería del noble a no ser que el campesino pudiera demostrar lo contrario. • La iglesia frente al proceso revolucionario En España, la Iglesia era el principal terrateniente, ya que poseía un 8% de la tierra. Para conseguir dinero principalmente, se desamortizaron sus tierras y se vendieron. Con esto, la iglesia vio perdida su independencia económica, y no tuvo más remedio que verse vinculada al Estado, que la subvencionaría desde entonces, y por tanto la controlaría. La Iglesia, por los ataques de los liberales, se convirtió en el estandarte de los carlistas, que se afirmarían como los defensores de la religión. Sin embargo, la Iglesia, aunque no reconoció hasta mucho tiempo después el régimen liberal como el legítimo, no se puso, salvo en contados casos ciertos individuos, a favor del carlismo contra los liberales. • El ejército como garante del proceso revolucionario y factor político decisivo El Ejército tendrá un papel de primer orden hasta casi la primera mitad del siglo XX. Tras las guerras napoleónicas, el ejército se verá influido por la idea francesa de "pueblo en armas, con lo que se creará la identificación ciudadano−ejército. Además, el ejército se comenzará a sentir representante de la nación reforzado por su continuo contacto con el pueblo. Por todo esto, los generales del Ejército, de tradición liberal, gracias a Fernando VII, que les dio esos cargos 6 antes de morir para que el Ejército apoyase a su hija Isabel, se verán muy implicados en la política. Serán los líderes de los partidos liberales moderados y exaltados, y a la vez lucharán en la guerra contra los carlistas. El ejército, por tanto, impedirá que los carlistas destronen a Isabel II e implantarán el sistema liberal definitivamente, defendiéndolo hasta donde haga falta. • Razones que explican los cambios constitucionales del Estatuto a la Constitución de 1837 y de ésta a la de 1845. En el Estatuto Real, apenas se crea un sistema abierto, ya que la regenta tiene mucho poder, y las Cortes están muy limitadas. Es un estatuto muy conservador. Las Cortes y la regenta comparten el poder y se vigilan mutuamente. El sistema es bicameral. La Cámara Alta es la Cámara de los Próceres, constituida por miembros hereditarios y vitalicios elegidos por el rey. En la Cámara Baja están los diputados, elegidos por los votantes (0,15 % de la población). Los ricos son los únicos que podrán votar. La representatividad del estatuto es mínima. La iniciativa legislativa la tiene el rey, no las Cortes. La situación de la guerra carlista no era muy ventajosa, y en 1837 los liberales pidieron a la regenta una Carta Magna más abierta y progresista que el Estatuto Real. Así se creó la Constitución de 1837. Esta Constitución es más representativa que la anterior, y es de carácter claramente progresista y radical. Las guerras, como la carlista, necesitan de medidas más radicales de las habituales, y esta Constitución respondía a esto. El voto es censitario, y el censo se amplia al 4,32% de la población española en 1843. El bicameralismo es desigual, fortaleciendo a la Cámara Baja, que elige los impuestos, y en la Cámara Alta se elige por otro modo a los senadores. Ya no son vitalicios. Además de la alta burguesía, que se beneficiaba con el anterior Estatuto, se beneficia también la pequeña o baja burguesía. La Constitución de 1845 fue mas moderada que la anterior. Cuando acabó la guerra carlista, la regencia de Espartero cayó, y con Isabel II ya como reina, comenzó la etapa moderada. Con ésta y la paz, se creó la Constitución, que derogó el principio de soberanía nacional, atribuyó a la regia prerrogativa el nombramiento de los senadores, quitaba al Congreso su poder en materias financieras, y las Cortes perdieron el derecho de reunirse por si mismas todos los años si la Corona no las convocaba. • Participación electoral y reflejo del apoyo social con el que cuenta cada grupo político. Como hemos visto antes, los liberales tienen un sistema de voto censitario. Ellos no pensaban que el Gobierno fuese para el pueblo, sino que se apoyaban en la idea del gobierno de los mejores. Para unos los mejores eran los más buenos, para otros los más listos, o incluso los más ricos... Por cualquier interpretación que se diera de esto, todos los grupos políticos defendieron el voto censitario. Este era una restricción de voto. Sólo tenían derecho a votar aquellos con un capital determinado, un título nobiliario, etcétera. Con la Carta otorgada, sólo podía votar el 0,15% de la población. En 1843, este censo se amplió al 4,32%. Los burgueses de gran capital, que sin embargo no tenían suficiente para votar, eran los principales apoyos de los radicales, mientras que serán los más ricos y la alta nobleza tras la desamortización (que más dinero sacasen) los que apoyen a los moderados. • Distinción entre plena ciudadanía y la condición de súbdito El estado liberal tiene la misión de defender las libertades individuales, como la propiedad. Hay así propietarios y no propietarios. La propiedad da lugar a la educación, ésta al conocimiento y éste al derecho. Por ello hay muy pocas personas con derechos, que sean consideradas ciudadanos de derecho, y muchos de los llamados ciudadanos de segunda. 7 • La idea de propiedad en el pensamiento liberal La revolución liberal suponía una nueva idea de propiedad. Como ésta garantizaba los derechos y era uno de los derechos y libertades individuales más importantes, se llevan a cabo una serie de reformas para que se dé mayor igualdad entre los ciudadanos. Pero estas reformas amenazaban la idea de seguridad del Antiguo Régimen, que tenía mucho que ver con la idea de propiedad, y esta idea de seguridad la esgrimirán los carlistas contra el liberalismo. • Cómo afecta la revolución literal a la nobleza, a la iglesia y al campesinado El principal factor que afecta a estos sectores es la desamortización. Los mayorazgos son abolidos. Esto permite vender la tierra y desvincularla, dividirla y heredarla varias personas, etcétera. La alta nobleza se enriquecerá por la medida, al poder vender unas tierras revaloradas. Sin embargo el dueño del mayorazgo tenía que mantener a los que vivieran en él y con la desamortización esto acaba. Así, las familias del mayorazgo se verán perjudicadas. En los señoríos, se decretará que el campesino que vive en ellos será el que tenga que demostrar su propiedad. Si no, el señorío será propiedad del noble. Con esta medida los liberales consiguen el apoyo de los nobles para mantenerse en el poder y en la guerra. Todo esto acerca a la alta nobleza a la revolución. Sin embargo el campesino se alejará de ella. Además, la baja nobleza vive de sus privilegios, y éstos le serán abolidos, con lo cual también se alejará de la revolución. A la iglesia le serán expropiadas todas sus tierras y luego subastadas. Aunque no se respeta el derecho de propiedad de la Iglesia, se consigue así dinero, propiedades y debilitar a la Iglesia. Con ello se fortalece al Estado. También se desamortizan las tierras de los ayuntamientos y se venden. El poder de la Iglesia desaparece al acabar su independencia económica, y pasa a depender de subvenciones estatales y de donativos de los feligreses pudientes. Con la desamortización eclesiástica se quedan sin seguridad (concepto de Antiguo Régimen) y sin trabajo como el de antes campesinos y artesanos. La Iglesia ofrecía mejores condiciones laborales que cualquier otro. La venta de las tierras comunales lleva a la ruina de las clases pobres, y desaparecen los gremios al desaparecer sus funciones. Como toda esta gente no podía votar porque no tenían dinero ni propiedad, protestaron con la única vía que les quedaba: levantamiento armado apoyando al carlismo y contra el liberalismo. • La guerra carlista El carlismo es un movimiento esencialmente popular. Por las medidas llevadas a cabo por los liberales, las masas populares serán carlistas. Los tradicionalistas de la época de Fernando VII apoyarán a Don Carlos porque no tienen otro apoyo. Por buscar la antigua y tradicional "constitución", y contra el liberalismo, apoyarán a Carlos porque éste, si subiera al trono, respetaría estas tradiciones. Sin embargo, no se puede decir, sobre todo al principio de la guerra, que el carlismo tuviese una ideología clara. Entre tanto campesino sólo los pocos miembros de la iglesia que apoyaron al carlismo pudieron dar más tarde una ideología, ya que eran los más cultos (Aunque la Iglesia nunca se puso de parte de los carlistas) Pero al principio el carlismo era una simple respuesta a la revolución liberal. Con el abrazo de Vergara, acaba la guerra, pero los liberales no han acabado con el ejército carlista. Vergara ofreció a los carlistas que lo quisieran integrarse al sistema liberal, lo que fue aceptado por el general carlista Maroto. Así, aunque aparentemente el conflicto ha acabado, el carlismo queda latente y esperando una próxima ocasión para actuar. DOSSIER VI: EL REINADO DE ISABEL II 8 • Liberalismo doctrinario y liberalismo radical Los liberales de esta etapa se dividen en doctrinales o moderados y radicales. Ambos se enfrentaron a los realistas no liberales durante la época de Fernando VII. Los moderados se apoyan en los realistas, y doceañistas y realistas marotistas. Los progresistas se apoyan en los radicales. Se diferencian en que para éstos la soberanía es nacional{ y para los doctrinarios la soberanía es la de las Cortes y el rey. Todos defienden el sufragio censitario, aunque los moderados lo limitan más que los radicales. Cuando empez6 el reinado de Isabel II, los grupos políticos eran los progresistas y los moderados. Los primeros se dividían en resellados (los más moderados), puros (clásicos progresistas), y demócratas (los más exaltados). Los moderados se dividían en conservadores autoritarios (marotistas, cristinos e incluso afines algunos a los carlistas), moderados (de Narváez, defienden el orden como sea y quieren poder moderador fuerte en la Corona) y puritanos (de donde salió Cánovas, defienden el turnismo de partidos). • El régimen de los generales En España, el gran peso del ejército desde la Guerra de la Independencia, unido esto a lo mencionado sobre el pensamiento liberal del Ejército y la identificación ciudadano− ejército, llevan a que los líderes de los partidos políticos sean generales del ejército. Los generales eran elegidos por la reina como Gobierno, que en la mayor parte del tiempo fue el Partido Conservador de Narváez. Esto llevó a un casi monopolio de los conservadores en el poder. Hasta que no se fragmentó el partido, los progresistas de Prim no llegaron al Gobierno, aunque sólo duraron dos años. O'Donnell y su Unión Liberal gobernarán desde 1856 hasta 1868. El problema del sistema es un exceso de corrupción por permanecer en el poder mucho tiempo, ya que no hay un turnismo en el poder de todos los partidos. Por esta razón los progresistas abandonaron el sistema, lo que dejaba a éste sin razón de ser, y posteriormente esto originaria la caída de Isabel II del trono. Narváez era el dirigente de la facción moderada de los doctrinarios. Defiende la soberanía Rey− Cortes, el sufragio censitario y defiende el poder moderador fuerte del rey. Además defiende el orden a ultranza. También defiende los derechos individuales, pero si éstos atentan contra el Estado y el orden, no dudará en violarlos. O'Donnell dirigirá el partido formado por resellados y puritanos, en lo que será un nuevo doctrinarismo. Será un defensor del poder moderador, como Narváez, y del turnismo de los partidos políticos. Prim dirigió a los progresistas tras el bienio progresista, pero la falta de turnismo le llevó a la revolución contra el propio sistema, del que no dudó en salirse para acabar con Isabel II (eso si, una vez Narváez había empezado represiones contra los progresistas). • ¿Por qué el sector punta de la burguesía española renunció hacia 1840−1845 a la opción progresista para integrarse en el régimen moderado? Espartero era un liberal progresista. Defendía el librecambismo, y lo tratará de poner en práctica en este periodo. Sin embargo, la revolución industrial acababa de empezar, y principalmente en Cataluña, que es la industria más floreciente, quieren que se lleven a cabo medidas proteccionistas para garantizar su desarrollo, y no un librecambismo que la hundiría porque no está en condiciones de competir con otras industrias mucho más desarrolladas. Aunque todavía no son un sector poderoso, los empresarios, que se ven perjudicados por el librecambismo, será uno de los sectores que apoyarán a los conservadores, que llevarán a cabo una política más proteccionista. • La crisis del sistema 9 − Crisis política: Es el factor más importante. Detrás de esta crisis está el carácter inestable de la reina. No es una reina fuerte, y no puede encarnar el fuerte poder moderador que buscan los liberales. Varios generales se aprovecharán de la debilidad de Isabel II. Además, los derechos de los ciudadanos son constantemente violados. Los moderados, al haber estado mucho tiempo en el poder, están corruptos, y la mayoría roba del Estado. Se da también una amplísima marginación de sectores sociales (los carlistas y los que no pueden votar), pero no hay tampoco un hambre de participación. − Crisis social: La revolución de 1868 aumenta las crisis sociales ya existentes, creadas, entre otras cosas, por el mal reparto de las tierras desamortizadas. − Crisis económica. Es muy grande, y es ocasionada por la guerra de la Independencia, por la guerra de las colonias y la guerra carlista. En 1867, se da una crisis agrícola y una crisis financiera habitual de los ciclos capitalistas. − Crisis internacional: España mantiene una posición mala en el extranjero. Claro es el ejemplo para buscarle matrimonio a Isabel II. España mantiene una falsa alianza con Portugal, Francia y Gran Bretaña. Cuando Francia y Gran Bretaña están de acuerdo, España las apoya. Si están enfrentadas, España se declara neutral. DOSSIER VII: EL SEXENIO REVOLUCIONARIO • Características formales de la Gloriosa Con la única idea de echar a Isabel II del trono de España, demócratas y progresistas firman el pacto de Ostende, el 13 de Agosto de 1866. Posteriormente, al morir O'Donnell en 1867, la Unión Liberal se integrará en el pacto contra la reina. Narváez será, como cabeza del ejército, el que mantenga a Isabel, pero muere en 1868 y el ejército no apoyará mas a la reina, que tendrá que abandonar España. Pero lo único que tenían en común estos grupos políticos es el deseo de que Isabel abandonase el trono. Prim logró mantener a los grupos más o menos unidos hasta que murió. Entonces los revolucionarios no se coordinan, y cada uno querrá llevar a cabo la política que a él le interese. • Oposición de los grupos ajenos al sistema El carlismo: Cuando se proclama la 1ª República en España, el carlismo vio una nueva ocasión para reivindicar la corona para Don Carlos (sería Carlos VII) y volver a las ideas tradicionales. El movimiento obrero: El descontento del pueblo hizo a la gente salir a la calle, cosa que se potenció aún más al darse la comuna de París en 1870, que motivó mucho a los españoles. La guerra de Cuba: Poco antes de morir asesinado Prim, Cuba se levantó en armas contra España para conseguir su independencia. • La Guerra cantonal Dentro de los muchos sistemas de gobierno llevados a cabo en el Sexenio y de las diferentes propuestas para España destaca en gran medida el federalismo o cantonalismo de Pi y Margall. Cuando subió al poder en 1873, proclamó una república federal. Sin embargo, múltiples levantamientos y sublevaciones llevaron a la caída de Pi y Margall y con él el cantonalismo. • La coyuntura internacional de 1868−1870 10 1868 no fue sólo un año de revolución en España. En Francia, Napoleón III se vio sorprendido con la proclamación de la República. La reunificación alemana se cerraría en 1870 con la proclamación del II Reich. Italia completaría también su unificación con la toma de Roma en 1871 y en Gran Bretaña, William E. Gladstone introdujo varias reformas muy importantes del sistema británico. • Consecuencias del Sexenio El Sexenio introdujo en España un miedo a la democracia y el liberalismo exacerbado. El desorden y caos de esta época llevó a que la RAE definiese república como lugar de desorden con exceso de libertades. El caos llevó a que el general Martínez Campos se pronunciase en 1874 y proclamase a Alfonso XII rey de España. DOSSIER VIII: LA RESTAURACIÓN. • La toma del poder y su consolidación Cánovas se crió políticamente en el grupo de los Puritanos dentro del partido moderado primero y después de la Unión Liberal. Cuando Martínez Campos se pronuncia en 1874, Cánovas tacha de "insensatez" la actuación del general pronunciado, y se desmarca así del golpe de Estado (un pronunciamiento crea muchas enemistades, lo que quería evitar Cánovas). Sin embargo, era el pronunciamiento lo que Cánovas quiere. Para deshacerse de Martínez Campos manda a éste a Cuba, y afirma que el general actuó mal cuando estaba ya casi todo hecho. Cuando Cánovas asume la presidencia del Consejo, se encuentra con varios problemas. Decide olvidarse de la guerra de Cuba ya que le urge más la guerra carlista y la política interior. Destina a todas las fuerzas para acabar militarmente con los carlistas, y manda al mismo Alfonso XII a dirigir al ejército. Además negoció con la Iglesia para integrarla en el sistema y quitarle de paso la bandera al carlismo de defensor de la religión. Eliminó también la prensa para acabar así con los opositores del sistema (republicanos, entre otros). Pero para contrarrestar estas medidas negativas que suponen las guerras y la censura negoció con la iglesia y para fortalecer el sistema y garantizar el turnismo, acordó con los progresistas de Sagasta turnarse en el poder. Este acuerdo fue personal entre Cánovas y Sagasta. En las primeras elecciones Cánovas usó sufragio universal, buscando así que se legitimase el sistema que se había impuesto por un pronunciamiento. Pero luego se volverá al sufragio censitario, para que no vuelva a haber un libertinaje como el del Sexenio. • El pensamiento canovista como base del sistema 11 Para Cánovas la nación, «es como es". Esto, para él, está fuera de toda discusión. Cánovas señala varias cosas dentro de lo indiscutible, que Cánovas afirma que están en la constitución interna: Esta incluye la libertad (España es una nación liberal), la propiedad, igualdad ante la ley, la monarquía (España es monárquica desde siempre) y dinastía (los reyes son los borbones de la línea isabelina), y el pensamiento doctrinario (la soberanía es del rey con las Cortes). Como hijo de los puritanos, Cánovas defiende el poder moderador fuerte. Con este poder se garantiza el poder del Estado, con el cual podrá llevar a cabo reformas, como las sociales. No hay que confundir el Estado fuerte con el interventor. El segundo busca imponerse por la fuerza, y controlarlo absolutamente todo. El primero busca la fuerza como un poder coercitivo, para mantener la estabilidad, pero no llega a usar ese poder. Cánovas, para garantizar la estabilidad, elimina al ejército de la intervención política y crea el turnismo por un pacto personal con Sagasta. Con él deciden turnarse en el poder, independientemente del rey y de las elecciones. Además, Cánovas se encarga de dar pie a los partidos que ve necesarios para su sistema. Además, con la Constitución de 1876 se ratifica el fundamento de las fuerzas contrapuestas. Por un lado, la soberanía la comparten rey y Cortes. Por otro lado se plantea el turnismo, con la consiguiente manipulación de las elecciones. • Otros rasgos del sistema político Cánovas crea el turnismo basándose en dos partidos: el suyo propio, el partido Conservador, y el partido progresista de Sagasta. Ambos se basan en los antiguos partidos de la época Isabelina. El de Cánovas en la Unión Liberal y el de Sagasta en el Partido Progresista. Este se diferenciará del otro principalmente en la idea de la soberanía aunque esto luego no lo practique realmente, y a final del siglo XIX sólo la posición religiosa diferenciará a los dos partidos. El resto del pensamiento es el canovista. Cánovas vio en la etapa isabelina que el ejército era el poder que garantizaba la estabilidad, ya que no había poder moderador fuerte ni turnismo que garantizase la estabilidad. Así, quiere impedir que el ejército sea el factor de estabilidad y elimina a los generales. Cánovas, para ello, hace que el rey Alfonso XII estudie en una academia militar británica. Se convierte así el rey en la cabeza visible del Ejército y por tanto en máximo representante. Así se aleja a los militares de la política. Sin embargo, en el sistema había otros problemas. Al principio la gente no participaba en la política, y para que hubiese participación en las elecciones se recurría a los caciques de los pueblos, que hacían que la gente votase a uno u otro partido. Además, los caciques pedirán cosas a Madrid a cambio de los votos. Sin embargo, la gente no querrá participar cuando los partidos no representen a la gente. El dinero se repartía de forma desigual. El campesino y obrero no eran pagados como se debía, lo que más adelante llevó a los movimientos socialistas y sindicalistas. Incluso el rico podía librarse del servicio militar obligatorio si pagaba una suma de dinero. DOSSIER X: −1898 COMO ACONTECIMIENTO INTERNACIONAL • La coyuntura internacional del 98 Con la Conferencia de Berlín en 1884, el mundo quedaba repartido entre las viejas naciones europeas para que fuese colonizado. Así comenzó el imperialismo. Las naciones comenzaron una carrera desenfrenada hacia la colonización. En los años 90 del siglo XIX ya no había más que colonizar. Sin embargo, las naciones tenían la necesidad de continuar la conquista para expandirse aún más. Estaba cantado que las naciones más poderosas aprovecharían la debilidad de otras para conseguir más territorios. España, como potencia ya ni siquiera en decadencia, sino desaparecida, sería una de las víctimas de la sed de colonialismo. A pesar de todo, incluso las naciones más poderosas sufrieron reveses en su afán conquistador frente a otras naciones en teoría más débiles. 12 • Raíces del expansionismo estadounidense Estados Unidos tenía, gracias a su comercio interior, gran poder económico. Pero acabada la conquista del Oeste, hay que crear nuevas fronteras. Además, Este y Oeste no eran comunicables más que por ferrocarril y por mar cruzando por el sur de la Tierra del Fuego, lo que era muy lento y muy caro. Se crea el canal de Panamá, pero Estados Unidos necesita puntos estratégicos en el mar para defender el canal. Serán Hawai en el Pacifico y Cuba y Puerto Rico en el Atlántico. Esto sería muy fácil para los norteamericanos, pero era vital mostrar a los americanos la importancia del canal. • Las consecuencias del 98 en España − El pueblo español vivirá con desencanto la derrota y verá en Cuba una inmensa pérdida. La pérdida de las demás colonias no había ocasionado este sentimiento de decepción porque en España se estaba viviendo otro periodo de guerras (guerras carlistas, guerra de Independencia). − Los políticos echarán la culpa de lo ocurrido a los dirigentes militares. Éstos, sin embargo, responsabilizarán a los políticos del Gobierno. Aquí comenzarán los roces entre políticos y Ejército. − Se incrementarán las posturas republicanas. Muchas personas culparán al rey de lo ocurrido. Esta actitud se acentuará con Marruecos. − Aumenta el regionalismo catalán. Por sus negocios con Cuba, serán los más afectados por las pérdidas. Además, los empresarios catalanes, amenazados por la industria extranjera, se unirán para presionar a Madrid. − Perjuicio de las clases medias: Principalmente la de pequeña propiedad agraria. Esto llevará al regeneracionismo, que se mueve entre una purificación del sistema electoral y la supresión del sistema liberal democrático. − Generación del 98: Los intelectuales del momento mostrarán su descontento con España y darán la idea de la España real diferenciada de la España oficial. La política gubernamental no tiene nada que ver con la vida social y sus problemas de España. DOSSIER XI: LA CRISIS DE LA RESTAURACIÓN • Crisis institucional Alfonso XIII intervino, al contrario que su padre mucho en política, problema estaba en que los partidos políticos ya no funcionaban. Tras la muerte de Cánovas y Sagasta, los partidos no habían sido capaces de renovar el pacto personal de los anteriores líderes, y representaban cada vez a menos gente. Por ello el rey tendrá que imaginar lo que quiere la opinión pública, debido a la falsificación de las elecciones, que le daban ideas equivocadas de la situación. Para solucionar el problema, Maura y Canalejas, líderes ahora de los partidos de Cánovas y Sagasta respectivamente, proponen a Alfonso XIII que se integren a los nuevos sectores de la izquierda y de la derecha en el sistema. Pero el rey rechaza esta idea. Alfonso XIII era un regeneracionista, y piensa que el ejército es la representación de la nación. Maura querrá hacer una democratización del sistema, una limpieza. Piensa que el problema no está en la Constitución, sino en el caciquismo, y para destruirlo hay que hacer una reforma de la administración social. Propone así una política proteccionista, la incorporación de los nacionalistas, una reforma educativa, una reforma militar y acabar con el caciquismo. Pero Maura no tenía apoyos. Su partido prefería a Dato, quien aseguraba que sí seguiría con el turnismo. El partido progresista estaba acabado sin el turnismo, ya que no representaba a casi nadie, y estaba en su contra. 13 La prensa atacará a Maura porque éste prohibió las subvenciones partidistas a los medios. Además, la guerra de Marruecos provocará que el socialismo, representante del pueblo que va a la guerra, lo ataque, y el ejército, por la supuesta integración de los nacionalistas en el sistema, desconfía de Maura. Con todo esto, y cuando se ordena el fusilamiento del anarquista Ferrer, el rey escuchará las peticiones de quitar a Maura del Gobierno. • Grupos políticos no integrados Con los problemas sociales crecientes, apareció la Lliga catalanista. Maura, que no está apoyado por su partido, recurrirá al partido catalán para llevar a cabo la reforma del sistema. Para ello recurre al líder catalán, Cambó. Esta unión amenazará el sistema. También se dio un fuerte movimiento regeneracionista, que pedía un cambio. Algunos, los menos, querían que el sistema se democratizase. El resto de los regeneracionistas apostaban por el puño de hierro, por la dictadura. Además, el aún más creciente movimiento obrero ganaba acólitos por momentos. El PSOE crea UGT. Con él aparece el sindicalismo de manera más fuerte. En 1911 se crea la CNT (Confederación Nacional de Trabajadores), de carácter anarquista. El anarquismo era en esas fechas más fuerte que el socialismo. Sus masas están principalmente en el campo andaluz y en la industria catalana. El socialismo tiene el problema de carecen de doctrina, ya que la que tiene copia al socialismo francés, y la sociedad de Francia es muy distinta a la de España. Además, el socialismo español es revolucionario, ya que no ha podido integrarse al sistema. También aparece en 1906 el Sindicato Nacional Católico. La mayoría del obrerismo será católico. El socialismo tratará de hacerse con seguidores de los dos sindicatos, principalmente del anarquista, y para eso se radicaliza. Esta radicalización aumenta cuando aparece el Partido Comunista en 1917. El radicalismo es ocasionado en gran medida por la no−integración de estos grupos al sistema, que encontrarán en la revolución el único medio para participar. • Agravamiento de los conflictos sociales y el problema del orden público Con la Gran Guerra, aparece la idea de República como una opción más fuerte, ya que nacen tras la guerra muchas repúblicas en Europa inspiradas en la República por excelencia, EEUU. El presidente norteamericano Wilson afirma que el conflicto se dio porque los países de Europa no coinciden con sus fronteras. Esto potenciará aún más el catalanismo. En lo económico, durante la I Guerra Mundial, España, país neutral, venderá mucho al extranjero, pero sólo se enriquecerá una minoría de especuladores. Entre ellos, se perjudica a clases menores y funcionarios. En 1917 estalla la Revolución Rusa, lo que lleva a la esperanza revolucionaria en toda Europa. Esto genera en los demás sectores el llamado miedo rojo. En estas fechas se crean las asociaciones de empresarios, lo que generará una guerra social. Debido a la incapacidad del débil Estado para actuar, los patronos crean los sindicatos amarillos, que actúan por su cuenta. Pero la mayoría de los obreros preferirán los anteriores grupos sindicalistas (UGT, CNT, SNC). • El Ejército Cánovas alejó al ejército de la política para evitar que fuese el elemento estabilizador del sistema. Quería garantizar así un liberalismo civil. Sin embargo, esto llevó más adelante a que el ejército estuviese desmarcado de los políticos, sobre todo tras 1898, por lo que se culpó a los militares y dejó al ejército aislado. Pero el rey, que desde Alfonso XII era militar, se identificaba con el ejército, ya que era el mismo monarca el máximo responsable del ejército. Tras tanta guerra y revolución, el ejército español tenía un exceso de oficiales. Había así más gente que 14 puestos. Por ello se ofreció que los que quisieran pudieran retirarse, pero se les seguía pagando como si estuviesen en activo, lo que creará inflación. Además, con respecto a esto se divide el ejército en los destinados en África y los destinados en la Península. Se enfrentarán y potenciará la crisis social del ejército. El ejército volverá a la política cuando el Estado no tenga más remedio que recurrir a ellos para detener el conflicto social. También aumentará la participación en la política por las actuaciones del ejército en Marruecos. • Las crisis −1905: Cuando la Lliga acababa de tener un gran éxito en las elecciones, se publicó un chiste en un periódico en el que se burlaban del ejército. Este se ofendió, pero el Estado no dijo nada. Varios oficiales quemaron el periódico y apalearon a los redactores. Tras esto se multiplicaron las protestas contra los catalanistas. El rey le dará la razón al ejército, y éste exigirá la ley de jurisdicción, por la cual los delitos contra el ejército y contra España quedarán bajo jurisdicción militar. −1917: En el ejército se da una asociación en juntas de infantería, que protestan frente al ministerio y rompen así la cadena de mando. Cambó, aprovechando esto, solicitará la reforma de la Constitución en una reunión informal de un grupo de diputados, apelando a Maura. El socialismo levanta así una huelga revolucionaria. El Estado se encuentra con que todos los que se odian entre sí están contra el Estado, aunque no estaban de acuerdo, Maura no apoya a Cambó, quien se queda solo frente a los socialistas. También el ejército está dividido, pero el Gobierno lo apoyará y se acabará con la revolución socialista. −1921: Se da en Marruecos el desastre de Annual. Los marroquíes aniquilan a una importante sección defensiva de Melilla. Hay una crítica contra e! ejército, contra el Gobierno e incluso contra el rey. Más tarde, Primo de Rivera dará el golpe de Estado. DOSSIER XII: LA IIª REPÚBLICA • El problema religioso En España se acusa a la Iglesia de tener gran poder económico, lo que era falso; de ser muy afín a la monarquía y a la dictadura de Primo de Rivera; de tener escaso sentido social, lo que tampoco era cierto, simplemente no era el sentido social que esperaban las izquierdas; y de intolerancia. La Iglesia, sin embargo, legitimará siempre la república española y aceptará lo que hace, incluso la quema de iglesias y que le quiten la educación. Cuando los días 11, 12 y 13 de Mayo se queman iglesias, el PSOE pedirá como la derecha republicana, que se contenga la quema y se mantenga el orden. Pero la izquierda republicana, personificada en Manuel Azaña, propone lo contrario. Esto llevará a que el PSOE no se atreva a contradecir a Azaña para que éste no sea más de izquierdas que ellos mismos. El Gobierno sabía que la quema de iglesias se iba a llevar a cabo, pero no hizo nada por impedirlo. Esto era parte de la visión anticlerical de Azaña, que considera a la Iglesia un enemigo. Incluso el Gobierno salió en defensa del ABC y unos monárquicos en Madrid que gritaban contra la república, pero nunca defendieron a la Iglesia. Tras esto se dio la Asamblea Constituyente, en la que el 13 de Octubre Azaña afirma que sí tuviera mayoría parlamentaria, no se quedaría atrás en la lucha contra la iglesia, en clara alusión al PSOE, en ese momento el partido mayoritario. Se llega así a la dictadura de la mayoría, entre Azaña y el PSOE. Además, la Iglesia se regirá por leyes especiales, por la que se le dejaba lo justo para vivir Esto llevará a que los católicos, votantes de la derecha republicana, dejarán de votarlos y apoyarán a la recién aparecida CEDA de Gil Robles. La CEDA pretende hacer una nueva república cambiando la Constitución. Así, amplios sectores se alejarán de la IIª República. 15 • El fracaso de la izquierda republicana Se resume en: − Actitud represiva del Gobierno: Azaña persigue con saña a los anarquistas, así como a los que considera no republicanos. − Identificación de Azaña con la República: Azaña era intelectualmente brillante, pero hace de su intelectualismo un uso innecesario. − La cuestión religiosa: la República se define a sí misma como oposición a la Iglesia. − Incapacidad de resolver el problema social, por la mala política del Estado. − El alejamiento de los intelectuales, que no se identifican con esta República. • Las "derechas" en la IIª República La CEDA es fruto del fracaso de la derecha republicana. Gil Robles, con la colaboración de la Iglesia, crea un partido que es coalición de varios, que quieren cambiar la Constitución. Pero Gil Robles renunciará a defender a la monarquía. Por su deseo de cambiar la Constitución, la izquierda acusará a la CEDA de accidentalismo y a Gil−Robles de querer sustituir la República por un sistema fascista. Cuando la CEDA se niega a defender la monarquía, aparece Acción Española, grupo de carácter tradicionalista, dirigido por Calvo Sotelo. Cuando la CEDA fracasa en 1936, Acción Española ocupará su hueco. Sin embargo, para entonces, ya se estaba preparando la lucha armada. La Falange es un grupo fascista, por denominarlo de alguna manera, pero es de los más pequeños de toda Europa. Esto es así porque España no sufre el descontento de la IIª Guerra Mundial, al no haberla vivido, y no hay gente ligada a la guerra con sentimiento de utilidad hacia la patria. Además, el catolicismo está muy vigente en la tradición española, y la Falange es de tradición no católica. También falta en España una tradición nacionalista orientada a la construcción de un imperio. Hay una profunda crisis de identidad. • Las elecciones de 1933 El PSOE había acusado a la CEDA de accidentalista, de estar en el Gobierno por accidente, y amenazó con una revolución si la CEDA entra en el Gobierno. La CEDA era el partido mayoritario en el Parlamento, y logró que dos miembros de la CEDA fueran ministros. Así el PSOE cumple su amenaza y se levanta en Asturias, y se produce un duro enfrentamiento armado, pero la revolución es aplacada y comienza una persecución a los grupos de izquierdas. • La revolución de Asturias El PSOE se levantó porque desde la dictadura de Primo de Rivera estaba profundamente dividido, y se radicalizó. Los radicales los encabezaba Largo Caballero, quien se apoyaba en UGT y las Juventudes Socialistas. Besteiro se oponía a Caballero, y era un ortodoxo marxista que estaba convencido de que un levantamiento precipitado provocaría una reacción negativa por parte de la derecha contra ellos. Pero entonces aparece Indalecio Prieto, que lideró el PSOE en esta revolución, influido por el miedo que pasó cuando estuvo en Austria, pero fracasa. 16 La revolución de Asturias trae como consecuencias una radicalización de posturas de izquierda y derecha, y también dentro del mismo ejército, en una postura monárquica conservadora URE y la Unión Militar Republicana Antifascista UMRA. Aquí se encuentra el origen doctrinal de la guerra civil. • Las elecciones de 1936 El Frente Popular, coalición de múltiples partidos de izquierda, pretendía una gran reforma tras ganar las elecciones de Febrero. Azaña fue el Primer ministro, y él debía organizar el Frente Popular. Aunque se acusó al Frente Popular de revolucionario, realmente no era tal, ya que entre sus ministros no había ningún miembro del Partido Comunista ni del PSOE. Era más una izquierda apoyada en la pequeña burguesía. Cuando Niceto Alcalá−Zamora fue destituido por las Cortes, Azaña será nombrado presidente de la República. Martínez Barrio le sustituiría como presidente del Gobierno. Cuando estalló el 17 de Julio la sublevación, el presidente Martínez Barrio hablaría telefónicamente con el general Mola el día 19. Mola estaba destinado en Navarra, y se había sublevado. Martínez Barrio le ofreció un gobierno de salvación nacional y acabar con los comunistas, pero Mola rechaza la oferta. Aquí ya no se podrá evitar la guerra • La rebelión Ésta se llevó a cabo porque el ejército consideró que España estaba en desorden, y había que anular los partidos políticos para que la gente se calmase. Además, tenían pensado formar un gobierno militar apolítico que cambiase todo lo legislado en especial la legislación social y religiosa. Decidieron que lo mejor para encauzar al país era suprimir el actual sistema liberal parlamentario e imponer uno militar hasta que el país se calmase y fuera a un curso normal. DOSSIER XIII: LA GUERRA CIVIL • La situación de partida La sociedad española estaba en 1936 profundamente dividida. Las posturas de la izquierda se habían radicalizado, tras el gobierno de la CEDA y la insatisfacción que supuso para muchos en la izquierda el gobierno del Frente Popular. La derecha continuó sus acusaciones al nuevo gobierno de revolucionario. En la derecha se concentraban los católicos y conservadores, la CEDA y los tradicionalistas, todos ellos en contra de esta República. El alzamiento del 17 de Julio no resultó tan esperanzador como pensaban los rebeldes. Controlaban una zona minoritaria y dividida en tres. Sus mejores tropas estaban en África. El Gobierno tenía los principales centros industriales, la mayoría de la flota, las grandes ciudades y las mejores zonas de producción agrícola y ganadera. Controla el Banco de España, lo que implica dinero, y todas las embajadas en Madrid. Tienen además la mitad de los efectivos del ejército de tierra y la totalidad del pasivo. Sin embargo, el bando franquista actúa con más diligencia, mientras que en la República se da un tiempo de desconcierto y desorden, que bastará para que los sublevados actúen y equilibren la situación. En la República, tras la llamada de Martínez Barrio a Mola, el débil gobierno se dejará en manos de las izquierdas revolucionarias. Éstas aprovecharán para hacer su revolución. El gobierno republicano cometerá su primer error al ceder en las peticiones comunistas de armar al pueblo. Anarquistas, comunistas y socialistas comenzarán la revolución, que descompondrá a la República. • La ayuda internacional Durante la guerra civil, diferentes naciones apoyarán a los dos bandos, aunque no serán decisivos. El bando franquista será ayudado por Mussolini al principio para que cruce el estrecho el ejército de África. También 17 mandará Italia voluntarios de la CTV. Posteriormente Hitler también colaborará mandando la Luftwaffe, concretamente la legión Cóndor. Estados Unidos colaboró también con Franco, aunque de manera indirecta. Franco negoció con la compañía TEXACO para obtener petróleo. A pesar de un embargo a España, la compañía americana mandará el crudo pedido, y el gobierno americano le pondrá una multa de apenas unos miles de dólares. A la República la ayudarán principalmente la Unión Soviética y Francia, mandando armamento. Además, a España llegarán las Brigadas Internacionales, formadas principalmente por miembros de la Internacional Comunista de toda Europa. Gran Bretaña se mantendrá al margen del conflicto, porque no quiere enfrentarse a Alemania y prefiere simplemente que el conflicto no salga de España. • Las causas de la victoria El bando franquista tuvo unidad desde el principio, cosa de la que careció la República. En el bando republicano hubo levantamientos internos, como la revolución anarquista de Barcelona, a los que había que mandar tropas para aplacarlos. Incluso la flota se echó a perder cuando los marineros acabaron con sus oficiales, que eran conservadores o moderados. Había así un frente interno y otro externo (con los franquistas). Franco logró la unidad de su mando con dos acciones: la elección del mando único y la unificación de las fuerzas. En elección de mando Franco se ocupó de tener las mejores cartas. Él había negociado con el extranjero, había liberado Toledo, tiene el ejército de Marruecos, y tiene simpatías con los conservadores católicos y los monárquicos. Los sublevados ofrecen el mando a Franco, pero éste, hábilmente, dice que no lo aceptará a no ser que sea jefe civil y militar. Es decir, Jefe del Estado. Después, Franco unificará las fuerzas militares, y acabará con la pluralidad política, legalizando los partidos. Se crea un partido nuevo, que es Falange Española tradicionalista. También se apoyará su régimen en el ejército, muy fiel a Franco, la administración, que no se identifica con el régimen ni con la doctrina, y la Iglesia. Aunque ésta no era la razón del levantamiento, la muerte masiva de religiosos en la zona republicana hizo que la Iglesia corriese a ampararse en el franquismo. DOSSIER XIV: EL RÉGIMEN FRANQUISTA • Soportes doctrinales El régimen franquista se basa en la idea del guante de hierro de Joaquín Costa y en la justificación histórica de Menéndez Pidal. La línea fascista del franquismo se destruirá incluso por el mismo Franco, apoyado por la Iglesia y buscando el equilibrio. El régimen tampoco es totalitario, ya que Franco no pretende crear una sociedad nueva ni una movilización de las masas. La falange no controlará nada, y la Iglesia está además en contra del totalitarismo. El régimen era católico, ya que por el apoyo de la Iglesia, no se separará ésta del Estado. Las leyes se redactan con mucha influencia de la Iglesia, e incluso los obispos estarán en las Cortes por ley. La enseñanza también volverá a la Iglesia. A partir del Concilio Vaticano II, la Iglesia romperá con Franco, quien no entenderá esto, aunque mantendrá su fidelidad a la Iglesia hasta el fin. Otras ideas que caracterizan al régimen son: − Monarquismo: Franco impone que España es un reino. Además de monárquico, Franco también era dinástico, y quería que un descendiente de Alfonso XIII fuera su sucesor. − Nacionalsindicalismo: Esta es una aportación de la Falange. Con nacionalismo hablan de un modo regeneracionista. Se quiere identificar a la España real con la oficial. En el sindicalismo se encuentra la idea de sindicato estatal, vertical. El nacionalsindicalismo sí aporta gran legislación social. También aportó un sentimiento de oposición a los partidos políticos. 18 − Organicismo: Viene a negar la doctrina liberal. Se afirma que el hombre nace integrado en una institución social: La sociedad se divide en cuerpos concéntricos, y hay además organismos secantes a los que pertenece. Desde estas dos posiciones el hombre ha de ser capaz de manifestarse. Esta idea no funcionó en la práctica. − El Estado en Obras: A partir de 1957, esto será lo que sostenga al régimen. El Estado es el gran constructor, no sólo de infraestructuras sino también de educación, sanidad, etc. − Autolimitación del poder: Franco se irá quitando, según avance el régimen, poderes que irá cogiendo el aparato legislativo. Sin embargo, Franco se guarda las leyes de atribuciones para sí, que morirán con él, y que sirven para que quede incluso por encima de la ley. • Las principales etapas del régimen • 1936/37−1956/57:Autarquía y resistencia Tras la Guerra Civil, España estaba sumida en la miseria y en el hambre. Cuando Hitler toma Polonia, Franco se declara neutral. Polonia es la frontera católica de Europa frente a Asia. Además, el tratado entre Hitler y Stalin hace que Franco se sienta traicionado. Cuando en 1940 Alemania invade Francia en semanas, Franco piensa entrar en la guerra, ya que parece que Gran Bretaña puede caer igual de fácil. Franco necesitaría, en caso de entrar en la guerra, que Hitler tomase rápidamente las islas británicas, para garantizar a España los suministros de comida y combustible que vienen de Iberoamérica, Pero Hitler tarda meses en responder a Franco, y para entonces se ha visto que Gran Bretaña aguantará, con lo que Franco decidirá declararse neutral. Sin embargo, los Aliados no se fiarán de España, y le harán un bloqueo tras la guerra que durará hasta los 50. Así Franco tendrá que cambiar ciertas cosas para mantenerse pero también para aliarse con los vencedores de la guerra. Para ello tendrá que legitimar el régimen, y esto lo conseguirá dando una imagen de seguridad ante el futuro. Para esto Franco se apoyará en la monarquía y en la Iglesia. En 1947 se establece la ley de sucesión, en la que se establece un sucesor y que España es católica. El ostracismo acabará cuando comiencen a aparecer las dictaduras comunistas. Los aliados se centrarán así en la Guerra Fría. Con el pacto de Madrid en 1953 se dará por fin la alianza, y en 1955 se entrará en la ONU. En España también encontrará Franco oposición. Los monárquicos instarán a Franco para que nombre un rey y que se vaya, personificado esto en Don Juan. También múltiples militares le propusieron hacer una regencia perpetua. Los republicanos exiliados también harán presión exterior, y los "maquis" comunistas comenzarán su guerrilla en el Norte del país. Sin embargo, los que criticaban a Franco desde dentro, como los monárquicos, pedirán a éste que acabe con los comunistas, con los que los opositores se neutralizan. • 1956157−1971173: Periodo plenitud Se da en este periodo la mayor crisis, primero porque Francia independiza Marruecos repentinamente, lo que obligará al régimen a abandonar el Marruecos español, segundo que comienzan las revueltas estudiantiles en 1956, con los problemas familiares que eso conlleva, y un gran problema de inflación, ya que los precios y los salarios aumenta. Pero esta crisis la solucionará Carrero Blanco, y sustituye a los falangistas por los tecnócratas. Lograrán una liberalización económica, una potenciación y desarrollo de la sociedad, y elegir un sucesor, el futuro Juan Carlos I. • 1971173−1975: Crisis Franco empeora de salud, y el transcurso de la política internacional, con la crisis energética, meterán al país en una crisis. Además, el propio sistema empieza a deshacerse, por cómo lo había organizado Franco. • Factores que caracterizan al régimen 19 En España se dio durante el franquismo una importante renovación social. Ésta se da por el aumento de la producción, con lo que se puede alimentar a más gente. La educación en la población aumenta, ya que la maquinaria y la nueva tecnología llevan a una mayor preparación necesaria. También se gana más y se vive mejor. Todo esto lleva al Estado de Bienestar. El régimen es Estado de Bienestar, ya que tiene el poder para llevar a cabo las reformas sociales necesarias, y se hacen. El régimen franquista es como un régimen democrático, pero la diferencia está, además de en la falta de elecciones, y en que el poder coercitivo del franquismo es más notorio. El régimen monta un aparato legislativo por la que se reconstruye el Estado. Franco era el Estado al principio, pero se irá autolimitando, a pesar de mantener para sí las leyes de atribuciones. La saciedad española se desmoviliza, tal y como quería Franco, y por lo tanto está despolitizada. Esto llevará a que los españoles sean pasivos en ¡a creación del Estado de Derecho. DOSSIER XV: LA MONARQUÍA DEMOCRÁTICA • Definición del proceso La transición es el cambio de sistema desde la legalidad dado por un nuevo Jefe de Estado que se enfrenta a la sustitución de la jefatura carismática por la monarquía arbitral. • La transición desde la herencia franquista Cuando Franco murió, ya poco quedaba del régimen franquista. El sistema estaba organizado de tal manera que cuando el Caudillo muriese el sistema se desharía por sí mismo. Por eso cabe pensar que la salida de la transición era la más lógica para un régimen que se rompería tarde o temprano. Con Franco murieron además los únicos poderes que el general gallego guardó para sí, que le mantenían por encima de la ley. Los propios franquistas tenían dudas sobre la legitimidad del régimen con Franco ya muerto. Entre otras cosas, había gran incoherencia entre lo que el régimen dice ser y lo que es. Por ejemplo, supone ser una monarquía, etcétera, y trata de entrar en Europa, pero no le dejan por no ser democrático. También había cambiado la mentalidad de los españoles, que ahora piden participación política. La sociedad había cambiado, y el régimen ya no era posible para esta sociedad de una nueva mentalidad. • El Rey corno factor decisivo, en la decisión de la reforma y en la elección, de modelo para llevarla a cabo El rey Don Juan Carlos I era la única persona que podía llevar a cabo una transición como Jefe del Estado. En su discurso del 22 de Octubre de 1975, trata de contentar a todo el mundo, ya que la situación era muy frágil, pero deja claras sus intenciones al hablar de la participación de todos los españoles, la diversidad ideológica y de las peculiaridades regionales. Para llevar a cabo esta reforma, Juan Carlos I se deberá basar en las leyes fundamentales franquistas, que permitirán un cambio, siguiendo una serie de pasos que efectivamente se recorrerán. • Influencia y actuación de las instituciones: Universidad, Iglesia, Ejército y Movimiento. Hay que decir que estas cuatro instituciones llevaron a cabo muy dispares actuaciones. En la Universidad los estudiantes ya habían manifestado sus protestas en las calles de forma ilegal durante el régimen. En la enseñanza universitaria se dieron profundos cambios en las materias. La Iglesia había roto desde el Vaticano II con el franquismo, y aplaudió el cambio de sistema en España. El Ejército le era leal a la victoria y a Franco, y si éste había decidido aprobar las leyes de sucesión y al 20 sucesor, el ejército lo apoyaría. El Movimiento fue más reticente, aunque como muchos franquistas, muchos se dieron cuenta de que el régimen no podía continuar. • La situación internacional y la crisis económica corno factores condicionantes. España tiene muy buenos aliados en occidente, aunque éstos son los primeros en empujar el cambio de régimen. La situación española se hace preocupante por dos cosas: Por el 73 portugués, en el que el fin de un régimen dictatorial llevó a una revolución marxista y la crisis económica del 73, Esta crisis no se vive sin embargo por el cambio político pacífico, que lleva a un cambio previo. Así, los países del bloque occidental ven necesario el cambio hacia la democracia en España. • El papel de la oposición antifranquista en el proceso. Fracaso de la ruptura La izquierda española, principal opositora del franquismo, consideraba que la transición no era la manera de llegar a la democracia como ellos querían. Cuando se celebró en diciembre de 1976 el referéndum para aprobar la transición del régimen a la democracia, la izquierda pidió la abstención en el voto para así romper con el sistema. Sin embargo, la abstención sólo obtuvo el 22% de los votos, lo que era un fracaso para la izquierda. Entonces la izquierda tendría que ofrecer la garantía de la democracia, y esto lo consigue al presentarse como la tradición democrática española y ofrecerse como oposición del sistema (dentro de él). • Principales fases del proceso y análisis de la Ley para la Reforma Política Para llevar a cabo la reforma política, el presidente del Gobierno debía presentar en las Cortes un proyecto, éstas debían aprobarlo y luego ser aceptadas por referéndum. El proceso se da en seis fases. − Juan Carlos I apoya su legitimidad: para ello se apoya en la tradición histórica monárquica, en los españoles y en las leyes del reino − Nombramiento del presidente de las cortes: El rey nombrará a Torcuato Fernández Miranda. Éste será la mano derecha del rey y gran cerebro de la transición. − Elección de Suárez: Tras forzar la dimisión de Arias Navarro, y después de que Fernández Miranda hiciese una maniobra para que Adolfo Suárez estuviese entre los candidatos a la presidencia, Suárez es precisamente el elegido por el rey. Suárez es elegido porque parece un pelele, aunque Fernández Miranda no contará con dos problemas de Suárez: Su incultura y su ambición. Reunión de las Cortes: el 18 de Noviembre de 1976, las Cortes aprobaban el proyecto de reforma política de Suárez. Aunque saben que es el fin de los procuradores, votan a favor de la reforma porque las Cortes respondían siempre a las presiones de la jefatura de Estado, por la presión de la opinión pública, por el convencimiento de que el régimen no tiene salida y porque Suárez presenta además el proyecto como algo continuista. Primo de Rivera, sobrino de José Antonio, fue quien presentó el proyecto. − Referéndum para la reforma: Se aprueba la reforma en diciembre de 1976 por aplastante mayoría. − El rey renuncia a sus poderes: Se da de hecho en Julio de 1977 cuando se comienza a redactar la Constitución y de derecho cuando se promulga el 6 de Noviembre de 1978. • Los errores del cambio Sobre la transición hay dos posturas críticas de opuesta ideología. La más conservadora afirma que la 21 transición supuso una traición al régimen y a Franco. La más revolucionaria afirma que la transición no trajo una verdadera democracia, que está manchado el sistema por el régimen franquista. Hoy hay en nuestra democracia diferentes problemas: − Hay un problema autonómico grave. España es el país más descentralizado del mundo, y aún así se piden más cosas. Además, el regionalismo crea déficit. − La constitución es muy imprecisa: Es muy ambigua y abierta a muchas interpretaciones. Es así porque Suárez quería contentar a todo el mundo y que se estuviese de acuerdo, pero se está de acuerdo en nada. − Confusión de poderes. El ejecutivo vendrá dado por la mayoría parlamentaria (quien gana las elecciones) y elegirá posteriormente al poder judicial. − Marginación de ideologías: Las pequeñas ideologías se están destruyendo, y poco a poco se llega a un sistema bipartidista. − Educación: Desde el franquismo, el nivel educativo ha bajado hasta niveles escandalosos. 22