(TEXTO DE APROBACION FINAL POR LA CAMARA) (17 DE MARZO DE 2015) ESTADO LIBRE ASOCIADO DE PUERTO RICO 17ma. Asamblea Legislativa 5ta. Sesión Ordinaria CÁMARA DE REPRESENTANTES R. de la C. 1210 3 DE MARZO DE 2015 Presentada por el representante Perelló Borrás Referida a la Comisión de Asuntos Internos RESOLUCIÓN Para ordenar a la Comisión De lo Jurídico, de la Cámara de Representantes del Estado Libre Asociado de Puerto Rico, realizar una investigación exhaustiva sobre el funcionamiento de todos los componentes del sistema de justicia juvenil, en particular la operación y el manejo de las Instituciones Juveniles y el procedimiento adjudicativo en los casos de los menores en el Tribunal de Menores y en el Tribunal General de Justicia cuando el menor es enjuiciado como adulto, y para otros fines relacionados. EXPOSICIÓN DE MOTIVOS El sistema de justicia juvenil se diferencia del sistema de justicia general ya que contiene un tratamiento distinto para esta población y así logra el bienestar y el desarrollo saludable del menor. A modo de ejemplo, un menor no comete delitos sino que comente faltas, las cuales no aparecen en su récord delictivo. Para atender esta conducta del menor, según definidas en la “Ley de Menores de Puerto Rico”, Ley Núm. 88 del 9 de julio de 1986, según enmendada, existe en el ordenamiento jurídico el concepto de la medida dispositiva que, en teoría, se distancia del concepto de las penas establecidas en el Código Penal, o en cualquier ley especial de naturaleza criminal. Dichas medidas establecidas en la “Ley de Menores de Puerto Rico” deben ser cónsonas con la intención legislativa de rehabilitar a los jóvenes de nuestro País que hayan cometido alguna infracción o acto contrario a la ley. 2 Uno de los componentes esenciales del sistema de justicia juvenil es el Negociado de Instituciones Juveniles, antes la Administración de Instituciones Juveniles. Cabe destacar que la Administración se creó mediante la “Ley Orgánica de la Administración de Instituciones Juveniles”, Ley Núm. 154 de 5 de agosto de 1988, según enmendada, para “propici[ar] la seguridad y la más efectiva rehabilitación de los menores bajo su custodia”. Sin embargo, esta ley fue derogada mediante el Plan de Reorganización del Departamento de Corrección y Rehabilitación del 2011, Plan de Reorganización Núm. 2 de 21 de noviembre de 2011, el cual consolida en el Departamento de Corrección y Rehabilitación la Administración de Corrección, y actualmente no existe legislación específica que reglamente las instituciones juveniles. Las instituciones juveniles, por mucho tiempo, se han mantenido al margen de la discusión pública en nuestro País. La ciudadanía si bien conoce el sistema correccional adulto, en cuanto al sistema de justicia juvenil abunda la ausencia de información sobre el funcionamiento y la efectividad de los programas de corrección y rehabilitación juvenil. De la misma manera, la Asamblea Legislativa, a lo largo de todos estos años, se ha enfocado mucho más en investigar el componente de corrección y rehabilitación de los adultos vis a vis el sistema de justicia juvenil. Esto limita la posibilidad de poder identificar las necesidades de este sistema, para así reformarlo y adaptarlo a las realidades contemporáneas de la población juvenil que comete faltas. Recientemente, surgió a la luz pública que en el sistema de detención juvenil hay menores que apenas alcanzan los ocho (8) años de edad. Tal hecho es una prueba más de la necesidad de realizar una evaluación objetiva del funcionamiento de nuestro sistema de justicia juvenil pero sobre todo de nuestras instituciones juveniles. Ciertamente, la existencia de niños de tan escasa edad que se encuentran institucionalizados en una muestra de la necesidad de repensar todos los esfuerzos que como gobierno y como sociedad hemos realizado para atender esta población. Por otro lado, en este momento hay alrededor de cuatrocientos (400) jóvenes ingresados en las cinco (5) centros de tratamiento social del Departamento de Corrección. Hace aproximadamente diez (10) años, los menores detenidos en las instituciones alcanzaban los mil doscientos (1,200) y existían trece (13) instalaciones en total. Definitivamente el Estado debe aspirar a que cada día menos jóvenes sean institucionalizados como medida dispositiva para atender determinada conducta transgresora. No obstante, los datos antes expuestos deben ser adecuadamente analizados de manera que se evalúe no sólo si las instituciones juveniles están atendiendo adecuadamente a esta población sino evaluar el tratamiento y atención que se les está brindando a los menores que cometen faltas y no se encuentran bajo la custodia de alguna institución juvenil. Es necesario además identificar las razones para el descenso a lo largo de estos años del número de menores que se encuentran ingresados en dichas instituciones 3 juveniles. Entre las áreas a investigar se encuentran los programas de desvío disponibles en el sistema de justicia juvenil, las medidas dispositivas alternas al ingreso a una institución juvenil, así como el número de casos en que el Tribunal de Menores haya renunciado a ejercer su jurisdicción sobre un menor, según lo permite la propia “Ley de Menores de Puerto Rico”. Igualmente, resulta esencial investigar las instalaciones y los recursos de las instituciones juveniles, lo que nos permitirá conocer cómo viven los menores ingresados en estas instituciones. El ambiente en el cual se desarrollan estos jóvenes tiene que responder a la política pública de rehabilitación del menor transgresor. Para que esta Asamblea Legislativa pueda conocer las necesidades y las condiciones de vida de los menores institucionalizados en este sistema, es necesario que se evalúe el Negociado de Instituciones Juveniles de manera directa y mediante una investigación integral. Como otro asunto medular, la investigación debe analizar qué agencias del Estado debían haber sido partícipes o interventores en la prestación de servicios al menor antes de haber sido encontrado incurso en falta. El perfil del menor transgresor presenta las características de los menores bajo custodia y enfatiza como rasgos distintivos la alta deserción escolar, abuso de sustancias controladas, consumo de bebidas alcohólicas, y que fueron víctimas de maltrato físico o psicológico, entre otras. Si, por ejemplo, los menores bajo custodia abandonaron la escuela, es menester investigar cuál fue el rol del Departamento de Educación para atender a los menores y evitar que ello sucediera. Por otro lado, si el menor fue víctima de maltrato, nos debemos preguntar cuál fue la intervención, si alguna, del Departamento de la Familia. Por tanto, un objetivo primordial de la investigación debe enfocarse en evaluar la eficacia de las agencias del gobierno en la prestación de servicios e identificación de necesidades del menor que puede ser un posible transgresor en aras de adoptar medidas efectivas para ayudarle. Debemos, por último, investigar cuáles son las necesidades del menor que va a egresar de una institución juvenil, cuál es el plan de egreso trabajado para atender sus necesidades en comunidad, y cómo se insertan las agencias del Estado para garantizar la ayuda necesaria al menor, evitando que éste reincida en la comisión de otra falta o delito. Esta Cámara de Representantes, velando por el bienestar y el desarrollo de los jóvenes puertorriqueños, entiende necesario ordenar a la Comisión De lo Jurídico de la Cámara de Representantes del Estado Libre Asociado de Puerto Rico, realizar una investigación exhaustiva sobre el funcionamiento de todos los componentes del sistema de justicia juvenil. 4 RESUÉLVESE POR LA CÁMARA DE REPRESENTANTES DE PUERTO RICO: 1 Sección 1.-Se ordena a la Comisión De lo Jurídico, de la Cámara de 2 Representantes del Estado Libre Asociado de Puerto Rico, realizar una investigación 3 exhaustiva sobre el funcionamiento de todos los componentes del sistema de justicia 4 juvenil, en particular la operación y el manejo de las Instituciones Juveniles, y el 5 procedimiento adjudicativo en los casos de los menores en el Tribunal de Menores y en 6 el Tribunal General de Justicia, incluyendo cuando el menor es enjuiciado como adulto. 7 Sección 2.-La comisión deberá, además, investigar la efectividad del 8 Departamento de Educación, el Departamento de la Familia, el Departamento de Salud, 9 y cualquier otra agencia o instrumentalidad concernida en este asunto, en la prestación 10 de servicios previo a que se entregara la custodia del menor al Departamento de 11 Corrección y Rehabilitación. Se deberán investigar las áreas de servicio que deben 12 mejorarse para atender las necesidades del menor y, en la medida que sea viable, prever 13 y evitar la posible comisión de una falta. 14 Además, se debe investigar el plan de egreso que se elabora para atender las 15 necesidades del menor una vez finalice su medida dispositiva, y el rol de las agencias 16 del Estado concernidas en la prestación de servicios al menor. 17 Sección 3.-La comisión podrá citar deponentes, requerir documentos e 18 información, convocar audiencias públicas, realizar inspecciones, referir información a 19 otras agencias con jurisdicción, y todos aquellos trámites necesarios para llevar a cabo la 20 investigación, sujeto a las leyes, reglamentos y ordenes administrativas vigentes. La 21 Comisión deberá rendir un informe que incluya sus hallazgos, conclusiones y 5 1 recomendaciones dentro de los ciento veinte (120) días naturales siguientes a la fecha de 2 la aprobación de esta Resolución. 3 4 Sección 4.-Esta Resolución entrará en vigor inmediatamente después de su aprobación.