Servicio de Noticias 028/00 ÍNDICE AI: AFR 62/06/00/s 10 de febrero del 2000 República Democrática del Congo: 61 personas pueden ser ejecutadas de un momento a otro Sesenta y una personas condenadas a muerte en Kinshasa pueden ser ejecutadas pronto, a pesar de que en agosto de 1999 el gobierno de la República Democrática del Congo garantizó a una delegación de Amnistía Internacional que se habían suspendido las ejecuciones. Amnistía Internacional insta al presidente Laurent-Désiré Kabila a conceder un indulto que salve las vidas de los 61 presos condenados a muerte y decretar la suspensión inmediata y obligatoria de cualquier otra ejecución. Según informes, Muchos de estos 61 hombres, que se encuentran en el Centro Penitenciario y de Reeducación (Centre pénitentiaire et de réeducation) de Kinshasa, fueron condenados por el tribunal militar conocido como Tribunal del Orden Militar (Cour d’ordre militaire) por delitos violentos, como asesinato y atraco a mano armada. Los informes también indican que al menos uno de ellos, Kasilibani Kabamba, fue condenado por traición. Las actuaciones de este tribunal siempre han vulnerado las normas internacionales sobre garantías en los juicios y las normas de las Naciones Unidas sobre protección de los derechos de los condenados a muerte. Sus estatutos impiden la apelación a una instancia superior, lo cual niega a los encausados la posibilidad de impugnar las sentencias. Su única oportunidad es solicitar el indulto presidencial. «A pesar de que el gobierno ha prometido detener las ejecuciones, estos 61 hombres se enfrentan ahora a la posibilidad de ser ejecutados en cualquier momento por un pelotón de fusilamiento, tras ser condenados por un tribunal militar en procesos que violan las normas internacionales sobre garantías procesales», ha manifestado Amnistía Internacional. Fuentes de Kinshasa señalan que los 61 presos han sido trasladados del pabellón seis al dos del centro penitenciario, donde en anteriores ocasiones se ha trasladado a otros condenados a muerte antes de ser ejecutados. «El gobierno de la República Democrática del Congo —ha subrayado Amnistía Internacional— debe cumplir su compromiso de abolir la pena de muerte, como afirmó en junio de 1999 ante las Naciones Unidas, y de abolir también el tribunal militar, como manifestó a Amnistía Internacional en julio y agosto del mismo año. En un país asolado por el conflicto —continuó la organización— nuevos homicidios sancionados por el Estado y otras medidas represivas sólo servirán para exacerbar la ya desesperada situación de los derechos humanos». Información general Aunque el Tribunal del Orden Militar fue creado en 1997 para juzgar a soldados acusados de delitos militares, también ha juzgado a civiles encausados por delitos políticos y económicos, en muchos casos presos políticos y presos de conciencia. El tribunal ha condenado a muerte a cientos de personas, y el número de ellas que han sido ejecutadas podría ascender a las doscientas. No se sabe que haya habido ninguna ejecución entre julio de 1999 y el 28 de enero del 2000. Sin embargo, entre el 28 de enero y el 2 de febrero del 2000, otros 19 presos fueron ejecutados en Kinshasa y en sus alrededores. Amnistía Internacional se opone a la pena de muerte en todos los casos por ser ésta una violación del derecho a la vida y el derecho a no sufrir penas crueles, inhumanas o degradantes. ****************************************************************************** Si desean más información, llamen a la Oficina de Prensa de Amnistía Internacional en Londres (Reino Unido), teléfono +44 171 413 5808, o visiten nuestro sitio web en http://www.amnesty.org.