IGLESIA SAN PEDRO APÓSTOL PEDRO MUÑOZ (CIUDAD REAL) Mario Morales Fernández Historia y Gestión del Patrimonio Artístico, grupo B Curso 2011 – 2012 Universidad de Valencia INDICE. 1. Descripción del monumento. 1.1 Localización. 1.2 Descripción. 2. Construcción. 2.1 Antecedentes históricos. 2.2 Construcciones. 3. Restauraciones. 4. Planos. 5. Reportaje Fotográfico 6. Bibliografía. 1. DESCRIPCIÓN DEL MONUMENTO. 1.1 Localización. La Parroquia de San Pedro Apóstol se encuentra en el pueblo de Pedro Muñoz, provincia de Ciudad Real. Situada a 108 km. al Noreste de la capital, en pleno corazón de la Mancha y en medio de una inmensa llanura, la Villa de Pedro Muñoz limita al Norte con El Toboso (Toledo), al Este con Mota del Cuervo (Cuenca), al Oeste con Campo de Criptana (Ciudad Real) y al Sur con Tomelloso (Ciudad Real), donde el río Záncara (afluente del Guadiana), actúa de límite natural entre estos dos términos. Actualmente tiene una Población de 8.684 habitantes. Junto a la Plaza de España, mezcla de varias influencias arquitectónicas, con predominio del estilo románico y con capacidad para acoger a ochocientas personas aproximadamente, se levanta la Iglesia Parroquial de San Pedro Apóstol. 1.2 Descripción La planta tiene forma de cruz latina. Su construcción se somete a una métrica precisa, que presenta al edificio por su parte interior una impresión de organización total. Así, la longitud del edificio no es arbitraria, sino que es múltiplo del ancho de la nave principal y la anchura de los brazos del crucero que forman el transepto se reduce a un submúltiplo de aquella. Predomino enorme del macizo sobre el vano, que presenta particulares problemas de iluminación interior. Por tanto, la Parroquia es oscura y se distingue por su gran masa que ofrece pocos puntos de comunicación con el exterior. Los huecos son estrechos, como exige el sistema de transmisión de carga de la bóveda. La bóveda de cañón, uno de los elementos determinantes en la Iglesia, pues con una se cubre la nave principal y con otra de igual altura que acomete perpendicular a la anteriormente mencionada, se cubren los brazos del crucero. Este cruce ortogonal de bóvedas engendra una bóveda por arista. La Capilla Penitencial, antiguamente llamada del Pilar, es de reducidas dimensiones y está situada a la izquierda de la nave principal, junto al crucero. Esta Capilla queda coronada por una pequeña cúpula hemisférica. Un gran arco de medio punto decorado con una arquivolta sobre pilastras de acceso a la misma, la Capilla, además de ser el lugar donde los feligreses acuden para recibir el Sacramento de la Penitencia, acoge durante todo el año las imágenes de Jesús de Medinaceli, el Santísimo Cristo de la Columna, Nuestra Señora de la Soledad y el Santo Sepulcro, en un retablo habilitado a tal efecto. El Presbiterio, de planta rectangular, queda cubierto con bóveda de medio cañón. A ambos lados se encuentran lo que antiguamente fueron dos Sacristías, que se comunicaban con el mismo mediante dos huecos practicados en los muros. En la actualidad estos huecos están tapiados y sólo una de esas dependencias se sigue utilizando como Sacristía, ya que desde las obras de acondicionamiento interior llevadas a cabo en 1992, la que se encuentra en la parte derecha, se habilitó como almacén y trastero para guardar los utensilios de limpieza de la Parroquia, así como los objetos sobrantes. Ambas dependencias se cubren con pequeñas bóvedas de cañón que descansan sobre muros. El Altar Mayor del Presbiterio se encuentra situado cuatro peldaños por encima del resto de la Iglesia. A la izquierda queda el lugar de la lectura del Evangelio; a la derecha la Pila Bautismal; y en el centro se halla el Altar, lugar de la Consagración. Detrás de estos tres elementos se levanta el Retablo del Altar Mayor, que ocupa la práctica totalidad del muro de cerramiento posterior. Este Retablo, estéticamente muy agradable, consta de tres cuerpos y coronación, separados por sendos entablamentos, soportados por columnas de planta circular de capitel jónico. Estas columnas dividen el retablo en nueve panos cuadrados pródigos en relieves, donde se encuentran reproducidas varias escenas de la vida de Cristo, a saber: el Nacimiento, el Bautismo, el camino hacia el calvario con la Cruz a cuestas, la Santa Faz, la Flagelación, la Crucifixión, el descenso de la Cruz, y la Resurrección. En el mismo Retablo y entre columnas, se encuentran las imágenes de San Juan Bautista, San Juan Evangelista, San Antonio Abad, Santa Rita, Santa Lucía y San Francisco de Asís. Como coronación del Retablo, se encuentra un tabernáculo que muestra al Apóstol San Pedro, titular del Templo, escoltado por cuatro Arcángeles. A los pies de la nave principal y a una altura intermedia entre el nivel del suelo de la Iglesia y el arranque de la bóveda, se sitúa el coro, cuya planta posee planta de L, apoyándose gran parte de la estructura sobre un gran arco rebajado, y otra parte sobre ménsulas de madera empotradas en uno de los muros que constituyen el cerramiento de la Iglesia. Se accede al coro mediante una estrecha escalera de tres tramos situada en el cuerpo bajo de la torre. La torre, de planta cuadrada, está situada en un lateral, a los pies de la nave principal y es exenta. El acceso se realiza a través de una vieja y pequeña puerta contigua al hueco que da acceso al coro. El interior de la torre es muy oscuro, pero aún así, desde abajo, se puede apreciar la parte inferior del gran número de arcos rampantes que constituyen los tramos que componen la escalera y que perimetralmente van subiendo hasta llegar al campanario. La subida es dificultosa, ya que el ámbito de la escalera y sus huellas son sumamente estrechos. Los salones parroquiales, se encuentran en la parte posterior de la Iglesia y constan de dos plantas. En su planta baja, un estrecho pasillo-distribuidor, da acceso al archivo de la Parroquia, a un pequeño aseo y al despacho del párroco, a través del cual se pasa a una sala de reuniones que queda comunicada con la Sacristía por su otro extremo. Mediante a una escalera situada a la derecha del pasillo, se accede a la planta superior, donde la totalidad de la superficie corresponde a un salón parroquial. La simplicidad y la sencillez son los rasgos principales a destacar cuando se hace referencia a las fachadas de la Iglesia. La torre es de tres cuerpos y coronación y da a la fachada principal. Sus parámetros son de mampostería ordinaria vista, quedando sus esquinas rematadas con sillares de gran tamaño. Entre cuerpo y cuerpo se intercala una moldura convexa. Su coronación está formada por una sucesión de molduras que preceden a una sencilla balaustrada rematada ornamentalmente por unas bolas sobre pedestal. La fachada principal da a la calle D. Eugenio Caja. Está compuesta por mampostería ordinaria vista y rematada con sillares en las esquinas. El acceso al interior se efectúa a través de la portada principal. La puerta la pusieron en la última reforma que se hizo en la Iglesia. El recercado es de piedra caliza blanca, que desentona con el resto del edificio, ya que para su elección no se atendió a cuidar la estética del conjunto, sino el aspecto puramente económico. Consta de dos pedestales, sobre los que se levantan dos pilastras que se unen con un elemento horizontal en su parte superior. Sobre este recercado existe una cruz labrada en piedra que sobresale del plano del muro. Por encima se observa un arco de descarga ejecutado en mampostería. La iluminación que recibe el interior es la que aporta una pequeña ventana situada en uno de los brazos del crucero. El recercado de esta ventana está formado por sillares de piedra. El alzado lateral derecho es el que ofrece su fachada a la Plaza de España. Muros de mampostería ordinaria vista con sillares como remate de esquinas. Los dos cuerpos bajos adosados a la nave central son el trastero y la sacristía. En ellos se pueden apreciar dos ventanas recercadas con sillares de piedra y protegidas con rejas, que aportan iluminación natural al interior de ambas dependencias. El alzado lateral izquierdo ofrece su fachada a la calle Iglesia. Sus muros de mampostería ordinaria vista con sillares que rematan las esquinas, tónica general de las anteriores fachadas. La nave central únicamente se ve iluminada por una ventana existente en el centro de esta fachada. Sobre este alzado se observan dos huecos más; una ventana cuadrada recercada en piedra artificial es la encargada de iluminar tanto la escalera como el pasillo de los salones parroquiales, y la ventana rectangular recercada con sillares de piedra, es la que aporta iluminación al interior de la Capilla Penitencial. El alzado posterior da fachada a un paseo peatonal. En él, se puede apreciar la entrada simétrica a la de la fachada principal. El recercado es el original, de piedra natural, erosionado por el paso del tiempo. Este consta de dos pedestales, sobre los que se levantan adosadas al muro sendas pilastras, formadas por piezas superpuestas, colocadas a hueso sobre pequeñas cuñas de madera. Estos sillares de piedra se encuentran perfectamente labrados y escuadrados y sustentan un cornisamento. Sobre el mismo se halla una cruz ejecutada igualmente en piedra. Merece mención especial el arco de descarga que se encuentra por encima de la cruz, ejecutada en mampostería utilizando para ello dovelas rectangulares. Sobre este alzado se aprecia la fachada de los salones parroquiales. Una puerta claveteada de madera con un estrecho recercado de piedra artificial, constituye el acceso a los mismos. Las ventanas de la planta baja iluminan el pasillo, el despacho parroquial y la sala de reuniones; mientras que la de la planta alta hacen lo propio con el salón parroquial. Toda la carpintería es de madera, protegida con rejas en planta baja y todos los huecos están recercados en piedra artificial. El cerramiento de planta baja está ejecutado con mampostería ordinaria vista, ya que este muro existía con anterioridad a la creación de los salones parroquiales. En cuanto al cerramiento en la planta alta, está ejecutado con ladrillo cerámico, acabado exteriormente con un aplacado de piedra abujardada, y vuelva ligeramente sobre la planta baja. Por encima de los salones se encuentra una ventana recercada con sillares que ilumina uno de los brazos del crucero. Un zócalo de mampostería resaltado ligeramente sobre el extradós de los muros recorre perimetralmente los cerramientos de la Iglesia, excepción hecha de los salones parroquiales. Las cubiertas tanto de la nave principal, como de los brazos del crucero, es a tres aguas. Tanto las cubiertas de la Capilla Penitencial como las de la sacristía y el trastero, son a dos aguas, mientras que la de la cúpula principal, de planta cuadrada, es a cuatro aguas. La torre, a nivel de la balaustrada, presenta una cubierta a cuatro aguas. La cubierta de los salones parroquiales es sencilla. El material de cubrición es la teja curva, a excepción de la caperuza que cubre el linternón que es metálica. Sólo queda reseñar, que una moldura de piedra recorre perimetralmente, a nivel de alero, la totalidad del edificio. 2. CONSTRUCCIÓN 2.1 Antecedentes históricos. Las primeras noticias que se recogen sobre la existencia de algún edificio de orden religioso se remontan al año 1525, donde en algunos manuscritos se habla acerca de una Iglesia (Abadía de San Antonio). Se comenzó la construcción del Templo, que es hoy la Parroquia dedicada al Apóstol San Pedro, en 1700, colocándose la primera piedra el día 8 de septiembre, consagrado a la Natividad de la Santísima Virgen y bajando el clero con la Cruz Parroquial para hacer la bendición de esta piedra. Los vecinos de la Villa ofrecieron unas monedas, colaborando así, a la construcción del Templo. Así pues, se abrieron las zanjas y se ejecutaron los cimientos y prosiguió la construcción hasta sacarla de la tierra 1,70 metros y así se dejó por entonces. Por el año de 1712 se reanudó la construcción del Templo y se concluyó en el de 1721, cuando se construyó la torre, según está reflejado en una piedra de su cornisa alta. Se hizo entierro general de huesos por el año de 1727 en la Capilla de la Iglesia antigua, destinándose desde aquel momento a cementerio municipal y en la nueva Iglesia se pusieron canceles en la entrada por 1733. El Templo carecía de Sacristía en sus comienzos, hasta que en septiembre de 1734 se construyeron dos cuerpos bajos laterales adosados a ambos lados del crucero para la Sacristía. Con las limosnas de los vecinos se mandó pintar el frontal del Altar, traer el Cáliz, poner postigos en el coro, tapiar la puerta antigua que había al poniente y se tuvo por conveniente demoler una vieja torre que allí había. 2.2. Construcción. A continuación se redacta la memoria constructiva. Para ello es obligado establecer una serie de hipótesis lo más lógicas posibles, ya que para poder describir los sistemas constructivos utilizados sería necesario realizar sucesivas observaciones para conocerlos con certeza. Hecha esta aclaración, se procede a describir los mencionados sistemas constructivos. Primeramente trataremos las fábricas y los tipos de muro, teniendo en cuenta los tipos de soporte, los tipos de cubrición y por supuesto, los materiales con los cuales se construyeron. Fábricas y tipos de muro. El tipo de cimentación utilizado se supone de zapata corrida. Su espesor sería aproximadamente entre 1,5 y 2 veces el del muro que le transmite las cargas. Por lo tanto, se trataría de una prolongación del muro ensanchada en su parte inferior, por debajo de tierra. Esta cimentación quedaría formada por mampuestos y ripios de piedra caliza irregulares de gran tamaño recibidos con mortero de arcilla. El espesor de los muros es enorme. En la mayoría de ellos se alcanza 1,40 metros. Los más delgados rondan el metro de espesor. Estos muros están ejecutados con mampuestos de piedra caliza bien aparejados, recibidos con mortero de arcilla. El extradós del muro queda visto, mientras que el intradós se encuentra revestido con un enlucido de yeso sobre el cual va adherida una capa de pintura. En los lugares donde los muros son interrumpidos por huecos, éstos sufren un abocinamiento tanto en las jambas como en el dintel y el vierteaguas, para permitir así el paso de la máxima luz posible al interior. Tanto las esquinas de la totalidad del edificio como el recercado de los huecos, están rematados con sillares de grandes y muy variables dimensiones. Estos sillares están mal escuadrados y se reciben igualmente con mortero de arcilla. En los dinteles, tanto en las portadas de acceso al edificio, como en las ventanas del mismo, se repite la misma solución constructiva: el arco de descarga. Este arco es adintelado en ventanas y más peraltado en las portadas. Siempre está ejecutado con dovelas de piedra de sección aproximadamente rectangular. Cubrición. Para salva la luz de la nave central que es de 10 metros, la armazón de cubierta está formado con toda probabilidad a base de cerchas de madera de par y pendolón colocadas a intervalos regulares, empotradas en los muros del cerramiento. Estas cerchas conforman la pendiente a dos aguas. Sobre ellas se disponen una correas de madera en sentido transversal a la línea de máxima pendiente y como piezas de entrevigado se coloca un tablazón de madera que es el encargado de recibir las piezas de cubrición, en este caso, teja curva. La conformación de pendientes en los brazos del crucero y el presbiterio está resuelta disponiendo dos cuchillos de madera empotrados. En el extremo superior el empotramiento se manifiesta en el muro de cerramiento de la cúpula y en el inferior, en el muro de fachada. A juzgar por el gran espesor de los muros, pudiera pensarse que su razón de ser radica en la mejor absorción de los empujes que pudieran transmitirle las bóvedas. Pero la forma de construir de la época, así como la gran distancia existente entre el extradós de las bóvedas y la cumbrera de su cubierta, hace pensar que no sea así. Así pues, nos encontramos ante una “falsa bóveda” ejecutada con escayola, que seguramente estará colgada al tirante de la estructura de madera anteriormente mencionada. La cubierta de la cúpula queda resuelta a cuatro aguas. La formación de pendientes posiblemente esté realizada con vigas celosía de madera para formar las limatesas, de las que quedan colgadas tanto las pechinas como la cúpula de escayola. Las vigas celosía apoyan en jácenas de madera perimetrales en la parte superior e inferior. Estas jácenas perimetrales descansan sobre el muro de cerramiento de la cúpula y sobre el murete del arranque del linternón. Sobre las celosías apoyan las correas y sobre éstas un tablazón de madera que sirve de apoyo a la teja curva. Los cerramientos del linternón, de planta octogonal, posiblemente están formados por murete de ladrillo, enfoscados exteriormente, que arrancan sobre las vigas perimetrales de madera, donde se apoyan por la parte superior las vigas celosía que conforman las limatesas descritas con anterioridad. En cada cara del octógono se abren huecos donde unas pequeñas ventanas aportan iluminación al interior de la cúpula. La caperuza metálica que cubre el linternón, queda soportada por una pequeña y elemental estructura triangulada de madera. La cúpula de la Capilla Penitencial se supone también colgada, de la misma forma que la principal. Parte del forjado del coro está resuelto con viguetas de madera muy próximas entre sí, empotradas por una extremo en uno de los muros de cerramiento y por el otro extremo en un arco rebajado que canaliza las cargas a dos pilares adosados a los cerramientos que lo sustentan. Sobre las viguetas se sitúan unas tablas de madera clavadas a ellas a modo de entrevigado y encima de éstas se ha colocado con posterioridad un pavimento de baldosa cerámica. Una pequeña parta del coro se encuentra resuelta con ménsulas de madera labradas, de gran canto, empotradas en uno de los muros en un extremo y en voladizo en el otro. Sobre las ménsulas se apoyan viguetas de madera y por encima de ellas, unas tablas de madera constituyen el acabado del pavimento. En cuanto al pavimento, en un principio, estaba compuesto por baldosas de pequeñas dimensiones sin esmaltar. Cuando en 1992 se realizaron las obras de acondicionamiento interior que incluían la instalación de calefacción por suelo radiante, se colocaron encima del antiguo pavimento unas planchas de aislamiento térmico y sobre éstas, las tuberías de agua caliente y una solera de hormigón. Por encima de la solera se colocó el pavimento que actualmente posee la Parroquia: baldosas de terrazo microgramo en la totalidad de la superficie de la misma, a excepción de un pasillo central y la escalinata del presbiterio que quedaron acabados con placas de granito. 3. RESTAURACIÓNES Hacia el año de 1928 tuvo lugar una tormenta y uno de sus rayos fue a parar a la torre, perdiendo uno de sus muros gran parte de su estabilidad, por lo que tuvo que procederse a su reparación. Para ello, se afianzó el muro que resultó dañado, mediante un tensor de acero anclado al extradós de la bóveda principal. También se reemplazaron parte de los sillares de una de sus esquinas. Esta reparación fue ejecutada con gran infortunio, ya que los sillares que remataban la esquina fueron sustituidos por rasillas aparejadas, recibidas con mortero de cemento y revestidas con un guarnecido de yeso de poco espesor, que se desprendería años después, dejando las rasillas vistas, produciendo un efecto estéticamente desastroso. En el año de 1979, se procedió al rejuntado de la mampostería que constituye el zócalo de la fachada, ya que las juntas habían resultado erosionadas con el paso de los años. El material de rejuntado elegido fue el mortero de cemento que aún perdura, denunciando la actitud desidiosa con la que se obró. En el año de 1984, a solicitud del párroco que había, se llevaron a cabo las obras de construcción de los actuales salones parroquiales en la parte posterior de la Iglesia. En ese lugar existía un patio descubierto donde se almacenaban los objetos que no se utilizaban; así pues, se procedió al a apertura de huecos para colocar ventanas den el cerramiento que existía, y se cubrió el espacio con un forjado sobre el que se levantó otra planta más. Por el mismo año también se procedió a la sustitución de la práctica totalidad de las piezas de cobertura cambiándolas por otras y unos años después se reemplazó el recercado por la portada principal por considerar que estaba altamente deteriorado, por otro muy sencillo de piedra caliza blanca. El recercado antiguo estaba compuesto por dos pedestales de piedra sobre los que se levantaban sendas pilastras que sustentaban un cornisamento. Éste a su vez, aguantaba una hornacina ejecutada igualmente en piedra y sobre ella se alzaba una cruz. La mencionada cruz es el único elemento que perdura en la actualidad, ya que el resto fueron demolidos. Una de las mayores obras ejecutada en la Parroquia fue sin duda la que se llevó a cabo para restaurarla interiormente. Esta restauración se realizó en el año 1992. Así, se sellaron tanto las fisuras que existían en los muros como las grietas existentes en las bóvedas y en la cúpula principal. Se remodeló el sistema de iluminación, instalándose candelabros a intervalos sobre los paramentos y luz indirecta en los lunetos de las bóvedas. Se sustituyó la totalidad del pavimento, instalando bajo el mismo sistema de calefacción por suelo radiante. También se sustituyeron los peldaños del Presbiterio y se pintó por completo la Iglesia. El 18 de enero de 2010 la cúpula de la iglesia se desplomó por completo causando la muerte de un trabajador y heridas a otros. En ese momento se intentaba desmontar la linterna que coronaba la bóveda, cuando se trabajaba en su restauración 4. PLANOS Situación Planta Cubiertas Alzados Principal. Lateral derecho. Lateral izquierdo. Posterior. Secciones Longitudinal. Transversal. Constructiva. Situación. Planta. Cubiertas Alzados: - Principal - Lateral Derecho. - Lateral Izquierdo. - Posterior: Secciones - Longitudinal. - Transversal. - Constructiva. 1. CAPERUZA METÁLICA. 2. ESTRUCTURA DE MADERA. 3. DINTEL. 4. VENTANAL. 5. MURETE ARRANQUE LINTERNÓN. 6. JÁCENA DE MADERA. 7. ENFOSCADO DE CEMENTO. 8. ENTREVIGADO. TABLÓN DE MADERA. 9. CORREAS DE MADERA. 10. EGIONES. 11. LIMATESA. VIGA CELOSÍA DE MADERA. 12. CÚPULA DE ESCAYOLA. 13. JÁCENA PERIMETRAL DE MADERA. 14. BROCHAL DE MADERA. 15. ALERO. MOLDURA PERIMETRAL. 16. MURO DE MAMPOSTERÍA ORDINARIA. 17. PAR DE MADERA. 18. TORNAPUNTAS. 19. TIRANTE. 20. MOLDURA ARRANQUE CÚPULA. 21. ARCO FAJÓN. 22. PECHINA. 23. ABOCINAMIENTO EN MURO 24. MOLDURA ARRANQUE BÓVEDAS. 25. LUNETO. 26. ENLUCIDO DE YESO. 27. PILASTRAS. 28. PEDESTAL. 29. ESCALINATA PRESBITERIO. 30. PAVIMENTO DE TERRAZO. 31. TUBERÍA DE AGUA CALIENTE. 32. SOLERA DE HORMIGÓN. 33. LÁMINA DE POLIETILENO. 34. AISLAMIENTO TÉRMICO. 35. ANTIGUO PAVIMENTO. 5. REPORTAJE FOTOGRÁFICO: Vista panorámica de la Iglesia Vista posterior de la Iglesia. Vista de la torre. Puerta principal. Detalle de la puerta posterior a la Iglesia y puerta de acceso a los salones parroquiales. Detalle de la ventana de la Sacristía Detalle de recercado de sillares en puerta tapiada y decorada con mosaico, situada en la fachada lateral izquierda. Detalle pilastras de la entrada a la Capilla Penitencial. Vista general de la cúpula de la Capilla Penitencial Cúpula y pechinas Vista de la cúpula, dos pechinas y el altar y el retablo. Vista desde el coro Vista del coro. Parte del coro. Detalle de ménsulas de madera que sustentan parte del coro. Detalle de moldura perimetral de arranque de bóveda y lunetos. Vista cenital de dos lunetos. 6. BIBLIOGRAFÍA MARTÍNEZ FALERO, Domingo Joseph: “Historia de la villa de Pedro Muñoz” Perea Ediciones, Pedro Muñoz (Ciudad Real) 1984 págs. 128 MONTOYA MAYORDOMO, Manuel: Pedro Muñoz y su Iglesia, Editorial Visión Libros, 2009 págs. 140 TIRADO ZARCO, Miguel (1984). Pedro Muñoz... Una Historia. Comisión de cultura del ayuntamiento de Pedro Muñoz, Archivo Ayuntamiento de Pedro Muñoz. Págs. 336 Archivo de la Parroquia de Pedro Muñoz Gustavo González Rosado, arquitecto encargado de la última rehabilitación realizada en la Iglesia de Pedro Muñoz. D. Damián Díaz Ortiz, Sacerdote de la Iglesia de Pedro Muñoz.